Desayuno

Huevos revueltos con tomate

$1.80 / porción

$3.60 total

Estos cremosos y esponjosos huevos llevan ricos y jugosos tomates de sabor dulce. Saben mejor cuando los tomates están de temporada. Sirve los huevos en o con una tortilla, si es que la tienes a la mano. PARA 2

½ cucharada de mantequilla

4 tomates frescos pequeños o 2 grandes, picados, o 2 tazas de tomates enlatados picados

4 huevos

sal y pimienta, al gusto

agregados

albahaca fresca picada u otros tipos de hierbas culinarias para espolvorear

1 Derrite la mantequilla en un sartén antiadherente pequeño o mediano y menéala para recubrir el sartén. Agrega los tomates y cocínalos de 5 a 7 minutos o hasta que suelten su jugo y se evapore su mayor parte.

2 Mientras tanto, rompe los huevos en un tazón y espolvorea con sal y pimienta. Bate los huevos ligeramente con un tenedor.

3 Reduce el fuego a bajo y agrega los huevos al sartén. Utiliza una espátula para mezclar los huevos y los tomates suavemente y revolverlos con cuidado de forma continua para evitar pedazos grandes. Reduce el fuego lo más bajo posible; entre más despacio se cocinen los huevos, más cremosos quedan.

4 Una vez cocidos los huevos a la consistencia deseada, apaga el fuego y agrega las hierbas picadas. La albahaca es la mejor para los tomates. A mí me gusta que los huevos revueltos queden sueltos, jugosos y suavecitos. Los puedes cocinar por un poco más de tiempo si los prefieres más secos.

Omelette

$0.80 / porción

$1.60 total

Hago esta omelette por lo menos una vez a la semana. Es ridículamente deliciosa, ya sea repleta de verduras o sencilla. Me encanta con eneldo, pero sabe bien con casi todo tipo de hierba culinaria o con cebollitas verdes. Suelo utilizar queso cheddar o romano, ya que combinan bien con la mayoría de las verduras. Pero el queso de cabra con calabacitas, y la coliflor con salchichas y hojuelas de chile, son también estupendas combinaciones.

Si voy a servir para dos personas, suelo cortar una omelette por la mitad en vez de preparar dos. Sin embargo, si te apetece preparar algo más elaborado, prepara un par de omelettes con dos huevos cada una utilizando la mitad de los ingredientes. Para preparar una omelette estilo francés, enróllala en el Paso 4 en vez de doblarla. Obtendrás un resultado muy fino y suave. PARA 2

4 huevos

2 cucharadas de eneldo fresco finamente picado

sal y pimienta, al gusto

mantequilla, para el sartén

1 chalota o ½ cebolla morada pequeña finamente picada

¼ taza de queso rallado

1 Coloca en un tazón los huevos, el eneldo, la sal y la pimienta y bátelos con un tenedor.

2 Derrite a fuego medio-alto un poco de mantequilla en un sartén para freír grande. Una vez chisporrotee, agrega la chalota y sofríela unos 2 minutos hasta que quede translúcida y tenga un buen olor.

3 Agrega los huevos al sartén caliente y revuélvelos para recubrir el sartén de forma pareja. Si el centro de la omelette se cocina más rápidamente que el borde, utiliza una espátula para llevar el huevo crudo al centro. Y ya no la toques más.

4 Después de unos 30 segundos, espolvorea el queso sobre los huevos, junto con cualquier otra verdura cruda o cocida que quieras agregar. Cuando ya no estén translúcidos los huevos, lo que toma de 30 segundos a 2 minutos, dobla la omelette por la mitad utilizando una espátula y retírala del sartén. No te conviene que los huevos queden con partes quemadas.

Sándwiches de huevo con picadillo de champiñones

$1.80 / porción

$3.60 total

Los sándwiches de huevo son uno de los pilares de todos los delicatessens de esquina de la Ciudad de Nueva York. Son baratos y sencillos, rápidos y deliciosos. Supe que tenía que incluir uno cuando Charlene, una de las primeras personas que me apoyaron, me pidió una receta con huevos y champiñones. (¡Le agradezco la petición! A mí no me gustan mucho los champiñones, así que escasean en este libro, aunque a muchas personas les encantan.) Esta receta es realmente sencilla, como es el caso de la mayoría de los sándwiches. Puedes utilizar los ingredientes que tengas a la mano. Los tristes sobrantes recobran su vigor cuando se combinan con la jugosa y grasosa consistencia de las yemas líquidas. PARA 2

2 cucharaditas de mantequilla

1 papa pequeña, en cubitos

sal y pimienta, al gusto

8 onzas de champiñones (hongos, setas), en rebanadas

2 dientes de ajo, finamente picados

2 panecillos o muffins ingleses, separadas sus partes, o 4 rebanadas de pan

2 huevos

agregados

tomate en rebanadas

aguacate (palta) sin hueso, pelado y en rebanadas

queso

variaciones

papa con cebolla

papa con chícharos (arvejas, guisantes)

berza (collards ) con tocino (tocineta)

calabacita (zucchini )

chorizo y chile verde

1 Derrite 1 cdta. de mantequilla en un sartén a fuego medio. Agrega las papas y cocínalas revolviéndolas lo más mínimo que se pueda por unos 5 minutos o hasta que empiecen a dorarse y a suavizarse. Condiméntalas con sal y pimienta.

2 Agrega los champiñones y el ajo y cocínalos revolviéndolos por otros 5 minutos o hasta que se doren y se achiquen los champiñones. Si las papas se pegan al sartén, agrega un poco de agua. Perfora un trozo de papa con un tenedor para ver si está. Si lo atraviesa fácilmente, ya terminaste. Si no, cocínalo unos cuantos minutos más. (Entre más picaditas estén las papas, más rápido se cocinan.) Pruébalo y ajusta la sazón según prefieras.

3 Coloca los panecillos o el pan en la tostadora. Mientras tanto, derrite la otra cucharadita de mantequilla a fuego medio en un sartén antiadherente mediano. Rompe los huevos, incorpóralos y espolvoréalos con sal y pimienta.

4 Si te gustan los huevos fritos estrellados, tapa la sartén para asegurarte de que se terminen de cocinar las claras sin que se endurezcan las yemas. En cuando ya no estén translúcidas las claras, apaga el fuego y retira los huevos de la sartén.

Si te gustan los huevos fritos volteados (mis favoritos), espera a que se cocinen las yemas sin perder todo su aspecto líquido, dales vuelta con una espátula y cocínalos del otro lado durante unos 15 segundos. De esta manera se cocinarán por completo las claras, pero las yemas seguirán líquidas—el mejor de los casos. Si las prefieres duras las yemas (¡no, por favor!), cocínalas unos 30 segundos más.

5 Rápidamente para que todo siga rico y caliente, arma el sándwich con los ingredientes poniendo una capa de verduras primero, cubriéndola con el huevo y utilizando los condimentos que quieras. ¡Mucho mejor que lo que encontrarás en el deli de la esquina!

Barras de granola con mantequilla de maní y jalea

$0.30 / BARRA

$3.60 total

¿Ya te cansan los sándwiches de mantequilla de maní (cacahuate) y jalea? ¡Prueba estas barras entonces! Las cree para mi amigo Alex, el mejor corredor de larga distancia que conozco. Su textura se desmorona un poco más que la de las barras que se venden en tiendas, así que ten cuidado al comerlas yendo de un sitio a otro—probablemente dejarás un sendero de migajas en la banqueta (acera, vereda) y en tu camisa. Y por si fuera poco, encontrarás los ingredientes en cualquier tienda o banco de alimentos. Puedes usar cualquier tipo de jalea o mermelada—yo utilicé una de moras azules (arándanos), pero las de uvas, las de fresa (frutilla) o las de cualquier otro sabor sabrán bien. Podrás utilizar avena de cocción rápida, si es lo único que tienes, pero yo prefiero la textura de la avena arrollada cuando se toma un bocado y se mastica. Para darle una textura más crujiente al masticarla, también puedes utilizar Rice Krispies en vez de una taza de avena. RINDE 12 BARRAS

mantequilla o aceite vegetal, para el molde

3 tazas de avena arrollada, o 2 tazas de avena arrollada y 1 taza de Rice Krispies

½ taza de mantequilla de maní (cacahuate)

½ taza de jalea o mermelada

¼ taza de agua caliente

¼ cucharadita de sal

agregados

½ taza de nueces picadas

½ taza de coco rallado

½ taza de fruta seca picada

½ taza de miel (en vez de la jalea)

1 Precalienta el horno a 350°F.

2 Engrasa un molde para hornear de 8 × 11 pulgadas. Si tienes un molde de tamaño diferente, está bien—solo cambiará el grosor de las barras, así que te va a hacer falta ajustar el tiempo de cocción un poco. Los moldes más grandes hacen que la cocción tome menos tiempo y hacen que queden más crujientes las barras, mientras que uno más pequeño tomará unos cuantos minutos más—simplemente estate pendiente del horno.

3 Vierte la avena en un tazón grande.

4 Coloca una cacerola pequeña a fuego bajo y agrega la mantequilla de maní, la mitad de la jalea, el agua, la sal y cualquier otro agregado. Revuelve unos 2 minutos o hasta obtener una consistencia homogénea.

5 Vierte la preparación de mantequilla de maní y jalea sobre la avena y revuelve la avena hasta que quede toda recubierta y obtengas una consistencia pegajosa. Vierte esta mezcla en el molde que engrasaste y aplástala hasta obtener una capa pareja. Esparce el resto de la jalea por encima.

6 Hornea las barras 25 minutos. Las barras ya están cuando están tostadas y doradas por los bordes. Mmm. Crujiente.

7 Deja las barras en el molde hasta que se terminen de enfriar, aproximadamente una hora, y, a continuación, córtalas en 12 barras.

ideas

Avena

$0.15 / porción

$0.30 total

La avena es un desayuno caliente y reconfortante que te dará energía para que tengas una mañana estupenda. También es barata en extremo, así que te permitirá gastar un poco más en el almuerzo y en la cena. La avena básica tiene la reputación de ser fastidiosa, pero esta receta te la mejora de tantas formas que nunca te aburrirás.

Piensa que preparar la avena básica es como echar los cimientos. Dale un toque personal con las ideas que te proponemos en la siguiente página. Sea con leche y dulce o sin dulce y salada, tengo la seguridad de que encontrarás tu manera favorita ¡de deleitarte con un tazón de avena por la mañana!

Avena básica

PARA 2

1 taza de avena arrollada

2 tazas de agua

¼ cucharadita de sal

1 Agrega la avena, el agua y la sal a una olla pequeña y hierve a fuego medio. Reduce el fuego a bajo de inmediato y pon la tapa.

2 Cocina la avena 5 minutos o hasta que las hojuelas estén suaves y tiernas y se haya evaporado casi toda el agua. Puedes agregar más agua si te gusta la avena más suave y menos espesa, o un poco menos para que quede espesa y cremosa.

1 Calabaza

$0.75 porción / $1.50 total

½ taza de calabaza enlatada

¾ taza de leche (o leche de almendra o de soya)

2 cucharadas de azúcar morena, y más al gusto

1 cucharadita de canela molida

agregados

¼ cucharadita de jengibre molido

¼ cucharadita de clavo molido con un rocío de jarabe (sirope) de arce

Usa un batidor de alambre para batir en una olla la calabaza, la leche y 1¼ taza de agua. Agrega la avena, la sal, el azúcar y las especias. Cocina a fuego medio de 2 a 5 minutos o hasta que la mezcla hierva. Reduce el fuego a bajo para darle 5 minutos más. Agrega el jarabe o más azúcar al gusto.

2 No dulce

$0.75 porción / $1.50 total

2 o 3 cebollitas, las partes blancas y verdes, finamente picadas

¼ taza de queso cheddar fuerte rallado

1 cucharadita de mantequilla

2 huevos

Cocina la avena de acuerdo a las instrucciones para la avena básica, pero agregando las cebollitas en el Paso 1. Incorpora el queso cuando ya casi esté listo. Mientras se cocina la avena, derrite la mantequilla a fuego medio en un sartén. Rompe los huevos, incorpóralos y, a continuación, tapa el sartén y fríelos de 2 a 3 minutos o hasta que se cocinen las claras sin que dejen de estar líquidas las yemas. Ponle a cada tazón de avena ¡un huevo frito!

3 Coco y limón

$0.75 porción / $1.50 total

¼ taza de hojuelas de coco sin endulzar

2 cucharadas de azúcar

jugo de ½ limón verde (lima)

Agrega el coco y el azúcar a la avena y sigue las instrucciones de la Avena básica. Apaga el fuego y rocía el jugo de limón por encima.

4 Afrutado

$0.55 porción / $1.10 total

½ taza de moras (bayas), o de frutas picadas, frescas o congeladas

1 cucharada de azúcar

Cocina la avena según las instrucciones de la Avena básica, pero 2 minutos antes de que esté lista, agrega las moras y el azúcar y revuélvelas para combinarlas. Es sorprendente el número de variaciones que se puede inventar uno con tan solo hacer la prueba con una fruta nueva.

5 Manzana con canela

$1 porción / $2 total

2 tazas de jugo de manzana o sidra

1 cucharadita de canela molida

1 manzana, descorazada y picada

Cocina la avena según las instrucciones para la Avena básica, pero utilizando el jugo de manzana en vez del agua y agregando la canela. Pon la manzana sobre la avena. Si quieres que la manzana esté suave y caliente, cocínala junto con la avena.

6 Baklava

$0.75 porción / $1.50 total

1 cucharadita de canela molida

1 cucharada de cáscara de naranja finamente rallada

4 cucharadas de miel

2 cucharadas de almendras o pistachos picados

Agrega la canela, la cáscara de naranja y 2 cdas. de miel antes de cocinar la avena según las instrucciones de la Avena básica. Corona cada tazón con otra cda. de miel y con una cda. de nueces.

7 Chocolate

$0.50 porción / $1 total

1 taza de leche

1 cucharada de cacao

1 cucharada de azúcar

Es una brillante sugerencia de una maravillosa lectora, Karen Lofstrom. ¿A quién le hacen falta los Cocoa Puffs cuando uno puede tener avena con cacao?

Reemplaza una de las dos tazas de agua con 1 taza de leche. Incorpora el cacao y el azúcar en la leche con agua antes de agregarlas a la olla—¡de esta forma no habrá grumos! Prosigue entonces con la avena.

Quinua de desayuno

$1.25 / porción

$2.50 total

La quinua es, de vez en cuando, una gran alternativa para reemplazar la avena. Contiene más proteínas presentes de forma natural que la avena, así que quedarás satisfecho por más tiempo. Desafortunadamente, tiene un precio de etiqueta más elevado, pero si la compras a granel podría salir económica. PARA 2

1 taza de quinua blanca

2 tazas de agua

¼ cucharadita de sal

1 cucharada de azúcar

1 taza de moras (bayas), o de frutas picadas, frescas o congeladas

1 Agrega la quinua, el agua y la sal a una olla pequeña y hierve a fuego medio. Reduce el fuego a bajo. Pon la tapa medio sesgada en la olla para que escape el vapor.

2 Después de 10 minutos, agrega el azúcar y la mitad de la fruta mientras las revuelves para combinarlas. La quinua debe de tomar unos 20 minutos en total, pero estate pendiente y agrega más agua si se pone demasiado seca. Ya está lista cuando los granos se ven translúcidos, han duplicado su volumen y puedes ver un anillo opaco alrededor de cada grano.

3 Suelta la quinua con un tenedor y ponla en tazones. Ponle encima el resto de la fruta.

Panqueques de plátano

$0.75 / porción

$3 total

Con la textura cremosa y el delicioso sabor de los plátanos (bananas), estos panqueques son impresionantemente buenos. Serás popular a más no poder si alimentas con ellos a tus amigos y familiares. Otra ventaja: Esta es una estupenda forma de deshacerse de los plátanos blandos sin tener que preparar pan de plátano. PARA 4, RINDE DE 10 A 15 PANQUEQUES

2 tazas de harina de uso general

¼ taza de azúcar morena

2 cucharaditas de polvo para hornear

1 cucharadita de bicarbonato de sodio

1 cucharadita de sal

4 plátanos (bananas)

2 huevos

1½ taza de leche

1 cucharadita de extracto de vainilla

mantequilla, para cocinar y servir

jarabe (sirope), para servir

1 Precalienta el horno al nivel más bajo.

2 Combina la harina, el azúcar morena, el polvo para hornear, el bicarbonato de sodio y la sal en un tazón mediano. Revuélvelos bien con una cuchara.

3 En otro tazón mediano, muele 2 de los plátanos con un tenedor. Agrega los huevos, la leche y la vainilla y revuélvelos bien para combinarlos.

4 Agrega los ingredientes secos a los líquidos y revuelve con una cuchara justo hasta que se mezclen. Los panqueques salen suaves si no se mezcla demasiado el batido. No te preocupes si todavía quedan algunos bolsillos de harina.

5 Deja reposar el batido de 10 a 15 minutos. Mientras tanto, rebana los 2 plátanos restantes.

6 Calienta a fuego medio un sartén o comal (plancha) de hierro fundido o antiadherente. Ya caliente, derrite una pequeña cantidad de mantequilla, una ½ cucharadita, en el sartén y usa un cucharón para verter parte del batido para panqueques en el centro del sartén. La cantidad normal de batido es de ¼ a ⅓ taza, pero puedes preparar los panqueques tan grandes o tan pequeños como lo desees. Hazlos pequeños si es la primera vez que los cocinas. Será más fácil voltearlos.

7 En cuanto el batido esté en el sartén, coloca 3 o 4 rebanadas de plátano sobre el lado del panqueque que no está cocido todavía. Voltea el panqueque una vez se le empiecen a secar los bordes y veas que burbujea en el medio. Cocínalos aproximadamente de
30 segundos a 1 minuto por lado o
hasta que se doren.

8 Apila los panqueques que vayas terminando en un plato dentro del horno caliente y repite los Pasos 6 y 7 hasta que se te termine el batido. Sírvelos calientes, con mantequilla y jarabe.

SI ESTáS DE PRISA, utiliza un sartén o un comal más grande y cocina unos cuantos panqueques a la vez. Prepararlos en tandas de tres o cuatro es mucho más rápido que ¡uno a la vez!

Scones de trigo entero con queso y jalapeños

$0.75 / porción

$3 total

Picantes, con queso, hojaldrados—estos scones, panecillos originarios de Escocia, están en su cúspide acabados de salir del horno. Son deliciosos de desayuno, o con un plato de frijoles o con muchas verduras, o desmoronados en guisos o en chilis. Cortar el queso en cubos en vez de rallarlo significa que tendrás bolsillos de queso derretido que contrastarán bien con la textura crujiente del scone. Si quieres que pique el jalapeño, déjale las semillas y la membrana; si quieres que pique menos, quítaselos y solo pica el jalapeño en sí. RINDE 6 SCONES

½ taza (1 barra) de mantequilla (ver recuadro)

2½ tazas de harina de trigo entero, y más para la superficie de trabajo

1 cucharada de polvo para hornear

1 cucharadita de sal

1 chile jalapeño, finamente picado (ver nota introductoria)

4 onzas de queso cheddar fuerte, cortado en cubos de aproximadamente ¼ pulgada

2 huevos, ligeramente batidos

½ taza de leche

barniz de huevo batido (opcional)

1 huevo

sal y pimienta, al gusto

1 Pon la mantequilla en el congelador durante 30 minutos.

2 Precalienta el horno a 400°F. Forra una charola (bandeja) para hornear con papel para hornear o engrásala con un poco de mantequilla.

3 Combina la harina, el polvo para hornear y la sal en un tazón grande.

4 Retira la mantequilla del congelador y rállala directamente sobre la mezcla de harina. (Utiliza un rallador para quesos—es la mejor manera de partir la mantequilla en pedazos sin derretirla.) Exprime la mantequilla suavemente con las manos para incorporarla a la harina, pero sin hacer que la consistencia de la mezcla sea homogénea. Los pedazos de mantequilla van a producir la textura hojaldrada.

5 Agrega el jalapeño, el queso, los huevos batidos y la leche al tazón y, a continuación, mezcla todo cuidadosamente con las manos justo hasta que se combinen. Es probable que la masa quede un poco rugosa, pero no importa.

6 Espolvorea harina sobre una encimera (mostrador) limpia y vierte la masa sobre ella. Con cuidado, forma con la masa un disco de aproximadamente 1½ pulgada de grosor. Corta el disco en 6 cuñas triangulares, como pedazos de pizza, y ponlas en la charola para hornear.

7 Si deseas preparar el barniz de huevo batido (¡te lo recomiendo!), bate el huevo ligeramente y pincela los scones con él (tendrás más barniz del que necesitarás). Espolvorea los scones con sal y pimienta. Hornéalos 25 minutos o hasta que queden bien doraditos.

UTILIZA EL ENVOLTORIO de la barra de mantequilla para engrasar la charola (bandeja) para hornear.

Muffins de calabacita con chocolate

$0.20 / MUFFIN

$4.80 total

Me preocupé un poco cuando mi amigo Michael me retó para que ideara una receta que llevara chocolate oscuro: ¡Es caro el chocolate oscuro! Pero me acordé de que el cacao en polvo es profunda y oscuramente achocolatado, y sin el gasto. Pensé en el pastel de calabacita con chocolate que hacía mi madre cuando yo era chica y supe que iba por buen camino.

Es un gran antojito de desayuno que usa alimentos básicos que por lo general deberías tener a la mano, como lo son la harina, la avena y el yogur. El yogur y la calabacita hacen que estos muffins queden superjugosos y ricos, pero sin dejar de ser una nutritiva opción para el desayuno (aunque un poco azucarada). Prepáralos a mediados del verano, cuando la temporada de calabacitas está en su cúspide y cuando los más grandes están de verdad baratos. Las calabacitas grandes tienen, por lo general, una textura un poco leñosa, pero son estupendas para hornear. RINDE 24 MUFFINS PEQUEñOS

mantequilla o aceite vegetal, para engrasar el molde

2 tazas de calabacitas (zucchini) ralladas (empieza con 1 calabacita grande o con 2 pequeñas)

1½ taza de harina de uso general

1½ taza de avena arrollada

1½ taza de azúcar

½ taza de cacao en polvo

2 cucharaditas de bicarbonato de sodio

1 cucharadita de sal

4 huevos

1 taza de yogur sin sabor

agregados

1 cucharada de canela molida

½ taza de chispas de chocolate oscuro

1 Precalienta el horno a 350°F.

2 Engrasa 24 tacitas para muffins con mantequilla, o ponles forros de papel (capacillos o pirotines) si los tienes.

3 Recórtales el extremo redondo a las calabacitas (que es un poco duro) teniendo cuidado de dejar el tallo para utilizarlo como una manija. Ralla las calabacitas en un tazón grande utilizando un rallador cuadrado (de cuatro caras) y sin olvidarte de detenerte antes de llegar al tallo.

4 Echa en un tazón mediano la harina, la avena, el azúcar, el cacao en polvo, el bicarbonato de sodio, la sal y la canela, y las chispas de chocolate, si los vas a usar.

5 Mezcla los huevos y el yogur con la calabacita rallada. Agrega los ingredientes secos, mezclándolos bien justo hasta combinarlos.

6 Con una cuchara, echa el batido
en las tacitas para muffins hasta que cada una esté llena hasta los tres cuartos. Llévalas al horno y hornéalas 20 minutos.

7 Saca los muffins y insértales un palillo de dientes o un cuchillo en el centro. Si sale húmedo, hornea los muffins 5 minutos más. Si sale limpio, ya están.

8 Deja enfriar los muffins en sus tacitas de 20 a 30 minutos y ¡a comerlos calientes!

Toronja asada al horno

$1 / serving

$2 total

Si tu horno tiene asador, esta es una manera rápida y divertida de darle vida a la común y saludable toronja de desayuno y de convertirla en un caliente antojito amelcochado. Quizás a ti te convierta en ¡todo un aficionado de las toronjas! Si tienes jarabe (sirope) de arce a la mano, utilízalo en vez del azúcar y tendrá aun más sabor. PARA 2

2 toronjas (pomelos)

2 cucharadas de azúcar morena oscura o clara

sal

1 Sube la temperatura del asador del horno a fuego alto.

2 Corta cada toronja por la mitad por su hemisferio y coloca las mitades boca arriba en una charola (bandeja) para hornear con borde o en otro tipo de molde refractario. Espolvorea las mitades con el azúcar morena y con un poco de sal para realzar el sabor.

3 Deja las mitades de toronja debajo del asador hasta que burbujeen y se doren un poco (o quizás hasta que se ennegrezcan) por los bordes. Asarlas así suele tomar unos 3 minutos, pero los asadores son diferentes, así que estate pendiente—al tuyo quizás le tome hasta 8 minutos. ¡No te distraigas! Que se ennegrezcan por el borde está bien; una plasta pegajosa negra en el centro no. No hay mejor manera de arruinar las comidas que quemándolas.

4 Deja enfriar la toronja durante uno o dos minutos antes de servir.