Notas
FILOSOFÍA DEL SIGLO XX
I. LA FENOMENOLOGÍA
1. E. Husserl, Investigaciones lógicas, 2 vols., trad. de M. García Morente y J. Gaos, Madrid, Alianza, 1982.
2. Ibid., vol. 1, pág. 22.
3. Ibid.
4. Ibid.
5. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, págs. 75s.
6. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 83.
7. Ibid., pág. 100.
8. Ibid., pág. 117.
9. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 147.
10. Ibid., págs. 160s.
11. Ibid., pág. 159.
12. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 296.
13. Ibid., págs. 162s.
14. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 203.
15. Ibid., pág. 208.
16. Ibid., pág. 216.
17. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 216.
18. Ibid., vol. 2, pág. 624.
19. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 1, pág. 338.
20. Ibid., pág. 382.
21. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 2, pág. 396.
22. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 2, pág. 484.
23. E. Husserl, Investigaciones lógicas, op. cit., vol. 2, pág. 652.
24. Cf. J. San Martín, La estructura del método fenomenológico, Madrid, UNED, 1986, págs. 27s.
25. Cf. W. Szilasi, Introducción a la fenomenología de Husserl, trad. de R. Maliandi, Buenos Aires, Amorrortu, 1973, pág. 152.
26. E. Husserl, Ideas relativas a una fenomenología pura y una filosofía fenomenológica, trad. de J. Gaos, México, FCE, 1985, pág. 169.
27. E. Husserl, Lecciones de fenomenología de la conciencia interna del tiempo, trad., presentación y notas de A. Serrano de Haro, Madrid, Trotta, 2002, pág. 103.
28. Cf. E. Husserl, La crisis de las ciencias europeas y la fenomenología trascendental, trad. de J. Muñoz y S. Mas, Barcelona, Crítica, 1991, pág. 134.
29. Cf. F. Montero, Mundo y vida en la fenomenología de Husserl, Valencia, Universitat de València, 1994, pág. 251.
30. Cf. E. Husserl, La crisis de las ciencias europeas..., op. cit., pág. 114.
31. Ibid., pág. 173.
32. Ibid., pág. 176.
33. M. Scheler, Philosophische Weltanschauung, Bonn, Cohen, 1929, pág. 101.
34. M. Scheler, Philosophische Weltanschauung, op. cit., pág. 103.
35. Ibid.
36. Publ. en M. Scheler, Vom Umsturz der Werte, Berna-Múnich, Francke, 1972 [El resentimiento en la moral, trad. de J. Gaos, Madrid, Espasa-Calpe, 1938, 1944].
37. R. Safranski, Un maestro de Alemania. Martin Heidegger y su tiempo, trad. de R. Gabás, Barcelona, Tusquets, 1997, pág. 42.
38. R. Safranski, Un maestro de Alemania..., op. cit., pág. 89.
39. R. Safranski, Un maestro de Alemania..., op. cit., pág. 91.
40. R. Safranski, Un maestro de Alemania..., op. cit., pág. 130.
41. R. Bultmann y M. Heidegger, Correspondencia 1925-1975, ed. por A. Großmann y Ch. Landmesser, pról. de E. Jüngel, trad. de R. Gabás, Barcelona, Herder, 2011, pág. 81.
42. Der Spiegel 23 (31 de mayo, 1976, pág. 209); cf. R. Safranski, Un maestro de Alemania..., op. cit., pág. 481.
43. Gadamer dice que en Marburgo le llamó la atención la distinción de Heidegger, tomada de la escolástica, entre actus signatus y actus exercitus, o sea, entre acto directo y acto reflexivo; por ejemplo, preguntar y dirigirse al preguntar en cuanto tal. Cf. H.-G. Gadamer, Los caminos de Heidegger, trad. de Á. Ackermann, Barcelona, Herder, 2002, pág. 43.
44. Cf. A. Leyte, Heidegger, Madrid, Alianza, 2005, pág. 31.
45. Cf. L. Landgrebe, El camino de la fenomenología, trad. de M. A. Presas, Buenos Aires, Sudamericana, 1968, pág. 50.
46. Cf. M. Heidegger, Sein und Zeit, Tubinga, Niemeyer, 1957, pág. 35. En adelante citado como SZ. Los textos citados son traducción del autor de la presente obra.
47. SZ, § 7.
48. SZ, pág. 35.
49. Cf. L. Landgrebe, El camino de la fenomenología, op. cit., págs. 57-59.
50. SZ, pág. 12.
51. Ibid.
52. SZ, págs. 16s (cap. 2, § 5).
53. SZ, pág. 44.
54. SZ, pág. 70, § 15.
55. SZ, pág. 87, § 18.
56. SZ, pág. 88, § 18.
57. SZ, pág. 122.
58. SZ, pág. 126.
59. SZ, pág. 127.
60. SZ, pág. 128.
61. Hay quienes para traducir eigen y Eigenlichkeit usan «propio» y «propiedad», y en las formaciones negativas uneigen y Uneigenlichkeit utilizan los términos «impropio» e «impropiedad». Otros traductores usan «auténtico» y «autenticidad». La raíz y el contexto apuntan a «el propio sí mismo» o la pérdida del propio sí mismo. Obviamente, puede decirse que quien pierde el propio sí mismo, no es genuino, no es auténtico.
62. SZ, pág. 129.
63. SZ, pág. 130.
64. SZ, pág. 132.
65. SZ, pág. 133.
66. Heidegger usa explícitamente el término Affektion, por ejemplo, en pág. 137.
67. SZ, pág. 134.
68. SZ, pág. 134.
69. SZ, pág. 144.
70. SZ, pág. 161.
71. Ibid.
72. Ibid.
73. SZ, pág. 166.
74. SZ, pág. 163.
75. SZ, pág. 167.
76. SZ, pág. 168.
77. SZ, pág. 186.
78. M. Heidegger, El ser y el tiempo, México, FCE, 1951, pág. 212. La expresión alemana es: Sich-vorweg-im-schon-sein-in-einer-Welt (SZ, pág. 192).
79. «El ser del Dasein es el cuidado. El cuidado comprende facticidad (condición de arrojado), existencia (proyecto) y caída. El Dasein, siendo, es arrojado, no se ha puesto a sí mismo en su Ahí. Siendo, está determinado como un poder-ser que no se pertenece a sí mismo y que, sin embargo, no se ha dado él mismo en propiedad a sí mismo. Existiendo, jamás logra ir más allá de su condición de arrojado, de tal suerte que pudiese alguna vez producir formalmente desde su ser-sí-mismo y llevar hasta el Ahí esa condición de “que él no es y tiene que ser” [...]. Aunque él mismo no ha puesto el fundamento, descansa en el área de su gravedad, que la afección le revela como peso»; SZ, pág. 284; cf. también la trad. de J. E. Rivera, Ser y tiempo, Santiago de Chile, Universitaria, 21998, pág. 303.
80. SZ, pág. 295.
81. SZ, pág. 322.
82. Por ejemplo, cuando trata, en la sección primera, de la apertura del «Ahí», habla en primer lugar de la afección. En cambio, cuando en la sección segunda aborda la temporalidad en sus tres formas de abrir el «Ahí», trata en primer lugar del comprender.
83. SZ, pág. 346.
84. SZ, pág. 366.
85. SZ, pág. 369.
86. SZ, pág. 374.
87. SZ, pág. 384.
88. SZ, pág. 391.
89. SZ, pág. 435.
90. Cf. R. Rodríguez, Heidegger y la crisis de la época moderna, Madrid, Cincel, 1987, págs. 130s.
91. A. Leyte, en su interpretación de Ser y tiempo (Heidegger, Madrid, Alianza, 2005), insiste enfáticamente (por ej. en págs. 18, 72) en que el ser del Dasein tiene que ver con el ser en general, tanto que apenas deja lugar a ningún cambio de dirección o viraje (Kehre) en Heidegger.
92. SZ, pág. 12.
93. Die Grundprobleme der Phänomenologie. Se titulan así las lecciones procedentes del semestre de verano de 1927, publicadas en el vol. XIV de la Gesamtausgabe (Frankfurt, Klostermann, 1975). Este volumen contiene la temática central de lo que había de ser la sección tercera de la primera parte de Ser y tiempo, anunciada como «Tiempo y ser».
94. Kritik der reinen Vernunft, B 626, Hamburgo, Meiner, pág. 572 (Crítica de la razón pura, trad. de P. Ribas, Madrid, Taurus, 2005, pág. 504).
95. Heidegger escribe concretamente: «La temporalidad [...] es la condición de posibilidad de la trascendencia y, con ello, la condición de posibilidad de la intencionalidad, fundada en la trascendencia» (Die Grundprobleme..., op. cit., pág. 452).
96. «El tiempo se temporacía a sí mismo como lo más temprano por antonomasia. Antes que todo posible, antes es el tiempo» (M. Heidegger, Die Grundprobleme..., op. cit., pág. 463).
97. Heidegger impartió estas lecciones en el semestre de invierno de 1929-1930; han sido publicadas en el vol. 29-30 de la Gesamtausgabe (Frankfurt, Klostermann, 1983).
98. M. Heidegger, ¿Qué es metafísica?, trad. de X. Zubiri, Buenos Aires, Siglo XX, s. a., pág. 42.
99. Ibid., pág. 44.
100. M. Heidegger, ¿Qué es metafísica?, op. cit., pág. 49.
101. Ibid.
102. M. Heidegger, ¿Qué es metafísica?, op. cit., pág. 51.
103. Ibid., pág. 54. Heidegger cita a Hegel en dos pasajes importantes de ¿Qué es metafísica? En este pasaje cita la Wissenschaft der Logik (I. Buch, WW III, 78); y, al principio del texto de la lección, dice: «La filosofía, considerada desde el punto de vista de la sana razón humana, es, según Hegel, el “mundo al revés”» (ibid., pág. 39).
104. ¿Qué es metafísica?, op. cit., pág. 55.
105. Die Grundbegriffe der Metaphysik, vol. 29-30 de la Gesamtausgabe (Frankfurt, Klostermann, 1983, pág. 148).
106. «De la esencia de la verdad» se publicó en 1943 y «La doctrina de Platón acerca de la verdad» en 1947.
107. Escrito publicado en la Gesamtausgabe, vol. 9 (1976), títulado Wegmarken (Hitos).
108. U. Ludz e I. Nordmann (eds.), Hannah Arendt: diario filosófico 1950-1973, 2 vols., trad. de R. Gabás, Barcelona, Herder, 2006, vol. 1, pág. 474.
109. M. Heidegger, «El origen de la obra de arte», en Arte y poesía, trad. de S. Ramos, México, FCE, 122009, págs. 62s.
110. Cf. O. Pöggeler, El camino del pensar de Martin Heidegger, trad. de F. Duque, Madrid, Alianza, 1986, pág. 268.
111. Conferencia pronunciada en 1959; cf. la trad. cast. en M. Heidegger, Interpretaciones sobre la poesía de Hölderlin, trad. de J. M. Valverde, Barcelona, Ariel, 1983, pág. 183.
112. Conferencia pronunciada en 1951.
113. F. W. von Herrmann, Wege ins Ereignis, zu Heidegger’s «Beiträge zur philosophie», Frankfurt, Klostermann, 1994, págs. 252s.
114. M. Heidegger, «El origen de la obra de arte», en Arte y poesía, op. cit., pág. 70.
115. Cf. F.-W. von Herrmann, Subjekt und Dasein, Frankfurt, Klostermann, 1985, págs. 180-190.
116. M. Heidegger, De camino al habla, trad. de Y. Zimmermann, Barcelona, Serbal, 1987, 32002, págs. 10s.
117. Esta obra ha sido publicada tardíamente (1989) [Aportes a la filosofía. Acerca del evento, trad. de D. V. Picotti, Buenos Aires, Almagesto, 2003] porque Heidegger dispuso que la publicación de los escritos para las secciones III y IV de la Gesamtausgabe solo podía iniciarse cuando hubiesen sido publicados los cursos de la sección II. Consideraba necesario el conocimiento de los cursos para la comprensión de los escritos inéditos. Entre estos cursos se hallaban especialmente Las cuestiones fundamentales de la filosofía. «Problemas» escogidos de la «Lógica», del semestre de invierno de 1937-1938. Este curso apareció en 1984 como vol. 45. Estos textos procedían de los Aportes a la filosofía, redactados en 1936-1937. «El ser» fue escrito en 1938. Este texto se hallaba en el capítulo 2 de la parte II, pero con la indicación de que no estaba correctamente incorporado. Por eso el editor lo trasladó al final.
118. Cf. F.-W. von Herrmann, Wege ins Ereignis..., op. cit., págs. 27s.
119. M. Heidegger, Aportes a la filosofía..., op. cit., pág. 229.
120. Ibid., pág. 37.
121. M. Heidegger, Beiträge zur Philosophie, vol. 65 de la Gesamtausgabe (Frankfurt, Klostermann, 1989, pág. 428). Citamos esta ed., aunque en las dos notas anteriores nos hemos referido a la trad. cast. porque hemos usado expresiones literales de esta última.
122. M. Heidegger La pregunta por la cosa: la doctrina kantiana de los principios trascendentales, trad. de E. García Belsunce y Z. Szankay, Buenos Aires, Alfa, 1975, pág. 89.
123. Cf. M. Heidegger, Sendas perdidas, trad. de J. Rovira Armengol, Buenos Aires, Losada, 31979, pág. 77.
124. Por esto algunos traducen Ge-stell con la palabra «imposición». Así A. L. Bixio; cf. por ejemplo, G. Vattimo, El fin de la modernidad, trad. de A. L. Bixio, Barcelona, Gedisa, 1987, pág. 151. A. Leyte (Heidegger, op. cit., págs. 230s), propone «tinglado», «dispositivo», «armazón», «estructura». En la traducción de R. Safranski, Un maestro de Alemania... (op. cit., pág. 14), se usa «engranaje» para resaltar el todo organizado que marca nuestra relación con la naturaleza, nuestra exigencia de energías para atender al sistema de producción.
125. Cf. M. Heidegger, ¿Qué es metafísica?, seguido de «Epílogo a “¿Qué es metafísica?”» e «Introducción a “¿Qué es metafísica?”», trad. de H. Cortés y A. Leyte, Madrid, Alianza, 2003, págs. 45-61 («Epílogo»).
126. Ibid., pág. 60.
127. M. Heidegger, ¿Qué significa pensar?, trad. de R. Gabás, Madrid, Trotta, 2005, pág. 63.
128. Ibid., pág. 21.
129. Ibid., pág. 80.
130. M. Heidegger, ¿Qué significa pensar?, op. cit., pág. 80.
131. Ibid., pág. 22.
132. Ibid., pág. 130.
133. M. Heidegger, Tiempo y ser, trad. de M. Garrido, J. L. Molinuevo y F. Duque, Madrid, Tecnos, 2001, págs. 19-44.
134. M. Heidegger, Tiempo y ser, op. cit., pág. 28.
135. Ibid., pág. 33.
136. Ibid., pág. 43.
137. Escrito procedente de 1956, en homenaje a Ernst Jünger en su cumpleaños.
138. M. Heidegger, Sobre la cuestión del ser, trad. de J. L. Molinuevo, Barcelona, Paidós, ICE de la UAB, 1994, pág. 108.
139. M. Heidegger, Serenidad, trad. de Y. Zimmermann, Barcelona, Serbal, 2002, pág. 47.
140. Cf. F.-W. Von Herrmann, Wege ins Ereignis..., op. cit., pág. 262.
141. O. Pöggeler, El camino del pensar de Martin Heidegger, op. cit., pág. 368.
142. M. Heidegger, Serenidad, op. cit., pág. 48.
143. M. Heidegger, Serenidad, op. cit., pág. 77.
144. Ibid.
145. Cf. M.ª C. López Sáenz, pról. a M. Merleau-Ponty, Elogi de la filosofia i altres assaigs, ed. de M.ª C. López Sáenz, trad. de M. Ingla, Barcelona, Laia, 1988, págs. 7-10.
146. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, trad. de J. Escudé, Barcelona, Seix Barral, 1970, págs. 23s.
147. F. Montero, pról. a M. Merleau-Ponty, Sentido y sinsentido, trad. de N. Comadira, Barcelona, Península, 1977, pág. 11.
148. M. Merleau-Ponty, Sentido y sinsentido, op. cit., pág. 39.
149. Ibid., págs. 44s.
150. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, op. cit., pág. 28.
151. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, op. cit., págs. 122s.
152. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, op. cit., pág. 174.
153. Ibid., pág. 164.
154. Ibid., pág. 172.
155. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, op. cit., pág. 171.
156. M. Merleau-Ponty, Lo visible y lo invisible, op. cit., pág. 191.
157. Ibid., pág. 184.
II. DERIVACIONES DE LA FENOMENOLOGÍA
158. H.-G. Gadamer, Verdad y método. Fundamentos de una hermenéutica filosófica, trad. de A. Agud Aparicio y R. de Agapito, Salamanca, Sígueme, 1977, pág. 106.
159. H.-G. Gadamer, Verdad y método, op. cit., pág. 106.
160. Ibid., pág. 115, citando la carta a Schubart del 3 de abril de 1818.
161. H.-G. Gadamer, Verdad y método, op. cit., pág. 161.
162. H.-G. Gadamer, Verdad y método, op. cit., pág. 535.
163. Ibid., pág. 537.
164. H.-G. Gadamer, Verdad y método, op. cit., pág. 568.
165. Ibid., pág. 585.
166. Cf. M. Peñalver, La búsqueda del sentido en el pensamiento de Paul Ricœur, Sevilla, Universidad de Sevilla, 1978, pág. 56.
167. P. Ricœur, Tiempo y narración, vol. 2, trad. de A. Neira, México, Siglo XXI, 52008, pág. 384.
168. P. Ricœur, Tiempo y narración, op. cit., vol. 2, págs. 1000s.
169. Ibid., pág. 999.
170. G. Vattimo, El sujeto y la máscara, trad. de J. Binagui, Barcelona, Península, 1989, pág. 17.
171. Cf. F. D’Agostini, Analíticos y continentales, trad. de M. Pérez Gutiérrez, Madrid, Cátedra, 2000, pág. 366.
172. A. G. Gargani (ed.), Crisi della ragione: nuovi modelli nel rapporto tra sapere e attività umane, Turín, Einaudi, 1979 [Crisis de la razón: nuevos modelos en la relación entre saber y actividad humana, México, Siglo XXI, 1983].
173. G. Vattimo, Más allá del sujeto, trad. de J. C. Gentile Vitale, Barcelona, Paidós, 1989, pág. 9.
174. G. Vattimo, Filosofia al presente, Milán, Garzanti, 1990, pág. 14.
175. Ibid., pág. 17.
176. G. Vattimo, Creer que se cree, trad. de C. Revilla, Barcelona, Paidós, 1996, pág. 46.
177. Ibid., pág. 85.
178. G. Vattimo, El fin de la modernidad, trad. de A. L. Bixio, Barcelona, Gedisa, 1987, pág. 104.
179. Ibid.
180. G. Vattimo, El fin de la modernidad, op. cit., págs. 106s.
181. Ibid., pág. 108.
182. Cf. G. Vattimo, «El nihilismo y lo posmoderno en filosofía», en El fin de la modernidad, op. cit., págs. 145-159.
183. Ibid., pág. 150.
184. G. Vattimo, «El nihilismo y lo posmoderno...», op. cit., pág. 152.
185. Ibid., pág. 155.
186. Cf. más datos biográficos en la parte bibliográfica de U. Ludz e I. Nordmann (eds.), Hannah Arendt: diario filosófico 1950-1973, 2 vols., trad. de R. Gabás, Barcelona, Herder, 2006.
187. U. Ludz e I. Nordmann (eds.), Hannah Arendt: diario filosófico..., op. cit., vol. 1, pág. 252.
188. Ibid., pág. 67.
189. Cf. R. Wolin, Los hijos de Heidegger: Hannah Arendt, Karl Löwith, Hans Jonas y Herbert Marcuse, trad. de M. Condor, Madrid, Cátedra, 2003, pág. 88.
190. Cf. H. Arendt, La condición humana, trad. de R. Gil Novales, Barcelona, Círculo de Lectores, 1999, pág. 56.
191. H. Arendt, Sobre la revolución, trad. de P. Baró, Madrid, Alianza, 2004, pág. 144.
192. Ibid., pág. 122.
193. Ibid., pág. 206.
194. H. Arendt, Sobre la revolución, op. cit., págs. 199s.
195. Ibid., pág. 279.
196. Ibid., pág. 282.
197. H. Arendt, Sobre la revolución, op. cit., pág. 283.
198. Ibid., pág. 293.
199. Ibid.
200. Ibid., págs. 55s. Cf. Platón, Leyes, VI, 775. Arendt cita también a Polibio: «El origen es más de la mitad de la totalidad».
201. H. Arendt, Sobre la revolución, op. cit., pág. 314.
202. Cicerón, De republica, III, 20.
203. H. Arendt, Sobre la revolución, op. cit., pág. 322.
204. Ibid., pág. 300.
205. Ibid., pág. 356.
206. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, Madrid, Espasa-Calpe, 1971, pág. 139.
207. Cf. C. Morón Arroyo, El sistema de Ortega y Gasset, Madrid, Alcalá, 1968, págs. 211s.
208. Cf. S. Rábade, Ortega y Gasset, filósofo. Hombre, conocimiento y razón, Barcelona, Humanitas, 1983, págs. 46s.
209. C. Morón Arroyo, El sistema de Ortega y Gasset, op. cit., pág. 306. Este autor concede una importancia decisiva al influjo de Heidegger en Ortega, tema que algunos comentaristas no abordan.
210. J. Pérez de Tudela, «José Ortega y Gasset», en F. Volpi, Enciclopedia de obras de filosofía, 3 vols. Barcelona, Herder, 2005, vol. 2, págs. 1600s.
211. Cf. J. Pardos, «José Ortega y Gasset», en F. Volpi, Enciclopedia..., op. cit., vol. 2, pág. 1603.
212. J. Ortega y Gasset, Obras completas, Madrid, Revista de Occidente, 1947-1960, vol. 1, pág. 222.
213. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 3, pág. 178.
214. Ibid., pág. 161.
215. Ibid., pág. 153.
216. Ibid., pág. 396 (texto de 1924).
217. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 3, pág. 178.
218. S. Rábade, Ortega y Gasset..., op. cit., pág. 131.
219. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 3, págs. 270-280 (texto de 1924).
220. Ibid., págs. 272-273.
221. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 7, págs. 404-405.
222. 1.ª ed. ingl. Oxford, 1935; 1.ª ed. cast., Madrid, 1941.
223. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 9.
224. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 15.
225. Ibid., pág. 21.
226. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 25.
227. Ibid., pág. 28.
228. Ibid., págs. 41s.
229. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 44, cf. además pág. 43.
230. Cf., por ejemplo, ibid., pág. 136.
231. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 52.
232. Ibid., pág. 53.
233. Ibid.
234. J. Ortega y Gasset, Historia como sistema, op. cit., pág. 58.
235. Ibid., pág. 133.
236. Ibid., pág. 140.
237. J. Ortega y Gasset, «Prólogo a la Historia de la filosofía de K. Vorländer», en Historia como sistema, op. cit., pág. 138.
238. Cf. Obras completas, vol. 10: Escritos políticos I (1908-1921), Madrid, Revista de Occidente, 1969; vol. 11: Escritos políticos II (1922- 1933), Madrid, Revista de Occidente, 1969.
239. Faro, n.º 1, 23 de febrero de 1908; cf. Obras completas, op. cit., vol. 10, pág. 38.
240. El imparcial, 2 de septiembre de 1908.
241. Conferencia de Ortega en la casa del Partido Socialista madrileño (2 de diciembre de 1909), cf. Obras completas, op. cit., vol. 10, pág. 120.
242. Cf. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 11, pág. 126.
243. J. Ortega y Gasset, Obras completas, op. cit., vol. 11, pág. 412.
244. J. Ortega y Gasset, España invertebrada, Madrid, Espasa-Calpe, 1967, pág. 99.
245. Ibid., pág. 126.
246. Ibid., pág. 131.
247. J. Ortega y Gasset, España invertebrada, op. cit., pág. 158.
248. J. Ortega y Gasset, La rebelión de las masas, Madrid, Revista de Occidente-Alianza, 41983, pág. 49.
249. Ibid., pág. 52.
250. Ibid., pág. 73.
251. J. Ortega y Gasset, La rebelión de las masas, op. cit., pág. 138.
252. Ibid., 139.
253. X. Zubiri, Cinco lecciones de filosofía, Madrid, Alianza, 1980, pág. 221 (1.ª ed. en Madrid, Moneda y Crédito, 1963).
254. X. Zubiri, Sobre la esencia, Madrid, Alianza-Sociedad de Estudios y Publicaciones, 21963, pág. 453.
255. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 399.
256. Ibid., pág. 104.
257. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 359.
258. Ibid., pág. 360.
259. Ibid., pág. 370.
260. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 512.
261. Ibid., pág. 517.
262. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 431.
263. Cf. J. Bañón Pinar, Metafísica y noología en Zubiri, Salamanca, Universidad Pontificia de Salamanca, 1999, pág. 18. Según Bañón, la «disyunción trascendental» aparece por última vez en Reflexiones filosóficas sobre la estética (1975) y desaparece en los tres volúmenes de Inteligencia sentiente.
264. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 201.
265. Ibid., pág. 391.
266. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., pág. 381.
267. Ibid., pág. 394.
268. Ibid., pág. 417.
269. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., págs. 391s.
270. Cf. J. Bañón Pinar, Metafísica y noología en Zubiri, op. cit., págs. 52s.
271. X. Zubiri, Inteligencia y Logos, Madrid, Alianza-Sociedad de Estudios y Publicaciones, 1982, pág. 246.
272. X. Zubiri, Sobre la esencia, op. cit., págs. 472s.
273. Cf. J. Bañón Pinar, Metafísica y noología en Zubiri, op. cit., págs. 248-263.
274. M. Zambrano, Claros del bosque, Barcelona, Seix Barral, 1977, pág. 14.
275. Cf. K. Jaspers, Filosofía de la existencia, Buenos Aires, Aguilar, 1980, pág. 125.
276. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico de la vida, ed. por A. M. López Molina, Madrid, Biblioteca Nueva, 1999, págs. 13-19 («Introducción» de A. M. López Molina).
277. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 279.
278. Ibid., pág. 138.
279. Ibid.
280. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 79.
281. Ibid., pág. 97.
282. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 80.
283. Ibid., pág. 87.
284. Ibid., pág. 103.
285. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 115.
286. Ibid., pág. 119.
287. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 135.
288. Ibid., pág. 152.
289. Ibid., pág. 164.
290. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 166.
291. Ibid., pág. 170.
292. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 175.
293. Ibid., pág. 178.
294. Ibid., pág. 193.
295. Ibid., pág. 206.
296. M. de Unamuno, Del sentimiento trágico..., op. cit., pág. 212.
297. Ibid., pág. 247.
298. Ibid., pág. 257.
299. K. Jaspers, Filosofía de la existencia, trad. de L. Rodríguez Aranda, Madrid, Aguilar, 1980, pág. 127 («Epílogo»).
300. Cf. W. Stegmüller, Corrientes fundamentales de la filosofía actual, trad. de F. Saller, Buenos Aires, Nova, 1967, pág. 249.
301. K. Jaspers, Filosofía de la existencia, op. cit., pág. 42.
302. W. Stegmüller, Corrientes fundamentales..., op. cit., pág. 254.
303. K. Jaspers, Filosofía de la existencia, op. cit., pág. 80.
304. id., Razón y existencia, trad. de H. Kahnemann, Buenos Aires, Nova, 1959, pág. 52.
305. Cf. A. Cohen-Solal, Sartre 1905-1980, trad. de A. López Tobajas y Ch. Monot, Barcelona, Edhasa, 2005, pág. 111.
306. J.-P. Sartre, La trascendencia del ego, trad. de O. Masotta, Buenos Aires, Caldén, 1968, págs. 48s.
307. J.-P. Sartre, El ser y la nada, trad. de J. Valmar, Buenos Aires-Madrid, Losada-Alianza, 1989, pág. 32.
308. Ibid.
309. J.-P. Sartre, El ser y la nada, op. cit., pág. 35.
310. Ibid., pág. 41.
311. Ibid.
312. J.-P. Sartre, El ser y la nada, op. cit., pág. 639.
313. Ibid., pág. 642.
314. Ibid., pág. 644.
315. Ibid., pág. 645.
316. Cf. E. Bello Reguera, De Sartre a Merleau-Ponty. Dialéctica de la libertad y el sentido, Murcia, Universidad de Murcia, 1979, págs. 73s.
317. J.-P. Sartre, El ser y la nada, op. cit., pág. 85.
318. Ibid., pág. 87.
319. Ibid., pág. 88.
320. Cf. J. M. Udina i Cobo, «Introducción» a Misteri ontològic: l’home problemàtic, Barcelona, Laia, 1989, pág. 33; id., «Gabriel Marcel 1889-1973», en P. Ll. Font (ed.), Història del pensament cristià, Barcelona, Proa-Fundació Joan Maragall, 2002, págs. 975-997.
321. Cf. A. Comín Oliveres, «Emmanuel Mounier», en P. Ll. Font (ed.), Història del pensament cristià, op. cit., págs. 1014s.
322. «Quelques réflexions sur la philosophie de l’hitlerisme», en Esprit 2 (26), 1934, págs. 199-208 [E. Levinas, Algunas reflexiones sobre la filosofía del hitlerismo, seguido de un ensayo de M. Abensour, «El mal elemental», México, FCE, 2002]. Cf. también el texto en M. Beltrán, J. M. Mardones y R. Mate, Judaísmo y límites de la modernidad, Barcelona, Riopiedras, 1998, págs. 65-73.
323. Cf. J. A. Sucasas, «Introducción», en VV. AA., Un libro de huellas. Aproximaciones al pensamiento de Emmanuel Levinas, Madrid, Trotta, 2004, págs. 43-58.
324. E. Levinas, Dios, la muerte y el tiempo, trad. de M. L. Rodríguez Tapia, Madrid, Cátedra, 1994, pág. 193.
325. E. Levinas, Totalidad e infinito, trad. de D. E. Guillot, Salamanca, Sígueme, 62002, pág. 60.
III. LA ESCUELA DE FRANKFURT
326. Cf. M. Jay, La imaginación dialéctica. Una historia de la Escuela de Frankfurt, trad. de J. C. Curutchet, Madrid, Taurus, 1974, pág. 79.
327. Cf. B. Witte, Walter Benjamin, Hamburgo, Rowohlt, 1985, pág. 136.
328. G. Gurisatti, «Walter Benjamin», en F. Volpi, Enciclopedia..., op. cit., vol. 1, pág. 243.
329. B. Witte, Walter Benjamin, op. cit., pág. 59.
330. Ibid., pág. 60.
331. W. Benjamin, Discursos interrumpidos I, Madrid, Taurus, 1982, pág. 32.
332. Ibid., pág. 39.
333. W. Benjamin, Discursos..., op. cit., pág. 53.
334. W. Benjamin, Discursos..., op. cit., pág. 55, nota.
335. Ibid., pág. 56.
336. W. Benjamin, Discursos..., op. cit., pág. 183.
337. Ibid., pág. 181.
338. Ibid., pág. 182.
339. W. Benjamin, Discursos..., op. cit., pág. 178.
340. Ibid., pág. 179.
341. Ibid., págs. 180s.
342. L. Hurbon, Ernst Bloch. Utopie et espérance, París. Éd. du Cerf, 1974, pág. 45.
343. L. Hurbon, Ernst Bloch..., op. cit., págs. 22s.
344. J. A. Gimbernat, Ernst Bloch. Utopía y esperanza, Madrid, Cátedra, 1983, pág. 36.
345. E. Bloch, El principio esperanza, trad. de F. González Vicén, Madrid, Trotta, 2004, vol. 1, pág. 25. Las líneas 2 y 3 de esta cita admiten también la versión: «no puede saber bastante de lo que los dirige interiormente hacia una meta y de lo que puede estar unido con ellos en todo lo de fuera».
346. E. Bloch, El principio esperanza, op. cit., vol. 1, pág. 94.
347. E. Bloch, El principio esperanza, op. cit., vol. 1, pág. 161.
348. Ibid., pág. 104.
349. E. Bloch, El principio esperanza, op. cit., vol. 1, págs. 281s. Bloch cita Aristóteles, Metafísica, VII, 7.
350. Bloch se apropia también elementos de Schelling. Cf. J. Habermas, «Ernst Bloch. Un Schelling marxista (1960)», en Perfiles filosófico-políticos, trad. de M. Jiménez, Madrid, Taurus, 1984, págs. 127-143.
351. E. Bloch, El principio esperanza, op. cit., vol. 1, pág. 283.
352. Ibid., pág. 361.
353. J. A. Gimbernat, Ernst Bloch..., op. cit., pág. 91.
354. E. Bloch, El principio esperanza, op. cit., vol. 3, pág. 201.
355. Habermas atribuye esta información a Gretel Adorno. Cf. J. Habermas, «Bemerkungen zur Entwicklungsgeschichte des Horkheimischen Werkes», en A. Schmidt y N. Altwickler (eds.), Max Horkheimer heute: Werk und Wirkung, Frankfurt, Fischer, 1986, pág. 171.
356. Ibid.
357. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica de la Ilustración, trad. de J. J. Sánchez, Madrid, Trotta, 1994, pág. 71.
358. Marqués de Sade, Juliette, trad. de J. García, Barcelona, Musa, 1987, pág. 155.
359. Ibid., pág. 166.
360. Ibid., págs. 93s.
361. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica..., op. cit., pág. 160.
362. Ibid., pág. 162.
363. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica..., op. cit., págs. 165s.
364. Ibid., pág. 174.
365. Ibid., pág. 204.
366. Ibid., pág. 199.
367. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica..., op. cit., pág. 199.
368. Ibid., pág. 171.
369. Ibid., pág. 176.
370. Ibid., págs. 181s.
371. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica..., op. cit., pág. 183.
372. Ibid., pág. 184.
373. Ibid.
374. Ibid., pág. 188.
375. Ibid., pág. 189.
376. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica..., op. cit., pág. 208.
377. Ibid., pág. 212.
378. M. Horkheimer, Crítica de la razón instrumental, trad. de H. A. Murena y D. J. Vogelmann, La Plata, Torremar, 2007, pág. 8.
379. M. Horkheimer, Crítica de la razón instrumental, op. cit., pág. 138.
380. Ibid., pág. 141.
381. Ibid., págs. 142s.
382. M. Horkheimer, Crítica de la razón instrumental, op. cit., pág. 149.
383. Ibid., pág. 84.
384. Ibid., pág. 103.
385. M. Horkheimer, Crítica de la razón instrumental, op. cit., pág. 124.
386. Ibid., pág. 169.
387. Ibid., pág. 172.
388. M. Horkheimer, Crítica de la razón instrumental, op. cit., pág. 172.
389. Ibid., págs. 178s.
390. Cf. J. Habermas, «Bemerkungen...», en A. Schmidt y N. Altwickler, Max Horkheimer heute..., op. cit., págs. 163-179.
391. M. Horkheimer, «Teoría crítica, ayer y hoy», en Sociedad en transición: estudios de filosofía social, trad. de J. Godó Costa, Barcelona, Península, 1976, pág. 59. G. Raulet, en «Kritik der Vernunft und kritischer Gebrauch des Pessimismus», en A. Schmidt y N. Altwickler, Max Horkheimer heute..., op. cit., pág. 44, considera que la teoría crítica de los años treinta podría verse en continuidad con la teología secularizada del siglo XVIII y con la teodicea de Hegel, pero acentúa a la vez que ya entonces están ausentes los rasgos positivos de esas filosofías de la historia.
392. Cf. por ejemplo S. R. Barbosa, Max Horkheimer o la utopía instrumental, Buenos Aires, Fepai, 2003, pág 336.
393. M. Horkheimer, «Teoría tradicional, teoría crítica», en Teoría crítica, trad. de E. Albizu y C. Luis, Buenos Aires, Amorrortu, 1974, pág. 270.
394. M. Horkheimer, «Homenaje a Adorno», en Teoría crítica, trad. de J. J. del Solar, Barcelona, Barral, 1973, pág. 226.
395. Ibid., pág. 225.
396. M. Horkheimer, «Crítica de la sociedad actual», en Sociedad en transición, op. cit., pág. 208.
397. M. Horkheimer, «La teoría crítica, ayer y hoy», en ibid., pág. 62.
398. M. Horkheimer, «La teoría crítica, ayer y hoy», en Sociedad en transición, op. cit., pág. 70.
399. M. Horkheimer, «El pesimismo en nuestro tiempo», en ibid., pág. 37. Cf. también el artículo escrito en 1955 con el título de «Schopenhauer y la sociedad».
400. Ibid., pág. 37.
401. M. Horkheimer, «La teoría crítica, ayer y hoy», en ibid., pág. 63.
402. Cf. H. G. Holl, «Religion und Metaphysik im spätwerk Horkheimers», en A. Schmidt y N. Altwickler, Max Horkheimer heute..., op. cit. págs. 142s.
403. Ibid., pág. 139.
404. Ibid., pág. 140.
405. Th. W. Adorno, Minima moralia, trad. de J. Chamorro Mielke, Madrid, Taurus, 32001, pág. 59.
406. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, trad. de J. M.ª Ripalda, Madrid, Taurus, 1975, pág. 365.
407. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 366.
408. Ibid., pág. 313.
409. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 305.
410. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 398.
411. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 208.
412. Ibid., pág. 241.
413. Ibid., pág. 262.
414. Ibid., págs. 269s.
415. Ibid., pág. 153.
416. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 160.
417. Th. W. Adorno, Dialéctica negativa, op. cit., pág. 166.
418. Th. W. Adorno, Teoría estética, trad. de F. Riaza, Madrid, Taurus, 1980, pág. 159.
419. Th. W. Adorno, Teoría estética, op. cit., pág. 162.
420. Ibid., pág. 114.
421. Th. W. Adorno, Teoría estética, op. cit., pág. 115.
422. M. Horkheimer y Th. W. Adorno, Dialéctica de la Ilustración, op. cit., pág. 72.
423. Ibid., pág. 73.
424. Th. W. Adorno, Teoría estética, op. cit., pág. 76.
425. Th. W. Adorno, Teoría estética, op. cit., pág. 77.
426. Ibid., pág. 194.
427. Th. W. Adorno, Teoría estética, op. cit., pág. 192.
428. Ibid., pág. 180.
429. H. Marcuse, Eros y civilización, trad. de J. García Ponce, Barcelona, Ariel, 1981, págs. 103s.
430. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., pág. 137.
431. Ibid., pág. 142.
432. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., pág. 162.
433. Ibid., pág. 167.
434. Ibid., pág. 168.
435. Ibid., pág. 167.
436. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., págs. 168s.
437. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., pág. 189.
438. Ibid., pág. 199.
439. Ibid., pág. 201.
440. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., pág. 217.
441. Ibid., pág. 218.
442. H. Marcuse, Eros y civilización, op. cit., pág. 225.
443. Ibid., pág. 235.
444. Ibid., pág. 239.
445. H. Marcuse, El hombre unidimensional, trad. de A. Elorza, Barcelona, Seix Barral, 91972, págs. 26s.
446. Ibid., pág. 35.
447. Ibid.
448. Ibid., pág. 54.
449. H. Marcuse, El hombre unidimensional, op. cit., pág. 104.
450. H. Marcuse, El hombre unidimensional, op. cit., pág. 186.
451. H. Marcuse, El hombre unidimensional, op. cit., pág. 182.
452. Ibid., pág. 184.
453. Ibid., págs. 189s.
454. Ibid., pág. 196.
455. Ibid., págs. 212 y 201.
456. H. Marcuse, El hombre unidimensional, op. cit., pág. 219.
457. Ibid., pág. 242.
458. Ibid., pág. 285.
459. J. Habermas y otros, Conversaciones con Herbert Marcuse, trad. de G. Muñoz, Barcelona, Gedisa, 1980, pág. 80.
460. Cf. H. Marcuse, El hombre unidimensional, op. cit., págs. 86s.
461. Cf. J. Habermas, Kultur und Kritik, Frankfurt, Suhrkamp, 1973, págs. 345-351.
462. H. Marcuse y otros, Conversaciones con Hebert Marcuse, op. cit., pág. 53.
463. Ibid., pág. 58.
464. H. Marcuse y otros, Conversaciones con Hebert Marcuse, op. cit., pág. 60.
465. Cf. su resumen autobiográfico en J. Habermas, Entre naturalismo y religión, trad. de P. Fabra, D. Gamper, J. Gil, J. L. López de Lizaga, P. Madrigal y J. C. Velasco, Barcelona, Paidós, 2006, pág. 26.
466. Cf. J. Keulartz, Die Verkehrte Welt des Jürgen Habermas, Hamburgo, Junius, 1995, págs. 10s.
467. Cf. J. Habermas, Entre naturalismo y religión, op. cit., pág. 20.
468. Ibid., pág. 21.
469. Ibid., pág. 23.
470. Ibid., págs. 25s.
471. Cf. J. Habermas, Teoría y praxis. Estudios de filosofía social, trad. de S. Mas y C. Moya, Madrid, Tecnos, 1987, pág. 232.
472. Cf. G. Therborn, «J. Habermas: un nuevo eclecticismo», en Theorema 6, junio de 1972, págs. 67s; R. S. Schaefer y V. Ch. Zimmerli, Theorie Zwischen Kritik und Praxis, Stuttgart, Frommann-Holzboog, 1975, págs. 150, 158s.
473. Cf. L. E. Hahn, «Die Theoretischen Grundlagen der Soziologie von J. Habermas», en Deutsche Zeitschrift für Philosophie 8, 1970, pág. 917.
474. J. Habermas, Teoría y praxis, op. cit., pág. 42.
475. Concretamente en la Lógica de las ciencias sociales, trad. de M. Jiménez, Madrid, Tecnos, 2002, págs. 81s (Hermenéutica), y en Hermeneutik und Ideologiekritik, Frankfurt, Suhrkamp, 1971.
476. J. Habermas, La lógica de las ciencias sociales, op. cit., pág. 247.
477. Cf. R. Gabás, J. Habermas: dominio técnico y comunidad lingüística, Barcelona, Ariel, 1980, págs. 205s.
478. Cf. J. Habermas, Conocimiento e interés, trad. de M. Jiménez, J. F. Ivars y L. Martín, Madrid, Taurus, 1982, págs. 333s.
479. Cf. K.-O. Apel, «La comunidad de comunicación como presupuesto trascendental de las ciencias sociales», en La transformación de la filosofía, vol. 2, trad. de A. Cortina, J. Chamorro y J. Conill, Madrid, Taurus, 1985.
480. J. Habermas, «¿Qué significa pragmática universal?», en Teoría de la acción comunicativa: complementos y estudios previos, trad. de M. Jiménez, Madrid, Cátedra, 1989, pág. 358.
481. Habermas, con apoyo en Ramsey y Strawson, distingue entre objetos de experiencia y hechos. Los objetos de experiencia se refieren al mundo experimental, bien se trate de cosas, bien de personas. En cambio, los hechos son enunciados reconocidos intersubjetivamente, son enunciados justificados en una discusión racional.
482. Cf. St. E. Toulmin, El puesto de la razón en la ética, trad. de I. F. Ariza, Madrid, Revista de Occidente, 1964; id., Los usos de la argumentación, trad. de M. Morrás y V. Pineda, Barcelona, Península, 2007.
483. J. Habermas, «Teorías de la verdad», en Teoría de la acción comunicativa: complementos..., op. cit., pág. 140.
484. Ibid., pág. 144.
485. Ibid., pág. 150.
486. J. Habermas, «Teorías de la verdad», en Teoría de la acción comunicativa: complementos..., op. cit., pág. 156.
487. Cf. el capítulo «Acción comunicativa y razón sin trascendencia», en J. Habermas, Entre naturalismo y religión, op. cit., págs. 31-82 (original al. del 2005).
488. Ibid., págs. 56s.
489. J. Habermas, Entre naturalismo y religión, op. cit., pág. 45.
490. J. Habermas, Teoría de la acción comunicativa, 2 vols., trad. de M. Jiménez, Madrid, Taurus, 1987, vol. 2, pág. 520.
491. J. Habermas, Teoría de la acción comunicativa, op. cit., vol. 2, pág. 564.
492. Sobre los lugares en que Habermas utiliza el contra Deum nisi deus ipse, cf. J. Keulartz, Die Verkehrte Welt..., op. cit., pág. 15.
493. J. Habermas, Pensamiento postmetafísico, trad. de M. Jiménez, Madrid, Taurus, 1990, pág. 45.
494. J. Habermas, Pensamiento postmetafísico, op. cit., pág. 25.
495. J. Habermas, Pensamiento postmetafísico, op. cit., pág. 25.
496. Cf. J. C. Velasco, Para leer a Habermas, Madrid, Alianza, 2003, págs. 56s.
497. J. Habermas, Faktizität und Geltung, Frankfurt, Surhkamp, 1992 [Facticidad y validez, trad. de M. Jiménez, Madrid, Trotta, 1998].
498. J. C. Velasco, Para leer a Habermas, op. cit., pág. 83.
499. Cf. J. Habermas, Entre naturalismo y religión, op. cit., pág. 96.
500. Ibid., pág. 102.
501. Ibid., pág. 98.
502. J. Habermas, Entre naturalismo y religión, op. cit., págs. 137-155.
503. Id., La inclusión del otro, trad. de J. C. de Velasco y G. Vilar, Barcelona, Paidós, 1999, pág. 119.
504. J. Habermas, La inclusión del otro, op. cit., pág. 253.
505. Ibid., pág. 257.
506. Con trabajos desde 2001 a 2004; cf. J. A. Estrada, Por una ética sin teología. Habermas como filósofo de la religión, Madrid, Trotta, 2004, pág. 204.
507. Ibid., pág. 211.
508. J. Habermas, Israel o Atenas: ensayos sobre religión, teología y racionalidad, trad. de P. Fabra, M. Jiménez y J. C. Velasco, Madrid, Trotta, 2001, pág. 175.
509. Ibid., pág. 180.
510. J. Habermas, El futuro de la naturaleza humana. ¿Hacia una eugenesia liberal?, trad. de R. S. Carbó, Barcelona, Paidós, 2002, pág. 139.
511. Cf. la introducción a Entre naturalismo y religión, op. cit., pág. 14 (original al. del 2005).
512. Ibid., pág. 114.
513. Ibid., pág. 116.
514. Cf. K.-O. Apel, Teoría de la verdad y ética del discurso, trad. de N. Smilg, Paidós, ICE de la UAB, 1991, pág. 83 (ed. al., 1987).
515. K.-O. Apel, Teoría de la verdad..., op. cit., págs. 121s.
IV. LA PLURALIDAD DE LENGUAJES O RAZONES
516. V. Kraft ofrece una clásica exposición del neopositivismo en El Círculo de Viena, trad. de F. Gracia, Madrid, Taurus, 21986.
517. R. Rorty, Filosofía y futuro, trad. de J. Calvo y Á. Ackermann, Barcelona, Gedisa, 2002, pág. 57.
518. A. Stroll, La filosofía analítica del siglo XX, trad. de J. F. Álvarez y E. de Bustos, Madrid, Siglo XXI, 2002, pág. 147.
519. A. Stroll, La filosofía analítica del siglo XX, op. cit., pág. 165.
520. Cf. C. Micieli, Foucault y la fenomenología: Kant, Husserl, Merleau-Ponty, Buenos Aires, Biblos, 2003, pág. 18.
521. El texto de Borges aludido es «El idioma analítico de John Wilkins», publ. originalmente en La Nación, el 8 de febrero de 1942. Luego fue incluido en Otras inquisiciones, Buenos Aires, Sur, 1952 (Emecé, 1960).
522. M. Foucault, Las palabras y las cosas, trad. de E. C. Frost, México-Madrid-Buenos Aires, Siglo XXI, 51974, págs. 1, 5s.
523. J. Habermas, El discurso filosófico de la modernidad, trad. de M. Jiménez, Madrid, Taurus, 1989, págs. 309s.
524. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., pág. 55.
525. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., págs. 320s.
526. Cf. C. Micieli, Foucault y la fenomenología, op. cit., pág. 34.
527. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., pág. 306.
528. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., pág. 335.
529. Ibid., pág. 375.
530. Ibid., pág. 373.
531. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., pág. 340.
532. Ibid., pág. 353.
533. M. Foucault, Las palabras y las cosas, op. cit., pág. 366.
534. M. Heidegger, Sein und Zeit, título del § 6: «Die Aufgabe einer Destruktion der Geschichte der Ontologie».
535. Cf. W. Welsch, Vernunft. Die Zeitgenössische Vernunftkritik und das Konzept der transversalen Vernunft, Frankfurt, Suhrkamp, 1996, pág. 252.
536. J. Derrida, La escritura y la diferencia, trad. de P. Peñalver, Barcelona, Anthropos, 1989, pág. 405.
537. J. Derrida, Tiempo y presencia, trad. de P. Marchant, Santiago de Chile, Universitaria, 1971, pág. 98.
538. J. Derrida, Tiempo y presencia, op. cit., págs. 100s.
539. Ibid., pág. 102.
540. Ibid., pág. 104.
541. Cf. W. Welsch, Vernunft..., op. cit., págs. 275-279.
542. W. Welsch, Vernunft..., op. cit., pág. 284.
543. No entramos aquí en el análisis de la forma de escribir de Derrida, tal como aparece particularmente en Glas (París, Galilée, 1974). Cf. J. Bernal Pastor, El desplazamiento de la filosofía de Jacques Derrida, Granada, Universidad de Granada, 2001, págs. 204s.
544. J.-F. Lyotard, La diferencia, trad. de A. L. Bixio, Barcelona, Gedisa, 1999, pág. 11.
545. J.-F. Lyotard, Moralidades posmodernas, trad. de A. Izquierdo, Madrid, Tecnos, 1993, pág. 57.
546. J.-F. Lyotard, Moralidades posmodernas, op. cit., pág. 68.
547. Ibid., pág. 73.
548. Ibid., pág. 162.
549. J.-F. Lyotard, La diferencia, op. cit., págs. 16s.
550. J.-F. Lyotard, La diferencia, op. cit., pág. 164.
551. Ibid., págs. 166s.
552. J.-F. Lyotard, La diferencia, op. cit., pág. 184.
553. J.-F. Lyotard, La diferencia, op. cit., pág. 152.
554. J.-F. Lyotard, El entusiasmo. Crítica kantiana de la historia, trad. de A. L. Bixio, Barcelona, Gedisa, 1987, pág. 39.
555. J.-F. Lyotard, El entusiasmo..., op. cit., pág. 40.
556. J.-F. Lyotard, El entusiasmo..., op. cit., pág. 50.
557. G. Deleuze y F. Guattari, El Anti-Edipo. Capitalismo y esquizofrenia, trad. de F. Monge, Barcelona, Paidós, 1985, pág. 49.
558. Ibid., pág. 23.
559. Ibid., pág. 122.
560. G. Deleuze y F. Guattari, El Anti-Edipo..., op. cit., pág. 391.
561. Ibid., pág. 127.
562. G. Deleuze y F. Guattari, El Anti-Edipo..., op. cit., págs. 47s.
563. Ibid., pág. 48.
564. G. Deleuze, Foucault, trad. de J. Vázquez Pérez, Barcelona, Paidós, 1987, pág. 121.
565. G. Deleuze y F. Guattari, ¿Qué es la filosofía?, trad. de Th. Kauf, Barcelona, Anagrama, 1993, pág. 57.
566. Ibid., pág. 76.
567. Ibid., pág. 39.
568. G. Deleuze y F. Guattari, ¿Qué es la filosofía?, op. cit., pág. 128.
569. Ibid., pág. 39.
570. R. Rorty, El giro lingüístico, trad. de G. Bello, Barcelona, Paidós-ICE de la UAB, 1990, pág. 93.
571. R. Rorty, El giro lingüístico, op. cit., pág. 112.
572. R. Rorty, Filosofía y futuro, trad. de J. Calvo y Á. Ackermann, Barcelona, Gedisa, 2002, pág. 21.
573. R. Rorty, «Habermas y Lyotard sobre la postmodernidad», en A. Giddens y otros, Habermas y la modernidad, trad. de F. Rodríguez Martín, Madrid, Cátedra, 1994, pág. 268.
574. W. Welsch, Vernunft..., op. cit., pág. 215.
575. Rorty escribe, por ejemplo: «La idea de que existe un orden natural de las razones independiente de las audiencias específicas es esencial a la idea de que existe una conexión profunda entre la justificación y la verdad. Esas malas ideas son variantes de la idea de que los seres humanos tienen una afinidad especial con la naturaleza intrínseca de las cosas» (¿Esperanza o conocimiento? Una introducción al pragmatismo, trad. de E. Rabossi, Buenos Aires, FCE, 1997, pág. 37).