ACTIVIDADES

1. LECTURA

Para lectura de textos de obras puede verse la antología de Fernando Doménech, La zarzuela chica madrileña: La Gran Vía, La verbena de la Paloma, Agua, azucarillos y aguardiente, La Revoltosa (Madrid: Castalia / Comunidad de Madrid, 1998) [38]. Buscar en Internet (especialmente en YouTube) puestas en escena o fragmentos de las obras anteriormente reseñadas. Esta actividad es optativa, pero se recomienda hacerla.

2. ANÁLISIS

a) Elegir uno de los compositores de zarzuelas, anteriormente mencionados, y constatar qué presencia tuvieron sus obras en la cartelera de dos o tres ciudades estudiadas en el SELITEN@T (http://www.uned.es/centro-investigacion-SELITEN@T/estudios_sobre_teatro.html), al igual de lo que se ha mostrado sobre Ruperto Chapí. Este análisis es optativo.

b) Actividad optativa (pero recomendada): ver una ópera de los autores señalados o de otros en directo o a través de vídeo, DVD o Internet y anotar, como autoevaluación, los rasgos más importantes de ella.

AMPLIACIÓN BIBLIOGRÁFICA

Para ampliar conocimientos sobre el tema, se recomiendan las siguientes entradas bibliográficas, entre otras varias.

1. PARA EL ESTUDIO DE LA HISTORIA DE AUTORES Y OBRAS

• Leza, José Máximo, «El teatro musical» [para el siglo XVIII], en JAVIER HUERTA CALVO (ed.), Historia del teatro español (Madrid: Gredos, 2003, vol. II, págs. 1687-1713).

• Casares Rodicio, Emilio, «El teatro musical en España (1800-1939)», en JAVIER HUERTA CALVO (ed.), Historia del teatro español (Madrid: Gredos, 2003, vol. II, págs. 2051-2084).

PARA LA HISTORIA DEL TEATRO REPRESENTADO

• OLIVA, CÉSAR Y TORRES MONREAL, FRANCISCO, «La ópera», en Historia básica del arte escénico (Madrid: Editorial Cátedra, 2003, 7.ª ed.º ampliada, págs. 261-269).

• Casares Rodicio, Emilio, «Teatro musical: zarzuela, tonadilla, ópera, revista…», en ANDRÉS AMORÓS y JOSÉ M.ª DÍEZ BORQUE (eds.), Historia de los espectáculos en España (Madrid: Castalia, 1999, págs. 147-174).

• Espín Templado, M.ª Pilar y Fernández San Emeterio, Gerardo, «Sobre teatro lírico e Internet: presente y futuro en las nuevas tecnologías», en JOSÉ ROMERA CASTILLO (ed.), Teatro e Internet en la primera década del siglo XXI (Madrid: Verbum, 2013, págs. 119-139).

[1] Cf. de José Subirá, Historia de la música teatral en España (Barcelona: Labor, 1945).

[2] Para más información remito a los estudios, entre otros, de Emilio Cotarelo y Mori, Orígenes y establecimiento de la ópera en España hasta 1800 (Madrid: Imprenta de la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, 1917); Antonio Peña y Goñi, La ópera española y la música dramática en España en el siglo XIX. Apuntes históricos (Madrid: Imprenta de El Liberal, 1881) —reeditado parcialmente luego por Eduardo Rincón, España, desde la ópera a la zarzuela (Madrid: Alianza, 1967)—; José Subirá, Historia de la música teatral en España (Barcelona: Labor, 1945), etc. Y muy especialmente el catálogo de óperas y zarzuelas de Luis Iglesias de Souza, Teatro lírico español (La Coruña: Diputación Provincial, 1992-1997, 4 vols.).

[3] Para más datos sobre la ópera, la zarzuela, el género chico, los bufos, etc. conviene ver el trabajo de Francisco León Tello, «El teatro musical español durante el siglo XIX», en Leonardo Romero Tobar (ed.), Historia de la Literatura Española. Siglo XIX (Madrid: Espasa Calpe, 1998, vol. II, págs. 150-183).

[4] Madrid: Imprenta Real de la Gazeta, 1779.

[5] Para más datos conviene ver, entre otros, el estudio clásico de Emilio Cotarelo y Mori, Historia de la Zarzuela, o sea el drama lírico en España, desde su origen a fines del siglo XIX (Madrid: Imprenta de la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, 1934). Así como los portales, entre otros, Fundación Teatro Lírico Española (lazarzuela.webcindario.com), Zarzuela.net, Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero (fundacionguerrero.com).

[6] Cf. de José de Cañizares y Sebastián Durón, Salir el Amor al Mundo (1696). Zarzuela en dos jornadas, editada por Antonio Martín Moreno (Málaga: Sociedad Española de Musicología, 1979).

[7] Que puede leerse en la edición de L. A. González Marín, publicada en Madrid: Instituto Complutense de Ciencias Musicales, 2000.

[8] Cf. de María Salud Álvarez Martínez, José de Nebra Blasco: vida y obra (Zaragoza: Institución Fernando el Católico, 1993).

[9] Que puede leerse ahora en la edición de María Salud Álvarez Martínez, publicada en Zaragoza: Institución Fernando el Católico, 1999.

[10] Que puede leerse ahora en la edición de María Salud Álvarez Martínez, aparecida en Zaragoza: Institución Fernando el Católico, 1997.

[11] Que puede leerse ahora en la edición de F. J. Cabañas Alamán, publicada en Madrid: Instituto Complutense de Ciencias Musicales, 1998.

[12] Cf. de Emilio Casares y Celsa Alonso (eds.), La música española en el siglo XIX (Oviedo: Universidad, 1995). Para más información bibliográfica puede verse el trabajo de José Romera Castillo, «Una bibliografía (selecta) para la reconstrucción de la vida escénica española en la segunda mitad del siglo XIX», Signa 9 (2000), págs. 259-421 (también en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/13528399434915617422202/p0000004.htm#I_17_).

[13] Cf. de M. Zurita Rodríguez, Historia del género chico (Madrid: Prensa Popular, 1920); José Deleito y Piñuela, Origen y apogeo del género chico (Madrid: Revista de Occidente, 1949); Antonio Valencia, El género chico (Madrid: Taurus, 1962); A. Barrera Masaver, Crónicas del género chico y de un Madrid divertido (Madrid: El Avapiés, 1993, 3.ª ed.º), etc.

[14] Cf. de E. Huertas Vázquez, El teatro de los Bufos madrileños (Madrid: Instituto de Estudios Madrileños / CSIC, 1993).

[15] En la Biblioteca Digital Hispánica, de la Biblioteca Nacional de España (bne.es./Catálogos.BibliotecaDigital), en la colección Teatro Lírico, se pueden encontrar noticias y libretos de diversos autores (Francisco Asenjo Barbieri, Ruperto Chapí, Miguel Ramos Carrión, Ricardo de la Vega, Vital Aza o Javier de Burgos, etc.); así como en el portal del Género Chico en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes (http://www.cervantesvirtual.com), los de la Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero (fundacion guerrero.com), Francisco Alonso (maestroalonso.com), etc.

[16] Como ha estudiado Alberto Romero Ferrer, «El género chico», en Javier Huerta Calvo (ed.), Historia del teatro español (Madrid: Gredos, 2003, vol. II, págs. 2031-2050).

[17] Cf. de nuestra colaboradora, M.ª Pilar Espín Templado, El teatro por horas en Madrid (1870-1910) (Madrid: Instituto de Estudios Madrileños / Fundación Jacinto e Inocencio Guerrero, 1995), entre otros trabajos suyos dedicados al teatro en el siglo XIX.

[18] Una constatación más detallada de sus actividades, referidas al teatro, en general, se encuentra en los estados de la cuestión de José Romera, «Teatro en escena: un centro de investigación sobre la vida teatral en España» Teatro de Palabras (Université de Québec a Trois-Rivières, Canadá) 6 (2012), págs. 175-201 (en línea: http://www.uqtr.ca/teatro/teapal/TeaPalNum06Rep/TeaPal06Romera.pdf); además de «Literatura, teatro y nuevas tecnologías: investigaciones en el SELITEN@T (España)», Epos XXVI (2010), págs. 409-420 (también puede leerse en http://congresosdelalengua.es/valparaiso/ponencias/lengua_comunicacion/romera_jose.htm). El panorama más completo puede verse en los dos capítulos primeros, «El Centro de Investigación de Semiótica Literaria, Teatral y Nuevas Tecnologías» y «El Centro de Investigación y el teatro», de su obra, Pautas para la investigación del teatro español y sus puestas en escena (Madrid: UNED, 2011, págs. 21-45 y 47-101, respectivamente).

[19] Cf. de José Romera, «El teatro francés en algunos escenarios españoles en la segunda mitad del siglo XIX y el SELITEN@T», en Stefano Torresi (ed.), Francia e Spagna a confronto (Macerata, Italia: Edizioni Università di Macerata, 2010, págs. 231-243).

[20] Una descripción detallada de la misma, puede verse en José Romera Castillo, «Reconstrucción de la vida escénica en España (Un proyecto de estudio)», en Beatriz Mariscal y Blanca López de Mariscal (eds.), Actas del XV Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas (México: Fondo de Cultura Económica, 2007, vol. III, págs. 357-370) y en su libro, Pautas para la investigación del teatro español y sus puestas en escena (Madrid: UNED, 2011, págs. 103-137).

[21] Tanto las tesis de doctorado completas como una síntesis de las carteleras teatrales de (casi todas) ellas pueden consultarse en el epígrafe «Estudios sobre teatro» de la página web del Centro: http://www.uned.es/centro-investigacion-SELITEN@T/estudios_sobre_teatro.html.

[22] Cf. entre otros estudios los de Juan José del Águila, Ruperto Chapí y su obra lírica (Alicante: Diputación, 1973); Ángel Sagardía Sagardía, Ruperto Chapí (Madrid: Espasa Calpe, 1979); Luis G. Iberni, Ruperto Chapí (Madrid: Instituto Complutense de Ciencias Musicales, 1995) y Ruperto Chapí: memorias y escritos (Madrid: Instituto Complutense de Ciencias Musicales, 1995), etc..

[23] Con reseña de Agustina Torres, en Signa 4 (1995), págs. 261-264 (también puede leerse en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/01371741344505955212257/p0000017.htm#I_22_). Cf. además de Francisco Reus, «Alicante (1900-1910)», Signa 12 (2003), págs. 519-546 (en la sección monográfica, coordinada por José Romera, sobre compañías teatrales; que también puede leerse en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/79106288329682384100080/p0000025.htm#I_29_) y «Alicante (1901-1910)», Signa 15 (2006), págs. 115-124 (en la sección monográfica sobre Puestas en escena de nuestro teatro áureo en algunas ciudades españolas durante los siglos XIX y XX, bajo la coordinación de Irene Aragón González; también en http://descargas.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12259418920170495210435/030480.pdf?incr=1).

[24] La sigla TD corresponde a Tesis de Doctorado.

[25] Pese a que se constate que fueron 41 piezas (Reus, 1994: 56) ó 39 en el índice de compositores (Reus, 1994: 410), al atribuir a Chapí la zarzuela La Rabalera (1907), perteneciente al maestro Amadeo Vives, con libreto de Miguel Echegaray (que fue puesta en escena en diecisiete ocasiones en la cartelera alicantina).

[26] Compartiría partituras también en muy escasas ocasiones, como, por ejemplo, en El Duque de Gandía (1894), en colaboración con Antonio Llanos; El guerrillero (1885), con Manuel Fernández Caballero y Emilio Arrieta; Aprieta constipado (1900), con Arturo Saco del Valle; El tío Juan (1902), con Enrique Morera; Man’zelle Margot (1903), con Joaquín Valverde (hijo); Los bárbaros del Norte (1907), con Joaquín Valverde Durán y Joaquín Quinito Valverde (hijo); La eterna revista (1908), con Jerónimo Jiménez; Diversiones infantiles (póstuma), con Tomás Bretón y Jerónimo Jiménez, etc.

[27] La citada compañía puso en escena la obra en trece ocasiones, en su estancia en Alicante durante los meses de enero y febrero de 1903.

[28] Cf. además de M.ª Eva Ocampo Vigo, «Ferrol (1878-1915)», Signa 12 (2003), págs. 461-480 (en la sección monográfica, coordinada por José Romera, sobre compañías teatrales; que puede leerse también en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/79106288329682384100080/p0000022.htm#I_26_).

[29] Aunque M.ª Eva Ocampo constate 43, al atribuirle a Chapí tres piezas: La caza del oso o el tendero de comestibles, que es del maestro Federico Chueca; El señor cura, comedia, en dos actos, que pertenece a Vital Aza (teatro declamado) y Churro Bragas —parodia del drama lírico Curro Vargas (con libreto de Joaquín Dicenta y Manuel Paso y música de Chapí)—, estrenada en el teatro Apolo de Madrid, el 1 de febrero de 1899, con libreto de Enrique García Álvarez y Antonio Paso Cano y música de Ramón Estellés.

[30] Cf. la reseña de Francisco Linares Valcárcel, en Signa 9 (2000), págs. 627-631 (también en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/13528399434915617422202/p0000007.htm#I_30_). Además de otro trabajo de Emilia Cortés, «Albacete (2.ª mitad del s. XIX)», Signa 12 (2003), págs. 409-422 —también puede leerse en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/79106288329682384100080/p0000020.htm#I_24_, en la sección monográfica sobre compañías teatrales, coordinada por José Romera.

[31] Con reseña de Emilia Cortés Ibáñez, en Signa 10 (2001), págs. 477-479 (también en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/01371852677834857430035/p0000027.htm#I_35_).

[32] Cf. además de Emilia Ochando Madrigal, «Representaciones de teatro histórico en Albacete (1983-1998)», en José Romera Castillo y Francisco Gutiérrez Carbajo (eds.), Teatro histórico (1975-1998): textos y representaciones (Madrid: Visor Libros, 1999, págs. 525-536); «Albacete (1924-1936)», Signa 12 (2003), págs. 423-459 (en la sección monográfica sobre compañías teatrales, coordinada por José Romera Castillo; que puede leerse también en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/79106288329682384100080/p0000021.htm#I_25_) y «Albacete (1924-1939)», Signa 15 (2006), págs. 149-158 (en la sección monográfica sobre Puestas en escena de nuestro teatro áureo en algunas ciudades españolas durante los siglos XIX y XX, bajo la coordinación de Irene Aragón González; que también puede verse en http://bib.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/79106288329682384100080/p0000021.htm#I_25_).

[33] La compañía esta vez puso en escena La tempestad, a la que se califica como «una joya inmortal de nuestro género lírico» y que «obtuvo una interpretación muy acertada, en la que se distinguieron las tiples Pepita Amorós y Enriqueta Torres y los señores Pastor, Miret, Balaguer y Acquaviva» (TD Ochando, vol. II: 656-657).

[34] Cf. además de Paloma González-Blanch Roca, «Segovia (1918-1936)», Signa 15 (2006), págs. 125-148 (en la sección monográfica sobre Puestas en escena de nuestro teatro áureo en algunas ciudades españolas durante los siglos XIX y XX, bajo la coordinación de Irene Aragón González; que también puede leerse en http://descargas.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/01474064211384173454480/030313.pdf?incr=1) y «El teatro representado en Segovia (2000-2005)», en José Romera Castillo (ed.), Tendencias escénicas al inicio del siglo XXI (Madrid: Visor Libros, 2006, págs. 637-652).

[35] Por ejemplo, en Segovia, «la compañía de zarzuela de Rafael Santoncha (11 de octubre de 1924), tiene 93 personas en nómina, con 22 actrices, 6 actores, un director artístico y otro técnico, dos maestros concertadores, 25 coristas de ambos sexos, 20 profesores de orquesta, 1 gerente, 1 sastre, 1 maquinista, 2 apuntadores y 1 atrezzista», mientras que en las de teatro declamado el número de personas es mucho menor (González-Blanch, 2005: 418).

[36] En Segovia, por ejemplo, «la compañía de César Muro, [representó] en las temporadas de 1918 (con casi un mes de permanencia, 32 títulos y 161 representaciones) y 1919 (tres meses de permanencia con 52 títulos y 171 representaciones) y la de Luciano Ramallo en 1923 (con 35 días de permanencia, 46 funciones, 39 títulos y 67 representaciones)», según González-Blanch (2005: 431).

[37] Este trabajo fue presentado en el Congreso Internacional Ruperto Chapí, organizado por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, INAEM, SGAE, Universitat de València e Institut Valencià de la Música (Valencia, 18-21 de noviembre de 2009), con motivo del centenario de la muerte del músico, y que no se ha publicado por incompetencia de sus dos organizadores, cuyos nombres ni siquiera merece la pena dejar constancia de ellos. Apareció posteriormente, reformulado, como parte del capítulo 9, «Ruperto Chapí: más allá de los escenarios madrileños», en el volumen de José Romera Castillo, Pautas para la investigación del teatro español y sus puestas en escena (Madrid: UNED, 2011, págs. 297-320).

[38] También puede acudirse a la realizada por Alberto Romero Ferrer, Antología del género chico (Madrid: Cátedra, 2005), que contiene 7 libretos: El baile de Luis Alonso, Gigantes y cabezudos, La Revoltosa, La Gran Vía, Agua, azucarillos y aguardiente, La verbena de la Paloma y Cuadros al fresco —proveniente esta última del teatro en verso—. Puede verse también la web dedicada a los libretos de zarzuelas (libretoszarzu.iespana.es).