Busca la acción correspondiente a tu signo en la página indicada.
Es más, este libro, Inteligencia astrológica, es todo un sistema de palabras que van de acuerdo a cualquiera de los doce signos astrológicos—tú escoges cual—y que compaginados con las seis palabras clave te ayudarán a encontrarle salida a cualquier embrollo, distancia a toda dificultad, manera de acercarte a quien quieras y de comenzar a tomar los pasos adecuados para lograr tus propósitos. Es en realidad una tabla de multiplicar astrológica, de fácil acceso para momentos claves.
Cómo usar tu tabla de ecuaciones astrológicas:
Si naciste bajo el signo de Acuario y quieres “acercarte” a un compañero de trabajo que no te ha prestado la atención que te mereces, busca tu signo en la primera columna de la tabla. Ahora, busca Acercamientos en la primera linea. El punto donde Acuario y Acercamientos convergen te indicará la página donde se encuentra la respuesta. Tu palabra clave es independencia. Por último, busca el signo de tu “compañero” en esta sección, por ejemplo:
Acuario y Leo. Lo repetiré una y mil veces. Los opuestos sí se atraen, y en este caso sólo se necesita encontrar algo liberador en que los dos estén de acuerdo. Una vez encontrado ésto, que podría ser totalmente trivial, pueden acercarse en conjunto en lo que se les pegue la gana. No olviden que a Leo le hace bien el calor del sol para suavizar sus primeros pasos.
Hagan otra prueba rápida. Digamos que tú eres Géminis. Que estás pensando en un negocio nuevo, o sea, cómo sacarle provecho o cómo regatear, es decir, negociar. Tu palabra clave es arriesgar. Puede conformarte simplemente con leer todos los pormenores de la palabra en esta página ó, si conoce el signo astrológico de la persona con quien quieres hacer el trato, léelo. Están incluidos los doce signos zodiacales en cada capítulo principal, relacionados y comparados con el tuyo.
Dete cuenta que tienes en las manos casi mil respuestas a un sin número de preguntas que cada quien aprenderá a contestar según su momento.
Siempre he pensado—y los miles que me han consultado lo han constatado—que la astrología es un instrumento además de ser un arte. Cuando quiero ser lírica, digo que la astrología es la parte poética de la astronomía, y cuando quiero ser realista repito que la inteligencia astrológica es ¡lo mejor que te puede suceder! Es un idioma. Yo, siempre me presento como Andrea Valeria que habla cinco idiomas: español, inglés, alemán, francés y el quinto: el idioma astrológico. Repito una y otra vez, que así como nos ayuda a conllevar el día por venir, anticipar el clima. ¿Lloverá? Ponemos un paraguas bajo el brazo o llevamos el impermeable y no usamos zapatos preferidos; un buen chal si hace frío, algo ligero para el calor etcétera. De la misma manera asentarte y fortalecerte dentro de tu propio signo del zodiaco, que te ha sido regalado por la bóveda celeste y un gran aliviane, dirían mis hijos, y un protector, dirían los que se atreven. Llevo treinta años practicando—además de quince años de estudio—este maravilloso mítico y mágico arte que nos permea de una energía reconocible. No es en balde que una de las películas IMAX sobre el cielo termina con las palabras; “Todos los humanos tenemos una parte de polvo estelar”.
Por supuesto que este sistema astrológico me costó mucho tiempo y trabajo, pero bien vale la pena mostrarles cómo puede la astrología convertirse en algo práctico—y no tan rimbombante—y de fácil acceso para el uso de cualquier persona que se dé el tiempo de sentirse bienvenido dentro de nuestra propia bóveda celeste.
La astrología tiene que ver con interpretaciones, como los buenos médicos cuyos diagnósticos son producto de una excelente interpretación. La astrología es un idioma y así como dos traductores diferentes nunca traducirán un poema de manera exacta, no hay modo de que dos personas—aunque tengan el mismo signo del zodiaco—interpreten el mensaje de las estrellas o de sus “influencias astrales” de la misma manera. La astrología rompe barreras, no las crea. Y por lo tanto, decidí que combinando palabras claves con interpretaciones cósmicas era la mejor manera—además de ser la más sencilla—para introducirles este arte tan antiguo, ahora puesta a la modernidad.
Y la palabra de fácil acceso que necesitan para comenzar la traen por haber nacido tal o cual día. Es tu propio signo del zodiaco. Tu signo solar, que puede ser Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión, Sagitario, Capricornio, Acuario o Piscis. La mayoría de ustedes seguramente ya conoce el suyo, pero de no ser así, no tienen más que ver esta página para averiguarlo. La complejidad maravillosa y rica, imbuida de mitología y de historia de cada de estos signos está entretejida por todas las palabras de este libro. Al usar la inteligencia Astrológica ustedes llegarán a entender mucho más sobre sí mismo y sobre los que les rodean.
Lo que tú hagas y como escoges hacerlo son los cimientos de la construcción de tu propia vida que por esta ocasión y con la ayuda de mi amiga y exeditora de Random House—de quien les hablaré después—he dividido en seis partes que pueden ser utilizadas en secuencia o al juicio del jugador. Albert Einstein, todos sabemos quien es, y a partir de ahora ya saben que es del signo de Piscis, dijo alguna vez que la vida es lo que el hombre está pensando todo el día. De alguna manera ésto me ayudó a escoger las seis palabras siguientes para que sean pilares del sistema de la inteligencia astrológica que te ayudarán a escoger con más claridad lo que realmente te conviene. Seis palabras que nos facilitan los pasos para encontrar nuestro lugar dentro de cualquier incógnita. Algo que tenga que ver con lo que tú estás pensando durante tu día.
Aquí están:
1—Acercamientos: Te sitúas y comienzas o estás a punto de comenzar algo.
2—Preguntar: Te empiezas a hacer preguntas personales.
3—Estrategias: Comienzas a hacer un verdadero plan.
4—Negociar: Te relacionas. Ya estás colaborando. Ya son más de uno.
5—Vínculos: Has dado algo y posiblemente, lo has recibido. Empiezas a vincularte, unirte, a alguien o algo.
6—Crecer y desarrollar: Estás creciendo, construyendo y edificando. Se abre un futuro seguro.
Éstas seis palabras se pueden aplicar en cualquier ocasión. Escoger una falda o un pantalón, tomar un atajo, salir a comer, pedir aumento o vacaciones, gustarle a tal o cual persona, hablarle a un desconocido en un elevador, pedir un permiso, darlo, pedir la mano o la confianza de tu ser querido, el gran espectro de la vida diaria en los negocios, la familia, las amistades, el romance, la educación, la recreación o el simple gusto por divertirse aprendiendo encuentra su lugar dentro de esta lista, y todos tenemos nuestro apoyo personal, o llave de acceso que es nuestro signo astrológico. Además de que viene un enlistado de los mismos en la contraportada. Inclusive, pueden usar este libro al azar. Vean.
Ábranlo a esta página (me tocó Libra/vínculos). Tomen unos minutos, lean de que se trata, o si tienen poco tiempo, simplemente vean que dice sobre Libra y la manera en que pueda divertirse con todos los otros signos, ¡incluyendo el tuyo! Este es un sistema que beneficia a todos y divierte a muchos. Al usarlo, tus decisiones se refuerzan con un impulso positivo que te encamina hacia algo que como mínimo habrá valido la pena. No quiero decir con esto que cambiará tu mundo, pero si estoy totalmente convencida de que al utilizarlo, no puedes más que hacerte un bien y eso nunca es una pérdida de tiempo.
Estoy totalmente consciente de que el debate sobre la autenticidad de la astrología será quizá interminable. ¡Y qué bueno! Simplemente en los Estados Unidos, hay algunos cuarenta millones de adeptos; en la India no hay matrimonio sin un compromiso anterior avalado por la buena conjugación de los astros de los contrayentes, y yo misma he tenido la grandísima oportunidad de pasearme—sin tocarlos, desafortunadamente—por la mejor biblioteca sobre la faz de la tierra en esta materia, que se encuentra dentro del Vaticano. Aunque tú seas un entregado a la causa astrológica, un simple curioso o un total y absoluto nocreyente, vale la pena darle el beneficio de una duda, suficiente para permitirte unos momentos más que te desbloquearán para que puedas descubrir como puedes, con un solo párrafo, darle un empujón a tus deseos. Una posibilidad de creer en ti, porque eres parte de un todo, que siempre ha existido, y siempre existirá, simplemente por estar ahí.
Y por eso el nombre de inteligencia astrológica. Ambas palabras no se excluyen; al contrario. Y, aunque he estado en lugares donde simplemente me dicen cosas como, “Pero si pareces tan inteligente, como puedes dedicarte a esas cosas tan atolondradas”?, sé que son legítimas. Cuando eso me sucede les menciono algún adepto o interesado cuyo nombre tiene peso histórico, alguien que usó los trucos de las estrellas para acomodarse mejor y frecuentemente esas mismas personas me preguntan, “¿Y, que me puedes decir de mi signo”?… ¡nunca falla!
Me preguntan también con gusto y sencillez; “¿Y cuál es el mejor signo”?
Siempre contestaré lo mismo.
Sin lugar a dudas, el tuyo. El propio.
Si eres un Virgo, entonces Virgo es el mejor signo. Ve esta página, esta página, esta página, esta página, esta página y esta página y estarás de acuerdo. Si naciste entre el 23 de septiembre y el 24 de octubre, eres del signo de Libra, y si tú eres Libra, no existe sobre la faz de la tierra mejor signo que el tuyo. Pero el primero en tener que estar seguro de esto eres tú, y con los conocimientos que este libro encierra, encontrarás como empezar a creerlo. Hasta el principio del 2001, tiene que haber aproximadamente entre quinientos a seiscientos millones de individuos de cada signo. ¡No es tanto si los comparamos con todas las estrellas del cielo! Al mismo tiempo, así como no hay dos copos de nieve iguales, no hay dos escorpiones iguales, ¡aunque sean gemelos! Por esto es tan interesante adentrarse en los conceptos de lenguaje y paraje astrológico. Si dos sagitarios abren este libro a esta página (Estrategias) verán en un santiamén como las palabras de Antoine de Saint-Exupéry, autor de El principito) les atañe de diferente manera, y al volcarse sobre los caminos a tomar entre su signo y el de cualquier otro, su entonación será diferente, aunque hubiesen nacido en el mismo lugar, a la misma hora y del mismo vientre. Todos tenemos dedos, pero nadie tiene huellas digitales iguales. Estamos comenzando una aventura de autoconocimiento y diversión.
Es bueno notar, sin embargo, que el paso exacto del sol de un signo a otro, puede variar año con año. Si ustedes nacen en un día para lo cual no tienen la absoluta seguridad de su signo, consulten con un buen almanaque, astrólogo o libro de efemérides, porque nadie debe privarse de saber dentro de cual maravilloso cuento mitológico navega su alma para gozar con tempura. El libro de efemérides es un libro lleno de números calculados con relación al lugar de la tierra bajo el firmamento en grados, usados por astrónomos y astrólogos desde siempre. Así, podrán imaginar que su propio signo es un tronco común que reparte millones de hijos en una familia inmensa de árboles, ramas, hojas, flores, frutos y semillas todas tumultuosos y alborotados con exuberancia bullicioso cargando su propia personalidad única, que proviene del mismo—me repito—polvo cósmico.
Apoyado con tu signo personal y la de otra persona—si quieres—pregúntate algo por inverosímil que se te haga con este sistema de fácil acceso y verás como poco a poco se les abre un sin fin de posibilidades. Poco a poco porque conforme vayan conociendo mejor los secretos de su propio signo verán que Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpión, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis no son simplemente nombres o dibujos extraños, sino que cada uno tiene la posibilidad de convertirse en un santuario, un resguardo que se va a ir pareciendo más a la gran familia arriba mencionada que a una simple estela dibujada hace miles de años. Y aprenderán como el mito y la magia de cada uno de los doce signos encierra fuerzas, causas, dones, ímpetus, características, flujos, flaquezas, contrariedades, posibilidades, extravagancias, elevaciones de potencia, suplementos accesibles y muchísimo donde tú encontrarás inspiración, desahogo y comprensión con los conocimientos y los secretos de tus palabras, que no son más que parte de propia solidez. Verás cómo tus decisiones serán más atinadas. Sagitario, por ejemplo, no simplemente aparenta o cree—en secreto—tener más opciones porque es mitológicamente mitad hombre mitad centauro, pero porque posiblemente (vea esta página) lleva una fuerte carga de ADN puestas por las mismas nueve musas. ¿Y cómo domarlas? Depende con quién (esta página a esta página). Poco a poco se te abre el mundo, y aparece un laberinto de oportunidades tan divertidas como fuertemente inclinadas a lo que tu destino se merece.
Puedes utilizar este libro para comenzar a cambiar, para alterar pequeñas molestias diarias, para afrontar decisiones que otrora te hacían sudar, o simplemente te daban flojera. A veces verás como un mínimo giro cambia tu humor o tu posición, como el Feng Shui o la adecuada posición de un mueble que parecía no tener importancia puede cambiar el mismísimo clima de las cosas. Un Capricornio podría estar impidiéndote el paso o tú podrías ser Capricornio y desear impedir una acción que sabes ser inconveniente. Ve, en esta página por qué razón es tan importante invertir tu tiempo, y te aseguro que si además sabes el signo zodiacal de la persona bajo tu escrutinio, ¡será cosa de niños!
¿Qué tal si eres Acuario, y tienes un verdadero problema con alguien en tu trabajo? Te aconsejo que busques en el capítulo de Estrategias, y tu palabra clave te indicará el camino que debes tomar. Como eres Acuario, no eres muy adepto a los consejos ajenos, así que ya te dejo solo. El beneficiado, la beneficiada, eres tú. El tiempo que te tomes para relacionarte con tu propio signo astrológico siempre será adecuado porque es tuyo, y cuando te des un poco más de tiempo para juzgar bajo cual de las seis premisas vale la pena ponderar y te relaciones por consiguiente con tu signo, habrás dominado esta nueva tabla de multiplicar de la misma manera que cuando aprendiste que ocho por seis es cuarenta y ocho en el tercer año de primaria, algo que sabemos para siempre y con todo y las computadoras maravillosas, siempre nos saca de apuros. Tan fácil como encontrarle el número adecuado de la frecuencia de tu programa favorito en el radio. A veces, con adelantar el carro dos metros o girar la antena un cuarto de círculo ya está, entra la voz de tu cantante favorito a todo dar como decimos en mi querido México. ¡Haz la prueba!
Deben sentirse alentados por el hecho que no hay límites a lo que la mente humana puede imaginar, trazar o crear. Tú eres el mejor arquitecto de tu propia vida, el autor de tu historia que es única y el creador de tu universo personal diariamente además del día que escojas hacerlo. Esto es lo que hace que de vez en cuando la vida sea divertida, llena de momentos que hacen que nos sentamos contentos de estar presentes en medio de todo este movimiento, a veces a doscientos kilómetros por segundo como la velocidad de la luz, y a veces con la suave lentitud de un sueño. La inteligencia astrológica te encaminará hacia la buena pista, te pondrá al día en relación a tu propia persona y te permitirá seguirle la pista a lo que puedes hacer para ser más feliz, tener mejores relaciones y escoger de acuerdo a un conocimiento permanente, válido y eterno.
En el último capítulo, consolidando, bajo el rubro de Piscis; con quien frecuentemente me encuentro finamente ligada casi de manera kármica además de que mis dos personajes preferidos de este mundo son de este signo: Benito Juárez y Albert Einstein. Existe una frase maravillosa, legado de la sabiduría China: Los maestros abren puertas, pero eres tú quien tiene que entrar. Es una frase que escogí específicamente por estar no solamente dentro del último segmento del libro, pero también al cuidado del último signo del zodiaco. No hay último signo, como no hay mejor signo. El número doce está allí para darle paso de nuevo al número uno, Aries; igual que la tierra dá vuelta sobre su eje y el día le sigue a la noche hasta que la noche le sigue al día. No hay en esta tabla mágica de vocablos palabra alguna escogida al azar sin que tú la puedas utilizar metódicamente, y mientras más asesoramiento personal encuentres al usar este método y mejor te acomodes con este sistema de rápido acceso personal, con mayor brío se presentarán las ventajas de estar en relación íntima no solamente con tu signo personal y sus conveniencias, sino que también con la energía cósmica de aquellos que pasan, entran y posiblemente se queden en tu vida en toda circunstancia y en cualquier momento íntimo, platónico, profesional o familiar. Conocer el signo astrológico de la persona que tienes enfrente es muy parecido a saber de que país viene y en qué idioma puedes comunicarte con él o con ella. Al saber un poco más sobre su temperamento astrológico, entran en sincronía, como ponerte el color que te queda bien o encontrar tu perfume adecuado. Las interacciones que hagas serán como una buena racha de ideas, que es la espina dorsal de la inteligencia astrológica. Me di cuenta que al poder hacer referencias cruzadas con este libro, nos miramos con mas profundidad a los ojos del otro, quien está enfrente de ti, quien te acompaña, quien se cruza por tu camino o con quien prefieres no hablar. Así las relaciones se vuelven más pacíficas y duraderas.
SI NACISTE…
entre el 21 de marzo y el 20 de abril, tu signo solar es ARIES; | |
entre el 21 de abril y el 21 de mayo, tu signo solar es TAURO; | |
entre el 22 de mayo y el 21 de junio, tu signo solar es GÉMINIS; | |
entre el 22 de junio y el 22 de julio, tu signo solar es CÁNCER; | |
entre el 23 de julio y el 23 de agosto, tu signo solar es LEO; | |
entre el 24 de agosto y el 22 de septiembre, tu signo solar es VIRGO; | |
entre el 23 de septiembre y el 24 de octubre, tu signo solar es LIBRA; | |
entre el 25 de octubre y el 22 de noviembre, tu signo solar es ESCORPIÓN; | |
entre el 23 de noviembre y el 21 de diciembre, tu signo solar es SAGITARIO; | |
entre el 22 de diciembre y el 20 de enero, tu signo solar es CAPRICORNIO; | |
entre el 21 de enero y el 18 de febrero, tu signo solar es ACUARIO; | |
entre el 19 de febrero y el 20 de marzo, tu signo solar es PISCIS. |
Con sólo un cambio de página, pones tus cinco sentidos en forma adelantada.
Simplemente recuerden por favor, que en lugar de decirte lo que deberías hacer, la inteligencia astrológica te dice lo que puedes hacer y te deja ver como suplir las cantidades además del marco de referencia. He aquí el sistema. Úsalo. Navega en y con él, y verás que es un accesorio práctico que ya le ha comprobado su eficacia a sus miles de lectores en idioma inglés, y nunca deja de ser divertido.