Retrato Inacabado
Celia fue una niña feliz, una joven solicitada, una esposa amante y entregada. Su vida era, ella misma lo reconocería más tarde, vulgar; pero marcada por una timidez congénita que la llevaría a hacer de su madre la única referencia psicológica; y esa dependencia sólo la podrían romper los propios sinsabores de la historia de Celia...