1. El presente ensayo permitirá al lector conocer mejor la forma de pensar y el fundamento teórico de lo que Dante Tejera quiso hacer con el mundo, pero no pudo. En cierta manera, es como tener una autobiografía de nuestro protagonista a través de un ensayo científico. El lector que no quiera leerlo puede perfectamente saltárselo, si bien es un compendio del pensamiento, intenciones y corpus de Tejera. Se vendió por millones, aunque pocos lectores lo entendieron y aún menos lo leyeron entero. Actualmente, tiene un valor similar para algunos estudiosos a El origen de las especies, de Charles Darwin, en términos de lo que se ha llamado «la autoevolución humana» o la evolución dirigida por el hombre. La aproximación del autor, que usa párrafos de la novela clásica de John Updike La versión de Roger para introducir cada capítulo es muy original y especialmente interesante, ya que asocia a un clásico de la literatura del siglo XX con la investigación más puntera del XXI, en una interesante cadena que une la física, la biología, el estudio de sistemas complejos, la cosmología, la teleología y la escatología.
2. Una supernova ocurre cuando una estrella muy masiva, generalmente al final de su vida, explota, y expulsa al espacio a enorme velocidad la materia de la que está hecha, que se esparce entonces en el espacio y que puede llevar a formar sistemas estelares, planetas y nuevas estrellas.
3. A. Turing, «The Chemical Basis of Morphogenesis», Philosophical Transactions of the Royal Society of London, Series B, Biological Sciences, vol. 237, 641. (14 de agosto de 1952), pp. 37-72.
4. «La doctrina que afirma que el mundo está constituido por objetos cuya existencia es independiente de la conciencia humana entra en conflicto con la mecánica cuántica y con hechos y situaciones establecidos mediante la experimentación.»
5. Wikipedia. Entrada dedicada a Bernard d’Espagnat.
6. «Lo que nos cuenta la mecánica cuántica, creo, es sorprendente, como mínimo. Nos dice que los componentes básicos de los objetos —las partículas, electrones, quarks, etc.— no pueden ser concebidos como “existentes por sí mismos”. La realidad de que esos componentes, y por tanto todos los objetos que forman es meramente “realidad empírica” (...) El resultado confirmó mis predicciones. El entrelazamiento a distancia existe físicamente, en el sentido de que tiene consecuencias físicas verificables (y verificadas). Ello prueba más allá de cualquier sombra de duda que muchas de nuestras más asumidas nociones sobre el espacio y la causalidad deberían ser replanteadas.»
7. Bernard d’Espagnat, «Quantum weirdness: What we call “reality” is just a state of mind, The Guardian, 20 de marzo de 2009.
8. Citando la estupenda definición de la Edición Neo de Wikipedia: «Un sesgo o prejuicio cognitivo es un efecto psicológico que produce una desviación en el procesamiento de lo percibido, lo que lleva a una distorsión, juicio inexacto, interpretación ilógica, o lo que se llama en términos generales “irracionalidad”, que se da sobre la base de la interpretación de la información disponible, aunque los datos no sean lógicos o no estén relacionados entre sí». El texto está disponible bajo Licencia Creative Commons.
9. El «sesgo cognitivo» es algo de lo que no podemos escapar, forma parte de nuestra mente, de lo que hemos heredado de nuestros antepasados, de la forma en que estructuramos el pensamiento en su forma más básica. La embarazada que afirma bajo juramento que desde que espera un hijo sólo encuentra embarazadas por la calle, el ciudadano que sólo ve personas enyesadas cuando él mismo lleva un yeso en su brazo, el político que afirma a pies juntillas que «los inmigrantes gastan recursos sanitarios» en contra de todas las evidencias estadísticas, el juez que condena a una mujer por una infracción de tráfico por el prejuicio de que «las mujeres conducen peor», que de nuevo es convertido en pura falsedad por la realidad científica, el fumador que sólo mira a un anciano de noventa años que aún fuma y no ve a todos los de su generación a los que el tabaco ha exterminado a los 50, 60, 70 y 80 años de edad con enfermedades espantosas, todos éstos son ejemplos de diversas formas de sesgo cognitivo.
10. Sin olvidar el epítome del «sesgo cognitivo» en las sociedades occidentales, el llamado «diseño inteligente» y sus hijos putativos, ideologías acientíficas que pretenden dar carta de valor a los libros religiosos (que se pretenden revelados) y que últimamente se ocultan bajo un lenguaje «parecido» al de la ciencia para intentar introducir lo que no son sino prejuicios ideológicos en la discusión científica. Esta perversa forma de ignorancia es de las más peligrosas, ya que ofrece al creyente una respuesta que sigue siendo la misma, pero que se viste de falsa ciencia.
11. «I cannot conceive of a God who rewards and punishes his creatures, or has a will of the type of which we are conscious in ourselves. An individual who should survive his physical death is also beyond my comprehension, nor do I wish it otherwise; such notions are for the fears or absurd egoism of feeble souls. Enough for me the mystery of the eternity of life, and the inkling of the marvelous structure of reality, together with the single-hearted endeavour to comprehend a portion, be it never so tiny, of the reason that manifests itself in nature.» (Albert Einstein, The world as I see it.)
12. Es muy similar al propuesto a finales del siglo XX por el mago y conocido escéptico James Randi y realizado por otros posteriormente, en el que un mago pide a un grupo de personas su fecha y hora de nacimiento para realizar su carta astral. Tras unas horas se les entregan esos documentos basados en esas fechas y se los invita a leerlos por separado. Luego se los interroga sobre lo cerca que la explicación ha estado de su verdadera personalidad y su condición personal. Las respuestas son de total credulidad, y los sujetos del experimento se ven retratados en esas cartas astrales. Cuando el mago revela a los presentes que todos han leído el mismo documento y que está lleno de lugares comunes aplicables a cualquier persona, se desvela el misterio: la combinación de credulidad, de bajada de barreras intelectuales y escépticas ante la intriga sobre la propia persona, y el «principio de autoridad» convierten a seres humanos inteligentes y racionales en completas marionetas crédulas.
13. Existe un amplio corpus de investigación psicológica al respecto. La lectura fría es una técnica para obtener información del interlocutor de modo que éste no sea consciente de que la suministra. Es usada de forma cotidiana, consciente o inconscientemente, por las gentes en sus relaciones personales, pero su uso más torticero, en manos de magos, astrólogos o todo tipo de vendedores de superstición puede causar graves daños al incauto que se somete a ellas. En general, el lector frío trabaja con preguntas generales y extrae de su interlocutor la información que, una vez devuelta a éste, es recibida con asombro como información nueva que ha sido «obtenida por facultades paranormales». Por ejemplo, un hábil astrólogo preguntará a su nuevo cliente, una mujer madura, por una pareja en su pasado (todos tenemos parejas en nuestro pasado) que ha dejado una huella profunda. Cuando mayor sea el cliente, más probable es que unas frases tan simples sirvan como anzuelo para la obtención de información. Las respuestas, por ejemplo, un «sí» entusiasta o una mirada de tristeza pueden llevar a que la lectura fría prosiga con un «alguien fallecido a quien echas de menos» (algo común a todas las personas a partir de una cierta edad), etcétera.
14. Efectivamente, se puede dar el caso de un uso «honesto» de la lectura fría. El echador de cartas o el astrólogo no son conscientes de que es el interlocutor quien les da la información, y de forma completamente inocente se creen dotados de poderes y clarividencia especiales.
15. Practicantes del «Camino neocatecumenal», una organización católica conservadora.
16. Los llamados «evangelios apócrifos» fueron excluidos del dogma católico, eligiéndose arbitrariamente los que se ceñían mejor a su modelo de culto.
17. Es el God in the gaps al que se refiere Hazen en su ensayo Gen-e-sis. La obsesión de la religión de querer explicar el mundo es la fuente de todos sus males, pues desde el siglo XVI es la ciencia la responsable de esa tarea, y los «huecos» de inexplicabilidad se van rellenando con nuevas teorías científicas y modelos con el paso del tiempo, huecos que la impotente religión se empeña en rellenar con Dios. Ésos son los gaps de Hazen. La Iglesia debería comprender que su terreno es el espiritual, el del ritual y el de cubrir la llamada «necesidad de Dios» inherente al ser humano de la que hemos hablado anteriormente, pero no la naturaleza fenoménica. Esa terquedad y cortedad de miras ha causado mucho daño a incontabes generaciones de seres humanos. Ya basta de cometer este genocidio intelectual, de engañar y de abusar del principio de autoridad que las religiones tienen entre sus fieles. He de añadir que, profesando un agnosticismo fascinado, como podríamos definir a mi forma de pensamiento, no niego a la religión, sino que niego su insistencia en salir de su terreno de conocimiento para entrar en otros en los que no tiene nada que hacer, excepto generar y generarse problemas. La religión no es ciencia. La teología no estudia los fósiles. La biología no se ocupa de Dios. La física no se interesa en los dogmas de fe. La genética no se inmiscuye en el misterio de más allá de la muerte. ¿Por qué la religión hace todo lo contrario y sí se inmiscuye en áreas que no son de su incumbencia y de las que su curia es manifiesta y completamente ignorante? Zapatero a tus zapatos es un refrán que debería definir las relaciones entre religión y sociedad.
18. He preferido remitir a una nota al pie un corolario de este planteamiento, y es considerar la hierofania (el acto de la manifestación de lo sagrado) como una forma más de pareidolia intelectual, de proceso semiautomatizado del cerebro, que, como la pareidolia puramente preceptiva, condiciona la interpretación de los impulsos provenientes de los sentidos por la zona perceptiva del cerebro, y una conclusión en forma de «revelación» interior. La hierofania sería por tanto considerada por nosotros como otra forma de ilusión perceptiva.
19. Otro modelo posible es el de Dios y la religión como parásito del lenguaje, de Daniel C. Dennett, o como meme autorreproductivo. No entraré en este interesante concepto, que se escapa a los propósitos de este escrito.
20. La llamada «hipótesis del diseño inteligente» es una prueba de cómo la religión sigue insistiendo, a pesar de haber perdido la batalla hace ya siglos, en inmiscuirse en el conocimiento científico. Mezcla de ignorancia, falacias intelectuales básicas y, sobre todo, un apriorismo desesperado por encontrar explicaciones preconcebidas y en retorcer la realidad conforme los prejuicios y dogmas religiosos, el diseño inteligente está condenado, afortunadamente, a desaparecer en una sociedad en la que los ciudadanos poco a poco están cada vez más y mejor formados y educados (si bien esto va en contraposición con algunos datos que nos informan de un peligroso avance de la superstición y la ignorancia del método científico en un segmento de los estudiantes y la población, originados en parte precisamente por este conjunto de falsas demostraciones que llamamos «diseño inteligente»). Sin embargo, encierra el peligro de negación suicida del progreso científico y de relectura falsaria desde la falacia de los fenómenos que descubre la ciencia. En este sentido, creo que es una gran responsabilidad de los filósofos, y especialmente los filósofos de la ciencia (Popper en su mejor momento sería un buen ejemplo) el desmentido de tales falacias y errores conceptuales básicos. Como siempre ocurre en otras disciplinas humanas, cuando diversas formas de conocimiento que se ocupan de aspectos diferentes de la vida invaden los de otras, se producen monstruos intelectuales. La religión y la ciencia son fuentes de conocimiento que se ocupan de asuntos diferentes y jamás deberían superponerse.
21. Un «flag» es un bit que se usa como señal de dos estados posibles, indicando, por ejemplo, «on» y «off», «activar» y «desactivar» un determinado equipo conectado al ordenador, un periférico, un error, etcétera.
22. Existen tipos de software especializados encargados de realizar esa «interpretación» o «traducción» de instrucciones, conocidos respectivamente como «intérpretes» (que van traduciendo línea a línea de código y ejecutándola) y «traductores» o «compiladores» que traducen todas las líneas de código antes de ejecutarlo.
23. Mi aproximación es de arriba-abajo, como la de George Ellis. La conciencia en última instancia dirige los electrones para cumplir una función macroscópica. La unión entre conciencia, acto y realidad subatómica, une a la mente con la realidad cuántica, a las ideas con los átomos.
24. Una máquina de Turing es una abstracción matemática de una máquina que lee, usando una «unidad lectora», instrucciones de una cinta, y que en función de ellas realiza unas acciones que llevan a unos resultados o «valores de salida».
25. Si y sólo si.
26. En informática se entiende por «algoritmo» a una secuencia de instrucciones que permiten resolver un problema determinado. La programación de software para ordenadores se basa en la creación de algoritmos y en su traducción a un lenguaje de programación orientado a problemas.
27. Es una similitud sorprendente, ya que la máquina de Turing está basada en la lectura de una tira de instrucciones y la generación de unos resultados, un comportamiento muy similar al de los ribosomas celulares en el proceso de la síntesis de proteínas.
28. El ADN tiene semejanza con la cinta de instrucciones de una máquina de Turing.
29. William Ross Ashby, uno de los padres de la cibernética, decía: «Sólo la variedad absorbe a la variedad», una llamada de atención hacia la excesiva simplificación de los modelos, asunto que valdría para otro ensayo completo, pero sobre el que no vamos a abundar. Baste el comentario de que la simplificación es un arma de doble filo que debe de ser manejada con cuidado.
30. La entropía, entre sus variadas definiciones, tiene la de la medida del desorden en un sistema, o de la disipación de energía no reversible en el mismo.
31. Obsérvese que he elegido en esta discusión obviar mayores complejidades. Estamos trabajando con máquinas de Turing sencillas (si acaso con varias cintas o con cintas n-dimensionales), que para nuestros efectos actúan como «partículas de cálculo» o «ladrillos» de una estructura o conjunto, formando múltiples conjuntos anidados unos dentro de otros (los conjuntos o estructuras formados por máquinas de Turing). No nos complicamos la vida con otros elementos posibles que podríamos utilizar, como máquinas oráculo o máquinas de Turmite. Tampoco añadimos factores estocásticos que podríamos abordar con máquinas de Turing probabilísticas, aunque creo que sería muy interesante estudiar el asunto, ni con otro tipo de entelequias, como autómatas celulares, cuyo uso en el famoso «Juego de la Vida» planteado por John Horton Conway abre un mundo de sugerencias. En cambio, el uso de máquinas de Turing deterministas y simples nos permite mantener la hipótesis de un anidamiento de conjuntos de procedimientos efectivos. Seguramente podríamos plantear el uso de máquinas de Turing probabilísticas en todos los Uc, distribuidas de forma única y con una variable que las convirtiera en máquinas de Turing determinísticas en función de las necesidades. Pero estaríamos negando la cualidad de procedimiento efectivo a alguno de los procesos en cuestión, negando nuestra hipótesis de partida.
32. El experimento de Turing: un interrogador realiza preguntas a un ser humano y a un ordenador, ambos ocultos a él excepto por sus respuestas. Si las respuestas del ordenador resultan indistinguibles de las del ser humano, entonces estamos en un caso de inteligencia artificial exitosa.
33. Como siempre, estas afirmaciones pueden parecer sacadas de la nada, pero están ahí como conclusiones de los descubrimientos actuales y los modelos vigentes de descripción del Universo.
34. Podríamos imaginar la vida como un conjunto de burbujas autorreproductoras que se autoordenan y viven en un estado de homeostasis de duración T. Algo que existe dentro del plan de hechos posibles en el Universo en el que vivimos. La prueba es su mera existencia.
35. No la niego, simplemente no me ocupo de esta teoría acerca del origen de la vida en este ensayo, pues básicamente, lo que hace es trasladar el problema a un evento llegado del exterior; es en cierta medida la aplicación del viejo deus ex machina al origen de la vida. Más al contrario, en este ensayo teorizo que la vida y la vida inteligente son «casos posibles» dentro del «atractor extraño» de sucesos posibles en el Universo en el que vivimos. Y como somos posibles, existimos. Somos acontecimientos de probabilidad distinta de cero.
36. One may say the eternal mystery of the world is its comprehensibility. Del artículo «Physics and Reality» (1936), reeditado en Out of My Later Years (1956).
37. Hay gran controversia sobre qué heredamos de nuestros antepasados directamente por la vía genética. Qué tendencias, qué inclinaciones, etcétera. Actualmente, la investigación alrededor de la llamada «epigenética» nos habla de asombrosas revelaciones de cómo ciertos rasgos, sucesos, tendencias y quién sabe qué más pasan directamente de padres a hijos, codificados en los cordones del ADN. De esta manera se ha podido demostrar que un padre fumador puede transferir a su hijo directamente un asma o una alergia que lo marcarán de por vida, haciendo más verdad que nunca ese adagio que dice que nada de lo que hacemos sobre nosotros está exento de consecuencias.
38. Montague se refiere a la intratabilidad del problema de la interacción entre proteínas y Penrose a la misma característica en la gravedad cuántica. Ambos asuntos se salen del alcance de este ensayo, pero en ambos casos se responde a ellos en el texto, pues ambos autores insisten en mezclar «intratabilidad» con «incomputabilidad», es decir, la imposibilidad de crear un algoritmo que los simule o modelice, olvidando además el uso de la computación cuántica que convierte problemas intratables en solubles.
39. La intratabilidad se define como la cualidad de un problema que puede ser resuelto en la teoría, pero no así en la práctica. Los problemas que requieren procesos exponenciales eran intratables con la tecnología disponible antes de los ordenadores cuánticos, pues sus resoluciones técnicas implicaban tiempos imposibles de asumir. Pero ello no implica que no sean computables. Sí pueden serlo, pero su resolución se hacía inviable. Esta confusión se hace común en las obras citadas, confundir «intratabilidad» con «incomputabilidad».
40. El Universo está repleto de procesos que se nos escapan, que para nuestros conocimentos actuales son «intratables», pero que casi todos son «computables». Esto es de gran importancia para nuestra tesis.
41. Llamada también Tesis o Teoría M.
42. Distorsión de la percepción que hace que se perciban estímulos sensoriales de forma errónea; por ejemplo, un sonido se percibe como una señal visual, o viceversa.
43. Tendencia de la mente humana a dar forma a percepciones desordenadas, que lleva a «ver», por ejemplo, rostros en las nubes, o formas animales en las montañas de un paisaje.
44. El modelo Penrose-Hamenoff nos habla de un estado cuántico en los microtúbulos neuronales que cambia de estado de superposición en un proceso llamado «colapso» 40 veces por segundo, siendo cada uno de estos colapsos una especie de «destello de conciencia». Experimentos recientes han desmentido que puedan darse tales estados en los microtúbulos por las características de los requerimientos físicos que esos estados de superposición requieren, incompatibles con la vida.
45. Añadiré que también existe una línea de investigación basada en la simulación numérica que utiliza máquinas de Turing para simular procesos neuronales en la mente humana (Ariel Zylberberg, Stanislas Dehaene, Pieter R. Roelfsema y Mariano Sigman), simultaneando procesos seriales (Von Neumann) con procesos paralelos neuronales. La vía de simulación tiene visos de generar interesantes resultados en este campo en el futuro, y en ello trabajamos justo en estos momentos.
46. Algunos estudios se han aproximado a los llamados «biofotones», creados por las neuronas en su proceso de funcionamiento y que podrían ser usados como transmisores de señales en el cerebro, son de funcionamiento aún incierto, pero explican ciertos procesos cerebrales que resultan demasiado rápidos con respecto a la teoría, al estar sometidos a los tiempos de reacción y transmisión de señales químicas y electrones, ambos mucho más lentos que los fotones de luz. Éste es un interesante campo de investigación actual.
47. Los números cuánticos son características básicas de la materia que todas las partículas del Universo deben de cumplir. En ese sentido, la conciencia en el pampsiquismo sería otra de esas características que está unida íntimamente a la materia per se. La materia es, ergo la conciencia también. Cogito ergo sum al revés: Sum ergo cogito. De nuevo la dualidad lógico-ontológica se puede desmoronar, y la pregunta carece de sentido.
48. Querido lector: ¿Te has planteado eso alguna vez? Todo el Universo en el que vivimos avanza en una especie de «frente de onda» irreversible por la naturaleza, ya discutida, de la «flecha del tiempo». Es un frente sin una línea continua, no es nítido, pero en él estamos, avanzando con el tiempo, sea éste lo que sea, hacia adelante. En realidad el tiempo es indefinible, ocupa un lugar absolutamente fundamental, nos hace, nos deshace, pero apenas podemos comprenderlo. Piensa que hasta las fluxiones de Newton (inventado por Leibniz y él más o menos a la vez, lo que llamamos el «cálculo»), hace relativamente poco tiempo, no pudimos ni intentar aprehender con ecuaciones el tiempo en nuestras manos. Y así y todo nos cuesta muchísimo. Llegó luego Einstein y nos colocó en un espacio de cuatro dimensiones en el que, esclavos de nuestra tridimensionalidad, vivimos inmersos en el tiempo, sin poder alejarnos sobre él para observarlo. Y así, cada día del Universo, defínase como se defina, es un experimento en la causalidad. En el que podemos morir en cualquier momento, desintegrarnos, desaparecer, o construir y crear. Somos esclavos de algo que no podemos ver, del tiempo, y a la vez somos el mascarón de proa del avance de la forma de onda que nos hace cada día. ¿No es fascinante? (N. del A. a la Segunda Edición.)
49. «Uno de los aspectos más impresionantes es que describir la evolución de un sistema modesto de 500 átomos requeriría el almacenamiento de más números que partículas hay en el Universo. ¿Cómo y dónde almacena la naturaleza toda esa información? Es algo asombroso.»
50. Siglas de Random Penguin Paradigm, monstruo editorial surgido de la absorción de Bertelsmann por Paradigm a mediados del siglo XX.
51. Qbit o Quantum Bit, es un bit de computación cuántica, la mínima unidad de información en ese campo. Puede tener dos valores propios, 0 y 1, y se suele representar mediante una esfera de Bloch correspondiente a un espacio de Hilbert de dimensión compleja 2 con autovectores. El Qbit por definición puede estar en un estado de superposición cuántica. El término fue acuñado por el físico cuántico Benjamin Schumacher.
52. Cita aquí Tejera el eslogan publicitario de la película Star Trek: la película (Robert Wise, 1979).