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Cubierta
Cándido o Un sueño siciliano
Del lugar y la noche en que nació Cándido Munafò; y del motivo por el cual recibiera el nombre de Cándido
De cómo el abogado Munafò comenzó a poner en duda el hecho de ser padre de Cándido; y de los males que ello causó
De la partida y del regreso de Amleto; y de aquello que merecidamente correspondió al abogado Munafò e inmerecidamente a Cándido
De la soledad del abogado Munafò y de la de Cándido
De cómo Cándido llegó a encontrarse casi completamente en la condición de huérfano; y del peligro en el que casi se vio mezclado al plantearse la posibilidad de su emigración a Helena, en el estado de Montana
Del compasivo reproche de que fuera objeto Cándido por parte del general, por parte de los parientes y de casi toda la ciudad; y de su comportamiento cuando llegó a tener conciencia de ello
De la preocupación que experimentaban el general y Conchita por la educación de Cándido; y de la decisión tomada por el general de ponerlo en manos de un preceptor, como se acostumbraba antiguamente
De las cosas acerca de las cuales Cándido y el arcipreste discurrían; y del fastidio que ello ocasionó en el ánimo del general
Del poder que Cándido, sin saberlo, poseía sobre su allegado más próximo; y de sus impresiones y acciones cuando supo que lo tenía
Del misterioso delito cuyo autor Cándido y el arcipreste por casualidad descubrieron; y de la condena que ambos tuvieron que sobrellevar, dictaminada por toda la ciudad y, en el caso del arcipreste, también por la jerarquía
De cómo el ex arcipreste hizo un intento de dedicarse a cultivar su propio huerto y Cándido sus propias tierras; y de las desilusiones que sufrieron
Del viaje a Lourdes que hicieron Cándido y don Antonio; y del beneficio que ambos obtuvieron
Del amor por las mujeres, y por una mujer que asaltó a Cándido; y de los discursos que sobre el tema le endilgaba a menudo don Antonio
Del comunismo de Cándido y de don Antonio; y de las conversaciones que ambos sostenían entre sí y también con sus compañeros
Del furor del general contra Cándido y Paola; de la entrada de Paola en la casa de Cándido, con la consiguiente fuga de Conchita
De las advertencias que el partido consideró que debía hacer a Cándido y del proceso que se comenzó a instruir en contra del muchacho
De la vida que llevaba Cándido entre su casa, el campo y el partido; y de la propuesta que le fuera hecha y que él no aceptó
De la investigación erizada de dificultades que, para identificar a Fomà Fomíc, llevó a cabo el partido; y de las conversaciones que acerca de ese personaje sostuvieron Cándido y don Antonio
De la desaparición de Paola; y de aquello que olvidó llevar consigo
De la decisión que impulsara a Cándido a deshacerse de sus tierras y a viajar; y de cómo sus parientes se dieron prisa para que se deshiciese de ellas
Del coloquio que Cándido sostuvo con un juez y con un psiquiatra; y de la sentencia de interdicción que se dictó después de eso
De la fiesta que los familiares de Cándido le ofrecieron, como premio a su buen comportamiento ante el juez y ante los médicos; y de los males que aquella fiesta acarreó a los familiares
De los viajes que hicieron Cándido y Francesca; y de la larga permanencia de ambos en Turin
De los viajes que a París hicieron Cándido y Francesco; y de la decisión de establecerse en esa ciudad
De la correspondencia entre Cándido y don Antonio; y del viaje a París que hizo don Antonio
Del encuentro de Cándido con su madre y de la velada que pasaron juntos; y de cómo, durante aquella noche, Cándido llegó a sentirse feliz.
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