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Index
Nota preliminar
Primera parte. Fantine
Libro primero. Un justo
Monseñor Myriel
Monseñor Myriel se convierte en monseñor Bienvenu
A obispo bueno, obispado arduo
Las obras acordes con las palabras
De que a monseñor Bienvenu le duraban demasiado las sotanas
De quién le guardaba la casa
Cravatte
Primero beber y luego filosofar
De lo que la hermana cuenta del hermano
El obispo ante una luz desconocida
Una restricción
Soledad de monseñor Bienvenu
Qué creía
Qué pensaba
Libro segundo. La caída
Por la noche tras un día de caminata
La prudencia que debe tener la sensatez
Heroísmo de la obediencia pasiva
Pormenores de las queserías de Pontarlier
Tranquilidad
Jean Valjean
La desesperación por dentro
El mar y la sombra
Nuevos agravios
El hombre que se despierta
Lo que hace
El obispo trabaja
Petit-Gervais
Libro tercero. En el año 1817
El año 1817
Doble cuarteto
De cuatro en cuatro
Tholomyès está tan alegre que canta una canción española
En el café Bombarda
Capítulo en que todos se adoran
La sabiduría de Tholomyès
La muerte de un caballo
Alegre final de la alegría
Libro cuarto. A veces encomendar es entregar
Una madre se encuentra con otra
Primer esbozo de dos caras que no son trigo limpio
La alondra
Libro quinto. Hacia abajo
Historia de un progreso en los abalorios de cristal negro
Madeleine
Cantidades depositadas en la banca Laffitte
Luto del señor Madeleine
Relámpagos inconcretos en el horizonte
Fauchelevent
Fauchelevent entra de jardinero en París
La señora Victurnien se gasta treinta y cinco francos en aras de las buenas costumbres
Triunfo de la señora victurnien
Prosigue el éxito
Christus nos liberavit
La ociosidad del señor Bamatabois
Se ventilan unas cuantas cuestiones de política municipal
Libro sexto. Javert
Comienza el descanso
De cómo Jean puede convertirse en Champ
Libro séptimo. El caso Champmathieu
Sor Simplice
Perspicacia de maese Scaufflaire
Una tempestad en una cabeza
Formas que adopta el sufrimiento durante el sueño
Un viaje que no va sobre ruedas
Sor Simplice puesta a prueba
El viajero, tras llegar, toma precauciones para marcharse
Pase de favor
Un lugar en que están naciendo unos convencimientos
El sistema de negativas
Champmathieu cada vez más asombrado
Libro octavo. Repercusiones
En qué espejo se miró el pelo el señor Madeleine
Fantine feliz
Javert contento
La autoridad vuelve por sus fueros
Sepultura decente
Segunda parte. Cosette
Libro primero. Waterloo
Lo que nos encontramos viniendo de Nivelles
Hougomont
El 18 de junio de 1815
A
El quid obscurum de las batallas
Las cuatro de la tarde
Napoleón de buen humor
El emperador hace una pregunta al guía Lacoste
Lo inesperado
La meseta de Mont-Saint-Jean
Mal guía para Napoleón, buen guía para Bülow
La guardia
La catástrofe
El último cuadro
Cambronne
Quot libras in duce?
¿Tiene que parecernos bueno Waterloo?
Recrudescencia del derecho divino
El campo de batalla por la noche
Libro segundo. El navío L’Orion
El número 24.601 se convierte en el número 9.430
Donde podrán leerse dos versos que son quizá de mano del Diablo
De que forzosamente la cadena de la argolla tenía que haber pasado por cierta labor preparatoria para que se la pudiera romper así de un martillazo
Libro tercero. Queda cumplida la promesa hecha a la muerta
La cuestión del agua en Montfermeil
Donde se completan dos retratos
Los hombres necesitan vino y los caballos, agua
Entra en escena una muñeca
Pobre niña solita
Algo que quizá demuestre la inteligencia de Boulatruelle
Cosette y el desconocido juntos en la oscuridad
De los inconvenientes de recibir a un pobre que a lo mejor es un rico
Thénardier con las manos en la masa
Quien busca lo mejor puede toparse con lo peor
Vuelve a aparecer el número 9.430 y a Cosette le toca con ese número la lotería
Libro cuarto. El caserón Gorbeau
El procurador Gorbeau
Nido para búho y curruca
El resultado de juntar dos desdichas es la felicidad
Las observaciones de la inquilina principal
Una moneda de cinco francos que se cae al suelo mete mucho ruido
Libro quinto. A escopetas negras, rehala muda
Los zigzags de la estrategia
Hay que congratularse de que por el puente de Austerlitz pasen coches
Ver el plano de París de 1727
La evasión a tientas
Algo imposible con el alumbrado de gas
Principio de un enigma
Prosigue el enigma
El enigma va a más
El hombre del cascabel
De cómo Javert no dio con la presa y se quedó con tres palmos de narices
Libro sexto. Le Petit-Picpus
El 62 de la calleja de Picpus
La regla de Martín Verga
Rigores
Donaires
Distracciones
El convento pequeño
Algunas siluetas de esa oscuridad
Post corda lapides
Un siglo bajo un griñón
Origen de la Adoración Perpetua
Fin de Le Petit-Picpus
Libro séptimo. Paréntesis
El convento, idea abstracta
El convento, hecho histórico
A condición de qué podemos respetar el pasado
El convento desde el punto de vista de los principios
La oración
Bondad absoluta de la oración
Precauciones que se deben tomar en la reprobación
Fe, ley
Libro octavo. Los cementerios toman lo que les dan
Donde se trata de la forma de entrar en el convento
Fauchelevent se enfrenta con ciertas dificultades
La madre Innocente
En el que da por completo la impresión de que Jean Valjean había leído a Austin Castillejo
De que no basta con ser borracho para ser inmortal
Entre cuatro tablas
Donde el lector hallará el origen de la expresión: no dejar que se le vaya a uno el santo al cielo
Un interrogatorio cumplido
Clausura
Tercera parte. Marius
Libro primero. París estudiado en su átomo
Parvulus
Algunas de sus señas particulares
Es simpático
Puede resultar útil
Sus fronteras
Algo de historia
El golfillo podría tener cabida en las clasificaciones de la India
Donde podrá leerse un dicho delicioso del último rey
El espíritu de la Galia antigua
Ecce París, ecce homo
Reír, reinar
El porvenir latente en el pueblo
Un niño: Gavroche
Libro segundo. El gran burgués
Noventa años y treinta y dos dientes
A tal dueño, tal domicilio
Luc-Esprit
Aspirante a centenario
Basque y Nicolette
Donde el lector vislumbra a la Magnon y a sus dos hijos pequeños
Norma: no recibir a nadie a no ser a última hora de la tarde
Un par que no hacía juego
Libro tercero. El abuelo y el nieto
Un salón a la antigua
Uno de los espectros rojos de aquella época
Requiescant
La muerte del bandido
De la utilidad de ir a misa para hacerse revolucionario
Lo que pasa cuando se conoce al mayordomo de una iglesia
Algún asunto de faldas
Mármol contra granito
Libro cuarto. Los amigos del A B C
Un grupo que estuvo a punto de convertirse en histórico
Bossuet pronuncia la oración fúnebre de Blondeau
Los asombros de Marius
La sala de atrás del café Musain
El horizonte se ensancha
Res augusta
Libro quinto. Excelencia de la desdicha
Marius indigente
Marius pobre
Marius se engrandece
El señor Mabeuf
La pobreza buena vecina de la miseria
El sustituto
Libro sexto. La conjunción de dos estrellas
El mote: cómo se forman los apellidos
Lux facta est
Efecto primaveral
Principia una grave enfermedad
A la Murgón le caen encima varios rayos
Prisionero
Aventuras de la letra U presa de las conjeturas
Incluso los inválidos pueden ser dichosos
Eclipse
Libro séptimo. El culo del gato
Las minas y los mineros
El fondo más bajo
Babet, Gueulemer, Claquesous y Montparnasse
Composición de la banda
Libro octavo. El mal pobre
Marius busca a una joven con sombrero y encuentra a un hombre con gorra
Hallazgo
Quadrifrons
Una rosa entre la miseria
La mirilla providencial
El hombre feroz en la madriguera
Estrategia y táctica
El rayo de luz en el tugurio
Jondrette casi llora
Tarifa de los cabriolés del transporte público: dos francos por hora
La miseria se pone a disposición del dolor
Para qué sirve la moneda de cinco francos del señor Leblanc
Solus cum solo, in loco remoto, non cogitabuntur orare pater noster
En que un agente de policía le da dos cachorrillos a un abogado
La lista de la compra de Jondrette
En que oímos una canción con melodía inglesa que estaba de moda en 1832
Para qué sirve la moneda de cinco francos de Marius
Las dos sillas de Marius cara a cara
Preocuparse de la oscuridad del fondo
La emboscada
Habría que empezar siempre por detener a las víctimas
El niño que lloraba en la segunda parte
Cuarta parte. El idilio de la calle de Plumet y La epopeya de la calle de Saint-Denis
Libro primero. Unas cuantas páginas de historia
Bien cortado
Mal cosido
Luis Felipe
Grietas en los cimientos
Hechos de los que sale la historia y que la historia no conoce
Enjolras y sus lugartenientes
Libro segundo. Éponine
El campo de la Alondra
Formación embrionaria de los crímenes en la incubación de las cárceles
Mabeuf tiene una aparición
Marius tiene una aparición
Libro tercero. La casa de la calle de Plumet
La casa del pasadizo secreto
Jean Valjean guardia nacional
Foliis ac Frondibus
Cambio de verja
La rosa se da cuenta de que es una máquina de guerra
Comienza la batalla
A tristeza, tristeza y media
La cuerda de presos
Libro cuarto. Ayuda de abajo puede ser ayuda de arriba
Herida por fuera, curación por dentro
A la Plutarco no le cuesta nada dar con la explicación de un fenómeno
Libro quinto. Cuyo final no tiene nada que ver con el principio
Conjunción de la soledad y el cuartel
Miedos de Cosette
Incidentes corregidos y aumentados con los comentarios de Toussaint
Un corazón debajo de una piedra
Cosette después de la carta
Los viejos están para salir de casa oportunamente
Libro sexto. Gavroche
Una trapacería del viento
En el que Gavroche el pequeño le saca partido a Napoleón el grande
Las peripecias de la evasión
Libro séptimo. La jerga
Orígenes
Raíces
Jerga que llora y jerga que ríe
Las dos obligaciones: vigilar y esperar
Libro octavo. Delicias y desconsuelos
Plena luz
El aturdimiento de la dicha completa
Inicio de sombra
Un chusco alimenta en el cuartel y ladra en jerga
Cosas de la noche
Marius recobra una existencia real hasta tal punto de que le da a Cosette sus señas
El corazón anciano y el corazón joven frente a frente
Libro noveno. ¿Dónde van?
Jean Valjean
Marius
El señor Mabeuf
Libro décimo. El 5 de junio de 1832
La superficie de la cuestión
El fondo de la cuestión
Un entierro: ocasión de un renacimiento
Las efervescencias de antaño
Originalidad de París
Libro undécimo. El átomo confraterniza con el huracán
Algunas aclaraciones acerca de la poesía de Gavroche. Influencia de un académico en dicha poesía
Gavroche en marcha
Justa indignación de un barbero
El anciano extraña al niño
El anciano
Reclutamientos
Libro duodécimo. Corinthe
Historia de Corinthe desde su fundación
Diversiones preliminares
La oscuridad empieza a tragarse a Grantaire
Intento de consolar a la viuda de Hucheloup
Los preparativos
Mientras esperaban
El hombre que se había sumado en la calle de Les Billetes
Varios signos de interrogación referidos a un tal Le Cabuc que a lo mejor no se llamaba Le Cabuc
Libro decimotercero. Marius se interna en las tinieblas
De la calle de Plumet al barrio de Saint-Denis
París a vista de búho
En el filo
Libro decimocuarto. Las grandezas de la desesperación
La bandera — acto primero
La bandera — acto segundo
Más le habría valido a Gavroche aceptarle la carabina a Enjolras
El barril de pólvora
Acaban los versos de Jean Prouvaire
La agonía de la muerte tras la agonía de la vida
Gavroche experto calculador de las distancias
Libro decimoquinto. La calle de L’Homme-Armé
Un vade que se va de la lengua
El golfillo enemigo de las luces
Mientras Cosette y Toussaint duermen
Gavroche se pasa de cumplidor
Quinta parte. Jean Valjean
Libro primero. La guerra entre cuatro paredes
El Caribdis del barrio de Saint-Antoine y el Escila del arrabal de Le Temple
Qué hacer en el abismo a menos que se charle
Un claro y nuevas nubes
Cinco menos y uno más
El horizonte que se ve desde lo alto de la barricada
Marius desencajado. Javert lacónico
La situación se agrava
Los artilleros consiguen que los tomen en serio
Uso de ese antiguo talento de cazador furtivo y de esa puntería infalible que influyó en la condena de 1796
Aurora
El tiro de fusil que no falla y que no mata a nadie
El desorden partidario del orden
Fulgores que pasan
En el que leeremos el nombre de la amante de Enjolras
Gavroche sale al exterior
De cómo se llega de hermano a padre
Mortuus pater filium moriturum expectat
El buitre se vuelve presa
La venganza de Jean Valjean
Los muertos están en lo cierto y los vivos no están equivocados
Los héroes
Palmo a palmo
Orestes en ayunas y Pílades borracho
Prisionero
Libro segundo. Los intestinos de Leviatán
El mar empobrece la tierra
Historia antigua de las alcantarillas
Bruneseau
Detalles no sabidos
Progreso actual
Progreso futuro
Libro tercero. El barro, pero el alma
Las cloacas y sus sorpresas
Explicación
Tras la pista de un hombre
Él también carga con su cruz
Tanto en la arena como en la mujer hay una sutileza que es perfidia
El socavón
A veces naufragamos cuando creemos desembarcar
El jirón de frac
Marius le parece muerto a alguien que entiende del asunto
Vuelve a casa el hijo pródigo de su vida
Lo absoluto se tambalea
El abuelo
Libro cuarto. Javert descarrila
[Javert se había alejado con paso tardo]
Libro quinto. El nieto y el abuelo
Donde vuelve a aparecer el árbol de la venda de cinc
Tras salir de la guerra civil, Marius se prepara para la guerra doméstica
Marius ataca
A la señorita Gillenormand acaba por no parecerle mal que el señor Fauchelevent hubiera entrado con un paquete debajo del brazo
Vale más depositar el dinero en un bosque que en el despacho de un notario
Los dos ancianos hacen cuanto está en su mano, cada cual a su manera, para que Cosette sea feliz
Efectos del sueño cuando se juntan con la dicha
Dos hombres imposibles de localizar
Libro sexto. La noche en blanco
16 de febrero de 1833
Jean Valjean sigue con el brazo en cabestrillo
La inseparable
Immortale jecur
Libro séptimo. Las heces del cáliz
El séptimo círculo y el octavo cielo
Las partes oscuras que puede haber en una revelación
Libro ocatvo. Va cayendo el crepúsculo
La sala de abajo
Más retrocesos
Recuerdan el jardín de la calle de Plumet
La atracción y la extinción
Libro noveno. Sombra suprema, supremo amanecer
Compasión para los desdichados, pero indulgencia para los dichosos
Últimos latidos de la lámpara sin aceite
El que levantaba la carreta de Fauchelevent no puede con el peso de una pluma
La botella de tinta que sólo consiguió limpiar
Postrera oscuridad tras la que viene la luz
La hierba tapa y la lluvia borra
Créditos
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