[1] El plan de estudios de gramática latina incluía principalmente las Cartas de Cicerón, las Comedias de Terencio, las Églogas de Virgilio, las Epístolas y las Tristia de Ovidio, y fragmentos de Séneca y Salustio. La práctica en la composición latina, la poética y la retórica se basaba en el De copia y De conscribendis epistolis de Erasmo, el Arte poética de Horacio, los Discursos y las Tusculanas de Cicerón, la Retórica a Herenio, y la Institución oratoria de Quintiliano. La gramática del griego se impartía en latín. Su conocimiento era previo y preparatorio para la traducción. Los primeros textos eran las Fábulas de Esopo, diálogos de Luciano y preceptos de Isócrates. En un segundo momento, llegaban Aristóteles, Jenofonte, Platón, Tucídides y Demóstenes. Homero y Píndaro, de mayor complejidad, difícilmente se estudiaban en ese grado. Tomo los datos de Andino Sánchez (2008).
[2] A mi juicio, el mejor esbozo del pensamiento y la cultura de Cervantes lo ha realizado Anthony Close en varios estudios, entre los que destaca, por su capacidad de síntesis, el capítulo «Cervantes: pensamiento, personalidad, cultura», incluido en el prólogo a la edición del Quijote del Instituto Cervantes, dirigida por Francisco Rico (2004, I, pp. LXXIII-XCIV). Muchos datos de los aquí expuestos remiten a ese trabajo, donde se hallará una explicación más engarzada y completa sobre el tema.
[1] Se transcribe aquí la portada de la primera edición, de 1614. Para el título, véase una explicación más detallada en la introducción.
[2] El texto de la edición príncipe lee de Consejo Real; se corrige en del Consejo Real.
[3] Don Rodrigo de Tapia, en efecto, fue caballero de la Orden de Santiago y aficionado a las letras desde muy joven. Su padre, Pedro de Tapia, fue hombre de gran influencia durante el reinado de Felipe III, llegando a ser oidor, ‘juez’, del Consejo Real y consultor, ‘ministro, juez’, del Tribunal de la Inquisición, como aquí se recuerda. La familia fue reconocida mecenas de las artes como muestra esta dedicatoria, y otras como las de las comedias de Lope de Vega El favor agradecido, a don Pedro de Tapia, o El soldado amante, a su hija, y hermana de don Rodrigo, Ana de Tapia (incluidas respectivamente en la Parte XV y la Parte XVII, ambas publicadas en 1621).
[4] El grabado muestra un jarrón con flores, del que sobresalen dos de ellas, en forma de campanillas, a ambos lados. El mismo taco se utiliza en otras impresiones debidas a la viuda de Alonso Martín, como los Entretenimientos y juegos honestos y recreaciones cristianas, de fray Alonso Remón (1623), o las Novelas ejemplares del propio Cervantes, que se editaron en 1622 a costa de Domingo González.
[5] A principios del siglo XVII los permisos para la publicación de un libro suponían cumplir con un enrevesado proceso administrativo, que implicaba la petición de licencias, tanto civiles como eclesiásticas, las cuales, una vez concedidas, debían imprimirse en el primer pliego del libro. Esta primera es la del vicariado, muchas veces llamada aprobación; por regla general, como aquí, es anterior a la civil, que se incluye a continuación.
[6] El memorial era el escrito de petición con que se iniciaba el procedimiento para obtener una licencia y estaba dirigido al Rey. Aparte los datos básicos (nombre del autor, título del libro…) debía demostrarse «la utilidad común que redundaría si se concedía lo que suplicaban» (Bouza Álvarez, 2012, p. 32).
[7] El doctor Gutierre de Cetina fue vicario general de Madrid y firmó también las aprobaciones de las Novelas ejemplares y la segunda parte del Quijote.
[8] En la edición príncipe se lee el el Viaje del Parnaso; se corrige eliminando el artículo repetido.
[9] El maestro Josef de Valdivielso, conocido poeta y capellán de la catedral de Toledo, amigo de Cervantes y Lope de Vega, redactó las aprobaciones de la segunda parte del Quijote, las Comedias y entremeses y el Persiles.
[10] El privilegio, firmado por mandato del Rey, establece el permiso de imprimir y el período de validez del mismo, en este caso, de seis años.
[11] con que: ‘a condición de que’.
[12] Jorge de Tovar fue miembro del Consejo de Su Majestad y secretario de la Cámara y Patronato Real.
[13] La tasa establecía el precio oficial del libro y se otorgaba una vez el volumen estaba impreso, en función de los pliegos de papel que contenía.
[14] Hernando de Vallejo, escribano de Cámara del Rey, estableció también la tasa de la segunda parte del Quijote. En aquel caso, el libro costaba doscientos noventa y dos maravedís, frente a los cuarenta y cuatro de este.
[15] La fe de erratas resultaba del cotejo entre el original presentado para tramitar los permisos de impresión y el volumen ya impreso.
[16] La plana 1 y 2 refieren al recto y verso de la página, respectivamente.
[17] Murcia de la Llana, médico y escritor, fue corrector entre los años 1601 y 1635, y firma las erratas del primer y segundo Quijote, por ejemplo.
[18] La brevedad de la dedicatoria y el prólogo se ha entendido como respuesta irónica a la falta de apoyos para la impresión del libro, sobre todo a la dificultad de encontrar alguien que le ofreciera poemas laudatorios de encabezamiento, como era costumbre en muchas obras de la época.
[19] El texto latino está corregido según la versión de José Vallejo, y la traducción que se ofrece a continuación se debe a Francisco Maldonado de Guevara (1952, p. 435): «Epigrama de don Agustín Casanate // Hijo de Cronos, pulsa el tambor de la espalda cerúlea / hieran a Tetis nutricia tus cuatro caballos en corso. / Bando el de Apolo —nueva en afrenta del ponto sagrado— / sobre las naves, armadas de versos, hiende los mares. / Presa de pasmo, deja Proteo la fauna marina, / deja Tritón en olvido su canto, y los monstruos sus cuevas. / Cuida no sea que la mole de versos cercene tus riendas, / si los consientes a ti sin vibrar el poder del tridente. / Mas… no te alarmes, no hay tal, sigue firme al gobierno del carro, / guía al Parnaso los versos, que vuelen con viento benigno: / desde la última Hesperia conduce, a través de tu reino, / claros poetas Miguel del real en demanda de Apolo».
[20] Este soneto no se halla en la mayoría de ejemplares de la primera edición del Viaje del Parnaso. Cervantes no había encontrado quien le escribiera un poema laudatorio para los preliminares, por lo que compuso uno él mismo, «El autor a su pluma». Pero, en el último momento, con el volumen ya impreso, le llegó el epigrama copiado más arriba, por lo que decide sustituir uno por otro. Se incluyen ambos para ilustrar el caso, aunque, sin duda, una edición crítica debería optar por reflejar la última voluntad del autor y eliminar su soneto.
[21] Un quídam: ‘un cierto’. Se refiere al autor italiano Cesare Caporali, quien escribió un Viaggio in Parnaso (1582), y que Cervantes, desde aquí, presenta como su principal fuente de inspiración.
[22] En efecto, Caporali era natural de Perusa (Perugia).
[23] reverendo: ‘respetable’.
[24] antigua: ‘vieja’.
[25] medroso: ‘miedoso’; estantigua: ‘fantasma’.
[26] caía: juego con el doble significado del verbo, el recto, y el figurado, relacionado con el ingenio del verso anterior, ‘caer en la cuenta’.
[27] poetón: aumentativo cómico.
[28] a la estafeta: ‘rápidamente’.
[29] el nombrado Oeta: ‘el famoso Oeta’, monte de Tesalia, desde el que se pueden ver las Termópilas y donde murió abrasado Hércules.
[30] La fuente de Aganipe, situada al pie del monte Helicón, estaba consagrada a Apolo y a las musas; por lo que beber de sus aguas propiciaba la inspiración poética. Había brotado al paso de los cascos de Pegaso, el caballo alado de Belerofonte.
[31] El original lee Porque la piedra que en mis hombros veo. La adición de la preposición en resulta necesaria para la compresión de los siguientes versos y no varía el cómputo silábico.
[32] Se refiere posiblemente a Marcelo de Aponte y Ávalos, jesuita y profesor de latín en Toledo.
[33] Posible alusión a Beltrán de Galarza, caballero sevillano de vida agitada, de quien se recogen algunos chistes en los Cuentos de Juan de Arquijo. Véase también la alusión a Antonio de Galarza más abajo, II, v. 383, y en el prólogo de las Comedias y entremeses.
[34] Rodomonte es un rey moro, personaje que aparece en el Orlando enamorado de Matteo Maria Boiardo y en el Orlando furioso de Ludovico Ariosto, caracterizado como fanfarrón.
[35] Vicente Gaos, en su edición del texto, señala el paralelismo de este verso con otro de Garcilaso: «y como d’un dolor otro s’empieza» (Égloga II, v. 494).
[36] siempre ligera: referencia a la pobreza de los poetas.
[37] de agilibus: ‘de habilidad, prácticas’; rateras: ‘despreciables’.
[38] el convexo van de las esferas: ‘están en la luna’.
[39] palestra: ‘lugar donde se lucha’, en relación con el dios Marte. Referencia a la poesía épica. Venus, a quien vemos en el verso 87, representará la poesía lírica.
[40] En la edición príncipe se lee «las acciones de Marte, o entre las flores». Aunque el verso podría leerse con una forzada sinalefa Marte-o-en, conservando sus once sílabas, parece más adecuado eliminar el segundo artículo las, que puede haber sido añadido por el componedor por atracción del primero.
[41] baldío: ‘vano, cambiante’; regalado: ‘placentero’.
[42] con letura: ‘con cuidado’.
[43] El cisne simboliza al buen poeta, mientras que el cuervo representa al malo. El narrador aquí se caracteriza, pues, como un poeta mediocre. Más allá de la interpretación que ha querido ver un trasunto de la opinión de Cervantes sobre sí mismo, no se puede olvidar que era habitual en los autores mostrarse humildes para captar la benevolencia del público.
[44] desbastar: ‘quitar lo basto, encogido y grosero que por falta de educación tienen algunas personas’.
[45] La rueda de la Fortuna, referida aquí, tradicionalmente nunca está quieta (queda), por lo que, si aquí lo está y no permite subir, es para exagerar la mala suerte del narrador.
[46] suceso: ‘éxito’.
[47] Entiéndase ‘un pan (candeal) con ocho maravedís (mis) de queso’.
[48] Parece una alusión a la Puerta de Guadalajara de Madrid, sobre la calle Mayor y muy cerca del mentidero de los representantes (mentiroso), la cual estaba flanqueada por dos torres laterales, y la cual se incendió en 1582 a causa de los festejos de la victoria militar de Felipe II en la batalla de la Isla Terceira.
[49] Crítica evidente del teatro de la época.
[50] Otro mentidero, el de San Felipe, al principio de la calle Mayor, era lugar de reunión de soldados, donde se conocerían las novedades del ejército turco (turco galgo, por ‘perro’, apelativo despectivo para referirse a los mahometanos). La gazzeta, en efecto, tiene su origen en Venecia a principios del siglo XVII y se trataba de un periódico que se publicaba semanalmente con noticias políticas y de otra índole. Tenía fama de exagerar los sucesos.
[51] Se trata del puerto de Cartagena.
[52] El texto de la príncipe trae ya navegado; se corrige y ha navegado.
[53] El texto de la príncipe trae y cen en vez de y con. Esta errata está consignada en la fe de los preliminares.
[54] Referencia a don Juan de Austria y la batalla de Lepanto, en la que participó Cervantes.
[55] Recuerdo del ataque de Juno a la flota de Eneas cuando huía de Troya y se dirigía hacia Italia, descrita al principio de la Eneida.
[56] Argos fue el constructor del barco del mismo nombre que usaron Jasón y sus compañeros, los argonautas, para su búsqueda del vellocino de oro.
[57] Metáfora del alba muy usada; en trenza: ‘descubierta’.
[58] Era tradición que los barcos hicieran la salva, es decir, saludaran disparando sus armas sin munición cuando se acercaban a un puerto amigo.
[59] chusma: ‘tripulación’.
[60] sirgo: ‘seda torcida’.
[61] El caduceo es una vara delgada, lisa y cilíndrica, rodeada de dos culebras, atributo de Mercurio, como se ha recordado, dios romano del comercio y mensajero de los dioses, considerada en la Antigüedad como símbolo de la paz.
[62] paraninfo: ‘el que anuncia una buena noticia’.
[63] el dios parlero: Mercurio era también el dios de la elocuencia.
[64] cilenio: atributo de Mercurio, por el monte Cilene, en el Peloponeso, lugar de origen del dios.
[65] Nueva alusión a la batalla de Lepanto, donde Cervantes resultó herido y perdió el uso de su mano izquierda.
[66] raro: ‘extraordinario, fuera de lo común’.
[67] La edición príncipe lee llevándola, pero es necesaria la concordancia con obras, por lo que se edita el plural.
[68] A la altura de 1614, el Quijote, libro aquí referido, había conseguido un éxito considerable. La edición príncipe trae, por error gráfico, ya en vez de y a, que es nuestra lectura crítica.
[69] monte: ‘el monte Parnaso’.
[70] luego: ‘inmediatamente’.
[71] matalotaje: ‘prevención de comida que se lleva en una embarcación’.
[72] apures: ‘compruebes’.
[73] quilla: ‘pieza de madera o hierro, que va de popa a proa por la parte inferior del barco y en que se asienta toda su armazón’; gavia: ‘vela que se coloca en el mastelero mayor de las naves, la cual da nombre a este, a su verga, a la cofa, etc.’; es decir, ‘de abajo arriba, toda la nave’.
[74] ballesteras: ‘abertura o agujero estrecho en el costado de un buque, en un muro o en otro lugar, que se utiliza para disparar con protección’; ensalada: ‘Composición poética en la cual se incluyen esparcidos versos de otras poesías conocidas o en la que se emplean a voluntad metros diferentes’; glosas: ‘composición poética a cuyo final, o al de cada una de sus estrofas, se hacen entrar rimando y formando sentido uno o más versos anticipadamente propuestos’, muy utilizada por Cervantes. La canción «La bella malmaridada» (La bella malmaridada / de las más lindas que vi, / acuérdate cuánto amada, / señora, fueste de mí), provenía de un romance viejo, y fue una de las más glosadas a lo largo de los siglos XVI y XVII, y tuvo tal éxito que fue contrahecha a lo divino y a lo humano, y fue punto de partida de, entre otras, una comedia de Lope de Vega. La ensalada de glosas no existe como tal, es una exageración de Cervantes, para incidir en lo asombroso de la nave y describirla no como una mezcla armónica sino como un batiburrillo de estrofas.
[75] popa: ‘parte posterior de una embarcación’; estraordinaria: ‘fuera de lo común’; bastarda: ‘aquí, heterodoxa’, pero también se usa como juego de palabras para contraponerse al cercano legítimos; labor: ‘composición, escritura’; peregrina: ‘extraña, pocas veces vista’.
[76] espalderes: ‘remeros que iban de espaldas a la popa de la galera para mirar y gobernar a los demás, marcando con su remo el compás de la boga’.
[77] Los tercetos, pues, son buenos para dar boga larga, es decir, para composiciones extensas, como esta misma. La boga larga es también ‘la boga pausada’, así que de nuevo tendríamos un juego de significados.
[78] crujía: ‘espacio de popa a proa en medio de la cubierta del buque’.
[79] «Pasar crujía» era un castigo infligido en las galeras, que consistía en asestar azotes al culpado. Véase, por ejemplo, el relato de Cristóbal Suárez de Figueroa: «Es pasar crujía tenderlos desnudos en medio de los dos lados de la galera. Amárranlos fuertemente de manos y pies, y con un grueso cordel embreado descarga el de más pujanza sobre los infelices un centenar o dos de espantosos golpes» (El pasajero, 1617). Por analogía, se usa para quien pasa miseria o maltrato.
[80] árbol: ‘mástil, el gran palo vertical que sujeta las velas’.
[81] Entiéndase ‘pintado, calafateado (embreado), de seis dedos de grueso (de canto)’; de nuevo se halla un juego de doble significado en canto, de cantar, y de grosor; se enfatiza, así, la prolijidad, el exceso de longitud, de la canción.
[82] entena: ‘vara o palo encorvado y muy largo al cual está asegurada la vela’.
[83] estrambotes: ‘conjunto de versos que por gracejo o bizarría suele añadirse al final de una combinación métrica, especialmente del soneto’.
[84] racamenta: ‘anilla que sujeta la vela al palo para que pueda correr a lo largo de este’; es parlera, pues suena al utilizarla.
[85] La redondilla es ‘una combinación métrica de cuatro octosílabos en que conciertan los versos primero y cuarto, tercero y segundo’.
[86] jarcias: ‘aparejos y cabos de un buque’; seguidillas: ‘composición métrica que puede constar de cuatro o de siete versos, de los cuales son, en ambos casos, heptasílabos y libres el primero y el tercero, y de cinco sílabas y asonantes los otros dos. Cuando consta de siete, el quinto y el séptimo tienen esta misma medida y forman también asonancia entre sí, y el sexto es, como el primero y el tercero, heptasílabo y libre’.
[87] La rumbada es el ‘corredor de proa de las galeras’.
[88] estancias: ‘estrofas formadas por más de seis versos endecasílabos y heptasílabos que riman en consonante al arbitrio del poeta, y cuya estructura se repite a lo largo del poema’.
[89] Las colecciones de varias rimas tenían su origen en el modelo petrarquista de las rime sparse de su Canzoniere, que había proliferado y evolucionado con gran éxito en la España de los siglos XVI y XVII.
[90] Los versos encadenados son aquellos que empiezan con la misma palabra con que acaba el anterior.
[91] En un buque se denomina obra muerta a la parte del casco que está fuera del agua de forma permanente, cuando el barco está a plena carga.
[92] versos sueltos: ‘sin rima’, normalmente se refiere a los endecasílabos sueltos o blancos; sestina: ‘sextina, forma de poesía culta que trata, generalmente, temas amorosos, y que consta de seis estrofas de seis versos endecasílabos cada una, y de otra que solo se compone de tres. En todas, menos en esta, acaban los versos con las mismas palabras, bien que no ordenadas de igual manera, por haber de concluir con la voz final del último verso de una estrofa el primero de la siguiente. En cada uno de los tres con que se da remate a esta composición entran dos de los seis vocablos repetidos de las estrofas anteriores’.
[93] espanto: ‘asombro’.
[94] Pactolo: ‘río situado en la costa turca del mar Egeo, donde en la Antigüedad estuvo el reino de Lidia; se le atribuían propiedades auríferas’.
[95] La palabra espía tenía género femenino en la época.
[96] Se refiere a la cruz de la Orden de Malta.
[97] yangüeses: ‘de Yanguas, Soria’; coritos: ‘asturianos’.
[98] Colgado: ‘pendiente y ansioso’.
[99] El licenciado Juan de Ochoa: posible referencia a un doctor humanista sevillano, que escribió una Gramática castellana (véase II, v. 14).
[100] divierte: ‘desvía’.
[101] Se trata de Damián Salucio del Poyo, dramaturgo contemporáneo de Cervantes, alabado también por Lope de Vega y Agustín de Rojas.
[102] deslumbre: ‘ofusque’.
[103] Hipólito de Vergara fue un poeta y dramaturgo con residencia en Sevilla, reconocido asimismo por Lope y Andrés de Claramonte, autor de una comedia atribuida a Tirso de Molina, La Virgen de los Reyes.
[104] Referencia a Felipe Godínez, teólogo y dramaturgo, quien en 1624 fue acusado de judío y atacado por esa misma razón por Quevedo. La temática de su obra es principalmente religiosa.
[105] Francisco de Calatayud, poeta soldado, contador de la Casa de Contratación de Sevilla y después secretario de Felipe IV en Madrid, es autor conocido e incluido en recopilaciones como la Segunda parte de las Flores de poetas ilustres, reunida por Juan Antonio Calderón en 1611.
[106] Miguel Cid (1550-1617), poeta sevillano muy prolífico que principalmente restringió su labor a las justas poéticas. Se significó por su defensa del dogma de la Inmaculada Concepción, que había supuesto un enfrentamiento teológico en Sevilla, en especial a partir de 1613.
[107] pone espanto: ‘causa asombro, admiración’.
[108] Según la mitología clásica, Calisto era una cazadora del cortejo de Artemisa, la cual incumplió su voto de castidad, seducida por Zeus. Fue el mismo dios quien la convirtió en la Osa Mayor, para dotarla de inmortalidad.
[109] Febo es uno de los epítetos del dios Apolo.
[110] sabe: ‘conoce’.
[111] Luis de Góngora y Argote (1561-1627), gran poeta cordobés iniciador del culteranismo.
[112] Se refiere a Fernando de Herrera (1534-1597), poeta sevillano de gran prestigio, conocido como «el divino».
[113] Luz es el nombre de la amada a la que Fernando de Herrera dedica muchos de sus poemas, álter ego de doña Leonor Fernández de Córdoba y de Milán de Aragón, que solo era su musa, pues era la mujer de su protector, el conde de Gelves.
[114] El texto de la edición príncipe lee alma; es necesario añadir el artículo: el alma.
[115] Juan de Jáuregui (1583-1641), o Jáurigui, como en el texto, poeta, erudito y pintor, de gran prestigio (el propio Cervantes cuenta que le sacó un retrato, que, de existir, no se ha conservado). Participó en las polémicas literarias en torno al culteranismo, enemistándose con poetas como el propio Góngora o Quevedo.
[116] Jáuregui tradujo en octavas reales la Farsalia de Lucano.
[117] necesidad: ‘apuro, aprieto’.
[118] El discurso pediría un le en vez de un te, pero en Cervantes son habituales estos cambios de referencia.
[119] Félix Arias Girón (1563-1622), poeta soldado, hijo del conde de Puñonrostro. Fue protector y juez de la Academia poética de Madrid.
[120] La fuente Aganipe ya ha aparecido en I, v. 32.
[121] Hipocrene es, como Aganipe, una fuente situada en el monte Helicón, consagrada a las Musas. Su origen se debe también al paso de Pegaso. Ambas fuentes suelen citarse juntas, como en las Metamorfosis de Ovidio (V, 312).
[122] a dicha: ‘acaso’.
[123] chacho: ‘jugador’. Algún estudioso ha visto aquí una posible referencia a Castillo Solórzano.
[124] Alonso Jerónimo de Salas Barbadillo (1581-1635), novelista, dramaturgo y poeta, conocido especialmente por sus colecciones de novela cortesana como El caballero puntual (1614) y Corrección de vicios (1615).
[125] La edición príncipe lee decirlo, pero debe corregirse decillo para restituir la rima con Barbadillo y oíllo.
[126] En la mitología griega, Ganimedes es un hermoso príncipe troyano, hijo de Tros (o de Laedomonte, según las fuentes), quien fue raptado de la tierra y se convirtió en el amante de Zeus y en el copero de los dioses. Algunos estudiosos ven aquí una referencia al poeta Esteban Manuel de Villegas, quien, de origen hidalgo, vio mermar su fortuna y adquirió fama de vivir de préstamos.
[127] a lo godo: ‘como rico, noble’.
[128] Luis Cabrera de Córdoba (1559-1623), historiador famoso por su Historia de Felipe II (1619), y poeta seguidor del estilo gongorino.
[129] Comparación con Cornelio Tácito (h. 55-120), autor de los Anales, y referente del historiador por excelencia.
[130] Bóreas era, en la mitología griega, el dios del frío viento del norte que traía el invierno. Era conocido por su fuerza y mal carácter.
[131] Lorenzo Ramírez de Prado (1583-1658), fue un humanista, bibliófilo y escritor político español.
[132] Antonio de Monroy y Zúñiga, señor de la casa de Monroy, fue natural de Plasencia, hermano de la ilustrísima señora doña Leonor Pimentel, a quien dedicó Lope La Filomena. Escribió una Elegía a la muerte del poeta don Luis Carrillo y Sotomayor, impresa al frente de las Obras póstumas de este (Madrid, 1611-1613).
[133] Torcuato Tasso (1544-1595), el gran poeta italiano, autor del poema heroico la Jerusalén liberada.
[134] Antonio de Paredes, poeta gongorino, autor de unas Rimas, que se publicaron póstumas en Córdoba en 1622, con aprobación de Lope de Vega.
[135] Antonio Hurtado de Mendoza (1586-1644), escritor y dramaturgo de la escuela culterana.
[136] Pedro de Morales, poeta cómico alabado también por Lope de Vega y Agustín de Rojas.
[137] Zoílo, gramático griego, filósofo cínico y crítico literario de Anfípolis, en Macedonia. Criticó severamente a Homero.
[138] Vicente Espinel (1550-1624), sacerdote, escritor y músico. A partir de sus Diversas rimas de 1591, modificó la estructura de la décima, estrofa conocida también como espinela en su honor. Fue conocido también por sus sátiras, de ahí su comparación anterior con Zoílo.
[139] la prima: ‘la primacía’.
[140] tira la barra: referencia al juego de lanzar una barra, cuyo objetivo es lograr la mayor distancia; pero la expresión tirar la barra también significa ‘realizar el máximo esfuerzo por conseguir algo’.
[141] Pindo es un macizo montañoso del Epiro, cordillera del norte de Grecia. A menudo era llamado en la Antigüedad la «columna vertebral de Grecia». Se trata de un monte poético, como el Parnaso.
[142] desgarra: ‘maldice’.
[143] Jusepe de Vargas, poeta alabado también en el Laurel de Apolo, de Lope de Vega, y por Pérez de Montalbán en el Para todos. Siempre aparece, como aquí, caracterizado como hombre irascible.
[144] Andrés Carlos de Balmaseda, poeta toledano. Hay un soneto suyo al frente de la Segunda parte de las Rimas de Lope de Vega (1605). Se sabe que colaboró en la Fama póstuma de Lope, publicada por Pérez de Montalbán en 1636.
[145] Posible referencia a Bartolomé López de Enciso, poeta de la segunda mitad del siglo XVI, quien escribió la novela pastoril Desengaño de celos, publicada en 1586. Según la fe de erratas de los preliminares, la edición príncipe lee incorrectamente inceso, pero no es así en nuestro ejemplar.
[146] Luis Vélez de Guevara (1579-1644), dramaturgo y novelista, autor de El diablo cojuelo.
[147] numeroso: ‘armonioso’.
[148] Gnatón y Davo son dos personajes de las comedias de Terencio, el primero un siervo y el segundo un truhán.
[149] Juan de España y Moncada fue contador mayor del infante cardenal don Fernando y caballero y procurador general de la Orden de Santiago. Lope de Vega lo alabó en la silva VII del Laurel de Apolo.
[150] Luso, hijo o compañero de Baco, de donde deriva Lusitania (‘Portugal’). La edición príncipe trae Lugo y no Luso, pero la corrección es necesaria.
[151] Miguel de Silveira, judío converso portugués. Poeta famoso desde inicios del siglo XVII, compuso los poemas heroicos El Macabeo (1638) y El Sol vencido (1639). Lope de Vega lo alaba en La Filomena, llamándole «lusitano».
[152] El licenciado Pedro de Herrera, autor de la Descripción de la Capilla de Nuestra Señora del Sagrario... de Toledo (1617). Posiblemente se trate del mismo Pedro de Herrera a quien Lope de Vega dedicó en 1621 su comedia El caballero del milagro.
[153] Francisco de Faría (1562-1616), natural de Granada (de ahí la referencia al río Dauro, ‘Darro’), canónigo de la Santa Iglesia de Málaga y doctoral de la de Almería. Tradujo en octavas castellanas el Robo de Proserpina, de Claudiano (1608).
[154] Pedro Rodríguez de Ardila, natural de Granada, fue poeta y librero. Agustín de Tejada Páez (1567-1635), doctor en teología. Pedro de Espinosa, en Flores de poetas ilustres (1605) recoge poemas de ambos.
[155] No se trata, como han supuesto algunos editores, de Baltasar Elisio de Medinilla, poeta y gran amigo de Lope de Vega, sino de Pedro Medina Medinilla. Su romance gozó de popularidad y se imprimió ya en la Cuarta y quinta parte de Flor de romances (Burgos, 1592): «Funestos y altos cipreses, / frondosas y verdes hayas / cercan un campo cubierto / de abrojos y hierba larga. / En medio estaba un sepulcro, / al pie de una palma ingrata / que, como da el fruto tarde, / con la muerte se compara…».
[156] Fernando Bermúdez de Carvajal, poeta natural de Plasencia. Fue camarero del duque de Sessa. Escribió numerosos poemas laudatorios, como el que encabeza las Novelas ejemplares (1613) de Cervantes, el anteriormente citado Robo de Proserpina de Claudiano (1608), traducido por Faría (véase la nota 153); Los pastores de Belén (1612) y las Rimas sacras (1614) de Lope; la Corrección de vicios de Salas Barbadillo (1615), etc.
[157] Bernardo de Balbuena (1562-1627), eclesiástico y poeta. Se recuerda aquí su libro Siglo de Oro, en las Selvas de Erifile... en que se describe una agradable y rigurosa imitación del estilo pastoril de Teócrito, Virgilio y Sanazaro (1608).
[158] Alusión a fray Miguel Cejudo y del Olmo (1578-1652), humanista, fraile y poeta, primo del citado Bernardo de Balbuena (véase la nota anterior); caballero del hábito de Calatrava, muy elogiado por Lope de Vega en La Arcadia y el Laurel de Apolo. También se recuerda aquí a Miguel Sánchez, llamado «el divino» (1560-1620), poeta y dramaturgo vallisoletano, considerado uno de los padres de la comedia nueva. Es elogiado por Lope en el Laurel de Apolo, La Filomena y La Arcadia.
[159] Don Francisco de Silva y Mendoza, hijo segundo de don Rodrigo Gómez de Silva, segundo duque de Pastrana. Ilustre aficionado a las letras, organizaba en su casa la Academia Selvaje, de la cual formaban parte Lope de Vega y el licenciado Pedro Soto de Rojas. Estos mismos lo elogiaron por su ingenio y caballerosidad. Tuvo una muerte heroica durante la batalla de Lombardía, en 1615, siendo aún muy joven, rasgo que recuerda aquí Cervantes.
[160] El licenciado Gabriel Gómez de Sanabria, poeta y jurista, que obtuvo diversos cargos en las Indias, siendo por entonces fiscal de la Audiencia de Charcas, en el Perú. Entre sus obras destaca su traducción de Marcial. Lope de Vega lo alaba en el Laurel de Apolo.
[161] La edición príncipe trae lecho y no hecho, pero la corrección es necesaria.
[162] Algunos autores identifican el Valdés del texto con Alonso de Valdés, poeta elogiado también en el «Canto de Calíope» de La Galatea; otros, sin embargo, creen que Cervantes se refiere aquí a Pedro de Valdés, poeta recordado por Francisco de Herrera Maldonado, en su traducción de Sannazaro (Sanazaro Español, 1620).
[163] Cristóbal Suárez de Figueroa (1571-h. 1644). Jurista, escritor, traductor y enciclopedista vallisoletano, quien marchó a Italia, siendo muy joven, y allí desempeñó varios cargos públicos, entre ellos el de auditor de la Infantería española. Su novela pastoril La constante Amarilis, prosas y versos, recordada aquí, se publicó en Valencia el año 1609.
[164] Diego de Silva y Mendoza (1564-1630), conocido como conde de Salinas, duque III de Francavilla y primer marqués de Alenquer, fue poeta reconocido y político de gran influencia durante los reinados de Felipe II y Felipe III.
[165] Don Francisco de Borja y Aragón, príncipe de Esquilache (1581-1658), conde de Mayalde y de Simari. Fue discípulo de Bartolomé Leonardo de Argensola. Desempeñó los cargos de gentilhombre de Su Majestad y de virrey del Perú (desde 1614). Es autor, entre otras, de Obras en verso (1630), La pasión de Nuestro Señor Jesucristo en tercetos (1638) y de un poema heroico, Nápoles recuperada por el rey don Alonso (1651).
[166] sobras: ‘superas’.
[167] tacaño: ‘astuto y engañador’.
[168] Don Diego Gómez de Sandoval y Rojas, hijo segundo del duque de Lerma. Poeta y benefactor de las artes a quien Lope de Vega dedicó su Jerusalén conquistada (1609).
[169] Nueva alusión al monte poético Pindo (véase II, v. 152).
[170] hacha: ‘mecha que se hace de esparto y alquitrán para que resista al viento sin apagarse’.
[171] Don Juan Bautista de Tasis y Peralta, conde de Villamediana (1582-1622), poeta de estilo muy personal, con fama de libertino, jugador y sátiro. Su talante lo abocó a dos destierros, a consecuencia de sus punzantes sátiras contra varios personajes. En 1621 fue nombrado gentilhombre de la reina doña Isabel. Murió asesinado, posiblemente por orden del conde-duque de Olivares. Sus Obras se publicaron 1629.
[172] Don Álvaro Antonio Enríquez de Almansa, marqués de Alcañices, fue gentilhombre de cámara de Felipe IV y poeta. Los preliminares de las Novelas ejemplares de Cervantes (1613) incluyen un soneto laudatorio suyo. Es alabado por Lope de Vega en su Laurel de Apolo y el mismo autor le dedicó la Segunda parte del Príncipe perfecto (1622).
[173] fenices: es plural de fénix.
[174] idificio: ‘edificio’.
[175] el cerco de la luna: o del sol, es ‘el resplandor que suele aparecer alrededor de estos planetas’; se trata de una hipérbole que enaltece el edificio de Apolo, y, en consecuencia, a los poetas citados.
[176] El texto de la príncipe lee el lauro palma lleva, pero es necesaria la introducción de la copulativa: el lauro y palma lleva. Lo notaba ya el corrector de la época y es error incluido en la fe de erratas.
[177] Francisco de la Cueva y Silva (1550-1621), poeta, dramaturgo, filólogo y jurista, fue elogiado por Quevedo, Agustín de Rojas Villandrado, Cristóbal de Mesa, Vicente Espinel y Lope, entre otros. Pese a estos elogios repetidos, no se conserva gran parte de su obra, a excepción de un tratado, algunos poemas, la tragedia Narciso y la Farsa del obispo don Gonzalo y los hidalgos de Jaén y celos del rey de Granada y victoria de Reduán.
[178] Rodrigo de Herrera y Ribera (1578-1641), poeta y dramaturgo español de la escuela de Lope de Vega. Este autor lo alaba en el Laurel de Apolo.
[179] Don Juan Antonio de Vera, Zúñiga y Figueroa (1583-1658), conocido como el conde de la Roca, diplomático, historiador y escritor. Fue embajador en Venecia, Roma y Saboya. Lope de Vega le dedicó sus comedias Los esclavos libres y La Felisarda, así como un poema en El peregrino en su patria (1604).
[180] Según el Tratado de la esfera, de Juan de Sacrobosco, el tratado astronómico más conocido en la época de Cervantes (lo fue desde su aparición en el siglo XIII hasta el XVIII), clasifica las esferas (‘cielos’) del universo. La cuarta era la del Sol y la quinta la de Marte. La edición príncipe trae quenta y no quinta, pero hay que enmendar la errata, ya vista por el corrector de la época e incluida en la fe de erratas.
[181] Referencia a Francisco de Quevedo, que aparecerá enseguida.
[182] llano: ‘allanado, fácil’.
[183] Francisco de Quevedo y Villegas (1580-1645), uno de los autores más destacados de la historia de la literatura española, especialmente conocido por su obra poética, aunque también escribió obras narrativas y dramáticas.
[184] Calíope es la musa de la elocuencia y de la poesía épica.
[185] El texto de la edición príncipe lee tenemos. Se corrige, pues, la unión de «esperar» y «temer» en contextos paralelos es muy habitual en la época, y el sentido es preferible a la posible sátira de ‘poetas malos que ya tenemos’.
[186] Quevedo era cojo.
[187] La edición príncipe lee al poeta y no el poeta, pero la corrección es necesaria.
[188] Algunos editores proponen la enmienda «dromedario», aunque la métrica resultaría muy forzada. Se conserva el original; alfana: ‘caballo corpulento, fuerte y brioso’.
[189] infando: ‘torpe e indigno de que se hable de ello’; jubes: ‘ordenas’. Se trata de una reminiscencia jocosa del hexámetro virgiliano «Infandum, Regina, iubes renovare dolorem» (Eneida, II, 3, ‘Reina, me mandas recordar un dolor que no se puede expresar’). Algún editor ha visto aquí una burla de los poetas culteranos.
[190] Entiéndase ‘que se hundiera inmediatamente’.
[191] saltarel: ‘saltarelo, baile de origen italiano’.
[192] Juana la Chasca era una famosa vendedora de embuchados de Madrid. Se la ha relacionado con unos versos del Poema heroico de las necedades y locuras de Orlando el enamorado, de Quevedo («Hembra por quien pasó tanta borrasca / el rey Grandonio, de testuz arisco, / a quien llamaba Angélica la chasca, / hablando a trochimochi y abarrisco»).
[193] pintiparado: aquí, ‘similar’. La tarasca era una figura de serpiente que iba al frente de las procesiones, representando místicamente el vencimiento glorioso de Jesucristo sobre el demonio. Parece voz tomada del verbo griego theracca, que significa ‘asustar’, porque espantaba a los niños.
[194] Juego semántico con el nombre de los vientos: regañón es ‘el viento del norte’, pero también ‘la persona que regaña por cualquier cosa’; y céfiro es ‘el viento de poniente’, pero a la vez ‘algo suave y apacible’.
[195] La palabra color era ambigua en la época de Cervantes, por tanto, podía utilizarse en femenino o masculino indistintamente.
[196] por brújula: ‘poco a poco’. Es expresión tomada de los juegos de naipes.
[197] Es creencia recogida por Plinio en su Historia natural (VIII, 31). Compárese un fragmento de las Sátiras menipeas de Bartolomé Leonardo de Argensola: «ansí en las entrañas de las nubes vieras engendrarse ranas, sapos, lagartos y otras diversas sabandijas, como las que produce por acá la putrefacción o el polvo cuando lo humedece la lluvia...» (El Dédalo).
[198] de rumbo: ‘ostentosos’; hampo: ‘del hampa, pícaros’; Dios es Cristo: ‘tercos, que no atienden a razones’.
[199] En el prólogo de las Comedias y entremeses se cita también a un Antonio de Galarza: «… las grandezas de las comedias de Luis Vélez de Guevara, y las que agora están en jerga del agudo ingenio de don Antonio de Galarza». Se carece de noticias sobre este dramaturgo. Cayetano Alberto de la Barrera cita en su Catálogo bibliográfico y biográfico del teatro antiguo español, un libro de Pascual de Gayangos de un tal Joseph Antonio López de Galarza, titulado Claridiano en dos puertos, pero no parece referir a nuestro Galarza. Véase la alusión a un homónimo en I, v. 53.
[200] Félix Lope de Vega y Carpio (1562-1635), uno de los más importantes poetas y dramaturgos del Siglo de Oro. Fue autor admirado por Cervantes, pero con quien no siempre mantuvo una relación cordial.
[201] ¡Cuerpo de mí!: ‘¡maldita sea!’, locución que denota enfado. Nótese que el sufijo -ambre, que hallamos en poetambre, indica abundancia, pero también es despectivo (como en pelambre).
[202] zaranda: ‘cedazo’.
[203] zarandó: ‘cribó, seleccionó’; gramalla: ‘vestido habitual de algunos cargos públicos de la administración’.
[204] de guilla: ‘abundante’.
[205] granzones: ‘pedazos gruesos que no pasan la criba’.
[206] Algunos editores han visto aquí una referencia al Sastre de Toledo, sobrenombre de un dramaturgo de mala fama, citado también por Suárez de Figueroa y Quevedo, entre otros.
[207] zapatero de obra prima: ‘el que confecciona calzado nuevo’, distinto del remendón, que solo lo repara.
[208] marina: ‘costa’.
[209] La edición príncipe lee y no en vez de y uno, pero la corrección es necesaria.
[210] chocante: ‘agresivo, violento’.
[211] curiosidad: ‘cuidado, esmero’.
[212] rancho: ‘sitio’.
[213] Avistar delfines saltando era símbolo de borrasca. Lo recoge, por ejemplo, Plinio en su Historia natural (IX, 8).
[214] esdrújulos: ‘versos esdrújulos’, es decir, que tienen la última palabra con ese tipo de acentuación.
[215] lizos: ‘tipo de hilo fuerte’.
[216] encarrujadas: ‘retorcidas, ensortijadas’.
[217] agarrochado: ‘herido’.
[218] algarabía: ‘árabe’.
[219] Entiéndase ‘ni siquiera consiente que el viento la pase’. En la edición príncipe no se ve claramente si dice consiente o consiete, por pérdida de la tilde de abreviatura.
[220] escombrada: ‘despejada, llana, clara’.
[221] Luis Ferrer de Cardona (1568-1641), poeta valenciano miembro de la Academia de los Nocturnos.
[222] Guillén de Castro y Bellvís (1569-1631), uno de los dramaturgos valencianos más reconocidos de la época. Su pieza más conocida fue Las mocedades del Cid, que inspiró a Corneille.
[223] Cristóbal de Virués (1550-1614), dramaturgo y poeta épico valenciano.
[224] Pedro de Aguilar parece un error por Gaspar de Aguilar (1561-1623), conocido poeta y dramaturgo valenciano, elogiado también en el prólogo de las Comedias y entremeses. En el Quijote (I-XXXIX), en la historia del cautivo, aparece también un ficticio Pedro de Aguilar, caracterizado como soldado poeta andaluz.
[225] estilos: ‘plumillas de hierro’; librillos de memoria: ‘pequeños cuadernos para tomar notas’.
[226] Andrés Rey de Artieda (1549-1613), poeta y dramaturgo valenciano, de los más reconocidos. En los años de composición del Viaje del Parnaso, Rey de Artieda superaba los sesenta años, de ahí la alusión a su avanzada edad en el verso siguiente.
[227] descaecido: ‘decaído’; laso: ‘cansado, débil’.
[228] godescas: ‘alegres, pero también lujosas’.
[229] El traje de romero, de peregrino, es muy sencillo, pues no debe lucir galas ni ostentar riqueza.
[230] Es difícil identificar a Juan Luis de Casanate. Se le emparenta con el Agustín de Casanate Rojas que firma el epigrama laudatorio que encabeza el Viaje.
[231] Para que resulte un endecasílabo, la forma seria debe editarse sin tilde, convirtiendo la palabra en bisílaba.
[232] Catón el Joven (95-46 a.C.), bisnieto de Catón el Viejo, muerto en Útica. Político romano famoso por su honestidad.
[233] Gaspar de Barrionuevo (1562-1624?), poeta y dramaturgo toledano, amigo de Lope de Vega; contador: ‘contable’, era cargo público. La edición príncipe, por error, trae Barionuevo en vez de Barrionuevo.
[234] Francisco de Rioja (1583-1659), eclesiástico y poeta sevillano, fue bibliotecario de Felipe IV y cronista de Castilla.
[235] Cristóbal de Mesa (1559-1633), poeta y traductor de origen juedoconverso.
[236] Jano es el dios de las puertas, los principios y los finales, y se le atribuye la creación de Génova.
[237] Referencia al curso y la desembocadura del Tíber, al oeste de Roma.
[238] Estrómbalo, por Estrómboli, una de las islas Eolias, en el Tirreno, que alberga el volcán del mismo nombre.
[239] La isla infame posiblemente sea Cerdeña, conocida desde la Antigüedad como tierra insalubre, de plantas venenosas y mala gente. Difícilmente puede ser Capri, como algunos estudiosos han propuesto, pues no concuerda con el trayecto aquí descrito.
[240] La nodriza, nutriz, de Eneas es Gaeta (Eneida, VII, 1 y ss.).
[241] En el original se escribe sin h, posiblemente se trata de un italianismo.
[242] Se trata de la colina de Polisipo, en Nápoles, donde se hallan las tumbas de Virgilio (Títiro, pastor protagonista de las Bucólicas) y Sannazaro (Sincero, joven protagonista de La Arcadia).
[243] Parténope es el nombre antiguo de Nápoles, tomado de la sirena homónima.
[244] Cita de los hermanos Bartolomé y Lupercio Leonardo de Argensola. Otros autores los llamaban los Lupercios en vez de los Leonardos. Estos acompañaron al conde de Lemos cuando tomó el gobierno de Nápoles, en 1610.
[245] Entiéndase ‘¡ataca, ataca!’.
[246] La edición príncipe trae ya si en vez de y así, pero la corrección es necesaria.
[247] Algunos editores han corregido podía por podrá, pero considero la enmienda innecesaria.
[248] Cervantes solicitó formar parte del séquito del conde de Lemos, pero no fue escogido por los hermanos Leonardo de Argensola. Le prometieron llamarlo a la primera oportunidad, pero nunca cumplieron con ello.
[249] alzarse: ‘retirarse de un juego cuando se va ganando, sin dar ocasión a los contrarios a desquitarse’.
[250] solio: ‘trono’.
[251] El doctor Mira de Amescua (1577-1644), poeta y dramaturgo que también se hallaba en Nápoles en esos años al servicio del conde de Lemos. De ahí que se diga que «también en sus puntos se retira», expresión que equivale al alzarse del verso 200.
[252] La edición príncipe trae y cese en vez de ícese; la corrección es necesaria.
[253] Escila y Caribdis son dos monstruos marinos mitológicos situados en los dos extremos de un estrecho (Odisea, XII); suelen situarse en el estrecho de Messina; temeroso: ‘temible’.
[254] La edición príncipe trae presuntosas; se corrige en presuntüosas y se marca el hiato, que, por lo demás, es natural, para obtener cómodamente las once sílabas del verso.
[255] Se refiere a Ulises (Odisea, V y VII).
[256] tasquen: ‘muerdan’.
[257] Creencia recogida desde antiguo en la literatura, como se ve, por ejemplo, en la historia de Jonás, que calma la tempestad al ser lanzado al mar.
[258] Antonio de Lofraso (h. 1540-h. 1600), poeta sardo famoso por la novela pastoril aquí referida Los diez libros de fortuna de amor (Barcelona, 1573).
[259] cómitre: ‘persona que en las galeras vigilaba y dirigía la boga y otras maniobras y a cuyo cargo estaba el castigo de remeros y forzados’; más genéricamente, también podía ser el ‘capitán de mar bajo las órdenes del almirante y a cuyo mando estaba la gente de su navío’.
[260] rebenque: ‘látigo de cuero o cáñamo embreado, con el cual se castigaba a los galeotes’.
[261] A orza: ‘maniobra en la que el buque navega poniendo la proa hacia la parte de donde viene el viento’.
[262] Se trata de una cadena de montañas del Epiro, hoy llamada Tschika o Jimarra. Horacio los llama infames porque atraían los rayos (Carmina, I, Oda III). También se citan en la Eneida (III-506-507).
[263] Entiéndase ‘los acostumbrados a las bebidas frías’.
[264] calzas: ‘especie de medias’; greguescos: ‘prenda de origen italiano semejante a unos calzones cortos, que se vestían sobre las calzas’.
[265] sopraestante: ‘inminente’, es italianismo.
[266] se somurmujan: ‘se sumergen’.
[267] La edición príncipe trae assí en vez de a sí; la corrección es necesaria.
[268] El texto de la príncipe trae la llevaron y no le llevaron; corrijo aunque no creo que se trate de una errata, sino de un cruce entre bajel y galera. En Cervantes son habituales los errores de concordancia por confusión entre dos antecedentes sinónimos.
[269] Corfú es una isla griega del mar Jónico, situada frente a la costa noroeste del Epiro griego; es la segunda mayor de las islas Jónicas; la isla inexpugnable es Malta, llamada así por su resistencia al sitio que sufrió en 1565 por parte del ejército otomano.
[270] Como ya se ha dicho, el rocín de Belorofonte (o Belerofonte) es Pegaso (véanse I, v. 32; II, v. 86).
[271] Hipocrene es una de las fuentes inspiradoras de la poesía. Se halla en el monte Helicón, el que se refiere desde el verso 307 (ya aparecida en II, v. 87).
[272] nos diviertes: ‘nos desvías, nos impides’.
[273] Apolo también retira los rayos de su cara en las Metamorfosis de Ovidio (II, 40-41).
[274] jubón: ‘vestidura que cubría desde los hombros hasta la cintura, ceñida y ajustada al cuerpo’.
[275] Las Horas son las doce hijas de Cronos.
[276] La hora menguada expresaba un mal momento, una desgracia.
[277] Juan de Arguijo (1567-1623), poeta y músico, natural de Sevilla. De familia acaudalada, llegó a ser veinticuatro en su ciudad natal. Fue mecenas de Lope de Vega, quien le dedicó sus Rimas.
[278] Luis Barahona de Soto (1548-1595), médico y poeta de corte italianizante muy alabado. Cervantes lo elogia y salva de la quema en el escrutinio de la biblioteca en el Quijote (I-VI).
[279] De nuevo aparecen las fuentes que propician el arte poético: Castalia y Helicona.
[280] La palabra majestoso es un italianismo.
[281] Los poetas de pensado son quienes escriben con atención y despacio; los de repente, los improvisadores orales.
[282] bríndez: ‘brindis’; caraos: ‘brindis para beber toda la copa’. Ambas son palabras de origen germánico; poner en bando: se ha entendido de dos maneras muy distintas: ‘se generalizó’ y ‘se desterró’. Opto por entender la segunda opción, pues el contexto indica que los poetas bebían con tal ansia que no perdían el tiempo en brindis.
[283] pedicoj: ‘a la pata coja’.
[284] Alonso de Ledesma (1562-1623), poeta considerado el iniciador del conceptismo. Algún estudioso lo ha postulado como autor del Quijote de Avellaneda.
[285] Se tienen muy pocos datos sobre Jerónimo de Castro; al parecer fue poeta y músico (de ahí, tal, que aparezca cantando un motete), y albacea del testamento de Vicente Espinel. Por la caracterización de Cervantes, deducimos que era poeta amoroso, pues el mirto era desde antiguo símbolo de la elegía amorosa (véase, por ejemplo, Ovidio, Amores, I, 1, vv. 27-30).
[286] Compárese con el verso 5 de la Noche serena de fray Luis de León: «en sueño y en olvido sepultado».
[287] Delio es otro de los nombres de Apolo.
[288] industria: ‘artificio’.
[289] La príncipe trae Alcinô, ô en vez de oo por errata.
[290] Comparación con tres jardines famosos por su belleza: los jardines Hespérides, donde Hércules superó uno de sus trabajos; los Pensiles, que refieren a los jardines colgantes de Babilonia, una de las Siete Maravillas del mundo antiguo; y los jardines de Alcínoo (aquí acentuado llano), rey de los feacios, cuya hermosura es celebrada por Homero, Virgilio, Ovidio…
[291] El mismo verso se repite en la Epístola a Mateo Vázquez, v. 201. Véase el poema [VIII]. También se halla en la Jornada I de El trato de Argel.
[292] La edición príncipe trae porque tuvo envidia en vez de porque tú, ¡oh Envidia!; la corrección es necesaria.
[293] Recuerdo de un verso de Juvenal, «Si natura negat, facit indignatio versum» (Sátiras, I, 79).
[294] De nuevo, véase Juvenal, «Qualemcumque potest: quales ego vel Cluvienus» (Sátiras, I, 80).
[295] El desterrado a Ponto es Ovidio.
[296] Se trata de una comedia de Cervantes perdida, de la que tenemos muy pocas noticias salvo que se cita de nuevo en la Adjunta al Parnaso y que se representó con éxito, pues aún se incluye en el repertorio del autor de comedias Juan Acacio en 1627.
[297] Alusión al polémico soneto con estrambote dedicado al túmulo de Felipe II en Sevilla. Véase, más abajo, poema XXVII.
[298] Véase, más abajo, el poema XXII.
[299] a pique: ‘a punto’.
[300] de a docena: ‘de poco valor’. La edición príncipe trae soneto en vez de sonetos, pero es necesario restituir el plural.
[301] Se refiere a la protagonista de La ilustre fregona («Raro humilde sujeto que levantas...»), y los dos dedicados a la criada Cristina en La entretenida, («Pluguiera a Dios que nunca aquí viniera», y «Que de un lacá-...», Jornada II).
[302] Filis es nombre común de amada poética; Silena es el nombre de la pastora que enamora a Lauso (álter ego de Cervantes) en La Galatea y el «Romance de los celos», citado unos versos arriba (IV, v. 41) y editado en la p. 242. En la edición príncipe, por errata, se lee Mifilena.
[303] La palabra fraude es femenina en la época.
[304] Timbreo es otro de los apelativos de Apolo.
[305] La edición príncipe trae granjealla en vez de granjeallo, posiblemente atraída por el ella del verso 80, pero la corrección es necesaria por rima y por significado (concuerda con «El bien» del verso 76).
[306] La edición príncipe trae, por errata, le estrecheza en vez de la estrecheza.
[307] El día de cutio es el ‘día de trabajo’.
[308] rozagante: ‘vistosa’.
[309] trafalmeja: ‘bulliciosa y de poco seso’.
[310] La sonaja y el morteruelo son dos instrumentos rústicos.
[311] tabanco: ‘puesto ambulante de comestibles’, y también ‘casa de juego’.
[312] coto: ‘medio palmo’.
[313] solecismos: ‘errores sintácticos, de lengua’.
[314] Baco es el dios del vino.
[315] el poleo: ‘la vanidad, la jactancia’.
[316] con pa y vereda: posiblemente, ‘con jolgorio, desenfreno’; el texto de la príncipe trae compa y vereda, y así se ha editado varias veces; el mastranzo y la juncia son plantas aromáticas, pero la juncia también significa ‘bravata’. Véase el pasaje paralelo de La Arcadia de Lope de Vega: «ellas con mastranzo y juncia / ellos con tejos y lauros».
[317] La edición príncipe trae la ala en vez de la gala; la corrección es necesaria.
[318] bureo: ‘entretenimiento’.
[319] El texto de la príncipe lee pueda en vez de puede; la corrección es necesaria.
[320] Sabea o Saba, reino conocido por sus muchos y buenos olores.
[321] Tíbar es un río de África, famoso por albergar oro; Hibla es un monte y ciudad de Sicilia, cuya miel tenía mucho prestigio. La edición príncipe trae Tíber y no Tíbar, pero la enmienda restituye la lectura simplificadora.
[322] ¡Aquí del rey!: expresión usada para pedir favor o auxilio.
[323] los de la carda: ‘los que no llevan una vida recomendable’, pero, también, ‘los del oficio, los poetas’.
[324] Lanfusa es la madre del caballero Ferraù en el Orlando furioso de Ariosto.
[325] bonete: ‘especie de gorra, comúnmente de cuatro picos, usada por los eclesiásticos y seminaristas, y antiguamente por los colegiales y graduados’; muceta: ‘esclavina que cubre el pecho y la espalda, y que, abotonada por delante, usan como señal de su dignidad los prelados, doctores, licenciados y ciertos eclesiásticos’.
[326] behetría: ‘confusión, desorden’.
[327] porfía: ‘tenacidad’.
[328] cayan: ‘caigan’; no nos cayan significa ‘no se enteren’.
[329] Francisco Sánchez de Villanueva (1581-1658), poeta y predicador de Felipe III y de Felipe IV.
[330] Hortensio Félix Paravicino y Arteaga (1580-1633), religioso de la Orden de la Santísima Trinidad y poeta culterano. La edición príncipe lee el maestro Orense, no Hortensio, pero la corrección parece plausible.
[331] Fray Juan Bautista Capataz, trinitario, padre presentado y poeta. Aprobó, en 1612, las Novelas ejemplares de Cervantes.
[332] Andrés del Pozo era sacerdote y poeta, natural de Granada.
[333] Fray Alonso Remón (1561-1632), de la Orden de la Merced, dramaturgo y prosista. Se hizo famoso como orador sagrado.
[334] los brazos de Dafne: ‘el laurel’.
[335] El otro se ha identificado con fray Gabriel Téllez, ‘Tirso de Molina’, aunque es más probable que se trate de una referencia a Bernardo de Sandoval y Rojas, Inquisidor general y cardenal arzobispo de Toledo, quien fue erudito y mecenas.
[336] ¡trapa, trapa, aparta, afuera, afuera!: ‘¡atención, apartaos, haced sitio!’.
[337] postillón: ‘mozo a caballo’.
[338] a la ligera: ‘con prisa, sin reflexión’; pero también ‘con menos comodidad y compañía de la que corresponde’.
[339] El texto de la príncipe trae pregenero por errata.
[340] Posiblemente se trate de don Sancho Martínez de Leiva, primer conde de Baños y señor de Leiva, que fue maestre de campo en 1588 y militó en los Países Bajos, Francia y otros lugares, llegando a ser capitán general de la flota de Nápoles y caballero de la Orden de Santiago. Fue poeta ocasional.
[341] Joao Mendes de Vasconcelos, poeta portugués que escribió un largo poema épico, Liga deshecha, por la expulsión de los moriscos de los reinos de España, publicado en 1612.
[342] bayo: ‘de color amarillento’.
[343] Es difícil establecer quién es este poeta soldado, pero varios investigadores apuntan a un homónimo que firma varios poemas en el Cancionero de la Academia de los Nocturnos.
[344] rota: ‘derrota’.
[345] tomó luego reseña: ‘pasó revista de inmediato’.
[346] Don Fernando de Lodeña el Mozo, soldado poeta, de la Orden de Santiago, firma uno de los poemas preliminares de las Novelas ejemplares.
[347] El licenciado Juan de Vergara (1545-1620), médico y poeta, que llegó a ser cirujano de cámara de Felipe II y Felipe III. También es alabado en el Canto de Calíope.
[348] Algunos editores corrigen este ilustre por y lustre para evitar tres versos con la misma rima (392, 394 y 396). La lectura de la príncipe, sin embargo, es correcta y hay casos paralelos en Cervantes, por lo que mantenemos el texto original. Esculapio y Apolo son los dioses de la medicina y la poesía, respectivamente.
[349] bien partido: ‘generoso’. Alude a San Martín, quien compartió su capa con un pobre.
[350] El licenciado Juan Antonio de Herrera Temiño (1583-1634), poeta y abogado. Entre otros, desempeñó el cargo de abogado de los negocios de la encomienda mayor de Castilla de la Orden de Santiago.
[351] puso en fil: ‘equilibró, niveló’.
[352] El licenciado Sebastián de Nieva Calvo, poeta autor del poema sacro La mejor mujer, madre y Virgen, sus excelencias, vida y grandezas, repartidas por sus fiestas todas (Madrid, 1625), cuyo último canto versa sobre la batalla de Lepanto. Participó en la Justa Poética de San Isidro recopilada por Lope de Vega en 1620. El maestro Valdivielso (aquí Valdivieso), conocido poeta y capellán de la catedral de Toledo, amigo de Cervantes y Lope de Vega, redactó las aprobaciones de la segunda parte del Quijote, las Comedias y entremeses, este Viaje y el Persiles. Véase, más arriba, la nota 9 de los preliminares.
[353] No tenemos noticia de Juan de Argote y de Gamboa.
[354] Se tienen pocos datos sobre Diego Abarca. Podría ser el poeta que firma una décima en los preliminares de la Historia de Nuevo México (Alcalá, 1610) de Gaspar Pérez de Villagrá.
[355] Diego Jiménez de Enciso (1585-1634), poeta y dramaturgo sevillano, conocido por la comedia El príncipe don Carlos.
[356] Posiblemente se refiere al contador Juan López del Valle, poeta que firma un soneto dedicado «a la grandeza del Duque de Béjar», al frente de las Flores de poetas ilustres de Pedro de Espinosa.
[357] Francisco de Pamonés, poeta sevillano conocido por su gusto por los juegos métricos, de ahí que a continuación se diga que «pone sus pies (‘unidad métrica’) por do ninguno».
[358] lejas: ‘lejanas’; incultas: ‘agrestes, poco transitadas’.
[359] Juan Bateo, o John Bath, poeta irlandés que firma unos dísticos latinos al frente del Pentecontarchus de Lorenzo Ramírez de Prado, y un epigrama, también latino, al principio del poema Liga deshecha, de Juan Méndez de Vasconcelos.
[360] Referencia a Artajerjes II, rey de Persia (404-358 a.C.), a quien los griegos dieron el sobrenombre de Memnón, por su gran memoria. Lo cuenta Plutarco en sus Vidas paralelas (VII).
[361] Pedro Mantuano (cambió su apellido original, de Castro, por este), clérigo y poeta malagueño, que fue secretario del condestable de Castilla don Juan Fernández de Velasco (en 1613), y después (en 1616 y 1617) del conde de Lemos. Escribió las famosas Advertencias a la Historia de Juan de Mariana (Madrid, 1613).
[362] El abad don Antonio de Maluenda, eclesiástico, poeta y músico burgalés, fue conocido como el «Homero de Burgos».
[363] El texto de la príncipe lee, por errata, la la vitoria en vez de la vitoria.
[364] Antonio de Vargas Gentil, poeta genovés que participó con un soneto a la Justa Poética de San Isidro (1620).
[365] Alusión al licenciado Pedro de Oña (1570-1643), teólogo y poeta chileno, autor de la Primera parte de Arauco domado (1596), poema épico inspirado en la Araucana de Alonso de Ercilla.
[366] La príncipe trae así mismo en vez de a sí mismo.
[367] En efecto, salma y tonelada son sinónimos.
[368] Calicut y Goa eran dos de los puertos más importantes para el comercio con la India, controlado por Portugal.
[369] Tomole ... alferecía: ‘le dio un patatús’.
[370] vaso: ‘barco’.
[371] adárame: ‘pizca’, es decir, que ‘la voz no tenía ni una pizca de tierna ni suave’.
[372] magancés: ‘traidor’.
[373] La príncipe trae la errata mentrioso que se restituye aquí en mentiroso.
[374] bárbaro: ‘inculto, grosero’.
[375] Bernardo de la Vega, autor andaluz conocido por la novela bucólica El Pastor de Iberia (1591).
[376] Alusión a la Primera parte de las Ninfas y Pastores de Henares (1587), escrita por Bernardo González de Bobadilla. Esta obra como la anterior se citan juntas en el escrutinio de la biblioteca de don Quijote, y ambas son condenadas (Quijote, I-VI) .
[377] de torbellino: ‘improvisados’.
[378] salir al rostro: ‘avergonzar’.
[379] acedo: ‘áspero, desapacible’.
[380] Cilenio, como se ha visto ya, es Mercurio.
[381] Compárese «Tu formasti me, et posuisti super me manum tuam» (Salmos, 138, 5) y «Sub umbra alarum tuarum proteges me» (Salmos, 16, 8).
[382] Compárese, de nuevo, «Fac mecum signum in bono et videant qui oderunt me, et confundantur» (Salmos, 85, 17) y «Pone me ut signaculum super cor tuum ut signaculum super brachium tuum» (Cantar de los cantares, 8, 6).
[383] hizo de ojo: ‘guiñó el ojo’; dio del pie: ‘removió’.
[384] buco: ‘concavidad de una nave’.
[385] menudean: ‘se mueven apresuradamente, se agitan’.
[386] Compás de Sevilla: lugar de reunión de la picaresca, entrada a la mancebía de Sevilla.
[387] ovas: ‘tipo de algas’.
[388] nume: ‘deidad’.
[389] defendida: ‘prohibida’.
[390] granuja: ‘uva desgranada, separada del racimo’.
[391] aprisco: ‘lugar donde guarecerse’.
[392] morsillón: ‘mejillón’.
[393] rejo: ‘vigor’.
[394] denegrido: ‘oscuro, color que tira a negro’.
[395] Torcuato Tasso (1544-1595), poeta italiano conocido especialmente por su poema épico Jerusalén liberada, compuesta en octavas reales.
[396] descerrajad: ‘abrid la cerradura’; almario: ‘lugar donde se guarda el alma’.
[397] ratero: ‘bajo, vil’.
[398] Acidalia es sobrenombre de Venus y significa ‘la que excita el deseo’.
[399] pardilla raja: ‘tejido tosco y grueso, de color pardillo’.
[400] al uso: ‘a la moda’.
[401] le dice muy bien: ‘le sienta muy bien’.
[402] Según la mitología, Adonis murió a causa del ataque de un jabalí.
[403] maco: ‘astuto’, en germanía.
[404] se respetaron: ‘se saludaron respetuosamente’.
[405] zalemas: ‘reverencias’.
[406] Ciprinida, de Chipre, lugar en que nació Venus y donde tuvo su primer templo.
[407] verdugado: ‘vestidura que las mujeres usaban debajo de las sayas para ahuecarlas’.
[408] Quincoces es nombre burlesco inventado por Cervantes.
[409] Pafo: ‘Pafos, en Chipre’.
[410] gafo: ‘tullido, paralítico’.
[411] linfas: ‘aguas’; garrafo: ‘garrafa’.
[412] rogo: ‘hoguera, pira’.
[413] cedo: ‘presto’.
[414] no sedïenta: porque está tragando mucha agua.
[415] Nido (Gnido) es la ciudad donde Venus tenía su templo más famoso.
[416] cuajado: ‘lleno’.
[417] odres: ‘cueros cosidos y empegados por todas partes menos por un extremo que sirven para contener líquidos, como vino o aceite’.
[418] La transformación piadosa de Venus, que convierte a los poetas en calabazas y odres para que floten, y así salvarlos, no deja de ser jocosa, pues calabaza también se dice de ‘las personas ineptas e ignorantes’ y odres de ‘los borrachos’.
[419] desde aparte: ‘desde lejos’.
[420] vejón: ‘viejo’.
[421] esguince: ‘ademán hecho con el cuerpo, hurtándolo y torciéndolo para evitar un golpe o una caída’.
[422] Bóreas es el frío viento del norte.
[423] con ... simboliza: ‘se parece’; la familia de los Cerdas es, jocosamente, ‘la de los cerdos’.
[424] poetas zarabandos: ‘los que componen coplas para la zarabanda y otros bailes’.
[425] seta: ‘secta’.
[426] se comiden: ‘se ofrecen, se disponen’.
[427] Compárese este verso con el último de la Elegía II de Garcilaso: «y así diverso entre contrarios muero».
[428] Los poetas cernícalos (‘ave de rapiña’) lagartijeros (‘que se arrastran’) no pueden gozar de los privilegios de los gavilanes (‘ave rapaz’) no pecheros (‘aristócratas, pues no pechan, no pagan impuestos’).
[429] en cuezo: ‘con poca ropa’.
[430] Tenemos pocos datos sobre Lorenzo de Mendoza y Figueroa, pero conservamos una composición suya al frente de La hermosura de Angélica de Lope de Vega.
[431] Pedro Juan de Rejaule y Toledo, abogado, poeta y dramaturgo valenciano. Al parecer, es el mismo poeta que, con el seudónimo de Ricardo de Turia, escribió el Apologético de las comedias españolas (de ahí lo de «defensor de la poesía» del verso 282).
[432] Carecemos de datos sobre el poeta Juan de Solís, aunque firma uno de los poemas de los preliminares de las Novelas ejemplares y de la Fama póstuma de Montalbán.
[433] Juan de Carvajal posiblemente se refiera a un médico poeta que fue catedrático de la Universidad de Sevilla y del que se conservan varios tratados de medicina.
[434] Gabriel Lobo Laso de la Vega (1559-1615), poeta, dramaturgo e historiador madrileño. Carecemos de noticias sobre Bartolomé de Mola.
[435] Posible referencia al licenciado Diego de Silva, de quien sabemos que colaboró en las fiestas que la imperial ciudad de Toledo hizo al nacimiento de Felipe IV y las que Madrid celebró con motivo de la canonización de san Isidro.
[436] La edición príncipe trae accidental en vez de occidental; la corrección es necesaria.
[437] Morfeo: el dios del sueño.
[438] El original trae nustro en vez de nuestro.
[439] El original trae tercera en vez de primera, pero la enmienda es necesaria y así la han postulado editores anteriores.
[440] dentera: aquí, ‘sentir hambre o envidia al ver comer a otro’, en contraposición con ahíto: ‘saciado’ o ‘empachado’.
[441] Es decir, ‘que no es bárbaro’.
[442] premisas: ‘esperanzas’.
[443] a lo discreto: ‘a discreción’.
[444] Sabea y Pancaya, lugares conocidos por sus muchos y buenos olores (véase, IV, v. 205).
[445] Se inicia aquí una reflexión sobre la verosimilitud, una de las principales y constantes preocupaciones teóricas de Cervantes. Véase, más abajo, la poesía suelta número IX.
[446] El original trae disparidd en vez de disparidad, por errata.
[447] El original trae abierras en vez de abiertas.
[448] grita: ‘gritería’.
[449] colmo : ‘colmado’.
[450] doncella: ‘virgen’.
[451] El original trae ningunos en vez de ninguno; la métrica impone la corrección.
[452] Véase el fragmento del prólogo a Los trabajos de Persiles y Sigismunda: «Esta enfermedad es de hidropesía, que no la sanará toda el agua del mar Océano que dulcemente se bebiese». Esta enfermedad, posiblemente diabetes, es la causa más probable de la muerte de Cervantes.
[453] leda: ‘alegre’.
[454] Referencia a tres de las siete maravillas del mundo antiguo: el Mausoleo de Halicarnaso (el sepulcro de la viuda bella), el Coloso de Rodas y el Faro de Alejandría (la lanterna que sirvió de estrella).
[455] lego: ‘no cultivado’.
[456] El original trae murio en vez de Mucio; se trata de una banalización.
[457] Referencia a Cayo Mucio Escévola, quien, según cuentan Plutarco, Tito Livio y muchos otros, es uno de los patricios romanos que se enfrentó al rey etrusco Porsena. Prendido por él, Mucio pone su mano sobre un brasero como acto de valentía, por el que es perdonado y liberado.
[458] Alusión a la leyenda del soldado romano Marco Curcio, quien se lanzó montado en su caballo a un agujero que se había abierto en el Foro y que según el Oráculo solo se cerraría tirando en él lo más valioso de Roma. Cayo Mucio Escévola y Marco Curcio aparecen juntos también en el Quijote (II-VIII).
[459] La diosa grecorromana Ocasión se representaba como una mujer de larga cabellera cubriéndole el rostro, pero calva por detrás, colocada sobre una rueda en movimiento. Esta diosa representaba las buenas ocasiones perdidas ya que, si pasaba, lo haría rápidamente y no se la podría asir siquiera por los cabellos, ausentes en la nuca.
[460] ministrándola: ‘administrándole’, con laísmo.
[461] Es imagen clásica desde Virgilio (Égloga III, v. 93), que se halla también en Petrarca , fray Luis...
[462] El original trae preve en vez de pruebe.
[463] Compárense los versos de fray Luis de León «Despiértenme las aves / con su cantar sabroso no aprendido» (Vida retirada, Oda I, vv. 31-32).
[464] Alusión a la fama de los toledanos de hablar un buen castellano.
[465] Recuerdo de uno de los sonetos del Canzoniere de Petrarca que empieza «Spirto felice che sì dolcemente…».
[466] Para obtener las once sílabas del verso debe realizarse dialefa entre la y hermosa.
[467] calor: ‘aliento’.
[468] embaidora: ‘embaucadora’.
[469] En efecto, la burba era un tipo de moneda de cobre, pequeña, que se acuñaba en Argel.
[470] pífaro: ‘flautín de tono muy agudo, usado en las bandas militares’.
[471] Entiéndase ‘una merced aquí te pido’.
[472] malmirada: ‘desconsiderada’.
[473] descoge: ‘despliega’.
[474] La anómala disposición tipográfica del folio 54r (vv. 31-51), que está compuesto en un cuerpo de letra mayor (de los versos 37 a 51) y contiene siete tercetos en vez de los ocho habituales, ha llevado a pensar que aquí falta una estrofa, aunque la rima encadenada no se rompe.
[475] Algunos editores han identificado este marqués con el de Montesclaros, don Juan de Mendoza y Luna.
[476] industria: ‘artificio’.
[477] Jerónimo de Mora, poeta y pintor que perteneció a la Academia de los Nocturnos de Valencia.
[478] jineta: ‘lanza corta’, distintivo de los capitanes de infantería.
[479] Posiblemente se refiere a Fernán Ruiz de Biedma, poeta del que sabemos que participó en la Justa poética de San Isidro de 1620.
[480] Gaspar de Ávila, poeta y dramaturgo murciano. Lo recuerda Lope de Vega en el Laurel de Apolo.
[481] Referencia a Juan de Icíar, famoso calígrafo y matemático que había escrito, entre otras obras, una Ortografía práctica (1548), y un Nuevo estilo de escribir cartas mensajeras (1552); Sincero puede aludir a Gabriel López Maldonado, quien utilizaba ese pseudónimo en la Academia de los Nocturnos, o a Sannazaro, que ya ha sido llamado así más arriba (III, v. 151).
[482] Juan de Mestanza de Ribera, poeta ya elogiado en el Canto de Calíope.
[483] Alusión a Baltasar de Cepeda, poeta de quien se conservan composiciones en las Flores de poetas ilustres de Espinosa. La referencia a Mejía no está clara. Como posibilidades, otros editores han propuesto a Diego Mejía, que había escrito la Primera parte del Parnaso antártico, y al dramaturgo Luis Mejía de la Cerda, autor de la tragedia de Doña Inés de Castro y del auto sacramental El juego del hombre.
[484] Tampoco resulta clara la referencia a Galindo: podría tratarse de Martín Galindo, poeta mencionado por el duque de Estrada en sus Comentarios del desengañado; o Gregorio Galindo, preceptor de gramática, del cual hay versos en el libro de Joaquín Romero de Cepeda Conserva espiritual (1588).
[485] Pindo es un macizo montañoso del Epiro, cordillera del norte de Grecia. A menudo era llamado en la Antigüedad la «columna vertebral de Grecia». Se trata de un monte poético, como el Parnaso. Véase II, vv. 152 y 260.
[486] Fernando Correa de la Cerda, militar y abogado portugués que escribió numerosas poesías entre las que se cuentan dos poemas heroicos: Imperio lusitano y el Pastor de Guadalupe.
[487] Francisco Rodrigues Lobo, poeta portugués autor de varias novelas pastoriles.
[488] Antonio de Ataíde, primer conde de Castro Dayro, fue militar y diplomático, del cual se conservan poesías manuscritas.
[489] Arbolánchez, quien aparecerá de nuevo en el v. 182, es en realidad Jerónimo Arbolanche, poeta navarro autor de Los nueve libros de las Habidas (1566).
[490] La palabra veinte no rima con frente y gente.
[491] No se acentúa transfuga por mantener el buen ritmo del verso.
[492] churrullero: ‘charlatán’.
[493] Debe conservarse el diptongo en ‘serian’, y no serían, para obtener las once sílabas del verso.
[494] La edición príncipe trae, por errata, Lafraso en vez de Lofraso (véase III, v. 247 y ss.).
[495] madrigados: ‘expertos’.
[496] riza: ‘destrozo’.
[497] concento: ‘canto acordado y armonioso de diversas voces’. Resulta paradójico llamarlo, a continuación, confuso.
[498] hondas de estallo: ‘hondas de estallido, que crujen cuando arrojan la piedra’.
[499] Ya se ha hecho referencia a este autor en II, v. 155.
[500] Cilenio es Mercurio.
[501] Nueva referencia a Jerónimo Arbolanche, aparecido en el v. 93, y a su obra Los nueve libros de las Habidas (1566); el término breviario se refiere a la pesadez de la obra, no a su tamaño.
[502] Posible referencia a las Coplas del Provincial o a las de «¡Ay, Panadera!».
[503] Posible alusión a Francisco Pedrosa y Ávila, poeta que participó en la Canonización de San Ignacio de Loyola y San Francisco Javier, en Madrid, 1622.
[504] El libro ya ha sido aludido en IV, v. 506.
[505] turbamulta: ‘multitud confusa y desordenada’.
[506] Gregorio de Angulo, regidor de Toledo y regente de Nápoles; mantuvo amistad con varios autores de la época, como Lope de Vega, quien lo alaba en el Laurel de Apolo. Sabemos que colaboró en las fiestas celebradas en Toledo con motivo del nacimiento de Felipe IV.
[507] La edición príncipe trae cañalla en vez de canalla. El licenciado Pedro Soto de Rojas, granadino, abogado, sacerdote y poeta. Perteneció a la Academia Selvaje y a la del conde de Saldaña.
[508] cierran: ‘acometen’.
[509] Haldeando: ‘moviendo las faldas, por andar deprisa’.
[510] La pícara Justina (Medina del Campo, 1605) es una novela picaresca firmada bajo el nombre de El Licenciado Francisco de Úbeda, natural de Toledo.
[511] culebrina: ‘antigua pieza de artillería, larga y de poco calibre’.
[512] Tomás Gracián Dantisco, elogiado también en el Canto de Calíope, era el hermano menor del autor del Galaeto español, Lucas Gracián Dantisco.
[513] Poeta ya citado en II, v. 199 y ss.
[514] envión: ‘empujón’.
[515] Según algunos editores, el andaluz mozuelo podría ser Alonso Álvarez de Soria, que murió ahorcado.
[516] Lupercio Leonardo de Argensola tenía muchos sonetos que podrían referirse aquí.
[517] El magno cordobés es Luis de Góngora.
[518] balas enramadas: ‘las que están unidas por una barra de hierro’.
[519] La edición príncipe trae Canaon en vez de canción.
[520] La edición príncipe trae Petrarte en vez de petarte (‘petrado’).
[521] Primer verso, muy famoso e imitado, de un soneto de Garcilaso.
[522] Entiéndase ‘de Garcilaso de la Vega o de Juan de Timoneda’, es decir, ‘partidario de la poesía italianizante o de los metros españoles tradicionales’.
[523] La edición príncipe trae con batiente en vez de combatiente.
[524] al peso: ‘al nivel’.
[525] Pedro Mantuano ha aparecido antes, en IV, v. 427.
[526] Julián de Almendáriz, autor salmantino. Rojas Villandrando lo alaba en su Loa de la comedia. Concurrió a las fiestas toledanas por el nacimiento de Felipe IV (1605).
[527] Delio, como ya se ha visto, es uno de los nombres de Apolo.
[528] por las rucias que peino: ‘por las barbas canosas que peino’, es juramento habitual; me corro: ‘me avergüenzo’.
[529] Hesperia: aquí, ‘España’.
[530] de llano: ‘con la parte llana de la espada’, pero también, ‘sencillo’; de corte: ‘con el filo de la espada’.
[531] Alude Cervantes a la oscuridad de la Fábula de Polifemo y Galatea de Góngora.
[532] interrotos: ‘entrecortados’. Cervantes utiliza este adjetivo, por ejemplo, en Quijote (II-IXL).
[533] cabrahígo: ‘higuera silvestre’.
[534] Recuerdo de la historia de Biblis, que murió de tanto llorar y se convirtió en fuente, víctima del amor incestuoso que sentía por su hermano Cauno. Lo cuenta Ovidio en sus Metamorfosis, IX.
[535] quejigo: ‘tipo de roble’.
[536] virgen por la espada: ‘que no ha usado la espada’, es decir, ‘cobarde’.
[537] Posible alusión a fray Bartolomé de Segura, benedictino en el convento de Valladolid, alabado por Lope de Vega en el Laurel de Apolo. Escribió en redondillas la Amazona cristiana: Vida de la beata Madre Teresa de Jesús (1619), dedicada a la condesa de Lemos.
[538] Tagarete: arroyo de Sevilla conocido por sus aguas sucias y malolientes.
[539] ¡ay me!: ‘¡ay de mí!’.
[540] Como el arroyo Tagarete recién aludido, el río Zapardiel, afluente del Duero, también tenía fama de sucio.
[541] quiete: ‘aquiete’.
[542] En efecto, Juan de Timoneda editó el teatro de Lope de Rueda, quien fue uno de los primeros actores profesionales de España y gran dramaturgo.
[543] Parece título inventado.
[544] El original trae guarde en vez de guarte (‘protégete’). Es alusión a La Araucana (XXIX), de Alonso de Ercilla: «¡Guarte, Rengo, que baja, guarda, guarda, / con gran rigor y furia acelerada / el golpe de la mano más gallarda».
[545] bastarda: ‘trompeta de sonido muy fuerte usada principalmente en la guerra’.
[546] Caístro es un río de Lidia que desemboca en el Egeo.
[547] El Esgueva, como antes el Tagarete y el Zapardiel (VII, v. 353 y ss.), es un río que nace en la provincia de Burgos y que era conocido por sus sucias aguas.
[548] Timbreo es otro de los apelativos de Apolo ya aparecidos (IV, v. 69).
[549] La gallarda es un ‘tipo de baile, muy airoso’, que se bailaba con el sombrero en la mano.
[550] segur: ‘hacha grande’.
[551] El original trae corodas en vez de coronadas. El árbol siempre verde es el laurel.
[552] El original trae Euterpi en vez de Euterpe.
[553] Son estas las nueve musas.
[554] La edición príncipe trae del que dice propios los ajenos en vez de aquel que dice propios los ajenos; la enmienda, propuesta por editores anteriores, recupera las once sílabas necesarias del verso.
[555] Expresión de origen bíblico (Salmos, 144, 15) que tiene también un uso jurídico.
[556] tabaque: ‘cesto de mimbre’.
[557] Parténope, como ya se ha visto (III, v. 158) es Nápoles. Tres de los poetas que se hallaban en esa ciudad y que podrían corresponder con el texto son Quevedo y los dos hermanos Leonardo de Argensola.
[558] Los poetas divinos por excelencia son Francisco de Figueroa, Francisco de Aldana y Fernando de Herrera.
[559] Cervantes había llamado a Lope, en el prólogo a sus Comedias y entremeses, precisamente monstruo de la naturaleza; aquí la expresión se usa para caracterizar a la Envidia, lo que ha hecho pensar a varios investigadores que se trata de una pulla contra ese autor.
[560] Varios editores han enmendado este verso (estimando este premio..., estimando el tal premio...), para contar once sílabas, pero esto se puede conseguir realizando una dialefa entre estimando y el.
[561] El original trae Billadoro en vez de Brilladoro. Este es el caballo de Roldán (el señor de Anglante) en el Orlando furioso de Ariosto.
[562] pica: ‘medida equivalente a 14 pies, es decir, 3,89 metros’.
[563] bel: ‘bello’.
[564] columbina: ‘rojo amoratado de algunos granates’.
[565] corvetas: ‘movimientos que se enseñan al caballo, haciéndolo andar con los brazos en el aire’.
[566] barjuletas: ‘bolsas grandes de tela o de cuero, cerradas con una cubierta, que suelen llevar a la espalda los caminantes, con ropa, utensilios o enseres’.
[567] El original trae hacían en vez de hacía.
[568] El original trae volumbres en vez de vislumbres.
[569] Urania es la musa de la astronomía y la astrología.
[570] se va: ‘se descompone el cuerpo’.
[571] El original trae vagido en vez de váguido.
[572] El original trae espectada en vez de respectada.
[573] beleño: planta como de un metro de altura, con hojas anchas, largas, hendidas y vellosas, flores a lo largo de los tallos, amarillas por encima y rojas por debajo, y fruto capsular con muchas semillas pequeñas, redondas y amarillentas. Toda la planta, especialmente la raíz, es narcótica. Por ello se la asocia con Morfeo.
[574] hopo: ‘mechón de pelo’.
[575] vide: arcaísmo que significa ‘vi’.
[576] pálpebras: ‘párpados’.
[577] Algunos estudiosos opinan que Cervantes tuvo realmente un hijo en Nápoles, el cual se recuerda aquí.
[578] Se trata de don Juan de Tasis, conde de Villamediana, ya aparecido en II, v. 265.
[579] las remite a haberes, aunque concuerda con el obras anterior; son numerosos los casos de concordancias difíciles en Cervantes.
[580] en fil: ‘equilibrado’.
[581] himineo: ‘himeneo, boda’; se alude al casamiento de Luis XIII de Francia con la infanta Ana de Austria, que se acordó en firme en 1612, y que se festejó, ese mismo año, en Nápoles.
[582] El original trae avergenza en vez de avergüenza.
[583] El conde de Lemos, entonces, virrey de Nápoles.
[584] Se trata en realidad del duca della Nocara, Donato Antonio di Loffredo, joven muy diestro en el arte de tornear, y no del duque de Nocera (Francisco Carafa).
[585] Alusión a don Antonio de Mendoza, consejero de Estado de Su Magestad y castellano de la fortaleza de San Telmo.
[586] Arrociolo es Troiano Caracciolo, caballero de antigua y noble familia napolitana.
[587] Juan de Oquina, tesorero del virrey de Nápoles, quien se encargó de redactar la Relación de las fiestas que el Excelentísimo señor conde de Lemos, virrey y capitán General del reino de Nápoles ordenó se hiciesen a los felices casamientos de los serenísimos Príncipes de España, con el rey e infanta de Francia, en trece de mayo de mil y seiscientos y doce año (Madrid, 1612).
[588] El duque de Pastrana, embajador de España en Francia.
[589] Alejandro Magno era conocido por su generosidad.
[590] me quitó el sombrero: ‘se quitó el sombrero ante mí’.
[591] Posible alusión a Alonso de Acevedo, canónigo de la Santa Iglesia de Plasencia y autor del poema Creación del Mundo (1615), dedicado a don Francisco de Castro, hermano del conde de Lemos.
[592] La edición príncipe trae anchio en vez de anch’io; zenoese: ‘genovés’; tusco: ‘toscano’.
[593] Luis Vélez de Guevara (1579-1644), dramaturgo y novelista, autor de El diablo cojuelo, ya ha aparecido en II, v. 167.
[594] Pedro de Morales, poeta cómico alabado también por Lope de Vega y Agustín de Rojas, ya ha aparecido en II, v. 145.
[595] Lucas Justiniano, dramaturgo y poeta, autor de la comedia Los ojos del cielo y martirio de Santa Lucía.
[596] cúyo: ‘de quién era’.
[597] al del Layo: posiblemente, ‘al del carácter agrio’; algunos editores han enmendado al soslayo.
[598] zalemas: ‘reverencias o cortesías humildes en muestra de sumisión’.
[599] El original trae disimulado en vez de disimulo.
[600] En un pasaje de la Biblia se cuenta cómo David huyó de Aquís fingiendo estar loco (I Samuel, 21, 12 y 13). La edición príncipe trae finguiendo en vez de fingiendo.
[601] buido: ‘afilado’.
[602] secreta: ‘escondida’; almarada: ‘puñal agudo de tres aristas y sin corte’.
[603] El original trae cuelliergido en vez de cuellierguido.
[604] reparándome: ‘recuperándome’.
[605] gorgoranes: ‘sedas’.
[606] darse de puñadas: ‘darse de puñetazos’.
[607] La edición príncipe trae espritus en vez de espíritus.
[608] Podría haber aquí un juego de palabras que no resulta claro, más cuando la edición príncipe trae el primer Partos en mayúscula, o una repetición irónica. Algunos editores han enmendado los frutos de los partos... o los partos de los ingenios...
[609] La edición príncipe trae déjeme en vez de dígame.
[610] descuentos: ‘contrapartidas’.
[611] coliseo: ‘teatro’.
[612] La comedia La confusa ya se ha citado en IV, v. 16.
[613] autores: ‘empresarios teatrales’.
[614] cubierta: ‘sobre’.
[615] sobrescrito: ‘dirección’.
[616] Las Piérides, hijas de Píero, eran nueve doncellas dotadas especialmente para la poesía y el canto, las cuales decidieron competir con las musas. No consiguieron ganar, y fueron convertidas en hurracas (véase Ovidio, Metamorfosis, V).
[617] Véase Ovidio, Metamorfosis, III.
[618] El segundo trabajo de Hércules fue acabar con el monstruo marino llamado Hidra, que poseía la virtud de regenerar dos cabezas por cada una que perdía o le era amputada.
[619] Véase Ovidio, Metamorfosis, IV.
[620] La edición príncipe trae Pancratio en vez de Pancracio.
[621] El refrán completo es: «Cuando nace la escoba, nace el asno que la roya», es decir, ‘nadie es tan malo que no encuentre alguien igual o que lo aprecie’.
[622] gusarapos: ‘animal de pequeño tamaño, con forma de gusano, que se cría en un líquido’.
[1] El poema se conserva en el manuscrito 373 de la Biblioteca Nacional de París, donde aparece bajo el título «Soneto de Miguel de Cervantes a la reina doña Isabel 2ª». En efecto, está dedicado a Isabel de Valois (1546-1568), tercera esposa de Felipe II, hija de Enrique II de Francia y Catalina de Médicis. Su matrimonio había firmado la paz entre España y Francia y al parecer brindó a Felipe II los años más felices de su vida. Se trata del primer poema que conocemos de Cervantes y se incluyó entre los que se realizaron para celebrar el nacimiento de la infanta Catalina Micaela, segunda hija del matrimonio real, en octubre de 1567.
[2] Este soneto y las tres composiciones siguientes se publicaron en la Historia y relación verdadera de la enfermedad, felicísimo tránsito, y suntuosas exequias fúnebres de la Serenísima Reina de España doña Isabel de Valois, nuestra Señora... Compuesto y ordenado por el Maestro Juan López, Catedrático del Estudio de esta villa de Madrid (Madrid, Pierres Cosin, 1569), en los folios 145-146, 148-149 y 157-162. El Ayuntamiento de Madrid había designado a López de Hoyos, maestro de Cervantes, para componer los epitafios, alegorías, jeroglíficos e historias que habían de colocarse en la iglesia de las Descalzas Reales para celebrar las exequias que hizo la Villa el 24 de octubre de 1568 por la reina doña Isabel de Valois, que había fallecido el día 3 del mismo mes, a los veintidós años de edad. Como recuerda Jorge García, «López de Hoyos le pidió a Cervantes cuatro poemas para engrosar un volumen de una relación publicada en la Corte y lo llama su “caro y amado discípulo”. [...] El cariño con que trata López de Hoyos al joven Cervantes implica familiaridad y sobre todo que nuestro joven era un estudiante adelantado: se le piden poemas para una Relación oficial por las exequias de la Reina por parte de un personaje bien relacionado y valorado en la Corte y con amigos en el claustro complutense» (Cervantes. La figura en el tapiz, Pasado y presente, Barcelona, 2015, pp. 46-47). En la Relación se titula «Epitafio» y se halla en el folio 145.
[3] Recuerdo de la paz de Chateaux-Cambrésis (1559), que puso fin a la guerra entre España y Francia.
[4] El poema se halla en los folios 145-146 de la Relación citada en la composición anterior y lleva el título de «Redondilla castellana». La redondilla castellana o copla real, según Díaz Rengifo, en su Arte poética, consta de dos redondillas «de a cinco versos» (es decir, quintillas), las cuales pueden llevar o no unas mismas consonancias. Es un tipo de estrofa muy utilizado por Cervantes.
[5] El poema se halla en los folios 147-148 de la Relación citada en la composición anterior y se titula «Cuatro redondillas castellanas a la muerte de Su Magestad». López de Hoyos, en el folio 148v, escribe: «Estas cuatro redondillas castellanas a la muerte de Su Magestad, en las cuales, como en ellas parece, se usa de colores retóricos, y en la última se habla con Su Magestad, son, con una elegía que aquí va, de Miguel de Cervantes, nuestro caro y amado discípulo».
[6] El original trae lo invencible muerte en vez de la invencible muerte; aunque la puntuación podría mejorar el sentido (lo invencible, muerte,), opto por enmendar, como han hecho ya otros editores.
[7] El texto, por error, trae enganos en vez de engaños.
[8] Referencia a las dos infantas, Isabel Clara Eugenia y Catalina Micaela, hijas de Isabel de Valois y Felipe II.
[9] Última de las composiciones incluidas en la Relación, esta en los folios 157-162. Se encabeza por el siguiente epígrafe: «La elegía que, en nombre de todo el estudio, el sobredicho compuso. Dirigida al Ilustrísimo y Reverendísimo Cardenal don Diego de Espinosa, etc. En la cual, con bien elegante estilo, se ponen cosas dignas de memoria». Don Diego de Espinosa (1502-1572) fue presidente del Consejo de Castilla, Inquisidor general, cardenal y obispo de Sigüenza. Tomó posesión de este obispado el 1 de septiembre de 1568.
[10] secutivo: ‘ejecutivo’, pero también ‘severo’.
[11] beata: ‘feliz, dichosa’.
[12] aherrojado: ‘oprimido, subyugado’.
[13] Los Campos Elíseos, en la mitología griega, representan el lugar del Más Allá al que van los hombres virtuosos y los guerreros heroicos; por analogía, sobre todo en literatura, son imagen del Paraíso cristiano.
[14] Caronte o Carón es el barquero del Hades (el Más Allá en la mitología griega) que lleva a las almas de este al otro mundo a cambio de una moneda.
[15] seguntina: ‘de Sigüenza’.
[16] arreos: ‘adornos’.
[17] El texto original lee por error nuenos en vez de nuevos.
[18] El texto del original trae aun dare en vez de anudaré; la corrección es necesaria.
[19] leda: ‘alegre, contenta, tranquila’.
[20] Este verso tiene doce y no once sílabas, como debería. Algunos editores han optado por corregir su mal es menos, y esta desventura.
[21] Entiéndase ‘parece que Dios lo destierra del cielo’.
[22] El verso original es hipermétrico: ¿quién nos puede de su vista hacer dichosos?; corregimos, como otros editores, la preposición de por en, que restaura el verso.
[23] El hijo de Latona es Apolo.
[24] El texto original trae execlente en vez de excelente.
[25] El texto original trae do se planta en vez de do pasea; la corrección es necesaria por rima.
[26] El texto original lee desscar por errata en vez de desear.
[27] El texto original trae por error rl en vez de al.
[28] El texto original parece leer cirlo en vez de cielo.
[29] El original parece leer doiorido o dotorido en vez de dolorido.
[30] Este soneto y el siguiente son dos composiciones laudatorias, incluidas en los preliminares de un manuscrito titulado: «Di Bartholomeo Ruffino di Chiambery, in Sauoia, Dottore in l’una e l’altra legge, e Auditore in Tunisi di la Natione Italliana, di presente schiavo del Re d’algieri - Sopra la desolatione della Goletta e forte di Tunisi. Insieme la conquista fatta da Turchi de Regni di Fezza e di Marocco», que se hallaba primero en la biblioteca de S.A.R. el duque de Génova y después en la Biblioteca Nacional de Turín. Hoy no se conserva, debido a un incendio acaecido en esa biblioteca en 1904. Los datos apuntan a que fueron compuestos hacia 1576, durante el cautiverio de Cervantes en Argel, donde coincidió con Bartolomeo Ruffino di Chiambery, que también estaba allí preso. La pérdida de los fuertes de La Goleta y Túnez en 1574 fue uno de los desastres bélicos del reinado de Felipe II. En esa batalla, en la que Cervantes participó entre los refuerzos enviados a socorrer esas plazas, perdió a más de un amigo. Este primer poema se encabeza con el epígrafe «Soneto de Miguel de Cervantes, gentilhombre español, en loor del autor».
[31] Parnaso y Ménalo son dos montes poéticos. El monte Parnaso alberga la fuente Castalia, la más conocida por otorgar inspiración poética a quien bebe de sus aguas. El monte Ménalo se sitúa en la región de Arcadia, y está consagrado al dios Pan, es decir, el dios de los pastores, símbolo, pues, de la poesía bucólica.
[32] Alusión a Tito Livio, el gran referente de los historiadores.
[33] Véase el comentario introductorio al anterior poema. Este soneto se encabezaba con el epígrafe «Del mismo [Cervantes], en alabanza de la presente obra».
[34] Recuérdese que Bartolomeo Ruffino está preso junto a Cervantes en Argel.
[35] El poema, conocido como «Epístola a Mateo Vázquez», es uno de los más apreciados de Cervantes y ha tenido una vida agitada, por su descubrimiento, su atribución al autor y su pervivencia hasta nuestros días. El texto se halló en 1863 y supuso un revuelo entre los especialistas y no especialistas. No tardó en cuestionarse si era fiable o una falsificación animada por el furor cervantino del siglo xix, animada la duda por la desaparición del texto. Tras años de investigación, José Luis Gonzalo Sánchez-Molero (2007) ha redescubierto el texto, que, según todas las pistas, es auténtico. Hoy se conserva en la Biblioteca Zabálburu de Madrid. Se trata de un poema en tercetos encadenados, compuesto por Cervantes durante su cautiverio en Argel, posiblemente hacia 1577, y dirigido a Mateo Vázquez de Leca, secretario real de Felipe II, quien, al parecer lo recibió, puesto en limpio, de Antonio de Toledo, amigo de Mateo Vázquez apresado en la galera San Pablo en 1577 y compañero de cautiverio de Cervantes en Argel. El poema se conserva bajo el epígrafe «De Miguel de Ceruante [sic] Captiuo a M. Vazquez mi Sr.».
[36] alma: ‘digna de veneración’, es adjetivo.
[37] mal lograda: ‘malograda’.
[38] Sabemos que Cervantes llegó a Italia en 1569, por lo que, si la epístola fue escrita hacia 1577, los diez años son aproximados.
[39] laso: ‘falto de fuerzas’.
[40] Alusión a la batalla de Lepanto, en la que Cervantes participó, en 1571.
[41] En efecto, Cervantes resultó herido en la mano izquierda.
[42] Tras la batalla de Lepanto, Cervantes guarda convalecencia hasta la primavera de 1572, momento en que vuelve al servicio activo.
[43] Ese reino es Cartago.
[44] Se refiere a los sitios de Túnez y La Goleta, donde podría haberse hallado. Solo participó en las misiones de refuerzo.
[45] Cervantes, junto a muchos otros entre los que se contaba su hermano Rodrigo, fue apresado por una flotilla comandada por Arnaut Mamí, en 1575, volviendo a España en la galera Sol, capitaneada por don Gaspar Pedro de Villena.
[46] Sabemos, como queda dicho, que Cervantes fue apresado en 1575, por lo que la fecha de la epístola puede ser 1577.
[47] Los árabes eran llamados ismaelitas por descender de Ismael, hijo de Abraham y Agar.
[48] El fragmento que va desde aquí hasta el final del poema se halla, con algunas variantes, en El trato de Argel, Jornada I. Esa tierra es Argel.
[49] Referencia a la expedición de Carlos V contra Argel llevada a cabo en 1541 y en la que una gran tempestad hundió más de ciento cincuenta naves, con los soldados y provisiones que en ellas iban.
[50] Compárense estos versos con los del Viaje del Parnaso, III, vv. 439-441: «Muéstrase balbuciente y casi muda, / si le alaba, la lengua más experta, / de adulación y de mentir desnuda».
[51] bicoca: ‘fortificación pequeña y de poca defensa’, pero también ‘cosa de poca estima y aprecio’.
[52] Alusión al Edicto Perpetuo (también conocido como Tratado de Marche-en-Famenne) firmado por don Juan de Austria en 1577 reconociendo los acuerdos de la Paz de Gante entre la Corona española y los Estados Generales de las provincias de los Países Bajos.
[53] begnino: ‘metátesis de benigno’, que propicia la rima.
[54] El poema se incluye como epílogo en el manuscrito XI.B.6 de la Biblioteca Centrale «Alberto Bombace» de Palermo, que contiene el primer libro de poemas de Antonio Veneziano, titulado Celia. Se trata de unas octavas dedicadas al autor, poeta siciliano compañero de cautiverio en Argel desde 1578, las cuales se hallan en los folios 88v-91v, acompañadas de una breve carta firmada por Cervantes (f. 88v): «Al señor Antonio Veneziani. Señor mío, prometo a vuesa merced, como cristiano, que son tantas las imaginaciones que me fatigan, que no me han dejado cumplir como quería estos versos que a vuesa merced envío, en señal del buen ánimo que tengo de [di, en el original] servirle, pues él me ha movido a mostrar tan presto las faltas de mi ingenio, confiado en que el subido de vuesa merced recibirá la disculpa que doy, y me animará a que, en tiempo de más sosiego, no me olvide de celebrar como pudiere el cielo que a vuesa merced tiene tan sin contento [contiento en el original] en esta tierra, de la cual Dios nos saque y a vuesa merced llegue a aquella donde su Celia vive. En Argel, los seis de noviembre 1579. De [Di en el original] vuesa merced verdadero amigo y servidor, Miguel de Cervantes [Cerbantes en el original, grafía habitual en el autor]». El cancionero Celia está compuesto íntegramente en octavas, de ahí probablemente que Cervantes escoja esa estrofa. En el folio 92 se halla la respuesta de Veneziano «Al signor Michele Servantes» en forma de soneto.
[55] Esta estrofa recuerda por sus elementos y estructura a dos de La Galatea, libro al que presumiblemente Cervantes ya se está dedicando en esos años. Se trata de los que empiezan: «Mientras que al triste lamentable acento» y «Afuera el fuego, el lazo, el hielo y flecha».
[56] El original trae vos en vez de os.
[57] El original trae llega neve en vez de llaga, nieve.
[58] El original trae vos en vez de os.
[59] El original trae obgietto en vez de objeto.
[60] El original trae disdichado en vez de desdichado.
[61] El original trae embedias en vez de envidias.
[62] El original trae inditio en vez de indicio.
[63] destra: ‘diestra’.
[64] El original trae tenendo en vez de teniendo.
[65] El original trae di en vez de de.
[66] El original trae sorte en vez de suerte.
[67] El original trae que al cielo sube y al alma y se apresura en vez de que al cielo sube el alma y se apresura.
[68] El original trae aspetto en vez de aspecto.
[69] El original trae asconditamente un ben perfetto en vez de ascondidamente un bien perfeto.
[70] El original trae obgetto en vez de objeto.
[71] El original trae y paz en vez de ya paz.
[72] El original trae va en vez de ve.
[73] El original trae minuda en vez de menuda.
[74] El original trae merezeçe en vez de merece.
[75] El original trae operation en vez de operación.
[76] El original trae descreçion en vez de discreción.
[77] El original trae prenda en vez de prende.
[78] Se enuncia ya aquí uno de los principios básicos del pensamiento de Cervantes: la verosimilitud. Véase también Viaje del Parnaso, IV, v. 27, y VI, vv. 58-60.
[79] El original trae entrestecida en vez de entristecida.
[80] El original trae tondo en vez de todo. Los editores han corregido habitualmente fondo.
[81] El original trae perechoso en vez de perezoso.
[82] El original trae y humano en vez de humano; se debe enmendar para que el verso no resulte hipermétrico.
[83] El original trae primiero en vez de primero.
[84] El original trae se en vez de te.
[85] El original trae rescatta en vez de rescata.
[86] El original trae y esquiva en vez de esquiva; se debe enmendar para que el verso no resulte hipermétrico.
[87] Se trata de un soneto laudatorio impreso en el Romancero de Pedro de Padilla, en el cual se contienen algunos sucesos que en la jornada de Flandes los Españoles hicieron, con otras historias y poesías diferentes (1583), que lleva aprobación del maestro Juan López de Hoyos. Pedro de Padilla ya había publicado un Tesoro de varias poesías (1580) y su Segunda parte de las poesías de P. d. P. en églogas pastoriles con algunos sonetos al cabo (1582), obras recordadas en el primer cuarteto. Todo apunta a que era amigo de Cervantes, quien lo elogia también en el «Canto de Calíope» de La Galatea y en el Quijote (I-VI). Se cree probable que fuera el propio Padilla quien recomendara la publicación de La Galatea (1585) al librero madrileño Blas de Robles, con quien había contado para su Tesoro, este Romancero y el Jardín espiritual. Véanse además las composiciones XII y XIII, dedicadas al mismo autor.
[88] El presente soneto se halla entre los numerosos poemas laudatorios —hasta ocho, con firmas como las de Góngora y Lupercio Leonardo de Argensola— de los preliminares de La Austríada de Juan Rufo, impresa en Madrid el año 1584. Se trata de un poema épico en 24 cantos que empieza con la sublevación de las Alpujarras y culmina en la batalla de Lepanto. También es alabado en el «Canto de Calíope» de La Galatea y en el Quijote (I-VI). Rufo es más conocido hoy por sus Apotegmas.
[89] Posible alusión al poeta Quinto Ennio, quien compuso unos Anales sobre la historia de Roma, en 18 libros de hexámetros. En ellos se cuenta la historia de Numa Pompilio, segundo rey de Roma, sucesor de Rómulo.
[90] El capitán celebrado no es otro que don Juan de Austria, claro.
[91] Poema incluido en los preliminares del Jardín espiritual de Pedro de Padilla (1585) y dedicado a su hábito. Véanse las composiciones X y XIII. Padilla ingresaba el mismo año de la publicación de su libro en la orden carmelita. El poema está compuesto en redondillas.
[92] Recuerdo de la carta de San Pablo a los Colosenses, 3, donde expone cómo el descubrimiento de Dios hace al hombre nuevo.
[93] Referencia a San Pedro (conocido como Simón Pedro o Cefas, ‘piedra’) a quien Jesús dice «Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia» (Mateo, 16, 16).
[94] jarciada: ‘equipada con redes e instrumentos de pesca’.
[95] El tempero es ‘la buena disposición de la tierra para las sementeras y labores’ y con ese significado lo hallamos en muchos textos de la época, así que podría entenderse que ‘no teme una mala siembra’; sin embargo, a la luz del lenguaje marítimo del pasaje, tiendo a pensar que el mal tempero se refiere más bien ‘al temporal, la tempestad’.
[96] plático: ‘práctico, experimentado’.
[97] a orza: ‘maniobra en la que el buque navega poniendo la proa hacia la parte de donde viene el viento’.
[98] a puja: posiblemente, ‘más fuerte’.
[99] Referencia a la Orden de los Carmelitas Descalzos, en la que ha ingresado Pedro de Padilla.
[100] Elías y Eliseo, su sucesor, son dos profetas cuya historia se cuenta en 2 Reyes, 1-2. Elías había derrotado a los falsos profetas en el monte Carmelo, y, más tarde, justo antes de ser arrebatado por Jehová en un carro de fuego llevado por caballos de fuego que lo llevaron al cielo, había separado las aguas del Jordán con su manto, el cual, después de desaparecer, quedó en manos de Eliseo.
[101] acabarás: ‘morirás’.
[102] Poema incluido, como el anterior, en los preliminares del Jardín espiritual de Pedro de Padilla (1585). Está compuesto en estancias.
[103] Se trata de las fuentes consagradas a las musas que ya han aparecido, Aganipe e Hipocrene (de Pegaso).
[104] El poema se incluye en el Jardín espiritual de Pedro de Padilla, en los folios 230v-231r. Va encabezado por el epígrafe «Soneto al mismo santo, de Miguel de Cervantes». El poema anterior es una «Canción a San Francisco» de Pedro Laínez.
[105] los lejos: según el Diccionario de Autoridades, «en la pintura se llama lo que está pintado en diminución, y representa a la vista estar apartado de la figura principal»; compárese con este fragmento de los Pastores de Belén de Lope de Vega: «Vio en este tiempo una pintura el pastor, que cubría buena parte del lienzo del aposento. Estaban pintadas en ella no de muy grosera mano dos pirámides, cuyas bases eran dos fortísimas peñas, y parecía que tenían su asiento en las entrañas de la tierra. En los lejos que la perspectiva descubría, se veía la primera nave del mundo, que sujetó y venció la soberbia de las aguas sin jarcias, velas, aguja, marineros y pilotos...».
[106] Las palabras sombras, lejos y colores pertenecen al lenguaje pictórico.
[107] Este poema y el siguiente se incluyen en los preliminares del Cancionero (Madrid, 1586) de Gabriel López Maldonado, amigo de Cervantes y de Pedro de Padilla. Aparece en los folios *r-v, y va encabezado con el epígrafe «De Miguel de Cervantes en loor del autor y de la obra. Soneto». Entre los poetas que ofrecen composiciones laudatorias en este volumen se encuentran nombres tan destacados como Lope de Vega, Vicente Espinel o el propio Padilla. López Maldonado había escrito, a su vez, un soneto en alabanza de La Galatea, y Cervantes lo había elogiado ahí en el «Canto de Calíope» y en el Quijote (I-VI).
[108] cita: ‘escita’, pueblo de pastores nómadas que habitaba la estepa póntica en la Antigüedad; etiope es voz llana en la época; se realiza dialefa entre etiope al para que el verso sume once sílabas.
[109] Segundo poema incluido en los preliminares del Cancionero (Madrid, 1586) de Gabriel López Maldonado, copiado a continuación del anterior, en los folios *v-*3r [*2r] bajo el epígrafe «Del mismo al mismo». Se trata de coplas reales.
[110] Los versos 23 y 24 aparecen en orden inverso en el original. Deben intercambiarse para conservar la estructura métrica que alterna una quintilla con rima en el primer y cuarto verso, por un lado, y en el segundo, el tercero y el quinto, por otro, y otra quintilla con rima en el primero, segundo y quinto, por un lado, y tercero y cuarto, por otro.
[111] El original, por errata, trae el el sabio en vez de el sabio.
[112] El poema de nuevo se cuenta entre las composiciones laudatorias de unos preliminares, en este caso de los de la Filosofía cortesana moralizada (1587) de Alonso de Barros. El autor, conocido paremiólogo, también publicó Perla de proverbios morales (1601), obra de considerable éxito.
[113] Soneto en loor, de nuevo, de Pedro de Padilla, incluido en los preliminares de sus Grandezas y excelencias de la Virgen señora nuestra, compuestas
[en octava rima (1587). Se trata de un extenso poema de 903 octavas divididas en 9 cantos en los que se ensalzan la Concepción de la Virgen, Natividad, Presentación, Anunciación, Visitación, Expectación, Purificación, Asunción y Festividad de las Nieves. El volumen está dirigido a la serenísima infanta Margarita de Austria, hija de Maximiliano II y de doña Margarita, y nieta de Carlos V, profesa desde 1584 en el convento de la Madre de Dios de la Consolación, en las Descalzas de Madrid. Véanse los poemas X, XII y XIII, también dedicados a Padilla.
[114] tusco: ‘toscano’.
[115] El soneto se incluye al final del Tratado nuevamente impreso de las enfermedades de los riñones, vejiga, y carnosidades de la verga y urina (1588), compuesto por Francisco Díaz, doctor en Medicina y maestro en Filosofía por la insigne Universidad de Alcalá de Henares, y cirujano del Rey, nuestro señor. En los preliminares del libro se halla otro soneto laudatorio, en este caso de Lope de Vega. Francisco Días ya aparecía en el «Canto de Calíope» de La Galatea.
[116] Esta canción y la siguiente constan en el ms. 2856 de la Biblioteca Nacional de Madrid, manuscrito que perteneció a don Luis Usoz y Río, y que corresponde a los últimos años del siglo XVI o principios del XVII. El poema se halla en los folios 20r-21r y lleva el epígrafe «Canción nacida de las varias nuevas que han venido de la armada que fue sobre Inglaterra», y, al parecer, de otra mano y tinta, debajo, «De Miguel de Cervantes Saavedra». La Armada Invencible fue una empresa bélica ordenada por Felipe II para destronar a Isabel I de Inglaterra llevada a cabo en 1588; no llegó a buen término, principalmente por la climatología adversa. Formaba parte de la guerra que España e Inglaterra mantuvieron de 1585 hasta 1604, momento en que se firmó el Tratado de Londres.
[117] El original trae armas en vez de almas; acepto la enmienda propuesta por Vicente Gaos.
[118] Los editores han tendido a puntuar: y en la muerte, del fuego muerte hallaban (‘con la muerte conseguían aplacar el fuego’); prefiero, sin embargo, cambiar de lugar la coma, y entender así el pasaje: ‘y en la muerte del fuego, es decir, al matar el fuego tirándose al mar, muerte hallaban’.
[119] El manuscrito lee sol en vez de son.
[120] Se refiere a Alonso Pérez de Guzmán, duque de Medina-Sidonia, quien capitaneaba la Armada, y a Alejandro Farnesio, duque de Parma, que debía ayudarlo zarpando desde los Países Bajos.
[121] Recuerdo de la hazaña de Alonso Pérez de Guzmán el Bueno en el sitio de Tarifa (1294), quien, como Abraham, estuvo dispuesto a sacrificar a su hijo, amenazado de muerte por sus enemigos (el despechado infante don Juan que capitaneaba el ejército del merení Abu Yacub), antes que rendir la plaza de su rey.
[122] El manuscrito trae mares distes en vez de mar os distes.
[123] El manuscrito trae cor en vez de cordero.
[124] El manuscrito trae quisier en vez de quisiera haber hecho.
[125] Varios investigadores han señalado el parecido con el final de la canción de Góngora, también dedicada a la Armada Invencible y que empieza «Levanta, España, tu famosa diestra»: «Canción, pues que ya aspira / a trompa militar mi tosca lira, / después me oirán (si Febo no me engaña) / el carro helado y la abrasada zona / cantar de nuestra España / las armas, los trïunfos, la corona» (vv. 86-91).
[126] Esta canción, como la anterior, se incluye en el ms. 2856 de la Biblioteca Nacional de Madrid, en los folios 21v-22v, y lleva el epígrafe «Canción segunda de la pérdida de la Armada que fue a Inglaterra».
[127] El manuscrito trae las en vez de los.
[128] La diosa grecorromana Ocasión se representaba como una mujer de larga cabellera cubriéndole el rostro, pero calva por detrás, colocada sobre una rueda en movimiento. Esta diosa representaba las buenas ocasiones perdidas ya que, si pasaba, lo haría rápidamente y no se la podría asir siquiera por los cabellos, ausentes en la nuca.
[129] vuelve por: ‘sale en defensa de’.
[130] El manuscrito trae indigerado en vez de indignado.
[131] Referencia a don Diego Fernández de Córdoba, caballero de Calatrava, comendador de Castilla y primer caballerizo de Felipe II. Fue gran amigo del Rey. Participó en la batalla de San Quintín y murió en 1598. Su hijo, aludido aquí, fue don Felipe Fernández de Córdoba y Lasso de Castilla, ahijado de Felipe II. Estuvo en la jornada de las islas Terceras y murió en la de la Invencible, el año 1588.
[132] El manuscrito solo trae an en vez de han dilatado; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[133] El manuscrito trae del en vez de del suelo; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[134] El manuscrito solo trae y gan en vez de y gana el cielo; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[135] El manuscrito solo trae levan en vez de levantares; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[136] El manuscrito solo trae espira en vez de espera, espera; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[137] El manuscrito solo trae diamantes en vez de diamante; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[138] El manuscrito solo trae latan en vez de quilatan; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[139] El manuscrito solo trae la hambre en vez de con la hambre; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[140] El manuscrito solo trae se en vez de cual se; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[141] El manuscrito solo trae purados en vez de y apurados; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[142] El manuscrito solo trae juberlo en vez de júbilo; adopto la enmienda ya sugerida por editores anteriores.
[143] Se trata del romance que Cervantes cita en el Viaje del Parnaso: «Yo he compuesto romances infinitos, / y el de Los celos es aquel que estimo, / entre otros que los tengo por malditos» (IV, vv. 40-42, véase, arriba). Se conserva manuscrito en la Biblioteca Nacional de Nápoles (ms. I. E. 49) en el Cancionero de Matías, duque de Estrada, de principios del siglo xvii, encabezado por el epígrafe «Romance a una cueva muy escura, por Miguel de Cervantes» (f. 94r). Es el único lugar donde aparece atribuido al autor. Se recoge, asimismo, en el Romancero general en que se contienen todos los romances que andan impresos en las nueve partes de romanceros, ahora nuevamente impreso, añadido y emendado (Luis Sánchez, Madrid, 1600), en los folios 209v-210, con el epígrafe «Otro romance». Otra versión se había impreso en la tercera parte de la Flor de varios y nuevos romances (Felipe Mey, Valencia, 1593), f. 153, bajo el epígrafe «La morada de los celos». La versión que se ofrece aquí es la contenida en el Romancero general, y se copia a continuación la de la Flor: «Hacia donde el sol se pone, / entre dos partidas peñas, / una entrada de un abismo, / quiero decir, una cueva / oscura, lóbrega y triste, / aquí mojada, allí seca, / propio albergue de la noche, / del terror y de tinieblas. / Por su boca sale un aire / que al alma encendida hiela, / y un fuego, de cuando en cuando, / que al pecho de nieve quema. / Óyese dentro un rüido / con crujir de cadenas / y unos ayes luengos, tristes, / envueltos en tristes quejas; / y en las funestas paredes, / por los resquicios y quiebras / mil víboras se descubren / y ponzoñosas culebras. / A la boca tiene puestos, / en una amarilla piedra, / huesos de muerto encajados / de modo que forman letras, / las cuales, vistas al fuego / que sale de la caverna, / dicen: “Esta es la morada / de los celos y sospechas”. / Un pastor contaba a Lauso / esta maravilla cierta / de la cueva, fuego y hielo, / aullidos, sierpes y piedras, / el cual, viéndole, le dijo: / “Pastor, para que te crean, / no has menester jurallo / ni hacer de ella esperiencia. / El mismo traslado es ese / de lo que mi pecho encierra, / el cual, como en cueva oscura, / ni siente luz, ni la espera. / Seco, le tienen desdenes / bañando lágrimas tiernas; / aire y fuego en los suspiros / arrójase, abrasa y hiela. / Los lamentables aullidos, / son mis continuas endechas, / víboras mis pensamientos / que en mis entrañas se ceban. / La piedra escrita, amarilla, / es mis sin igual firmezas, / que los fuegos en mi muerte / dirán cómo fui de piedra. / Los celos son los que avisan / en esta morada estrecha, / que causaron los descuidos / cuidados de Silena”. / En pronunciando este mal, / cayó como muerto en tierra, / que de memorias de celos / tales sucesos se esperan».
[144] Se enmienda el puesto del original por puestos, por la concordancia y el análogo de la versión de 1593.
[145] El texto de 1600 trae cantaba al uso en vez de contaba a Lauso, lectura que debe enmendarse, a la luz del texto de 1593, y teniendo en cuenta que Lauso y Silena, que aparecerán unos versos más tarde, son pastores de La Galatea, al parecer trasunto del propio Cervantes y su amada.
[146] Se trata de una glosa realizada en coplas reales, como tantas otras de Cervantes, presentada en las justas literarias que organizó el convento de Santo Domingo de Zaragoza con motivo de la canonización de San Jacinto, recogida en la Relación de la fiesta que se ha hecho en el convento de Santo Domingo de la Ciudad de Zaragoza a la Canonización de San Jacinto (1595), pp. 234-236. Sabemos que Cervantes logró el primer premio en el segundo certamen por las quintillas que hallamos en las pp. 390-391: «De la gran materna Delo, / cual otro hijo de Latona, / para hermosear nuestro suelo / y en el recebir corona / de ingenioso y sutil vuelo, / Miguel Cervantes llegó, / tan diestro, que confirmó / en el Certamen segundo / la opinión que le da el mundo, / y el primer premio llevó».
[147] Es conocido que el jacinto se utilizaba en medicina para calmar la cólera; lo cuenta, por ejemplo, Plinio en su Historia natural (XXI, 26).
[148] El poema se halla en los folios 177v-178r del Comentario en breve compendio de disciplina militar, en que se escribe la jornada de las islas de los Azores, por el licenciado Cristóbal Mosquera de Figueroa, auditor general de la Armada (Madrid, 1596), bajo el epígrafe «De Miguel de Cervantes Saavedra. Soneto». Se incluye dentro de un capítulo titulado «Elogio al retrato de don Álvaro de Bazán, marqués de Santa Cruz, Señor de las villas del Viso y de Valdepeñas, Comendador Mayor de León, del Consejo de Su Majestad y su Capitán General del mar Océano y de la gente de guerra del reino de Portugal, y armada para el reino de Inglaterra». Se trataba del mejor marino de su época. Cristóbal Mosquera de Figueroa fue amigo de Cervantes, quien lo elogia en el «Canto de Calíope».
[149] Soneto satírico dedicado a la entrada del duque de Medina en Cádiz, que lleva el siguiente epígrafe: «El capitán Becerra vino a Sevilla a enseñar lo que habían de hacer los soldados, y a esto, y a la entrada del duque de Medina en Cádiz, hizo Cervantes este soneto». Según los editores Schevill y Bonilla: «Publicó este soneto Juan Antonio Pellicer y Saforcada, en su Ensayo de una Biblioteca de Traductores Españoles; Madrid, 1778; pp. 160 y 161; y lo reimprimió en su Vida de Cervantes; Madrid, 1800; pp. 46 y 47, citando la signatura [Est. M-cod. 163-f. 81 b] del manuscrito de la Real Biblioteca en que se contenía y que en vano hemos buscado en las del Real Palacio y Nacional». Se conserva una versión en el ms. 861, f. 627, de la Biblioteca Nacional de España. En julio de 1596, el duque de Medina Sidonia, con ayuda de las tropas que el capitán Becerra tenía en Sevilla, entró en Cádiz para socorrer a la ciudad, que había sido atacada por los ingleses, al mando del conde de Essex, pero llegó tarde, pues los saqueadores habían huido. Véase el artículo de Carlos Mata Induráin (1998) donde se comenta con extremado detalle y lucidez este soneto.
[150] cofradías: en germanía, ‘agrupación de maleantes’.
[151] La muchedumbre de plumas alude a los adornos de los soldados, pero también a que son cobardes.
[152] volaron: ‘fueron rápido’, en tono irónico, pues tardaron catorce o quince días. Los pigmeos (conocidos por reducido tamaño) y Golías (‘Goliat’, un gigante) juntos significan ‘todos, todo el mundo’.
[153] El Becerro alude al capitán Becerra, lugarteniente del duque de Medina Sidonia.
[154] Este verso y el anterior apuntan a las señales de la muerte de Jesucristo: terremoto, ruido, escurecimiento del cielo...
[155] El soneto se conserva en un volumen manuscrito de la Houghton Library de la Universidad de Harvard (ms. Span. 56, f. 169) con el título de Poesías varias, año 1631, y es en parte autógrafo del pintor Francisco Pacheco. Lleva el siguiente epígrafe: «Miguel de Cervantes autor de D. Quijote. Este soneto hice a la muerte de Fernando de Herrera, y, para entender el primer cuarteto, advierto, que él celebraba en sus versos a una señora, debajo de este nombre de Luz. Creo que es de los buenos que he hecho en mi vida». La muerte del divino Fernando de Herrera acaeció en 1597 (véase Viaje del Parnaso, II, vv. 65-67).
[156] Helicón y Pirene son dos fuentes poéticas.
[157] Este es probablemente el poema más famoso de Cervantes, quien se enorgullece de haberlo escrito en el Viaje del Parnaso, IV, vv. 37-39: «Yo el soneto compuse que así empieza, / por honra principal de mis escritos: / Voto a Dios, que me espanta esta grandeza». Se reproduce aquí el texto crítico que ofrece José Solís de los Santos, en su estudio y edición del soneto, donde se hallará una descripción detallada de los veintiún testimonios que transmiten el texto (entre manuscritos e impresos), así como una explicación pormenorizada de las variantes que presentan y de la adopción de unas u otras. Se trata de un soneto con estrambote. Tras la muerte de Felipe II, acaecida el 13 de septiembre de 1598, se realizó un funeral en El Escorial, sin ostentación, pero, después, en muchos lugares del reino, se organizaron honras fúnebres, como túmulos o catafalcos en diversas catedrales. El de Sevilla, aquí ironizado, fue a todas luces exagerado: se preparó un edificio de tres pisos y estaba cargado de imágenes, esculturas, etc., dedicados a las glorias, virtudes y grandezas del rey muerto. Supuso un gasto considerable y queda constancia de las luchas entre las personas de influencia de la ciudad por conseguir los mejores asientos.
[158] El túmulo tardó cincuenta y dos días en ser construido para estar en pie solo una semana; al final, se conservó durante casi cuarenta días.
[159] valentón: ‘arrogante, que se jacta de guapo o valiente’.
[160] encontinente: ‘al instante’.
[161] chapeo: ‘sombrero’.
[162] El poema se conserva en la Descripción del Túmulo y relación de las exequias que hizo la Ciudad de Sevilla en la muerte del rey don Felipe Segundo [1598], realizada por el licenciado Francisco Gerónimo Collado, y que guarda hoy la Biblioteca Colombina de Sevilla junto a otros escritos del mismo autor (manuscrito, estante B-4.ª-446-11). Acompañando el texto se lee: «Algunos otros versos se pusieron sueltos, y unas décimas que compuso Miguel de Cervantes, que, por ser suyas, fue acordado de ponerlas aquí. Síguense».
[163] El original trae Aseo en vez de Aqueo, que no da sentido. Los aqueos habitaron parte de la Grecia antigua, de manera que se está refiriendo aquí a la batalla de Lepanto.
[164] El original lee el en vez de al.
[165] Curioso verso que, incluido en el panegírico, recuerda que Felipe II a su muerte dejó el Imperio casi al borde de la bancarrota.
[166] El soneto se publicó acompañando La hermosura de Angélica, con otras diversas rimas, de Lope de Vega, en su edición de Madrid de 1602, f. 348v. De hecho, aparece en los poemas preliminares de la Tercera parte de las rimas, que sigue a la Hermosura.
[167] Helicón es una fuente poética.
[168] Cilenio es Mercurio, quien, según la mitología, había nacido en Cyllene.
[169] El soneto se incluye entre los preliminares de las Obras del insigne caballero don Diego de Mendoza (Madrid, 1610). Diego Hurtado de Mendoza, poeta y diplomático español, que había muerto en 1575, es uno de los personajes encubiertos de La Galatea (Meliso).
[170] Se trata de referencias mitológicas: el Etna es el volcán de las fraguas de Vulcano; Estigio, el río o laguna del infierno; y Cocito, un afluente del Aqueronte, así que, de nuevo, se trata de un río infernal.
[171] El poema se cuenta entre los preliminares de la Dirección de Secretarios de Señores, y las materias, cuidados y obligaciones que les tocan, con las virtudes de que se han de preciar, estilo y orden del despacho y expediente... (Madrid, 1613), de Gabriel Pérez del Barrio Angulo, secretario del marqués de los Vélez, y alcaide de la fortaleza de su villa de Librilla. El libro es un tratado moral y político. Las octavillas van encabezadas por el epígrafe «Miguel de Cervantes, al Secretario Gabriel Pérez del Barrio Angulo».
[172] El soneto figura en los preliminares del curioso libro Parte Primera de Varias explicaciones y transformaciones, las cuales tratan términos cortesanos, práctica militar, casos de Estado en prosa y verso con nuevos jeroglíficos y algunos puntos morales (Nápoles, 1613), de don Diego Rosel y Fuenllana, sargento mayor en las partes de España y gobernador de la ciudad de Santa Ágata, en Italia.
[173] excesible: posiblemente, ‘excelsa, inaccesible’.
[174] Falerina y Dragontina son dos magas que aparecen en el Orlando enamorado de Mateo María Boyardo.
[175] Tronto es un afluente del Adriático, en la Italia central.
[176] Esta canción figura en el Compendio de las solemnes fiestas que en toda España se hicieron en la Beatificación de N. B. M. Teresa de Jesús (Madrid, 1615), de fray Diego de San José; en los folios 52-53v. La acompaña el epígrafe: «De Miguel de Cervantes, a los éxtasis de nuestra beata madre Teresa de Jesús». Su Beatificación data de 1614, y fue canonizada en 1622. El poema se había presentado y había ganado el certamen que se había organizado en octubre de 1614 en la Iglesia de los Carmelitas Descalzos de Madrid y en cuyo tribunal se habían contado, entre otros, Francisco Chacón, Rodrigo de Castro, Melchor de Moscoso y Lope de Vega, que actuó como secretario.
[177] El original trae cuando en vez de cuanto.
[178] arrobos: ‘éxtasis’.
[179] El soneto se incluye en los preliminares de Los Amantes de Teruel, epopeya trágica, con la restauración de España por la parte de Sobrarbe, y conquista del reino de Valencia (Valencia, 1616), de Juan Yagüe de Salas, con el epígrafe «De Miguel de Cervantes Saavedra. Soneto».
[180] Referencia a don Juan Martínez de Marcilla, amante de Isabel de Segura; ambos son los amantes de Teruel.
[181] Consta este soneto en los preliminares del libro titulado Minerva Sacra (Madrid, 1616), del licenciado Miguel Toledano. Su epígrafe reza: «De Miguel de Cervantes Saavedra, a la señora doña Alfonsa González, monja profesa en el Monasterio de Nuestra Señora de Constantinopla, en la dirección de este libro de la Sacra Minerva». El monasterio se hallaba en Madrid, donde ahora se abre la calle de Calderón de la Barca.