Capítulo 11
Los fonemas vocálicos

El español tiene cinco fonemas vocálicos: /a e i o u/. Estos fonemas son de suma importancia porque, como ya se ha presentado, por un lado representan el 47,8% de los fonemas de la muestra estudiada y por otro funcionan como el núcleo de la sílaba. El presente capítulo trata la ocurrencia de los fonemas vocálicos en posición silábica nuclear; la ocurrencia no nuclear de las vocales se presenta en el próximo capítulo que trata las combinaciones vocálicas.

Este capítulo comienza con una presentación general de las características fonéticas de las vocales. Presenta también una clasificación más detallada de las vocales. Continúa con un contraste entre los sistemas vocálicos del español y del inglés. Concluye con un análisis de cada fonema vocálico. En ese análisis se presentan los datos fonológicos y fonéticos de cada fonema. Incluye también claves para el estudiante en la adquisición de una buena pronunciación de las vocales españolas.

Características de las vocales en general

Es útil repasar lo que ya se ha dicho sobre las características de las vocales en contraste con las consonantes. En el Capítulo 5 ya se estableció que desde el punto de vista articulatorio, las vocales, frente a las consonantes:

En el Capítulo 6 se estableció que frente a las consonantes, las vocales, desde el punto de vista acústico:

En el Capítulo 7 se estableció cómo el oído produce una imagen mental de las características acústicas de la vocal y cómo el cerebro interpreta esa información en el proceso de la identificación y sistematización del sonido vocálico recibido.

La clasificación fonológica y fonética de las vocales

La clasificación de las vocales puede ser fonológica o fonética. Es importante entender la diferencia entre las dos clasificaciones. La clasificación fonológica contiene el número mínimo de rasgos necesarios que refleja la oposición entre los cinco fonemas vocálicos del español. La clasificación fonética, en contraste, contiene el número máximo de rasgos posibles para describir todos los detalles de la producción física de los alófonos vocálicos del español.

11.1 Los cinco fonemas vocálicos del español.

11.1 Los cinco fonemas vocálicos del español.

Los rasgos fonológicos de los fonemas vocálicos

Para diferenciar entre los cinco fonemas vocálicos del español se necesitan solamente dos rasgos fonológicos: el modo de articulación y el lugar de articulación. El modo de articulación se refiere al grado de abertura bucal; así se clasifican las vocales como cerradas /i u/, medias /e o/ y abierta /a/. El lugar de articulación se refiere a la región bucal en que la lengua se acerca más al techo de la boca; así se clasifican las vocales como anteriores /i e/, central /a/ y posteriores /o u/. Los cinco fonemas vocálicos del español pueden contrastarse mediante la aplicación de estos dos rasgos como se puede ver en el Cuadro 11.1.

De esa manera el fonema /i/ se distingue del fonema /u/ por ser este cerrado posterior y aquel cerrado anterior. De la misma manera el fonema /i/ se distingue del fonema /e/ por ser este medio anterior y aquel cerrado anterior. Siguiendo el mismo modelo, el fonema /u/ se distingue del fonema /a/ por ser este abierto central y aquel cerrado posterior.

Los rasgos fonéticos de los alófonos vocálicos

Los mismos rasgos fonológicos de las vocales (es decir, el modo de articulación y el lugar de articulación) también son rasgos fonéticos, porque reflejan características importantes en la producción de los alófonos vocálicos. Estos dos rasgos son tanto fonológicos (porque contienen la información mínima necesaria para establecer la oposición entre los fonemas) como fonéticos (porque describen los rasgos articulatorios principales). Además de estos rasgos principales, existen otros cinco rasgos fonéticos que tienen que ver con otros aspectos de la pronunciación de los alófonos vocálicos: el estado de las cuerdas vocales, el estado del velo del paladar, el estado de los labios, la duración y la intensidad.

El modo de articulación

En cuanto al modo de articulación, como ya se ha presentado, las vocales se clasifican fonéticamente según el grado de la abertura bucal. De acuerdo con el grado de abertura, los alófonos vocálicos que aparecen en el núcleo silábico se clasifican como cerradas [i u], medias [e o] o abierta [a].

El estudiante de fonética puede observar la progresión en la abertura bucal de cerrada a media a abierta al decir las secuencias [i e a] y [u o a]. Se puede ver mejor esa progresión al decir esas secuencias ante el espejo o cuando las articula otra persona. Se puede sentir la misma progresión poniendo los dedos sobre los labios o la mano debajo del mentón al articular estas secuencias.1 ifig0002

El lugar de articulación

En cuanto al lugar de articulación, como ya se ha presentado, las vocales se clasifican fonéticamente según la región de la boca en que la lengua se acerca más al techo de la boca. Cuando la lengua se acerca más a la zona palatal de la boca, las vocales se clasifican como anteriores. Cuando la lengua se acerca más a la zona velar de la boca, las vocales se denominan posteriores. Cuando la lengua adopta una posición intermedia entre anterior y posterior, la vocal se define como central. De acuerdo con el lugar de articulación, los alófonos vocálicos que aparecen en el núcleo silábico se clasifican como anteriores [i e], posteriores [u o] o central [a].

El estudiante de fonética puede observar el cambio en la posición de la lengua al comparar la articulación de las vocales [i u] y [e o]. En las vocales [i e] se puede sentir que el acercamiento más estrecho de la lengua ocurre en la región palatal; el acercamiento más estrecho ocurre en la región velar con las vocales [u o]. Se puede sentir ese acercamiento de la lengua a la región palatal al decir la secuencia [a i] y hacia la región velar al decir la secuencia [a u].

El estado de las cuerdas vocales

Las vocales, a nivel fonético, pueden clasificarse también de acuerdo con el estado de las cuerdas vocales. Como ya se presentó en el Capítulo 5, el grado de abertura/cerrazón de las cuerdas vocales, junto con el paso de aire controlan la vibración (sonidos sonoros) o no vibración (sonidos sordos) de las cuerdas vocales. Las vocales, por regla general, son sonoras. Sin embargo, hay casos en español en que puede ensordecerse la vocal debido a la asimilación. En español esa asimilación es optativa y ocasional. Los casos en que ocurre la producción de una vocal ensordecida, son cuando la vocal ocurre entre una consonante sorda y una pausa. Se emplea el signo diacrítico [º] para indicar un sonido ensordecido. En forma de regla se puede expresar este ensordecimiento de la siguiente manera:

fig0036

Se puede oír el ensordecimiento vocálico en la última vocal de las siguientes muestras: [komjéɾonlapástḁ] [nó͜úβokláse̥] [nesesíta͜ócʃo̥].2 ifig0003 El estudiante de fonética puede sentir la diferencia entre las vocales sonoras y las vocales sordas al poner los dedos sobre la laringe. Al articular las vocales [i e a o u], se puede sentir la vibración con los dedos. Al susurrar las vocales [i̥ e̥ ḁ o̥ u̥] no se siente la vibración.3 ifig0003

El papel que desempeña el rasgo del estado de las cuerdas vocales en el sistema vocálico del español es totalmente fonético, puesto que no crea nunca una oposición fonológica con las vocales sonoras. Los sonidos vocálicos sordos, cuando ocurren, son siempre alófonos de los fonemas vocálicos, que son sonoros por naturaleza.

El estado del velo del paladar

Las vocales, a nivel fonético, pueden también clasificarse de acuerdo con el estado del velo del paladar. Como se presentó en el Capítulo 5, la posición del velo del paladar, sea para arriba o para abajo, controla la cantidad de aire que se admite a la cavidad nasal. En la producción de toda vocal se mantiene la boca abierta. Si al mismo tiempo se levanta el velo, este se adhiere a la pared faríngea impidiendo que el aire entre en la cavidad nasal: así se produce una vocal oral. Si se baja el velo, se abre la entrada a la cavidad nasal, permitiendo que el aire entre y que la onda sonora resuene en la cavidad nasal; de ese modo se produce una vocal oronasal o vocal nasalizada.

En español ocurre una leve nasalización al final de la producción de la vocal cuando ocurre ante el archifonema nasal /N/, es decir, cuando se tiene una nasal en posición final de una sílaba fonética. Se emplea el signo diacrítico [῀] para indicar una vocal nasalizada. En forma de regla se puede expresar esta nasalización de la siguiente manera:

fig0037

Se puede oír la nasalización vocálica en la vocal tónica de las siguientes palabras: [èªtimo] [çªte] [kæmpo] [déªde] [pêªto].4 ifig0003 El estudiante de fonética puede sentir la diferencia entre las vocales orales y las vocales oronasales al producirlas tapándose y destapándose la nariz. Al articular las vocales orales [i e a o u], se puede notar que el sonido producido no cambia al taparse y destaparse la nariz. Esto se debe al hecho de que con el velo levantado, no hay aire que entre en la cavidad nasal, y como consecuencia, el efecto de taparse la nariz es nulo. Sin embargo, al bajar el velo del paladar y producir las vocales oronasales [Þ Ý Ü ß à], el sonido se altera mucho al taparse y desta-parse la nariz. Esto se debe al hecho de que en la producción de estas vocales sí hay aire que sale por la nariz. Se puede constatar la aplicación de la regla al comparar la producción de los siguientes pares de palabras: [písta pèªta] [sáles sálÝn] [kapitál kapitæn] [tÕrta téªta] [urtáðo àªtáðo].5 ifig0003

El grado de nasalización que ocurre en español es mínimo comparado con el que ocurre en otros idiomas como el portugués y el francés. Esto se debe a que la abertura entre el velo del paladar y la pared faríngea que ocurre en español es mínima al compararse con la abertura más grande que ocurre en portugués y en francés. En el caso de la vocal nasalizada del español, la separación del velo del paladar de la pared faríngea crece a lo largo de su producción; es decir, la separación aumenta al aproximarse cada vez más a la consonante nasal final de sílaba. En otras palabras, la vocal comienza como una vocal oral, pero a lo largo de su producción se nasaliza cada vez más. Se puede decir que el portugués y el francés tienen vocales netamente oronasales, mientras que en español se trata de una leve nasalización que resulta de una coarticulación anticipante. Por eso, la nasalización solamente se indica en una transcripción detallada del español.

11.2 Nasogramas de la sílaba /káN/ de la palabra {canta} en español y en portugués.

11.2 Nasogramas de la sílaba /káN/ de la palabra {canta} en español y en portugués.

Ya se comentó la diferencia entre el grado de nasalización que ocurre en español y el que ocurre en portugués. Este hecho se ve en los nasogramas de la Fig. 11.2. El nasograma indica el porcentaje de la energía acústica que proviene de las dos cavidades. En el nasograma, el eje horizontal representa el tiempo y el eje vertical representa el grado de nasalización. Teóricamente un cero por ciento quiere decir que toda la energía acústica proviene de la cavidad oral, mientras que un cien por ciento quiere decir que toda la energía proviene de la cavidad nasal. Sin embargo, en la práctica nunca se da el caso del cero por ciento ni del cien por ciento, debido a que la onda sonora producida se transmite por todos los tejidos de la cara.

En la sílaba /káN/ de la palabra {canta} del español, se nota en la Fig. 11.2 que durante la tensión de la vocal, la nasalidad de la vocal crece gradualmente del 10% hasta el 40%. Durante la transición formada por la distensión de la vocal e intensión de la consonante nasal, el grado de nasalización crece súbitamente hasta el 95% para la producción de la consonante nasal.6 ifig0003

Por su parte, en la sílaba /káN/ de la palabra {canta} del portugués, se nota que durante la tensión de la vocal la nasalidad de la vocal crece rápidamente del 10% hasta el 70%. Durante la distensión de la vocal e intensión de la consonante nasal, el grado de nasalización crece súbitamente hasta el 95% para la producción de la consonante nasal. Es obvio que el grado de nasalización del portugués es mayor que el del español.6 ifig0003

El papel que desempeña el rasgo del estado del velo del paladar en el sistema vocálico del español es totalmente fonético, puesto que no crea nunca una oposición fonológica: los sonidos vocálicos oronasales son siempre alófonos de los fonemas vocálicos, que son orales por naturaleza.

Como la nasalización es sensible a la posición silábica, es importante entender bien las reglas de la división silábica del español, que solo se presentarán detalladamente en el Capítulo 18. Se verá en ese capítulo, entonces, cómo el silabeo afecta la aplicación de la regla de nasalización vocálica.

El estado de los labios

Las vocales, a nivel fonético, se clasifican también de acuerdo con el estado de los labios. Según este rasgo, las vocales pueden clasificarse como labializadas o deslabializadas. Esta diferencia es evidente al comparar la conformación de los labios de las vocales [i] y [u]. En la articulación del sonido [u] las comisuras de la boca se acercan, los labios se redondean y se proyectan hacia adelante. En la articulación del sonido [i] las comisuras de la boca se alejan de la posición normal y los labios se abren. Según este rasgo las vocales [i e a] se clasifican como deslabializadas y las vocales [o u] como labializadas.7 ifig0002 Esto se puede constatar al ver la posición de los labios en el espejo al pronunciar las vocales. Se puede sentir la diferencia al poner los dedos sobre las comisuras de la boca durante la articulación de las vocales. Acústicamente, la labialización de una vocal tiene el efecto de bajar el segundo formante.

El papel que desempeña el rasgo del estado de los labios en el sistema vocálico del español es totalmente fonético, puesto que este rasgo no crea nunca de por sí una oposición fonológica. Es un rasgo redundante porque sigue la misma clasificación dada por el lugar de articulación. Es decir, para el español, los únicos sonidos vocálicos que son labializados son los posteriores; todos los demás sonidos vocálicos son deslabializados.

La tonicidad o intensidad

Según su tonicidad o intensidad en español una vocal se clasifica como vocal tónica o vocal átona. Este fenómeno se llama comúnmente “el acento”, pero este término es muy ambiguo como se verá en el Capítulo 19. El fenómeno a que se refiere aquí es un fenómeno fonológico y fonético, que tiene que ver con la representación mental de una frase y con la articulación de ella y no con su ortografía. Por ejemplo, en la palabra {cantara} la primera y última [a] son átonas y la penúltima es tónica, aunque la palabra no contiene ningún acento ortográfico: [kܪtáRa]. En la palabra {cántara} la primera vocal es la tónica y las otras dos son átonas: [kæªtaRa].8 ifig0002

La duración

Como se ha comentado en capítulos anteriores, los sonidos pueden variar en el tiempo durante el cual se mantiene su producción. Según su duración, una vocal puede clasificarse como vocal larga o vocal breve. Las variaciones dependen de varios factores: la tonicidad de la vocal, la posición fonológica en que ocurre la vocal o su combinación con otras vocales. Por ejemplo, en la realización de la frase {está aquí} el sonido [a] es breve: [estákí]. En la realización de la frase {está alto} el sonido [á:] es largo: [está:¢to].9 ifig0002 El alargamiento de un sonido se transcribe mediante el uso del símbolo [:]. Los detalles del fenómeno del alargamiento vocálico se tratarán en el Capítulo 12.

El sistema vocálico del español comparado con el del inglés

Como introducción a la presentación de las vocales españolas, es útil examinar los varios contrastes que existen entre los sistemas vocálicos del español y del inglés. Los sistemas se contrastan en cuanto al ataque y a la cesación de la vocal. En los dos idiomas existe un contraste entre vocales tónicas y átonas. En cada sistema hay un contraste marcado en el número de vocales que existe y la ubicación de cada uno de los fonemas en el espacio vocálico. Hay también un contraste en cuanto a la relativa variación dialectal que se exhibe dentro de los dos sistemas.

La comparación entre el ataque y la cesación vocálicos

Como ya se ha presentado, la producción de cualquier sonido consiste en tres fases: la intensión, la tensión y la distensión. Ya se comentó la importancia de la coarticulación que resulta del solapamiento de la distensión de un sonido y la intensión del sonido siguiente. Sin embargo, es posible encontrar vocales en dos casos especiales donde no ocurre ese solapamiento. Cuando la vocal ocurre en posición inicial de grupo fónico (es decir, después de una pausa), se puede hablar del ataque vocálico, puesto que la intensión de la vocal no se mezcla con ninguna distensión. Cuando la vocal ocurre en posición final de grupo fónico (es decir, ante una pausa), se puede hablar de la cesación vocálica, puesto que la distensión de la vocal no se mezcla con ninguna intensión.

El ataque vocálico

Es importante contrastar el ataque vocálico del español con el del inglés porque son tan diferentes. El ataque vocálico ocurre cuando el grupo fónico comienza con una vocal, en otras palabras, ocurre únicamente cuando la vocal sigue a una pausa. El español tiene un ataque vocálico creciente mientras que el inglés tiene un ataque vocálico abrupto.

En español, el ataque vocálico creciente ocurre cuando se comienza a forzar el aire de los pulmones hacia la laringe con las cuerdas vocales ya abiertas a la posición precisa para que entren en vibración con el paso del aire. Comienzan a vibrar con una amplitud muy baja, pero con el crecimiento del paso del aire, se aumenta gradualmente la amplitud. La Fig. 11.3 demuestra el efecto acústico del ataque vocálico creciente.

11.3 El ataque vocálico creciente del español.

11.3 El ataque vocálico creciente del español.

11.4 El ataque vocálico abrupto del inglés.

11.4 El ataque vocálico abrupto del inglés.

En inglés, en contraste, el ataque vocálico abrupto ocurre cuando se comienza a forzar el aire de los pulmones hacia la laringe con las cuerdas vocales cerradas. Lo que resulta entonces, es un gran aumento de presión de aire debajo de las cuerdas vocales sin producción de sonido. Cuando de repente las cuerdas vocales se abren a la posición precisa para una vocal, se produce inicialmente una explosión de aire por las cuerdas vocales. Estas comienzan a vibrar repentinamente con la amplitud de la fase tensiva de la vocal. La Fig. 11.4 demuestra el efecto acústico del ataque vocálico abrupto.

Al comparar el ataque vocálico del español con el del inglés, se nota la diferencia entre la intensión de la vocal de cada idioma. La intensión del ataque vocálico del español es una producción vocálica con amplitud creciente, debido a que las cuerdas vocales se encuentran inicialmente abiertas. En contraste, la intensión del ataque vocálico del inglés es una explosión, un golpe de glotis, debido a que las cuerdas vocales se encuentran inicialmente cerradas. Se puede escuchar la diferencia fonética en el ataque vocálico al comparar las siguientes series de palabras: [a¢táR] [aksjén] [æmpljo] {altar, acción, amplio} demuestran el ataque vocálico creciente del español mientras que [?‚1lthQ=] [?€1kS‰n] [?€1mpl+] {altar, action, ample} demuestran el ataque vocálico abrupto del inglés, con golpe de glotis inicial.10 ifig0003

La cesación vocálica

Es importante también contrastar la gran diferencia entre la cesación vocálica del español y la del inglés. La cesación ocurre cuando el grupo fónico termina con una vocal, en otras palabras, ocurre únicamente cuando la vocal precede a una pausa. El español tiene una cesación vocálica abrupta mientras que el inglés tiene una cesación vocálica decreciente.

En español la cesación vocálica abrupta ocurre porque después de la producción de la fase tensiva de la vocal, la producción del sonido cesa mediante una cerrazón repentina de las cuerdas vocales. La Fig. 11.5 demuestra el efecto acústico de la cesación vocálica abrupta.

En inglés, en contraste, la cesación vocálica decreciente ocurre porque después de la producción de la fase tensiva de la vocal se disminuye gradualmente el paso de aire por las cuerdas vocales, lo cual disminuye gradualmente la amplitud de la onda sonora hasta que llega a ser inaudible. La Fig. 11.6 demuestra el efecto acústico de la cesación vocálica decreciente.

Al comparar la cesación vocálica del español con la del inglés, se nota la diferencia entre la distensión de la vocal de cada idioma. La distensión de la cesación vocálica del español es una producción vocálica con una terminación repentina mediante la cerrazón de las cuerdas vocales. En contraste, la distensión de la cesación vocálica del inglés es una disminución gradual de la fuerza articulatoria hasta llegar al silencio. Esta gran diferencia se nota fácilmente al comparar las siguientes series de palabras: [tÖ] [nÕ] [yá] [sÓ] [sí] {tú, no, ya, sé, sí} demuestran la cesación vocálica abrupta del español mientras que [thÖU] [nÕU] [y‚1] [sÓI] [síI] {two, no, yaw, say, see} demuestran la cesación vocálica decreciente del inglés.11 ifig0003

11.5 La cesación vocálica abrupta del español.

11.5 La cesación vocálica abrupta del español.

11.6 La cesación vocálica decreciente del inglés.

11.6 La cesación vocálica decreciente del inglés.

La comparación entre los sistemas vocálicos tónicos de español e inglés

Para poder comparar los dos sistemas hace falta primero analizar cada uno individualmente. Como ya se ha analizado, el sistema vocálico del español, aquí se incluye solamente un breve repaso para fines contrastivos. Luego se presentará el sistema del inglés porque es necesario entender el sistema del inglés para entender qué es lo que tiene que hacer el anglohablante para poder producir correctamente las vocales del español.

El sistema fonológico de las vocales tónicas del español

Como ya se ha presentado, el sistema vocálico del español en posición tónica es un sistema simétrico de cinco vocales: [i e a o u]. El siguiente esquema de los fonemas vocálicos indica en forma gráfica cómo las cinco vocales del español se sitúan en el espacio vocálico:

fig0038

Se ha constatado la existencia de cinco fonemas vocálicos para el español. Se pueden poner todas las vocales en la secuencia modelo /p_so/, lo que comprueba la oposición entre esas cinco vocales. Eso resulta en los pares mínimos: [píso] [pÓso] [páso] [pÕso] [pÖso].12 ifig0003 Ortográficamente esta serie se representa {piso, peso, paso, pozo, puso}.

De los cinco fonemas vocálicos del español, tres tienen una distribución complementaria sistemática. En el Capítulo 9, se presentaron reglas de distribución complementaria para los fonemas /i/ y /u/, las vocales cerradas o altas. Las reglas describen la formación de diptongos, lo que se examinará en detalle en el Capítulo 12. En este capítulo, se presenta una aproximación a una regla que describe el comportamiento de los alófonos del fonema /e/.

Desde el punto de vista de la fonotáctica, se puede observar que los cinco fonemas vocálicos ocurren como el núcleo de una sílaba monofonemática, es decir, en una sílaba de un solo fonema, en este caso, la vocal misma. Ejemplos son hi-go, e-so, a-bre, o-so, ú-til. Los fonemas vocálicos ocurren como núcleo silábico en todos los tipos de sílaba; es decir, pueden o no ser precedidos por un ataque y/o pueden o no ser seguidos de una coda. Las siguientes palabras ejemplifican núcleos silábicos precedidos por un ataque: pi-co, pe-na, si-lá-bi-co, po-co, se-gu-ro. Como ejemplos de núcleos silábicos seguidos de una coda pueden citarse an-tes, en-te, is-la, ob-vio, um-bral. Ejemplos de núcleos silábicos con un ataque y una coda son can-to, ven, pinto, con-tra, pun-to.

Vale recapitular otros datos fonotácticos para los fonemas vocálicos que se presentaron en el Capítulo 10. Los fonemas vocálicos tónicos pueden ocurrir en posición inicial de palabra, interior de palabra o final de palabra. Las vocales tónicas pueden aparecer en sílabas con o sin ataque y con o sin coda. En posición final de palabra, con la excepción de algunas flexiones verbales y derivaciones adjetivales, las vocales tónicas son poco frecuentes.

El sistema fonológico de las vocales tónicas del inglés

El sistema vocálico del inglés que se presenta en este libro es el así llamado dialecto del medio-oeste de los Estados Unidos. Se eligió ese dialecto porque representa una norma culta aceptada como tal en todas las regiones del país. En posición tónica, el sistema es cuasi-simétrico e incluye quince núcleos silábicos que demuestran oposición fonológica, los cuales se presentan en la Fig. 11.7.

11.7 Los fonemas vocálicos tónicos del inglés.

11.7 Los fonemas vocálicos tónicos del inglés.

Se puede constatar el valor fonemático de los quince núcleos vocálicos del inglés mediante pares mínimos. El Cuadro 11.8 demuestra como doce de los fonemas se dan en la secuencia modelo /b_t/. Todas esas palabras monosilábicas funcionan como miembros de pares mínimos. En este caso las palabras tienen la forma silábica CVC: /b_t/. Al cambiar el núcleo vocálico se producirá un cambio de significado y por lo tanto una palabra diferente. Por ejemplo, el par mínimo [biIt] [bIt] comprueba la oposición entre los fonemas /ii/ y /I/. El par mínimo [biit] [beit] comprueba la oposición entre los fonemas /ii/ y /I/. De esta manera se puede hacer un contraste fonológico entre todos estos doce núcleos vocálicos.

11.8 Doce de los fonemas vocálicos se dan en la secuencia modelo /b_t/ en inglés. Todas estas palabras monosilábicas pueden usarse en pares mínimos.

11.8 Doce de los fonemas vocálicos se dan en la secuencia modelo /b_t/ en inglés. Todas estas palabras monosilábicas pueden usarse en pares mínimos.

Quedan tres núcleos vocálicos por comentarse porque no ocurren en la secuencia modelo /b_t/: /υ ɔi ɔ/. El fonema /υ/ se comprueba al oponerse a /uu/ como demuestran los pares mínimos [khƱk] [khuuk] {cook, kook} y [wƱd] [wuud] {would, wooed}. El fonema /ɔi/ se comprueba al oponerse a /ou/ como demuestran los pares mínimos [khɔin] [khoun] {coin, cone} y [bɔi] [bou] {boy, bow}. El fonema /ɔ/ se comprueba en algunos dialectos del este de los Estados Unidos donde se opone al fonema /‚/ como demuestran los pares mínimos /k‚t/ /kɔt/ {cot, caught}. En esos dialectos {bought} rima con {caught}. En el dialecto americano del medio-oeste el fonema /ɔ/ ocurre solamente ante el fonema /r/ como en las palabras /bɔr/ {bore, boar} y /fɔr/ {for, fore, four}.13 ifig0003

El anglohablante suele pensar que el inglés tiene cinco vocales, es decir, i e a o u. El concepto de que el inglés tenga solo cinco vocales es un concepto puramente ortográfico, pues los ejemplos de arriba demuestran que en inglés hay quince núcleos vocálicos que se oponen. De hecho, cada letra ortográfica puede representar múltiples fonemas. Por ejemplo, el grafema {a} puede realizarse como [‚] en {father}, como [ei] en {date} o como [€] en {cat}. El Cuadro 11.9 demuestra las correspondencias grafémicas para los quince núcleos vocálicos fonémicos del inglés. Es importante, sin embargo recordar que esas correspondencias son generalizaciones y no reglas absolutas, pues el cuadro también contiene excepciones notables.

El Cuadro 11.9 presenta los quince núcleos vocálicos del inglés en la primera columna. El resto del cuadro presenta las correspondencias ortográficas. Tradicionalmente se han dividido los núcleos vocálicos en tres grupos: vocales largas, vocales breves y diptongos. El Cuadro 11.10 presenta las vocales ortográficas en sus formas largas y breves, dando primero el valor fonético y segundo la forma ortográfica.

Los diptongos son tres: [€U] {sound}, [ɔi] {boy}, [juu] {muse} (técnicamente un triptongo). El gran problema ortográfico/ fonético del inglés es: ¿Cómo representar los quince núcleos vocálicos fonológicos con solo cinco grafemas o letras vocálicas? El patrón general del inglés, que se indica en estos cuadros, es que si una sola letra vocálica se presenta entre dos letras consonánticas en la misma sílaba {CVC}, la vocal se considera breve. Por otro lado, si la palabra se deletrea con una consonante más vocal más consonante más la vocal {e} (llamada e muda) {CVCe}, o si la palabra se deletrea con una consonante más dos grafemas vocálicos más consonante {CVVC}, la vocal se considera larga. Esta generalización, que se resume en el Cuadro 11.11, es claramente ortográfica.14 ifig0003

Otra categorización que se usa en la descripción de las vocales inglesas es entre vocales tensas (ing. tense) y flojas (ing. lax). Sin excepción, las vocales flojas son todas vocales tradicionalmente breves. Las vocales tensas son tradicionalmente largas o diptongos con solamente dos excepciones. Las dos excepciones son los núcleos [‚] y [ɔ] que tradicionalmente son breves, pero que se consideran tensas. Es interesante destacar que en la mayoría de los dialectos americanos ha habido una neutralización parcial entre los fonemas /‚/ y /ɔ/. Por ejemplo, para algunos dialectos del este de los Estados Unidos las palabras [kh‚t] {cot} y [khɔt] {caught} son un par mínimo que demuestra la oposición entre los fonemas /‚/ y /ɔ/. Sin embargo, en la mayoría de los dialectos americanos, estas dos palabras tienen la misma pronunciación: [kh‚t]. Delante del fonema /r/, sin embargo, se mantiene la oposición en casi todos los dialectos americanos: [f‚Q] {far} y [fɔQ] {four}.

La categorización entre vocales tensas y flojas no es una categorización fonética; es decir, no representa rasgos fisiológicos pertinentes a su producción. Representa más bien una categorización fonotáctica de los núcleos vocálicos. Por ejemplo, tanto vocales tensas como flojas pueden aparecer en sílabas terminadas en consonante: [bÓit] [b×t] [bíit] [b™t]. Por otro lado, solamente las vocales tensas aparecen en sílabas terminadas con la propia vocal: [bÓi] [bíi]. Son imposibles en inglés palabras como *[b×] o *[b™i]. Claramente la distinción entre tensa y floja es fonotáctica.

Al examinar las diferencias fonéticas entre los núcleos vocálicos del inglés, se puede notar que hay tres factores principales que influyen en su producción: la duración, el timbre y la diptongación. La duración se

11.9 Los núcleos vocálicos fonemáticos tónicos del inglés.
11.9 Los núcleos vocálicos fonemáticos tónicos del inglés.

11.9 Los núcleos vocálicos fonemáticos tónicos del inglés.

refiere simplemente al tiempo que perdura la producción de determinado sonido. El timbre se refiere a la cualidad vocálica que resulta de la conformación de los formantes vocálicos, que varían según los rasgos fisiológicos de la vocal producida como, por ejemplo, la abertura bucal o la posición de la lengua. La diptongación resulta del cambio de timbre a través del tiempo. Al comparar la vocal larga [ii] con la vocal breve [™], como se ven en las palabras [bíit] {beat} y [b™!t] {bit}, se observa que la vocal breve no es solamente más breve que la larga, sino que también es un sonido de timbre distinto y que no presenta diptongación como la larga. De modo general, las vocales largas del inglés demuestran una duración mayor con diptongación, o sea, un cambio de timbre a lo largo de su realización. Las vocales breves, por su parte, tienen una realización de menor duración y de timbre más constante.

11.10 Las vocales ortográficas en sus formas largas y breves.

11.10 Las vocales ortográficas en sus formas largas y breves.

11.11 El patrón general del inglés de las vocales breves y largas.

11.11 El patrón general del inglés de las vocales breves y largas.

La comparación entre los sistemas vocálicos átonos de español e inglés

Es muy diferente el sistema vocálico átono español del sistema vocálico átono inglés. Como se hizo en la sección anterior, aquí se presenta un análisis de las vocales átonas del español seguido de un análisis del sistema del inglés. Con esto se podrán ver posteriormente las grandes diferencias que existen entre los sistemas vocálicos átonos de los dos idiomas.

El sistema fonológico de las vocales átonas del español

Como ya se ha presentado, el sistema vocálico del español en posición átona es un sistema simétrico de cinco vocales: [i e a o u]. Fonéticamente hay poca diferencia entre las vocales tónicas y las átonas; las átonas suelen ser ligeramente centralizadas en relación con las tónicas. Sin embargo, es importante destacar que los formantes de las vocales átonas quedan dentro de las gamas de los formantes de las vocales tónicas. El siguiente esquema indica la relación entre las vocales tónicas y las átonas.

fig0039

Se puede constatar la existencia de los cinco fonemas vocálicos en posición átona como ya se ha presentado en el Capítulo 10 sobre la fonotáctica. Vale recapitular otros datos fonotácticos para los fonemas vocálicos que se presentaron en el mismo capítulo. Los fonemas vocálicos átonos pueden ocurrir en posición inicial de palabra, interior de palabra o final de palabra. También ocurren en sílabas con o sin ataque y con o sin coda. Sin embargo, en posición final de palabra ocurren algunas limitaciones sistemáticas: las vocales /e/ /a/ y /o/ átonas son comunes en posición final de palabra, mientras que las vocales /i/ y /u/ son poco frecuentes en esa posición.

El sistema fonológico de las vocales átonas del inglés

La situación de las vocales inglesas en posición átona es muy complicada debido al hecho de que existen vocales átonas plenas y vocales átonas reducidas. Las vocales átonas plenas tienen generalmente el mismo timbre que las vocales tónicas, pero son más breves. En el caso de /ii/, /ei/, /ou/ y /uu/ puede haber también una disminución o pérdida de la diptongación. Las vocales reducidas sufren aun más reducción tanto de timbre como de duración. En cuanto al timbre, la reducción es hacia una vocal media central, el llamado schwa [‰] (o en algunos casos una vocal alta central [š]). En cuanto a la duración, la reducción puede resultar en una vocal cuya duración mide hasta la décima parte de lo que dura una vocal tónica. Las Figuras 11.12 y 11.13 representan estos dos sistemas.

La reducción vocálica representa una implosión del cuadro vocálico hacia el centro. El sonido más central, el schwa [‰], es el sonido más frecuente del inglés. El schwa [‰] se produce cuando la boca está entreabierta y la lengua está en posición de reposo y se vocalizan las cuerdas vocales. El sonido de schwa [‰] puede representarse ortográficamente por todos los grafemas: {a} contraband, dramatic, fraternity; {e} elephant, basketball, women; {i} multipli-cation, musical, irritate; {o} profession, collide, sorority; {u} campus, album, tuberculosis. La vocal alta central [š] ocurre en posición átona por coarticulación como ocurre en los siguientes ejemplos: roses, bushes, roasted, coded.15 ifig0003

El Cuadro 11.14 contiene ejemplos de cómo pueden aparecer los quince núcleos vocálicos fonemáticos en sílabas tónicas, átonas y reducidas. En la sílaba tónica, la vocal tiene un valor más distintivo y una pronunciación de mayor duración. En la sílaba átona, la vocal es todavía plena, pero sufre una reducción de duración y puede perder la diptongación. En la sílaba reducida se pierde la distinción del timbre, produciéndose en todos los casos el schwa [‰].16 ifig0003

11.12 Los sonidos vocálicos átonos plenos del inglés.

11.12 Los sonidos vocálicos átonos plenos del inglés.

11.13 Los sonidos vocálicos átonos reducidos del inglés.

11.13 Los sonidos vocálicos átonos reducidos del inglés.

Otra reducción que se debe comentar es la reducción completa, es decir, la reducción al cero fonético. Esta reducción se manifiesta en varios tipos de palabras. La reducción al cero ocurre en la terminación de las formas del tiempo pasado de los verbos. Con el verbo {started} [st‚1QRšd] la terminación tiene claramente una vocal, mientras que las palabras {timed} [tháimd] y {passed} [phǽst] se realizan fonéticamente con solo la vocal de la raíz, y la desinencia verbal no contiene una vocal articulada. Otra reducción incluye el fenómeno en que la pérdida de la vocal hace que la consonante que sigue se convierta en el núcleo silábico. Este fenómeno ocurre regularmente con los sonorantes: {little} [l™1RL=], {button} [bÁ?n=], {mother} [mÁDQ=].17 ifig0003

El proceso de reducción que ocurre en las sílabas átonas es un proceso prototípico del inglés. Ese proceso se manifiesta en la reducción temporal de las vocales plenas de las sílabas átonas y se intensifica en la implosión del sistema vocálico en las vocales centrales de las sílabas reducidas. Termina con la reducción total en algunos casos.

fig0040

11.14 Ejemplos de cómo pueden aparecer los quince núcleos vocálicos fonemáticos del inglés en sílabas tónicas, átonas y reducidas.

Los contrastes entre los sistemas vocálicos del español y del inglés

Los sistemas vocálicos del español y del inglés son marcada y fundamentalmente diferentes en su organización y su realización. Ya se ha mencionado la distinción entre el ataque y la cesación vocálicos. La configuración de las vocales españolas en un sistema es totalmente distinta a la configuración de las vocales inglesas. Las diferencias se notan tanto en las vocales que ocurren en sílabas tónicas como también en las vocales que ocurren en sílabas átonas. Debido a las diferencias entre los sistemas vocálicos es imprescindible que el estudiante de lengua aprenda bien la pronunciación de las vocales españolas.

11.15 Ataque y cesación vocálicos de español e inglés.

11.15 Ataque y cesación vocálicos de español e inglés.

Ataque y cesación vocálicos

El ataque vocálico ocurre cuando el primer sonido de un grupo fónico es una vocal. En otras palabras, ocurre cuando la vocal sucede a una pausa: /V… En español la fase intensiva de la vocal, o sea el ataque vocálico, es creciente, mientras que en inglés la fase intensiva es abrupta. La cesación vocálica ocurre cuando el último sonido de un grupo fónico es una vocal. En otras palabras, ocurre cuando la vocal precede a una pausa: …V/. En español la fase disten-siva de la vocal, o sea la cesación vocálica, es abrupta, mientras en inglés la fase intensiva es decreciente. Estos datos se resumen en el Cuadro 11.15.

Al comparar los dos idiomas se nota que el ataque y la cesación se realizan de forma inversa: mientras que el ataque vocálico del español es creciente, la cesación vocálica del inglés es decreciente. A la inversa, mientras que el ataque vocálico del inglés es abrupto, la cesación vocálica del español es abrupta.

Los sistemas vocálicos según su tonicidad

El español tiene un sistema vocálico simétrico sencillo de cinco vocales que ocurre en los dos tipos de tonicidad: es decir, tanto en posición tónica como en posición átona. Esto contrasta pronunciadamente con el inglés que tiene tres tipos de tonicidad: es decir, posición tónica, posición átona plena y posición átona reducida. El Cuadro 11.16 resume los sistemas vocálicos de los dos idiomas según su tonicidad.

Son chocantes las diferencias entre los sistemas vocálicos de los dos idiomas. El sistema del español es simétrico, sencillo y constante, tanto en posición tónica cuanto en posición átona. El sistema del inglés, en contraste, es cuasi-simétrico, complicado y susceptible a cambios drásticos según su tonicidad.

Las vocales en posición tónica

En posición tónica, el español tiene un sistema sencillo de cinco vocales. Por su parte, el inglés tiene un sistema complicado de quince núcleos vocálicos fonemáticos que incluye vocales simples, diptongos y hasta un triptongo.

Al contrastar los dos sistemas tónicos es importantísimo observar que no hay ninguna vocal española que aparezca dentro del sistema vocálico del inglés. En otras palabras, el anglohablante que aprende español tiene que aprender a pronunciar cinco sonidos nuevos. Las vocales inglesas más cercanas a las cinco vocales españolas son marcadamente distintas. Las diferencias son de timbre, diptongación y por lo tanto duración. Desgraciadamente la mayoría de los manuales de pronunciación y libros de texto de lengua española para anglohablantes erróneamente presenta esas vocales como equivalentes.

El Cuadro 11.17 destaca claramente la falta de correspondencia entre las cinco vocales españolas y sus supuestas vocales correspondientes del inglés.18 ifig0003 En el caso de las cuatro vocales /i e o u/, la pronunciación inglesa comienza con una vocal que se aproxima a la vocal española, pero en inglés el complejo vocálico no termina con esa vocal simple, sino que continúa con una diptongación, es decir, un cambio de timbre, lo cual extiende su duración notablemente. En el caso del fonema /a/, la diferencia entre el español y el inglés no se trata de una diptongación, sino que se trata de una marcada diferencia en el timbre como también en la duración de las vocales. Esas diferencias se ven claramente en los sonogramas de la Fig 11.18.

11.16 Los sistemas vocálicos según su tonicidad.

11.16 Los sistemas vocálicos según su tonicidad.

11.17 La falta de correspondencia entre las cinco vocales españolas y sus supuestas vocales correspondientes del inglés.

11.17 La falta de correspondencia entre las cinco vocales españolas y sus supuestas vocales correspondientes del inglés.

Otra discrepancia significativa entre los sistemas vocálicos del español y del inglés tiene que ver con el análisis fonológico de los diptongos. Como ya se ha presentado, el inglés cuenta con siete diptongos y hasta un triptongo que funcionan como núcleos fonemáticos: por ejemplo, las palabras [bíit] {beat}, [bÓit] {bait}, [bÕut] {boat}, [bÖut] {boot}, [báit] {bite}, [bǽut] {bout}, [bO1il] {boil} y [bjÖut] {butte}. Todas se analizan fonológicamente como palabras monosilábicas de forma CVC, es decir, que se forman mediante una consonante más vocal más consonante. Se analizan así a pesar de que tienen en el medio un complejo vocálico en que hay un cambio de timbre, es decir, fonéticamente son diptongos o triptongos, pero fonológicamente representan un solo fonema.

11.18 Las vocales españolas [i e a o u] en contraste con sus suspuestas equivalencias inglesas de las palabras {see, say, saw, so, sue}. Se puede ver que las vocales españolas [i e o u] son monoptongos, como lo demuestran los formantes estables. En cambio las vocales inglesas [ii ei ou uu] son claramente diptongos, como demuestran la fuerte transición de sus distensiones. Las frecuencias de los formantes de la vocal española [a] y de la vocal inglesa [‚] son diferentes.

11.18 Las vocales españolas [i e a o u] en contraste con sus suspuestas equivalencias inglesas de las palabras {see, say, saw, so, sue}. Se puede ver que las vocales españolas [i e o u] son monoptongos, como lo demuestran los formantes estables. En cambio las vocales inglesas [ii ei ou uu] son claramente diptongos, como demuestran la fuerte transición de sus distensiones. Las frecuencias de los formantes de la vocal española [a] y de la vocal inglesa [‚] son diferentes.

Los diptongos

La situación de los diptongos en español es muy diferente. Una diferencia es que el español tiene más diptongos que el inglés, por eso los diptongos españoles se tratarán en su propio capítulo. Hay, sin embargo, tres diptongos del inglés que son fonéticamente similares a tres de los diptongos españoles. Estos diptongos son los núcleos /eI/, /oU/ y /aI/. El Cuadro 11.19 presenta ejemplos de estos diptongos tanto en inglés como en español junto con su transcripción fonética y estructura fonológica.

La diferencia más significativa es la de la estructura fonológica. En el caso del inglés, el diptongo fonético [ei] representa un solo fonema /ei/, siendo el diptongo un complejo vocálico que funciona en sí como el núcleo de la sílaba. En el caso del español, el diptongo fonético [ei] representa dos fonemas, siendo el fonema /e/ el núcleo de la sílaba, seguida del fonema /i/ que ocurre fonéticamente como semivocal en la coda silábica. Una prueba de que los diptongos tienen que analizarse de esta manera es que en español existen pares mínimos de pala-bras en que el fonema vocálico /e/ ocurre seguido o no del fonema /i/ como en el caso de [peinááðo] frente a [penáðo]. En inglés tales oposiciones no existen.19 ifig0003

Las vocales en posición átona

En posición átona, el español tiene el mismo sistema sencillo de cinco vocales. El inglés, por su parte, tiene dos sistemas que aparecen en posición átona: un sistema átono pleno (parecido al sistema tónico) y un sistema reducido.

Al contrastar los dos sistemas átonos es importante observar que mientras el sistema español no manifiesta grandes diferencias ni de timbre ni de duración respecto al sistema tónico, el inglés sí manifiesta grandes diferencias. En primer lugar, el inglés tiene dos sistemas que aparecen en posición átona. En el sistema átono pleno del inglés, las vocales suelen ser de duración menor en comparación con sus equivalentes tónicos. En el caso de algunos diptongos (/ii/, /ei/, /ou/ y /uu/) hay una disminución general o pérdida de diptongación.

Las vocales reducidas sufren aun más debilitamiento de tanto el timbre como la duración. En cuanto al timbre, la reducción es hacia una vocal media central, el llamado schwa [‰]. En cuanto a la duración, la reducción puede resultar en una vocal cuya duración mide hasta la décima parte de lo que dura una vocal tónica. Es importantísimo señalar que el schwa [‰] no ocurre nunca en ningún dialecto del español.

Como ya se ha demostrado, el debilitamiento de la vocal átona inglesa en algunos casos puede resultar en la pérdida fonética total de la vocal. Con la excepción de escasos dialectos, este fenómeno tampoco ocurre en español.

Para las vocales átonas, el patrón general del español es el mantenimiento del timbre y de la duración de las vocales tónicas, mientras que el patrón general para el inglés es hacia el debilitamiento o reducción del sistema vocálico.

Puntos esenciales

Puesto que todas las sílabas del español y casi todas las sílabas del inglés contienen una vocal como núcleo, las vocales suelen formar la base de los dos sistemas fonológicos. En los dos idiomas, la frecuencia de ocurrencia media de los fonemas vocálicos supera a la frecuencia de ocurrencia media de las consonantes.

11.19 Ejemplos de los diptongos /ei/, /ou/ y /ai/ en inglés y en español.

11.19 Ejemplos de los diptongos /ei/, /ou/ y /ai/ en inglés y en español.

Al comparar los sistemas vocálicos de español e inglés desde una perspectiva fonológica, se puede notar que el español tiene un sistema invariable de cinco fonemas. El sistema vocálico del inglés, por su parte, es un sistema muy complejo de quince fonemas vocálicos en posición tónica hasta dos en posición átona. Es interesante observar que la variación fonética dialectal del español es casi exclusivamente consonántica. Esto quiere decir que la pronunciación de las vocales es bastante uniforme entre los varios dialectos del español. Por el contrario, el inglés demuestra una variación fonética que es mayormente vocálica. Esto no quiere decir que no exista la variación consonántica, pero los distintos dialectos del inglés se reconocen principalmente por las diferencias en la realización de sus vocales.

Las grandes diferencias entre los sistemas vocálicos del español y del inglés hacen destacar la suma importancia de dedicar mucho empeño en la adquisición del sistema fonológico y de la realización fonética de las vocales del español. Hay dos razones fundamentales que hacen con que sea tan importante concentrarse en la adquisición de una buena pronunciación de las vocales: que el estudiante adquiera una buena pronunciación de las vocales. Primero, los sonidos vocálicos son los sonidos más frecuentes del español, representando casi el 50% de los sonidos producidos en la cadena fónica. Segundo, el sistema de los sonidos vocálicos es muy estable en el mundo hispánico, apenas existe una variación dialectal. Esto quiere decir que ante todo, el estudiante tiene que adquirir una destreza en la pronunciación de las vocales si quiere adquirir una buena pronunciación del español. A la inversa, el estudiante que no adquiere una buena pronunciación de las vocales nunca tendrá un acento aceptable del español.

Los fonemas vocálicos del español

Para que el estudiante aprenda a pronunciar el español bien, es imperativo que entienda el sistema fonológico del español. Cuando un emisor produce una cadena fónica, tiene que producirla dentro de los parámetros que permita que el receptor identifique los sonidos y los sistematice de acuerdo con el sistema fonológico de la lengua común. Cuando un emisor no produce una cadena fónica dentro de los parámetros del sistema, el enunciado puede resultar no inteligible. A veces un enunciado puede ser comprendido por un receptor favorablemente dispuesto al esfuerzo del emisor por comunicarse. Peor es cuando un receptor simplemente desiste en sus intentos de comprender el enunciado, rechazándolo por ser recargado de un acento demasiado extranjero, resultando en una incomprensión. Puesto que la ortografía es, en su base, fonemática, y no fonética, se comenta en esta sección también las correspondencias grafémicas.

La presentación de los fonemas individuales en este libro sigue el modelo general teórico ya presentado. Se examina cada fonema comenzando con un análisis fonológico que incluye una especificación de las relaciones entre fonemas, de la distribución de sus alófonos y de sus características fonotácticas.

El análisis fonético sigue con una presentación de cada alófono, lo cual comenta sus características articulatorias, acústicas y auditivas. La presentación articulatoria contiene una descripción pormenorizada de los movimientos fisiológicos necesarios para producir el sonido correctamente. Se incluye también un trazo articulatorio que permite ver el posicionamiento correcto de los órganos fonadores. La presentación acústica contiene una descripción de la onda sonora apoyada por un trazo de la forma de onda y por un espectrograma del sonido. La presentación auditiva contiene una descripción de los rasgos de la onda sonora que emplea el receptor para identificar y sistematizar el sonido.

Los detalles fonéticos son necesarios porque la adquisición de una segunda lengua se lleva a cabo tanto fonológica como fonéticamente. Es decir, el estudiante tiene que adquirir la habilidad de controlar los órganos articulatorios para poder producir la onda sonora correcta, permitiendo la fácil identificación y sistematización del sonido por parte del receptor hispanohablante. En algunos casos se incluyen también notas dialectales cuando existen variantes regionales de difusión extendida.

El análisis de cada fonema concluye con una presentación de pistas pedagógicas para que el estudiante pueda enterarse de lo que tiene que hacer para mejorar su pronunciación. El estudiante de un segundo idioma tiende a producir los sonidos del segundo idioma de acuerdo con las pautas fonéticas de su idioma materno. Esa interferencia de los sonidos del idioma materno en la producción fonética del segundo idioma, es la causa principal de un acento extranjero. El hecho de que no exista una correspondencia exacta entre los sonidos del español y del inglés, hace que cuando el estudiante anglohablante del español enuncie palabras en español, lo haga con los sonidos del inglés más próximos a los sonidos del español que deberían producirse. Este fenómeno se llama el principio del vecino más próximo. Las pistas pedagógicas en primer plano le ayudan al estudiante a saber las diferencias que hay entre el sonido español deseado y su vecino más próximo del inglés. La presentación parte del principio de que es necesario que el estudiante perciba cómo el sonido deseado se difiere de su vecino inglés antes de poder producir correctamente el sonido español; es decir, la percepción precede a la producción.

El fonema /a/

El fonema /a/ es único dentro del sistema vocálico del español por ser la única vocal central y también la única vocal abierta.

La fonología del fonema /a/

El fonema /a/ se opone a los demás fonemas vocálicos /i e o u/ como se ejemplifica con la serie [páso píso pÓso pÕso pÖso]. El fonema /a/ es el segundo fonema más frecuente del español con un porcentaje de frecuencia de 12,7% del total de los fonemas. Hay una correspondencia exacta entre el grafema {a} y el fonema /a/.

En términos prácticos pedagógicos, el fonema /a/ tiene una distribución única, es decir, el fonema /a/ se representa siempre mediante el alófono [a]. Sin embargo, en términos fisiológicos científicos, el fonema /a/ puede tener también otros dos alófonos: uno nasalizado y uno ensordecido. El alófono nasalizado [Ü] ocurre como fenómeno común a todos los dialectos. Esa nasalización sigue la regla general presentada antes, en que la vocal se nasaliza delante de una consonante nasal en posición final de sílaba. El alófono ensordecido [ḁ] ocurre en algunos idiolectos, siguiendo la regla optativa presentada antes, en que la vocal puede ensordecerse después de una consonante sorda y antes de una pausa.

Referente a la fonotáctica, el fonema /a/ aparece siempre como núcleo vocálico. El fonema /a/ puede ser tónico en posición inicial, medial y final: [kæntaГa], [kÜntnГa], [kÜntaГá]. Como se ve también en los ejemplos anteriores, el fonema /a/ puede ser átono en las mismas posiciones.

La fonética del alófono [a]

El alófono [a] es el alófono principal del fonema /a/. La descripción articulatoria del alófono [a] es igual a la definición del fonema: en cuanto al modo de articulación, es una vocal abierta o baja y en cuanto al lugar de articulación es central. Por no ser una vocal posterior, la vocal [a] es deslabializada. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.20.

La caracterización acústica del sonido [a] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.21.

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [a] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 750 Hz y un segundo formante alrededor de 1300 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.22.

La percepción auditiva del sonido [a] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. Estos mismos formantes se hallan representados en el sonograma de la Fig. 11.22.

11.20 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [a]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.20 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [a]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.21 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [a].

11.21 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [a].

Pistas pedagógicas

Es importante reconocer que el sonido [a] no es un sonido que ocurre en la mayoría de los dialectos del inglés. Muchos libros de texto y manuales de pronunciación erróneamente indican una correlación entre el sonido [a] del español y el sonido vocálico de {hot} [a] o la primera vocal de {father} [a]. La Fig. 11.23 contiene un gráfico que ubica las vocales [e a o] del español y las vocales [æ a ∂] del inglés como también el punto de partida del diptongo [ai], según sus formantes. El gráfico indica claramente que la vocal [ᾳ] del inglés es muy diferente de la vocal [a] del español. De hecho, el sonido [a] del español difiere tanto de la vocal [ᾳ] del inglés como de la vocal [æ] del inglés. El gráfico indica que el sonido vocálico del inglés más próximo al sonido vocálico [a] del español es la vocal que ocurre al comienzo del diptongo [ai] como en las palabras inglesas {bite}, {right}, {height}, {sky}, {buy} o {lie}.

Las interferencias del inglés en la pronunciación del español, por parte del estudiante anglohablante, tienen que ver tanto con el timbre como con la duración. Es útil la Fig. 11.23 para visualizar las posibles inter-ferencias de timbre de las vocales inglesas que pueden ocurrir. Las tres vocales inglesas con timbres más próximos a la vocal española [a] son [æ a ∂]. También interfiere la vocal inglesa [a] por el nombre del grafema {a} [eį]. Estas vocales sí interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [a] como se puede ver en el Cuadro 11.24.

11.22 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [a].

11.22 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [a].

En el Cuadro 11.24 se observa también que hay además de interferencias de timbre, interferencias de duración. En los ejemplos de {la} [la:] y {cama} [ka1:m∂] se ve que el anglohablante transfiere el alargamiento [a:] sistemático del inglés a la producción del español.

11.23 La posición de las vocales [e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [æ a ∂] del inglés como también el punto de partida de los diptongos [ai ei] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [a] del español con un círculo.

11.23 La posición de las vocales [e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [æ a ∂] del inglés como también el punto de partida de los diptongos [ai ei] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [a] del español con un círculo.

Es importante recordar que en español el timbre de la vocal no cambia según su tonicidad. Esto quiere decir que se emplea el sonido vocálico [a] tanto en sílabas tónicas como también en sílabas átonas: el anglohablante tiene que resistirse a la tentación de producir schwa [∂] en sílabas átonas. Esa tendencia es aun más fuerte cuando se trata del fonema /a/ átono final de palabra como en {casa} {habla} {tenga} que tienen que pronunciarse como [kása] [áßla] [tìŋga] y no como *[kás] *[áßl] *[tÓŋg].

El estudiante no tiene que preocuparse por el alófono nasalizado [ã] porque se trata de una coarticulación anticipante natural que el anglohablante producirá automáticamente. El anglohablante tampoco tiene que preocuparse por el alófono ensordecido [ḁ] porque se trata de un fenómeno esporádico e idiosincrásico.

11.24 Las tres vocales inglesas con timbres más próximos a la vocal española [a] son [æ a ∂]. También interfiere la letra inglesa {a} por el nombre de su grafema [eį]. Estas vocales interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [a] española.

11.24 Las tres vocales inglesas con timbres más próximos a la vocal española [a] son [æ a ∂]. También interfiere la letra inglesa {a} por el nombre de su grafema [eį]. Estas vocales interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [a] española.

Consejos prácticos

El anglohablante que quiere adquirir una buena pronunciación de la vocal /a/ del español debe:

El fonema /e/

El fonema /e/ comparte el rasgo de lugar de articulación con la vocal /i/, siendo los dos fonemas vocales anteriores. Comparte el rasgo de modo de articulación con la vocal /o/, siendo las dos vocales medias.

La fonología del fonema /e/

El fonema /e/ se opone a los demás fonemas vocálicos /i a o u/ como se ejemplifica en la serie [páso píso pÓso pÕso pÖso]. El fonema /e/ es el fonema más frecuente del español con un porcentaje de frecuencia de 14,8% del total de los fonemas. Hay una correspondencia exacta entre el grafema {e} y el fonema /e/.

En términos prácticos pedagógicos, el fonema /e/ tiene una distribución complementaria, es decir, el fonema /e/ se representa mediante dos alófonos principales: [e] y [Ɛ]. La vocal [e] es semicerrada y la vocal [Ɛ], semiabierta; sus características fonéticas se presentan con más detalles a continuación. La base de la distribución complementaria gira alrededor de la estructura silábica en que aparece el fonema. De modo general, la variante más abierta [Ɛ] ocurre cuando es una vocal trabada, es decir, cuando aparece en una sílaba cerrada, o sea ante una consonante en posición final de sílaba. La variante más cerrada [e] ocurre cuando es una vocal libre, es decir, cuando aparece en una sílaba abierta, o sea cuando la misma vocal está en posición final de sílaba. Sin embargo, existen algunas excepciones a esas generalizaciones. La regla de distribución complementaria para el fonema /e/ es:

fig0041

Como la distribución complementaria del fonema /e/ es sensible a la posición silábica, es importante entender bien las reglas de la división silábica del español, que solo se presentarán detalladamente en el Capítulo 18. Se verá en ese capítulo, entonces, cómo el silabeo afecta la aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /e/.

El hecho de que exista una variación alofónica basada en la posición silábica, ya es suficiente para establecer una regla. Sin embargo, hay que recordar que una regla, especialmente en este caso, es una gene-ralización que puede no tener aplicación categórica. No obstante, si el estudiante aplica esa regla en su habla, tendrá una aproximación mejor a una pronunciación auténtica.

El análisis espectrográfico que se presentará a continuación demuestra la diferencia que existe en cuanto a la pronunciación y los contextos fonológicos en que aparecen los alófonos [e] y [Ɛ]. La aplicación de la regla se ejemplifica con las palabras del Cuadro 11.25.20 ifig0003

11.25 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /e/.

11.25 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /e/.

En términos fisiológicos científicos, como en el caso del fonema /a/, el fonema /e/ puede tener también otros dos alófonos: uno nasalizado y uno ensordecido. El alófono nasalizado ocurre como fenómeno común a todos los dialectos. Esa nasalización sigue la regla general presentada antes en que la vocal se nasaliza delante de una consonante nasal en posición final de sílaba. Sin embargo, es importante notar que puesto que la vocal nasalizada siempre es trabada o sea que ocurre en una sílaba cerrada, su realización es siempre más abierta, es decir, el alófono [Ɛ]. El alófono ensordecido ocurre en algunos idiolectos siguiendo la regla optativa presentada antes en que la vocal puede ensordecerse después de una consonante sorda y antes de una pausa. Puesto que la vocal ensordecida siempre es libre o sea que ocurre en una sílaba abierta, su realización es siempre más cerrada, es decir, el alófono [ḙ].

Referente a la fonotáctica, el fonema /e/ aparece siempre como núcleo vocálico. El fonema /e/ puede ser tónico tanto en posición inicial, como medial y final: [sÓleßſe], [selÓßſe], [seleBRÓ]. Como se ve en los ejemplos anteriores, también puede ser átono en posición inicial, medial y final.

La fonética del alófono [e]

El alófono [e] es el alófono principal del fonema /e/. Es el alófono principal porque es el alófono que suele ocurrir en sílabas abiertas, que son más frecuentes que las sílabas cerradas en español. La descripción articulatoria del alófono [e] es semejante a la definición del fonema con la diferencia del modo de articulación. En cuanto al modo de articulación, es fonéticamente una vocal semicerrada y en cuanto al lugar de articulación, es anterior. Siendo vocal anterior, el sonido [e] es deslabializado. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.26.

11.26 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [e]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.26 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [e]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.27 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [e].

11.27 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [e].

11.28 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [e].

11.28 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [e].

La caracterización acústica del sonido [e] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.27.

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [e] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 525 Hz y un segundo formante alrededor de 1850 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.28.

La percepción auditiva del sonido [e] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. El receptor sistematiza el sonido [e] como representante del fonema /e/. Estos mismos formantes se hallan presentados en el sonograma de la Fig. 11.28.

La fonética del alófono [Ɛ]

El alófono [Ɛ] es el segundo alófono principal del fonema /e/. Es el segundo alófono principal porque es el alófono que suele ocurrir en sílabas cerradas, que son menos frecuentes que las sílabas abiertas en español. La descripción articulatoria del alófono [Ɛ] es semejante a la definición del fonema con la diferencia del modo de articulación. En cuanto al modo de articulación, es fonéticamente una vocal semiabierta y en cuanto al lugar de articulación, es anterior. Siendo vocal anterior, el sonido [Ɛ] es deslabializado. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.29.

La caracterización acústica del sonido [Ɛ] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.30.

11.29 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [Ɛ]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.29 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [Ɛ]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.30 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [Ɛ].

11.30 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [Ɛ].

11.31 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [Ɛ].

11.31 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [Ɛ].

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [Ɛ] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 762 Hz y un segundo formante alrededor de 1300 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.31.

La percepción auditiva del sonido [Ɛ] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. El receptor sistematiza el sonido [Ɛ] como representante del fonema /e/. Estos mismos formantes se hallan presentados en el sonograma de la Fig. 11.31.

11.32 La posición de las vocales [e Ɛ a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [æ Ɛ ∂] del inglés como también el punto de partida del diptongo [eį] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica las vocales objetivo [e] y [Ɛ] del español con un círculo.

11.32 La posición de las vocales [e Ɛ a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [æ Ɛ ∂] del inglés como también el punto de partida del diptongo [eį] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica las vocales objetivo [e] y [Ɛ] del español con un círculo.

Pistas pedagógicas

Es importante reconocer que el sonido [e] no es un sonido que ocurre en inglés. Muchos libros de texto y manuales de pronunciación erróneamente indican una correlación entre el sonido [e] del español y el sonido vocálico de {ate} [eįt]. Algunos incluyen también la posibilidad de una correlación con el sonido vocálico de {net} [Ɛ]. La Fig. 11.32 contiene un gráfico que ubica las vocales [e Ɛ a o] del español y las vocales [Ɛ æ ∂] del inglés como también el punto de partida del diptongo [eį], según sus formantes. El gráfico indica claramente que el punto de partida del diptongo [eį] del inglés es casi idéntico a la vocal [e] del español. Lo que no indica es la estabilidad de los formantes de la [e] del español y la diptongación o transición de los formantes de la [eį] inglesa, lo que sí se puede ver en la Fig. 11.18 El gráfico también indica una proximidad entre el sonido vocálico [Ɛ] del español y el sonido vocálico [Ɛ] del inglés, aunque este es más abierto que la variante española.

Es interesante observar las diferencias que existen entre los sonidos [eį Ɛ] del inglés por un lado y los sonidos [e Ɛ] del español por otro lado. En inglés, los dos sonidos [eį Ɛ] aparecen en pares mínimos, como ˈbeit ˈbƐt], que atestiguan una oposición fonológica. Como representan fonemas distintos, los sonidos [eį Ɛ] del inglés se diferencian al máximo siguiendo el principio de separación perceptiva suficiente. Esa separación se destaca por el timbre inicial de las vocales, como se puede ver en la Fig. 11.32. También se destaca la separación por el timbre final: en la vocal [Ɛ] el timbre no cambia a lo largo de la vocal, pero en la vocal [eį] el timbre sí cambia resultando en un diptongo. Además, se diferencian por la duración, siendo la vocal [Ɛ] breve y la vocal [eį] más larga, debido a su diptongación.

En español la situación es muy diferente. Los sonidos [e Ɛ] no reflejan una oposición fonológica, es decir, son alófonos del mismo fonema. Como consecuencia, no manifiestan diferencias fonéticas tan extremas como existen en el caso del inglés. En español las vocales [e Ɛ] tienen la misma duración y cada una tiene formantes uniformes sin diptongación. Las vocales españolas [e Ɛ] se encuentran más próximas la una a la otra en comparación con las vocales inglesas [eį Ɛ], porque no tienen que mantener una separación perceptiva suficiente.

La aplicación de la regla de distribución de los alófonos del fonema /e/ del español parte de una base silábica. El anglohablante generalmente tiende a producir la vocal semicerrada [e] (con una diptongación indebida [eį]) en sílabas abiertas y tiende a producir la vocal semiabierta [Ɛ] (aun más abierta que la norma española) en sílabas cerradas. Sin embargo, el anglohablante que quiere dominar la pronunciación tiene que atenerse también a las excepciones contenidas en la regla de distribución complementaria.

Las interferencias del inglés en la pronunciación del español por parte del estudiante anglohablante tienen que ver tanto con el timbre como con la duración. Es útil la Fig. 11.32 en visualizar las posibles interferencias de timbre de las vocales inglesas que pueden ocurrir. Las tres vocales inglesas con timbres más próximos a la vocal española [e] son [eį Ɛ ∂]. Sin embargo, por motivos fonotácticos, el sonido [Ɛ] del inglés no suele interferir en la buena pronunciación del español por parte del anglohablante. La razón es que en inglés, el fonema /Ɛ/ nunca ocurre en una sílaba abierta; en otras palabras, el fonema /Ɛ/ del inglés siempre ocurre en una sílaba cerrada.

Puesto que el alófono [ε] del español suele ocurrir en las sílabas cerradas también, el sonido [ε] del inglés no presenta problemas de interferencia. Sin embargo, hay casos en que la diferencia en la estructura silábica entre los dos idiomas sí crea una interferencia. La regla general del silabeo inglés para la secuencia VCV (vocal consonante vocal) divide la sílaba VC-V, mientras que en español la división es V-CV. Siendo así, el anglohablante tiende a emplear la vocal [ε] de una sílaba cerrada inglesa en una sílaba abierta del español, como se ve en el tercer ejemplo del Cuadro 11.33. Las otras dos vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [e] son [e̯] y [ǝ], como se puede ver también en el Cuadro 11.33.

11.33 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [e] española.

11.33 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [e] española.

En el Cuadro 11.33 se nota que hay además de interferencias de timbre, interferencias de duración también. La interferencia principal en cuanto al fonema /e/ tiene que ver con la diptongación que el anglohablante suele producir para el alófono [e] del español. Esa interferencia suele ocurrir en posición tónica (como en el ejemplo de {say} [sé̯]), pero se extiende también a la posición átona final (como en el ejemplo de *[cláse̯]). La segunda interferencia significativa es que, a diferencia del inglés, el timbre de la vocal en español no cambia según su tonicidad. Esto quiere decir que se emplea el sonido vocálico [e] o [ǝ] tanto en sílabas tónicas como también en sílabas átonas: el anglohablante tiene que resistir a la tentación de producir schwa [ǝ] en sílabas átonas. Esta tendencia es más fuerte cuando se trata del fonema /e/ átona en posición no final como en las palabras {sereno} {seleccionar} {mecánico} que tienen que pronunciarse como [sǝRóno] [selEksjonáR] [mekániko] y no como *[sǝRéno] *[sǝlεksjonáR] *[mǝkániko].

El estudiante no tiene que preocuparse por el alófono nasalizado [å] porque se trata de una coarticulación anticipante natural que el anglohablante producirá automáticamente. El anglohablante tampoco tiene que preocuparse por el alófono ensordecido [e4] porque se trata de un fenómeno esporádico e idiosincrásico.

El fonema /o/

El fonema /o/ comparte el rasgo de lugar de articulación con la vocal /u/, siendo los dos fonemas vocales posteriores. Comparte el rasgo de modo de articulación con la vocal /e/, siendo las dos vocales medias.

La fonología del fonema /o/

El fonema /o/ se opone a los demás fonemas vocálicos /i e a u/ como se ejemplifica con la serie [páso píso póso pÕso pÖso]. El fonema /o/ es el tercer fonema más frecuente del español con un porcentaje de frecuencia de 10,5% del total de los fonemas. Hay una correspondencia exacta entre el grafema {o} y el fonema /o/.

En términos prácticos pedagógicos, el fonema /o/ tiene una distribución única, es decir, el fonema /o/ se representa siempre mediante el alófono [o]. Sin embargo, en tér-minos fisiológicos científicos, el fonema /o/ puede tener también otros dos alófonos: uno nasalizado y uno ensordecido. El alófono nasalizado ocurre como fenómeno común a todos los dialectos. Esa nasalización sigue la regla general presentada antes, en que la vocal se nasaliza delante de una consonante nasal en posición final de sílaba. El alófono ensordecido ocurre en algunos idiolectos siguiendo la regla optativa presentada antes en que la vocal puede ensordecerse después de una consonante sorda y ante una pausa.

Tradicionalmente algunos tratamientos del fonema /o/ presentan dos variantes: una [o] semicerrada y una [Ɔ] semiabierta. Los tratamientos proponen que estas variantes ocurren en una distribución complementaria. Como se presentó en la Fig. 7.10 del Capítulo 7, las realizaciones físicas de cualquier vocal presentan una gama de timbres. En el caso del fonema /e/ las realizaciones fonéticas se separan en dos grupos en una distribución complementaria. En el caso del fonema /o/, sin embargo, a pesar de que existan realizaciones más cerradas como [o] y más abiertas como [Ɔ], las variantes no se separan en una distribución complementaria. El fonema /o/, por lo tanto, tiene una distribución única representada por su alófono principal: la vocal posterior semicerrada [o].

Referente a la fonotáctica, el fonema /o/ aparece siempre como núcleo vocálico. El fonema /o/ puede ser tónico tanto en posición inicial, como medial y final: [fósfoRo], [ÞmplóRo], [ÞmploRó]. El fonema /o/ también puede ser átono en posición inicial, medial y final como se ve en las palabras [okasjén], [ÞmploRÕ], [ÞmplÕRo].

La fonética del alófono [o]

El alófono [o] es el alófono principal del fonema /o/. La descripción articulatoria del alófono [o] es igual a la definición del fonema; fonéticamente es una vocal media posterior. Siendo vocal posterior, el sonido [o] es labializado. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.34.

La caracterización acústica del sonido [o] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.35.

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [o] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 500 Hz y un segundo formante alrededor de 950 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.36.

La percepción auditiva del sonido [o] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. Estos mismos formantes se hallan representados en el sonograma de la Fig. 11.36.

11.34 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [o]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.34 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [o]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.35 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [o].

11.35 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [o].

Pistas pedagógicas

Es importante reconocer que el sonido [o] no es un sonido que ocurre en inglés. Muchos libros de texto y manuales de pronunciación erróneamente indican una correlación entre el sonido [o] del español y el sonido vocálico de {note} [‘noṷt]. La Fig. 11.37 contiene un gráfico que ubica las vocales [e a o] del español y las vocales [‚ ǝ] del inglés como también el punto de partida del diptongo [oṷ], según sus formantes. El gráfico indica claramente que el punto de partida del diptongo [oṷ] del inglés es casi el mismo que el de la vocal [o] del español. Lo que no indica es la estabilidad de los formantes de la [o] del español y la diptongación o transición de los formantes de la [oṷ] inglesa, lo que sí se puede ver en la Fig. 11.18.

Las interferencias del inglés en la pronunciación del español por parte del estudiante anglohablante, tienen que ver tanto con el timbre como con la duración. Es útil la Fig. 11.37 en visualizar las posibles interferencias de timbre de las vocales inglesas que pueden ocurrir. Las tres vocales inglesas con timbres más próximos a la vocal española [o] son [‚ ǝ] y el comienzo del diptongo [oṷ]. Esas vocales sí interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [o] como se puede ver en el Cuadro 11.38.

11.36 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [o].

11.36 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [o].

En el Cuadro 11.38 se nota que hay además de interferencias de timbre, interferencias de duración también. La interferencia principal en cuanto al fonema /o/ tiene que ver con la diptongación que el anglohablante suele producir para el alófono [o] del español. Esta interferencia suele ocurrir en posición tónica (como en el ejemplo de [nóṷ]), pero se extiende también a la posición átona final (como en el ejemplo de [sóṷloṷ]). La segunda interferencia significativa es que, a diferencia del inglés, el timbre de la vocal en español no cambia según su tonicidad. Esto quiere decir que se emplea el sonido vocálico [o] tanto en sílabas tónicas como también en sílabas átonas: el anglohablante tiene que resistir a la tentación de producir schwa [ǝ] en las sílabas átonas. Esa tendencia es más fuerte cuando se trata del fonema /o/ átono en posición no final como en las palabras {tomaron} {color} {completo} que tienen que pronunciarse como [tomáRon] [kolóR] [kέmpl×to] y no como *[tǝmáRǝn] *[kǝlóR] *[kómpl×to].

11.37 La posición de las vocales [e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [‚ ǝ] del inglés como también el punto de partida del diptongo [oṷ] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [o] del español con un círculo.

11.37 La posición de las vocales [e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [‚ ǝ] del inglés como también el punto de partida del diptongo [oṷ] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [o] del español con un círculo.

A veces, el anglohablante comete una transferencia negativa basada en el hecho de que en inglés la letra {o} como vocal breve se pronuncie como [‚]. Por eso ocurren errores como *[poRtuniDáD] para {oportunidad} [opoRtuniDáD] o *[kmjun™!stǝ] para {comunista} [komunísta].

11.38 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [o].

11.38 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [o].

El estudiante no tiene que preocuparse por el alófono nasalizado [õ] porque se trata de una coarticulación anticipante natural que el anglohablante producirá automáticamente. El anglohablante tampoco tiene que preocuparse por el alófono ensordecido [o4] porque se trata de un fenómeno esporádico e idiosincrásico.

Consejos prácticos

El anglohablante que quiere adquirir una buena pronunciación de la vocal /o/ del español debe:

El fonema /i/

El fonema /i/ comparte el rasgo de lugar de articulación con la vocal /e/, siendo los dos fonemas vocales anteriores. Comparte el rasgo de modo de articulación con la vocal /u/, siendo las dos vocales cerradas o altas. El fonema /i/ se difiere de los fonemas vocálicos /a e o/ porque en su forma átona puede combinarse con otra vocal cualquiera para formar un diptongo. Los diptongos se tratarán más a fondo en el Capítulo 12.

La fonología del fonema /i/

El fonema /i/ se opone a los demás fonemas vocálicos /e a o u/ como se ejemplifica en la serie [páso píso péso póso púso]. El fonema /i/ es el quinto fonema más frecuente del español con un porcentaje de frecuencia de 6,4% del total de los fonemas. Los cinco fonemas más comunes del español incluyen cuatro vocales y una consonante: /e a o s i/. Ortográficamente, el fonema /i/ se representa principalmente por el grafema {i}, pero también por el grafema {y} en posición átona final de palabra. Históricamente estos dos grafemas son el grafema {i} (la llamada i-latina) y el grafema {y} (la llamada i-griega).

En términos prácticos pedagógicos, el fonema /i/ tiene una distribución complementaria, es decir, el fonema /i/ se representa mediante tres alófonos principales: [i], [j] y [I̯]. La base de la distribución complementaria gira alrededor de la estructura silábica en que aparece el fonema y la producción de diptongos y triptongos. La regla de distribución complementaria presentada en el Capítulo 9 es:

fig0042

La aplicación de la regla se ejemplifica con las palabras del Cuadro 11.3921 ifig00033. Los detalles de la formación de los diptongos y los pormenores articulatorios, acústicos y auditivos de los alófonos empleados en los diptongos y triptongos se presentarán en el Capítulo 12.

En términos fisiológicos científicos, como en el caso de los demás fonemas vocálicos, el fonema /i/ puede tener también otros dos alófonos: uno nasalizado y uno ensordecido. El alófono nasalizado ocurre como fenómeno común a todos los dialectos. Esa nasalización sigue la regla general presentada antes en que la vocal se nasaliza delante de una consonante nasal en posición final de sílaba. El alófono ensordecido ocurre en algunos idiolectos siguiendo la regla optativa presentada antes en que la vocal puede ensordecerse después de una consonante sorda y antes de una pausa.

11.39 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /i/.

11.39 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /i/.

Referente a la fonotáctica, el fonema /i/ aparece mayormente como núcleo vocálico, pero a diferencia de los fonemas /e a o/, el fonema /i/ puede aparecer tanto en el ataque como en la coda de la sílaba. El fonema /i/ puede ser tónico tanto en posición inicial como medial: [íªtimo], [iªtímo]. Como se ve en los ejemplos anteriores, también puede ser átono en posición inicial y medial. Es importante observar que el fonema /i/ no ocurre sistemáticamente en posición final de palabra, sea tónico o átono. Los pocos ejemplos del fonema /i/ en posición final corresponden a solo el 0,1% de las ocurrencias del fonema. Las ocurrencias tónicas más sistemáticas del fonema /i/ en posición final de palabra se limitan a verbos en -er e -ir conjugados en primera persona singular del pretérito {comí} {salí} y a escasas formas adjetivales {alfonsí} {marroquí}. Las ocurrencias átonas del fonema /i/ en posición final de palabra se limitan a poquísimas palabras como {casi} {taxi}.

11.40 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [i]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.40 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [i]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.41 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [i]

11.41 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [i]

La fonética del alófono [i]

El alófono [i] es el alófono principal del fonema /i/. Es el alófono principal porque es el alófono que ocurre como núcleo silábico. La descripción articulatoria del alófono [i] es igual a la definición del fonema. En cuanto al modo de articulación, es fonéticamente una vocal cerrada y en cuanto al lugar de articulación, es anterior. Siendo vocal anterior, el sonido [i] es deslabializado. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.40.

La caracterización acústica del sonido [i] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.41.

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [i] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 315 Hz y un segundo formante alrededor de 2175 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.42.

La percepción auditiva del sonido [i] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. El receptor sistematiza el sonido [i] como representante del fonema /i/. Esos mismos formantes se hallan presentados en el sonograma de la Fig. 11.42.

11.42 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [i].

11.42 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [i].

11.43 La posición de las vocales [i e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [Ι ǝ] del inglés como también los puntos de partida de los diptongos [ii̯ ei̯] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [i] del español con un círculo.

11.43 La posición de las vocales [i e a o] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [Ι ǝ] del inglés como también los puntos de partida de los diptongos [ii̯ ei̯] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [i] del español con un círculo.

La fonética de los alófonos [j] e [i̯]

Los sonidos [j] e [i̯] son alófonos combinatorios que solo se emplean en la formación de diptongos y triptongos. Se examinarán articulatoria, acústica y auditivamente en el Capítulo 12, que trata las situaciones en que aparece más de un fonema vocálico dentro de una sílaba.

Pistas pedagógicas

Es importante reconocer que el sonido [i] no es un sonido que ocurre en inglés. Muchos libros de texto y manuales de pronunciación erróneamente indican una correlación entre el sonido [i] del español y el sonido vocálico de {beat} [bii̯t]. La Fig. 11.43 contiene un gráfico que ubica las vocales [i e a o] del español y las vocales [™ ǝ] del inglés, como también el punto de partida de los diptongos [e̯] según sus formantes. El gráfico indica claramente que el punto de partida del diptongo [e̯] del inglés es próximo a la vocal [e] del español. Lo que no indica es la estabilidad de los formantes de la [e] del español y la diptongación o transición de los formantes de la [iI̯] inglesa, lo que sí se puede ver en la Fig. 11.18.

11.44 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [i].

11.44 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [i].

Las interferencias del inglés en la pronunciación del español por parte del estudiante anglohablante tienen que ver tanto con el timbre como con la duración. Es útil la Fig. 11.43 en visualizar las posibles interferencias de timbre de las vocales inglesas que pueden ocurrir. Las tres vocales inglesas que suelen interferir en la pronunciación de la vocal española [e] son [e̯ ࡊ ǝ] como se puede ver en el Cuadro 11.44.

Como se ve en la Fig. 11.43, la vocal española [i] está muy cerca del punto de partida del diptongo [ii] del inglés. Debido a que el sonido [i] no suele ocurrir en inglés sin la diptongación, el anglohablante suele producir el diptongo automáticamente cuando trata de producir el sonido [i] del español. Otra interferencia común es la de la vocal breve inglesa [™]. Esta interferencia suele ocurrir con palabras cognadas que en inglés contienen el fonema /™/. Este fenómeno solamente ocurre en sílabas trabadas, puesto que según las reglas fonotácticas del inglés, el fonema /™/ no ocurre en sílabas abiertas. Como ejemplos de esa transferencia negativa pueden citarse las palabras {importante} {interesante} {incapaz} que tienen que pronunciarse como [ÞmpoRtæªte] [ÞªteResæªte] [ÞNkapás] y no como *[ 2mpoRtæªte] *[2ªteResæªte]*[2Nkapás].

En el Cuadro 11.44 se nota que hay además de interferencias de timbre, interferencias de duración también. La interferencia principal en cuanto al fonema /i/ tiene que ver con la diptongación que el anglohablante suele producir para el alófono [i] del español. Esa interferencia suele ocurrir en posición tónica (como en el ejemplo de {sea, see} [síi]). La segunda interferencia significativa es que, a diferencia del inglés, el timbre de la vocal en español no cambia según su tonicidad. Esto quiere decir que se emplea el sonido vocálico [i] tanto en sílabas tónicas como también en sílabas átonas: el anglohablante tiene que resistir a la tentación de producir schwa [‰] en sílabas átonas. Esta tendencia es más fuerte cuando se trata del fonema /i/ átono en posición no final como en las palabras {típico} {difícil} {cíclico} que tienen que pronunciarse como [típiko] [difísil] [síkliko] y no como *[t™ 1pkoU] *[dfís‰l] *[s™ 1klkou].

La aplicación de la regla de distribución de los alófonos comunes del fonema /i/ del español, parte de una base silábica y tiene que ver con la formación de los diptongos y trip-tongos, que se examinarán en el Capítulo 12.

El estudiante no tiene que preocuparse por el alófono nasalizado [Þ] porque se trata de una coarticulación anticipante natural que el anglohablante producirá automáticamente. El anglohablante tampoco tiene que preocuparse por el alófono ensordecido [i$] porque se trata de un fenómeno esporádico e idiosincrásico.

Consejos prácticos

El anglohablante que quiere adquirir una buena pronunciación de la vocal /i/ del español debe:

  • producir la vocal [i] del español de duración breve con un timbre más próximo al comienzo de la vocal [ii] del inglés, pero sin diptongación;
  • no producir la vocal breve inglesa [I];
  • atenerse a la regla de distribución complementaria;
  • no alargar la producción de la vocal [i] en sílabas tónicas;
  • no reducir la vocal a schwa [ə] en sílabas átonas.

El fonema /u/

El fonema /u/ comparte el rasgo de lugar de articulación con la vocal /o/, siendo los dos fonemas vocales posteriores. Comparte el rasgo de modo de articulación con la vocal /i/, siendo las dos vocales cerradas o altas. El fonema /u/ difiere de los fonemas vocálicos /a e o/ porque en su forma átona puede combinarse con otra vocal cualquiera para formar un diptongo o triptongo. Los diptongos y triptongos se tratarán más a fondo en el Capítulo 12.

La fonología del fonema /u/

El fonema /u/ se opone a los demás fonemas vocálicos /i e a o/ como se ejemplifica en la serie [páso píso pÓso pÕso pÖso]. El fonema /u/ es el décimo-segundo fonema más frecuente del español con un porcentaje de frecuencia de 3,3% del total de los fonemas. Ortográficamente, el fonema /u/ se representa exclusivamente por el grafema {u}.

En términos prácticos pedagógicos, el fonema /u/ tiene una distribución complementaria, es decir, el fonema /u/ se representa mediante tres alófonos principales: [u], [w] y [u]. La base de la distribución complementaria gira alrededor de la estructura silábica en que aparece el fonema y la producción de diptongos y triptongos. La regla de distribución complementaria presentada en el Capítulo 9 es:

fig0043
11.45 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /u/.

11.45 La aplicación de la regla de distribución complementaria del fonema /u/.

La aplicación de la regla se ejemplifica con las palabras del Cuadro 11.4522 ifig0003. Los detalles de la formación de los diptongos y triptongos y los pormenores articulatorios, acústicos y auditivos de los alófonos empleados en los diptongos y triptongos se presentarán en el Capítulo 12.

En términos fisiológicos científicos, como en el caso de los demás fonemas vocálicos, el fonema /u/ puede tener también otros dos alófonos: uno nasalizado y uno ensordecido. El alófono nasalizado ocurre como fenómeno común a todos los dialectos. Esa nasalización sigue la regla general presentada antes en que la vocal se nasaliza delante de una consonante nasal en posición final de sílaba. El alófono ensordecido ocurre en algunos idiolectos siguiendo la regla optativa presentada antes en que la vocal puede ensordecerse después de una consonante sorda y antes de una pausa.

Referente a la fonotáctica, el fonema /u/ aparece mayormente como núcleo vocálico, pero a diferencia de los fonemas /e a o/, el fonema /u/ puede aparecer tanto en el ataque como en la coda de la sílaba. El fonema /u/ puede ser tónico tanto en posición inicial, como medial: [Öniko], [caDÖko]. El fonema /u/ también puede aparecer como vocal átona en posición inicial y medial: [xuGáR], [apàªtáR]. Es de notar que el fonema /u/ no ocurre sistemáticamente en posición final de palabra, sea tónico o átono. Los pocos ejemplos del fonema /u/ en posición final corresponden a solo el 0,1% de las ocurrencias del fonema. Las ocurrencias tónicas del fonema /u/ en posición final de palabra se limitan a unas cuantas palabras como {tabú} {menú}, la mayoría siendo préstamos de otras lenguas. Las ocurrencias átonas del fonema /u/ en posición final de palabra también son limitadas: {espíritu} {tribu} {ímpetu}.

11.46 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [u]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.46 La posición de los órganos articulatorios para el sonido [u]: perfil, vista frontal y trazo articulatorio.

11.47 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [u].

11.47 Seis ciclos de la forma de onda del sonido [u].

La fonética del alófono [u]

El alófono [u] es el alófono principal del fonema /u/. Es el alófono principal porque es el alófono que suele ocurrir como núcleo silábico. La descripción articulatoria del alófono [u] es igual a la definición del fonema. En cuanto al modo de articulación, es fonéticamente una vocal cerrada y en cuanto al lugar de articulación, es posterior. Siendo vocal posterior, el sonido [u] es labializado. Se puede ver claramente el posicionamiento de los labios y de la lengua en la Fig. 11.46.

La caracterización acústica del sonido [u] es la de una onda sonora armónica, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. Su forma de onda está representada en la Fig. 11.47.

Los armónicos que llegan a formar parte de la onda compuesta le dan al sonido [u] un timbre particular. El timbre consiste en un primer formante alrededor de 315 Hz y un segundo formante alrededor de 836 Hz, según el hablante. Estos formantes se ven en el sonograma de la Fig. 11.48.

11.48 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [u].

11.48 Espectrograma de banda estrecha y de banda ancha para el sonido [u].

La percepción auditiva del sonido [u] por parte del receptor, depende de la identificación de la vocal por la energía acústica de las frecuencias de los formantes producidos por el emisor. El receptor sistematiza el sonido [u] como representante del fonema /u/. Estos mismos formantes se hallan presentados en el sonograma de la Fig. 11.48.

La fonética de los alófonos [w] y [ṷ]

Los sonidos [w] y [ṷ] son alófonos combinatorios que solo se emplean en la formación de diptongos y triptongos. Se examinarán articulatoria, acústica y auditivamente en el Capítulo 12, que trata las situaciones en que aparece más de un fonema vocálico dentro de una sílaba.

Pistas pedagógicas

Es importante reconocer que el sonido [u] no es un sonido que ocurre en inglés. Muchos libros de texto y manuales de pronunciación erróneamente indican una correlación entre el sonido [u] del español y el sonido vocálico de {boot} [buṷt]. La Fig. 11.49 contiene un gráfico que ubica las vocales [e a o u] del español y las vocales [ʊ ə] del inglés, como también el punto de partida de los diptongos [uṷ oṷ] según sus formantes. El gráfico indica claramente que el punto de partida del diptongo [uṷ] del inglés es próximo a la vocal [u] del español. Lo que no indica es la estabilidad de los formantes de la [u] del español y la diptongación o transición de los formantes de la [uṷ] inglesa, lo que sí se puede ver en la Fig. 11.18.

Las interferencias del inglés en la pronunciación del español por parte del estudiante anglohablante tienen que ver tanto con el timbre como con la duración. Es útil la Fig. 11.49 en visualizar las posibles interferencias de timbre de las vocales inglesas que pueden ocurrir. Las cuatro vocales inglesas que suelen interferir en la pronunciación de la vocal española [u] son [uṷ juṷ ʊ ə] como se puede ver en el Cuadro 11.50.

11.49 La posición de las vocales [e a o u] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [Ʊ ə] del inglés como también los puntos de partida de los diptongos [uṷ oṷ] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [u] del español con un círculo.

11.49 La posición de las vocales [e a o u] del español (indicadas con un triángulo) y las vocales [ʊ ə] del inglés como también los puntos de partida de los diptongos [uṷ oṷ] del inglés (indicadas por un punto), según sus formantes. Se indica la vocal objetivo [u] del español con un círculo.

Como se ve en la Fig. 11.49, la vocal española [u] está muy cerca del punto de partida del diptongo [uṷ] del inglés. Debido a que el sonido [u] no suele ocurrir en inglés sin la diptongación, el anglohablante suele producir el diptongo automáticamente cuando trata de producir el sonido [u] del español. Otra interferencia común es la de la vocal breve inglesa [ʊ]. Esta interferencia suele ocurrir con palabras cognadas que en inglés contienen el fonema /ʊ/. Este fenómeno solamente ocurre en sílabas trabadas, puesto que según las reglas fonotácticas del inglés, el fonema /ʊ/ no ocurre en sílabas abiertas. Como ejemplos de esta transferencia negativa pueden citarse las palabras {durante} {fútbol} {pudín} que tienen que pronunciarse como [durã́n̪te] [fútβol] [puðĩ́n] y no como *[dʊrã́n̪te] *[fʊ́βol] *[pʊðĩ1n].

11.50 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [u].

11.50 Las vocales del inglés que interfieren en la adquisición de una buena pronunciación de la vocal [u].

En el Cuadro 11.50 se nota que además de interferencias de timbre, hay interferencias de duración también. La interferencia principal en cuanto al fonema /u/ tiene que ver con la diptongación o triptongación que el anglohablante suele producir para el alófono [u] del español. Esta interferencia suele ocurrir en posición tónica (como en el ejemplo de *[thuṷ] o *[mjúṷzəkə]). La segunda interferencia significativa es que, a diferencia del inglés, el timbre de la vocal en español no cambia según su tonicidad. Esto quiere decir que se emplea el sonido vocálico [u] tanto en sílabas tónicas como también en sílabas átonas: el anglohablante tiene que resistir a la tentación de producir schwa [ə] en sílabas átonas. Esa tendencia es más fuerte cuando se trata del fonema /u/ átono en posición no final como en las palabras {sublime} {superior} {suponer} que tienen que pronunciarse como [suβlíme] [supeɾjóɾ] [suponéɾ] y no como *[səβlíme] *[səpeɾjóɾ] *[səponéɾ].

La aplicación de la regla de distribución de los alófonos comunes del fonema /u/ del español, parte de una base silábica y tiene que ver con la formación de los diptongos y triptongos, que se examinarán en el Capítulo 12.

El estudiante no tiene que preocuparse por el alófono nasalizado [ũ] porque se trata de una coarticulación anticipante natural que el anglohablante producirá automáticamente. El anglohablante tampoco tiene que preocuparse por el alófono ensordecido [u˳] porque se trata de un fenómeno esporádico e idiosincrásico.

Consejos prácticos

El anglohablante que quiere adquirir una buena pronunciación de la vocal /u/ del español debe:

  • producir la vocal [u] del español de duración breve con un timbre más próximo al comienzo de la vocal [uṷ] del inglés, pero sin diptongación;
  • no producir la vocal breve inglesa [ʊ];
  • no producir el triptongo inglés [juṷ];
  • atenerse a la regla de distribución complementaria;
  • no alargar la producción de la vocal [u] en sílabas tónicas;
  • no reducir la vocal a schʊa [ə] en sílabas átonas.

Los alófonos vocálicos nasalizados

Articulatoriamente, los alófonos vocálicos nasalizados resultan de una coarticulación anticipante a la realización alofónica del archifonema nasal /N/. Como se vio antes, el grado de nasalización crece desde el inicio de la producción vocálica hasta su limite con la consonante nasal. Esto se debe al hecho de que en la transición de vocal a consonante nasal, el velo del paladar tiene que despegarse de la pared faríngea. Es de notar, sin embargo, que el grado de nasalización de la vocal nunca llega a los extremos que se encuentran en portugués o en francés. Esa leve nasalización ocurre naturalmente en el habla. Los alófonos nasalizados difieren de los alófonos principales porque en su etapa final se producen con la vía a la cavidad nasal abierta, como se ve en el trazo articulatorio de la vocal [ã] en la Fig. 11.51.

11.51 Trazo articulatorio del sonido [Ü].

11.51 Trazo articulatorio del sonido [ã].

11.52 Once ciclos de la forma de onda de una producción de la vocal /e/. Los primeros cinco ciclos son ciclos orales [E]; los ciclos de seis a ocho son de una transición; los ciclos nueve a once son de la vocal ya nasalizada [å].

11.52 Once ciclos de la forma de onda de una producción de la vocal /e/. Los primeros cinco ciclos son ciclos orales [ɛ]; los ciclos de seis a ocho son de una transición; los ciclos nueve a once son de la vocal ya nasalizada [å̃].

La caracterización acústica de las vocales nasalizadas son unas ondas sonoras armónicas, es decir, la onda tiene un tono fundamental y armónicos. La Fig. 11.52 contiene la forma de onda de la realización de la vocal /e/ delante del archifonema /N/. En la forma de onda, los primeros cinco ciclos son de ciclos orales [ɛ]; los ciclos de seis a ocho son de una transición; los ciclos nueve a once son de la vocal ya nasalizada [ɛ̃]. Se puede ver claramente que en el sexto ciclo comienza una transición en que la vocal adquiere un grado creciente de nasalización. Los ciclos nueve a once ya demuestran una clara diferencia con respecto a los ciclos orales iniciales: los ciclos orales tienen tres picos puntiagudos, y los ciclos nasales tienen básicamente dos picos más achatados.

Auditivamente, la vocal levemente nasa-lizada que se da en español en sílaba cerrada delante del archifonema nasal, se distingue por sus formantes no muy distintos de los del alófono oral del mismo fonema. Es decir, el receptor, de modo general, ni reconoce que ha habido una nasalización de la vocal.

Los alófonos vocálicos ensordecidos

Articulatoriamente, los alófonos vocálicos ensordecidos resultan de una coarticulación perseverante en que la sordez de una consonante sorda persevera durante la articulación de una vocal siguiente, que es también final de grupo fónico. Esa variante no es general, pues ocurre esporádicamente en algunos idiolectos. Los alófonos ensordecidos difieren de los alófonos principales por ser sordas, es decir, se producen sin vibración de las cuerdas vocales. Siendo así, tienen el mismo trazo articulatorio que tienen las vocales sonoras.

Acústicamente, las formas de onda de las vocales ensordecidas son de ondas inarmónicas, puesto que no tienen ningún ciclo que se repita. Por otro lado, la amplitud o volumen es mucho menor que la de las ondas sonoras. Estos hechos se ven clara-mente en las formas de onda de [a] y [ḁ] de la Fig. 11.53.

Como se ve en la Fig. 11.54, que compara los sonogramas de las vocales sonoras y sordas, las amplitudes de las sonoras son mucho más altas como indica la negrura de sus formantes. Las vocales sordas, que no tienen formantes debido a la falta de un tono fundamental, no obstante presentan zonas de energía acústica en las mismas zonas donde se esperarían los formantes de las vocales orales. Esto se debe a que la conformación bucal deja pasar la energía acústica correspondiente a esas frecuencias.

11.53 Comparación de la forma de onda de la vocal sonora [a] y la vocal sorda [ḁ].

11.53 Comparación de la forma de onda de la vocal sonora [a] y la vocal sorda [ḁ].

11.54 Comparación del sonograma de las vocales sonoras (después de la consonante [s]) con el de las vocales sordas.

11.54 Comparación del sonograma de las vocales sonoras (después de la consonante [s]) con el de las vocales sordas.

Auditivamente, la vocal susurrada es muy débil, casi imperceptible al oído del anglohablante. Sin embargo, para el hispanohablante, la vocal susurrada sí es perceptible, porque entra en función su conocimiento de las reglas fonotácticas.

Sumario

La clasificación fonética de las vocales incluye todos los factores fisiológicos necesarios para la producción de la vocal. Siendo así, la clasificación fonética incluye el modo de articulación, el lugar de articulación, el estado de las cuerdas vocales, el estado del velo del paladar, el estado de los labios, la tonicidad y la duración como se ve en el Cuadro 11.55.

La clasificación fonológica de las vocales se reduce al número mínimo de rasgos necesarios para diferenciar entre los cinco fonemas vocálicos del español que se oponen fonológicamente. En español la definición de los cinco fonemas vocálicos se establece con dos rasgos: el modo de articulación y el lugar de articulación.

11.55 La clasificación fonética de las vocales.

11.55 La clasificación fonética de las vocales.

El ataque vocálico se refiere al caso en que el primer sonido de un grupo fónico es una vocal. La cesación vocálica se refiere al caso en que el último sonido de un grupo fónico es una vocal. Es importante recordar que los dos idiomas manifiestan características fonéticas opuestas tanto en el momento de ataque como en el momento de cesación según ya se presentó en el Cuadro 11.15.

El sistema vocálico del español es muy distinto al sistema vocálico del inglés. El español tiene un sistema básico de cinco vocales que aparecen tanto en posición tónica como en posición átona. El inglés, por su parte, tiene un sistema mucho más complicado de quince núcleos vocálicos que ocurren en posición tónica. En posición átona, el inglés tiene dos sistemas: uno pleno de quince vocales y otro reducido donde la vocal pronunciada tiende a schwa [ə]. Los sistemas vocálicos de los dos idiomas ya se presentaron en el Cuadro 11.16.

Los errores de pronunciación por parte del estudiante anglohablante que aprende español resultan de la transferencia negativa del sistema fonológico y de los hábitos fonéticos del inglés.

Las principales pistas pedagógicas para el anglohablante con respecto a las vocales tónicas del español son:

Las principales pistas pedagógicas para el anglohablante con respecto a las vocales átonas del español son:

Presentados ya los fonemas vocálicos nucleares, se examinarán en el Capítulo 12 las secuencias de dos o más vocales.

Preguntas de repaso

  1. ¿Cuáles son las características articulatorias de las vocales en contraste con las consonantes?
  2. ¿Cuáles son las características acústicas de las vocales en contraste con las consonantes?
  3. ¿Cuáles son los rasgos fonológicos de una vocal? Dé ejemplos.
  4. ¿Cuáles son los rasgos fonéticos de una vocal? Dé ejemplos.
  5. Explique el papel de las vocales ensordecidas en español. Explique y ejemplifique la regla del ensordecimiento vocálico.
  6. Explique el papel de las vocales nasalizadas en español. Explique y ejemplifique la regla de la nasalización vocálica.
  7. Explique el papel de labialización en las vocales españolas.
  8. ¿Cómo se clasifican las vocales españolas según su tonicidad? Dé ejemplos.
  9. ¿Cómo se clasifican las vocales españolas según su duración? Dé ejemplos.
  10. ¿A qué se refieren los conceptos de ataque y cesación vocálicos?
  11. Compare el ataque vocálico del español con el del inglés.
  12. Compare la cesación vocálica del español con la del inglés.
  13. Dé los sistemas vocálicos tónicos del español y del inglés. ¿Cómo se contrastan?
  14. Escriba una lista de palabras que ejemplifiquen los quince núcleos fonemáticos tónicos del inglés junto con su transcripción fonética.
  15. Distinga entre las vocales largas y breves ortográficas del inglés. ¿Cuáles son sus símbolos fonéticos? Dé ejemplos.
  16. Dé los sistemas vocálicos átonos del español y del inglés. ¿Cómo se contrastan?
  17. Distinga entre el sistema vocálico átono pleno y el sistema vocálico átono reducido del inglés. Dé ejemplos.
  18. ¿Cómo se representa el sonido schwa ortográficamente? Dé ejemplos. ¿Cuál es su símbolo fonético?
  19. ¿Cuántas de las cinco vocales españolas se encuentran entre las quince vocales inglesas? Dé ejemplos.
  20. Compruebe la oposición entre los cinco fonemas vocálicos del español.
  21. Compare la distribución de alófonos de los cinco fonemas vocálicos del español.
  22. Comente las características fonotácticas de los cinco fonemas vocálicos del español.
  23. Explique cómo la interferencia negativa y el principio del vecino más próximo afectan la pronunciación de un segundo idioma.
  24. Comente los consejos prácticos para los alófonos del fonema /a/.
  25. Comente los consejos prácticos para los alófonos del fonema /e/.
  26. Dé y ejemplifique la regla de distribución complementaria para el fonema /e/.
  27. Comente los consejos prácticos para los alófonos del fonema /o/.
  28. Comente los consejos prácticos para los alófonos del fonema /i/.
  29. Dé y ejemplifique la regla de distribución complementaria para el fonema /i/.
  30. Comente los consejos prácticos para los alófonos del fonema /u/.
  31. Dé y ejemplifique la regla de distribución complementaria para el fonema /u/.
  32. ¿Qué tiene que hacer el anglohablante para no pronunciar mal las vocales tónicas españolas?
  33. ¿Qué tiene que hacer el anglohablante para no pronunciar mal las vocales átonas españolas?

Conceptos y términos

Ejercicios de pronunciación

La vocal /a/ 23 ifig0005
  1. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [a] española, procurando no pronunciar las vocales [æ α ei̯] del inglés.
    • amoral
    • anual
    • atípico
    • base
    • cama
    • cuatro
    • da
    • español
    • fantasía
    • fácil
    • haber
    • hace
    • hacer
    • la
    • laboratorio
    • mamá
    • mapa
    • nada
    • papá
    • para
    • tal
    • tanto
    • va
    • ya

  2. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [a] española, procurando no pronunciar la vocal [ə] del inglés.
    • banana
    • cama
    • casa
    • ella
    • esta
    • ganar
    • habla
    • labor
    • mañana
    • palabra
    • sea
    • tenga
    • toman
    • una
    • vaya

La vocal /e/ 24 ifig0005
  1. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [e] española, procurando no pronunciar las vocales [ei̯ ə] del inglés.
    • alteza
    • base
    • bebé
    • beso
    • cantaré
    • cena
    • clase
    • daré
    • de
    • debe
    • decano
    • fase
    • frase
    • fue
    • hablé
    • hace
    • hincapié
    • jaqueca
    • le
    • me
    • melocotón
    • mesa
    • moraleja
    • nobleza
    • pelo
    • peso
    • promesa
    • que
    • quema
    • quepa
    • sabe
    • sale
    • seso
    • te
    • vena
    • veneno
    • vive

  2. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [ε] española, procurando no pronunciar la vocal [ei̯] del inglés ni la vocal [e] del español.
    • acento
    • aquel
    • comer
    • delgado
    • dentro
    • en
    • énfasis
    • es
    • exacto
    • experto
    • extra
    • felpa
    • hacen
    • lento
    • menta
    • meta
    • metro
    • mexcla
    • pero
    • perro
    • ser
    • usted
    • ven
    • venta

  3. Pronuncie las siguientes palabras diferenciando entre las vocales [e ε] del español.
    • almena
    • hable
    • he
    • pecar
    • seca
    • sepa
    • ve
    • almendra
    • del
    • hablen
    • el
    • pescar
    • secta
    • sexta
    • sed
    • ten
    • ver

  4. Pronuncie las siguientes palabras con las vocales [e ε] españolas, procurando no pronunciar la vocal [ə] del inglés.
    • cenar
    • comen
    • defensa
    • delante
    • dicen
    • eliminar
    • emocional
    • enemigo
    • entregar
    • meses
    • noches
    • número
    • pesado
    • presente
    • revelar
    • tomen
    • ustedes
    • viven

La vocal /o/ 25 ifig0005
  1. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [o] española, procurando no pronunciar las vocales [ou̯ α] del inglés.
    • como
    • completo
    • comunista
    • donde
    • dos
    • español
    • foco
    • foto
    • gol
    • hago
    • hombre
    • muchacho
    • mucho
    • no
    • noviembre
    • objeto
    • obligar
    • octubre
    • ocupar
    • ofrecer
    • ojo
    • ómnibus
    • operar
    • óptico
    • peso
    • pobre
    • poco
    • soda
    • solo
    • toca
    • todo
    • vamos
    • voz

  2. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [o] española, procurando no pronunciar la vocal [ə] del inglés.
    • color
    • completo
    • fonología
    • hablaron
    • obsoleto
    • ocasional
    • ofender
    • oponer
    • ortodoxo
    • orégano
    • sicología
    • tomaron

La vocal /i/ 26 ifig0005
  1. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [i] española, procurando no pronunciar las vocales [ii̯ I] del inglés.
    • cíclico
    • diferente
    • difícil
    • digo
    • dilo
    • ficción
    • hijo
    • importante
    • imposible
    • interesante
    • ir
    • kilo
    • misa
    • mínimo
    • pido
    • pintura
    • ridículo
    • siglo
    • sincero
    • ti
    • vi
    • vino
    • visitar
    • vive

  2. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [i] española, procurando no pronunciar las vocales [ə ɨ] del inglés.
    • animar
    • aprendizaje
    • cíclico
    • difícil
    • exigente
    • facilitar
    • gitano
    • hesitar
    • irritar
    • líquido
    • ridículo
    • típico

La vocal /u/ 27 ifig0005
  1. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [u] española, procurando no pronunciar las vocales [uu̯ juu̯ ʊ] del inglés.
    • aguda
    • alguno
    • atributo
    • ayuno
    • burro
    • burócrata
    • búho
    • curiosidad
    • duda
    • duplicar
    • duración
    • durante
    • duro
    • fuga
    • furor
    • fusil
    • futuro
    • fútbol
    • grupo
    • humo
    • julio
    • lujo
    • lúgubre
    • mudo
    • mugre
    • musa
    • nube
    • pudo
    • pudín
    • puro
    • seguro
    • tabú
    • tuvo
    • uniforme
    • universidad
    • uso
    • uva
    • útil

  2. Pronuncie las siguientes palabras con la vocal [u] española, procurando no pronunciar la vocal [ə] del inglés.
    • ambulancia
    • ángulo
    • bujía
    • corpulento
    • culebra
    • curandero
    • espectáculo
    • purita
    • ridículo
    • sublime
    • superior
    • suponer

Materiales en línea

1. ifig0002 Video de la abertura progresiva de las secuencias vocálicas.

2. ifig0003 El ensordecimiento vocálico.

3. ifig0003 Las vocales sonoras y ensordecidas.

4. ifig0003 La nasalización vocálica.

5. ifig0003 Las vocales orales y oronasales.

6. ifig0003 Grado de nasalización en la palabra {canta} en español y portugués.

7. ifig0002 Las vocales deslabializadas y labializadas.

8. ifig0003 Vocales átonas y tónicas.

9. ifig0003 El alargamiento vocálico.

10. ifig0003 El ataque vocálico creciente y el ataque vocálico abrupto.

11. ifig0003 La cesación vocálica abrupta y la cesación vocálica decreciente.

12. ifig0003 Pares mínimos de los fonemas vocálicos del español.

13. ifig0003 Ejemplos de los fonemas vocálicos del inglés.

14. ifig0003 Las vocales largas y breves inglesas (los Cuadros 11.10 y 11.11).

15. ifig0003 Las vocales reducidas inglesas.

16. ifig0003 Las vocales tónicas, átonas y reducidas del inglés (el Cuadro 11.14).

17. ifig0003 La reducción vocálica del inglés al cero fonético.

18. ifig0003 La comparación entre las vocales tónicas de español e inglés (el Cuadro 11.17).

19. ifig0003 El contraste entre [e] y [ei̯] en español.

20. ifig0003 La distribución complementaria de /e/ (el Cuadro 11.25).

21. ifig0003 La distribución complementaria de /i/ (el Cuadro 11.39).

22. ifig0003 La distribución complementaria de /u/ (el Cuadro 11.45).

23. ifig0005 Ejercicios de pronunciación: la vocal /a/.

24. ifig0005 Ejercicios de pronunciación: la vocal /e/.

25. ifig0005 Ejercicios de pronunciación: la vocal /o/.

26. ifig0005 Ejercicios de pronunciación: la vocal /i/.

27. ifig0005 Ejercicios de pronunciación: la vocal /u/.