Notas

1 La primera cita es de la Apología y la segunda de Conclusiones mágicas, transcriptas por Edgar Wind en Los misterios paganos del Renacimiento, Barcelona, Barral, 1972, pág. 115 y comentarios en notas 37, 38 y 39.

2 Para mostrar el arraigo de esta peregrina idea en el modernismo, que llega incluso hasta el pensamiento contemporáneo, señalamos que, tanto Benedetto Croce como Antonio Gramsci, al interpretar la ferocia en Maquiavelo, la ferocidad de las bestias de presa en los hombres, que debe utilizar el político, coinciden en considerar esta pasión como un momento fundamental de la política. Véase A. Gramsci, Notas sobre Maquiavelo, sobre la política y el Estado moderno, Buenos Aires, Nueva Visión, 1984, págs. 70 y 76.

3 E. Wind, op. cit., págs. 75, 76 y nota 57 con una erudita selección de textos sobre la ira provenientes de pensadores del Quattrocento.

4 De la inmensa bibliografía sobre este tema, recomiendo por su seriedad y concisión dos trabajos de la historiadora británica Frances A. Yates del famoso Instituto Warburg: su clásico Giordano Bruno and the hermetic tradition, Londres, 1964 (hay traducción española de editorial Planeta), y el posterior La filosofía oculta en la época isabelina, México, Fondo de Cultura Económica, 1982. Acerca de la influencia de estas creencias mágicas en las modernas políticas románticas de los socialismos nacionalistas e internacionalistas, puede verse mi libro: Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, Buenos Aires, El Ateneo, 2001, anexo I: «El romanticismo político de la Edad Moderna como organicismo».

5 Ver Eugenio Garin, El Renacimiento italiano, Barcelona, Ariel, 1986, pág. 78, y los textos que transcribe de León Battista Alberti (págs. 79-80) y de Niccolò Maquiavelo (págs. 168-169) en este sentido.

6 Maurice de Gandillac en la Introducción a Œuvres choisies de Nicolas de Cues, París, Aubier, 1942, pág. 27.

7 En el año anterior (1484) había emitido la bula Summis Desiderantes que ordenaba severas medidas contra los magos y las brujas en Alemania. Él fue quien nombró a Torquemada gran inquisidor de España y a los frailes Heinrich Kramer y Jacobus Spranger (los autores del famoso Malleus Maleficarum) como inquisidores en Alemania, Suiza y Bohemia-Moravia. Para aclarar que no era a las brujas o los brujos lo que se perseguía sino a la magia y el maleficio, puede verse el erudito y revolucionario estudio del historiador judío Norman Cohn: Los demonios familiares de Europa, Madrid, Alianza, 1980, caps. 8, 9 y 10.

8 Para mayores precisiones sobre la política mágica puede verse mi libro Democracia práctica: para una ciudadanía con sentido común, Buenos Aires, Emecé, 2004, tercera parte, «Política en acción», cap. 1, «Dos puntos de partida opuestos: el mágico y el democrático».

9 Con distinta terminología, esta es la conclusión a la que llega el interesante libro de J. G. A. Pocock, The Maquiavellian Moment, Londres, Princeton University Press, 1975.

10 Voltaire, Prefacio a El antimaquiavelo de Federico II de Prusia, Buenos Aires, Quadrata, 1943, pág. 11.

11 James Burnham, The machiavellians: Defenders of freedom, Nueva York, John Day, 1943, pág. 40. Resulta tan increíble calificarlos como «defensores de la libertad» como haber erigido en la Universidad de Roma un monumento a Giordano Bruno como «mártir de la democracia» a quien calificó Guido de Ruggiero como el más antidemocrático de toda la filosofía.

12 Ioan P. Coulianu, Eros and magic in the Renaissance (con Prólogo de Mircea Eliade), The University of Chicago Press, 1987, págs. 88-89.

13 Ibíd., Las citas son de págs. 88-89.

14 Ibíd., pág. 95.

15 Julius Evola, La tradición hermética, Barcelona, Martínez Roca, 1975, pág. 268. Entre paréntesis mío.

16 Baltasar Castiglione, El Cortesano, el Cuarto Libro, n.º 19. Intervención del Signor Gasparo. En el fondo el objetivo es reingresar, irrumpir, en el Paraíso perdido del que fue expulsado injustamente el hombre debido a su pecado original.

17 Véase Democracia práctica, op. cit., pág. 28.

18 Texto transcripto en Eugenio Garin, op. cit., págs. 173-174.

19 Pierre Mesnard, L’essor de la philosophie politique au XVI e siècle, París, Vrin, 1977, pág. 120.

20 Antología de escritores políticos del Siglo de Oro, Madrid, Taurus, 1966.

21 Denzinger, Enchiridion Symbolorum, números 691 a 694.

22 Ibíd., números 706 a 712.

23 Ver sus Cartas en Eugenio Garin, El Renacimiento italiano, op. cit., págs. 25-30.

24 Giovanni Reale, Introducción a Aristóteles, Barcelona, Herder, 1992, pág. 164.

25 Para la información que avala estas afirmaciones, ver José Enrique Miguens, Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, Buenos Aires, El Ateneo, 2001, parte I, cap. 5, «La desaparición de la Política de Aristóteles».

26 Luc Brisson, «El mundo bizantino y la cultura griega», en Monique Canto-Sperber y otros, Filosofía griega, vol. 2, La filosofía en la época helenística, Buenos Aires, Docencia y Fundación Hernandarias, 2000, págs. 757-758.

27 Ibíd., pág. 757.

28 Ibíd., pág. 759.

29 Francisco García Bazán, «El descenso y ascenso del alma según Plotino y la crítica a los gnósticos», en DIADOKHÉ. Revista de estudios de filosofía platónica y cristiana, vol. 3, n.º 1-2, 2000. Gnosis: La esencia del dualismo gnóstico, parte I, cap. 5, «Los gnósticos de Plotino», Buenos Aires, Castañeda, 1978.

30 Monique Canto-Sperber, Filosofía griega, op. cit., vol. 2, pág. 859.

31 Martin P. Nilsson, Historia de la religiosidad griega, Madrid, Gredos, 1953, pág. 228.

32 M. Canto-Sperber, op. cit., págs. 858, 859 y 869.

33 Nilsson, op. cit., págs. 170 y 232.

34 D. M. Nicol, «Byzantine political thought», en The Cambridge history of medieval political thought, Cambridge University Press, 1988, págs. 75-76.

35 Canto-Sperber, op. cit., vol. 2, págs. 758 y 759.

36 Mircea Eliade, Historia de las creencias y de las ideas religiosas, t. III/1, «De Mahoma al comienzo de la Modernidad», Madrid, Ediciones Cristiandad, 1983, pág. 262.

37 Plutarco, Isi et Osiris, París, L’Atelier du livre, 1925, pág. 226 (subrayado mío).

38 Contra Aristóteles que oponía a despotiké la politiké arché, el tipo de gobierno que no es dominación. Ver José Enrique Miguens, Desafío a la política neoliberal, op. cit., pág. 22.

39 Para un análisis sociopolítico de esta sociedad trifuncional según la definición de Georges Dumézil, ver mi libro Política sin pueblo: Platón y la conspiración antidemocrática, Buenos Aires, Emecé, 1994, parte III, cap. 1, págs. 97-118.

40 José Enrique Miguens, Política sin pueblo, op. cit., págs. 83-84. Platón, La República, cap. V, 459d.

41 Ibíd., pág. 81, La República, 433a y b.

42 Guillermo Fraile, Historia de la filosofía, t. III, Madrid, BAC, 1966, pág. 99.

43 The Cambridge history of medieval political thought, op. cit., pág. 79.

44 Ernst Cassirer, Individuo y cosmos en la filosofía del Renacimiento, Buenos Aires, Emecé, 1951, pág. 131.

45 George Gordon Catlin, Historia de los filósofos políticos, Buenos Aires, Peuser, s/f, pág. 217.

46 Op. cit., parte III, «El revés de la trama: la realidad política del platonismo», caps. 1, 2 y 3.

47 Las respectivas citas bibliográficas y una ampliación de este tema pueden verse en mi Política sin pueblo, op. cit., parte III, cap. 2, «Platón y su proyecto político concreto», y notas en págs. 91-92.

48 Harol Cherniss, The riddle of the early academy, University of California Press, 1945, págs. 67-68. También Pierre-Maxime Schuhl, «Platon et l’activité politique de l’Académie», Revue des études grecs, t. LIX-LX, años 1946-1947. Nadie discute hoy esta orientación práctica (de la Academia).

49 Demóstenes: II.a Filípica, 21 y 22; III.a Filípica, 26, 27 y 33; IV.a Filípica (hoy aceptada como auténtica), 4, 5, 11 y 15; Sobre los asuntos del Quersoneso, 40-43.

50 J. E. Miguens y M. D. Boeri, «¿Qué hacían los miembros de la Academia Platónica?», Rev. CIAS del Centro de Investigaciones y Acción Social, año XLII, n.º 420, marzo de 1993, págs. 33-48.

51 Pierre-Maxime Schuhl, «Platon et l’activité politique de l’Académie», op. cit., págs. 46-54.

52 George Santayana, Three philosophical poets, Cambridge, Harvard University Press, 1944, pág. 78.

53 Lorenzo Valla, De Constantini Donatione, transcripto en Eugenio Garin, El Renacimiento italiano, op. cit., pág. 198. También L. B. Alberti, Pontifex, en págs. 200-201.

54 Arnold Toynbee, «Russia’s byzantine heritage», en Civilization on trial, Nueva York, Oxford University Press, 1948, pág. 164.

55 Trata detenidamente la nueva interpretación Manfred Riedel en Metafísica y Metapolítica, op. cit., Segunda Parte: «La tradición aristotélica y la transformación del lenguaje político en la época moderna».

56 «El Fausto de Goethe y la filosofía del Renacimiento», en Wilhelm Windelband, Preludios filosóficos, Buenos Aires, Santiago Rueda, 1940.

57 Ibíd., págs. 140, 144, 145 y 151 respectivamente.

58 Raymond Klibansky, El filósofo y la memoria del siglo, Barcelona, Península, 1999, pág. 123.

59 Ernst Bloch, La philosophie de la Renaissance, París, Payot, 2007, pág. 33.

60 Para la documentación sobre este asunto puede verse mi libro Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, Buenos Aires, El Ateneo, 2001, parte I, cap. 5, «Desaparición de la Política de Aristóteles».

61 Peter Green, Alexander to Actium. The Hellenistic Age, Londres, Thames & Hudson, 1990, Prefacio, págs. XV y XVI.

62 The Oxford history of the classical world. Greece and the hellenistic world, Oxford University Press, 1991, págs. 309, 315 y 318.

63 Pierre Vidal-Naquet, Ensayos de historiografía, Madrid, Alianza Editorial, 1990, primera parte, «Flavio Arriano ante dos mundos», págs. 65-66. Entre paréntesis, míos.

64 Ver José Enrique Miguens, Desafío a la política neoliberal, op. cit., parte II, cap. 4: «La justificación del derecho a mandar a los otros» y «Las superioridades alegadas son inconmensurables».

65 Gerhard Aalders, Political thought in hellenistic times, Ámsterdam, Hakkert, 1975, págs. 2-3.

66 Ibíd., pág. 1.

67 Ibíd., págs. 20 y 22.

68 Ibíd., págs. 100 y 105.

69 Adriana Beatriz Martino, El mundo griego: perspectiva sociopolítica, Buenos Aires, Fundación Universitaria Hernandarias, 1995, pág. 249.

70 Christian Meier, The greek discovery of politics, Cambridge, Harvard University Press, 1990, págs. 5, 3 y 6.

71 Jürgen Gebhardt, «The origins of politics in Ancient Hellas: Old interpretations and new perspectives», en J. M. Porter (ed.), Sophia and Praxis: The boundaries of politics, Nueva York, Chatam House, 1984, pág. 1.

72 Trato extensamente el asunto en José Enrique Miguens, Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, op. cit., parte II, cap. 2. La cita es de pág. 93.

73 Analizo detenidamente el tema en: José Enrique Miguens, Democracia práctica: para una ciudadanía con sentido común, op. cit., parte VI, cap. 2, «Deformaciones modernas de la conversación social dialogal» y «Cultura de masas y política antidemocrática».

74 Robert N. Bellah, «Religious evolution», en American Sociological Review, XXIX, 1964. Las clasifica como: religión primitiva, arcaica, histórica y moderna.

75 Samuel N. Eisenstadt, «Heterodoxia, sectarismo y dinámica de las civilizaciones», en revista Diógenes del Consejo Internacional de Filosofía y Ciencias Humanas de la Unesco, n.° 120, Invierno, 1982, pág. 8.

76 Clifford Geertz, «Religion as a cultural system», incluido en M. Banton (ed.), Anthropological approaches to the study of religion, Londres, Tavistock, 1968, pág. 4. «Ethos, Visão de Mundo e a Análise de Símbolos Sagrados», en A interpretação das culturas, Río de Janeiro, ZAHAR, 1973, cap. 5.

77 Pitirim Sorokin, Social and cultural dynamics, Nueva York, American Book Co., 1.ª edición en 4 volúmenes, ver vols. 1, 2 y 4.

78 Eisenstadt, op. cit., pág. 9.

79 Émile Poulat, La crisis modernista, Madrid, Taurus, 1974, pág. 20.

80 Poulat, op. cit., págs. 82-83.

81 Puede consultarse mi crítica formulada desde el punto de vista de la lógica y de la epistemología actual, en «Sociología de la religión y clericalismo sociológico» en revista Cias del Centro de Investigación y Acción Social, año XXX, n.° 306, septiembre de 1981.

82 Hace dieciséis años señalé el anacronismo de estas tentativas en «Viejas y nuevas formas de indagación científica», Revista Criterio, año LXIII, n.° 2061 del 22-11-1990.

83 Paul Johnson, La historia del cristianismo, Buenos Aires, Javier Vergara, 1989, pág. 427.

84 John Henry Newman, Parochial and plain sermons, I, p. 309, traducción del padre Fernando Cavallier, publicada en Revista Newmaniana, año IV, n.° 11, mayo de 1994, pág. 14.

85 Paul Johnson, La historia del cristianismo, op. cit., pág. 428.

86 Debo estas informaciones y otros datos sobre el Movimiento a la doctora Inés de Cassagne, a quien agradezco su generosa colaboración.

87 Paul Johnson, op. cit., págs. 430, 431 y 432.

88 Gilbert K. Chesterton, El pozo y los charcos, Buenos Aires, Ágape, 2006, pág. 44.

89 Jaime Balmes, El protestantismo comparado con el catolicismo en sus relaciones con la civilización europea, Buenos Aires, EMECÉ, s/f., cap. XXX, pág. 267, nota 20, pág. 706.

90 Fritz Valjavec, Historia de la Ilustración en Occidente, Madrid, Rialp, 1964, pág. 151. (Aclaro que cuando se refiere a la ortodoxia y el método escolástico se está refiriendo al modo de razonar propio de la primera generación del protestantismo).

91 F. Nietzsche, Der Antichrist, libro I, n. 10. Cit. por Paul Asveld, La pensée religieuse du jeune Hegel, Lovaina-París, Desclée, 1953, pág. 2, n.° 1. (Hay una mala e incompleta edición argentina del Anticristo por Internacional Editora, 1961).

92 Erich Kahler, Historia universal del hombre, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 4.ª edición, 1965, págs. 406-407.

93 F. Valjavec, Historia de la Ilustración en Occidente, op. cit., pág. 157.

94 Paul Hazard, La crisis de la conciencia europea (1680-1715), Madrid, Pegaso, 1988, pág. 214.

95 F. Valjavec, op. cit., pág. 164.

96 Sobre esto ver José Enrique Miguens, Desafío a la política neoliberal. Comunitarismo y democracia en Aristóteles, Buenos Aires, El Ateneo, 2001. «Retorno de la política moderna al atomismo y el mecanicismo», págs. 39-41.

97 G. W. Leibniz, Discours de métaphysique, París, Vrin, 1929, págs. 22-23. (Entre paréntesis, me pertenece).

98 Ibíd., págs. 27 y 58. (Subrayado en el original).

99 Erich Kahler, op. cit., págs. 406 y 407. (Entre paréntesis me pertenece).

100 La posición contraria está expuesta y bien fundada por el teólogo Josef Pieper en La fin des temps, París, Desclée, 1953, págs. 134-138.

101 Ibíd., pág. 418.

102 Las citas y las alusiones de Kant a su obra en su correspondencia figuran en Joseph Maréchal, S. J., Le point de départ de la métaphysique, París, Desclée, 1947, vol. IV, págs. 227-233.

103 Los textos entrecomillados son transcripciones textuales del Opus Postumum, incluidos en Maréchal, op. cit., págs. 294-295. Debo aclarar que la posición de Maréchal, en general, es más benevolente que la mía.

104 Textos transcriptos por Maréchal, pág. 296.

105 Kant, Fondements de la Métaphysique des mœurs, París, Delagrave, 1951, 2.ª sección, pág. 120.

106 Kant, La religión dentro de los límites de la mera razón, Madrid, Alianza, 1969. Prólogo de Kant a la primera edición, pág. 19.

107 Los datos y las citas son de la bien informada «Introducción» del profesor Victor Delbos a la edición francesa de los Fundamentos de la Metafísica de las costumbres, op. cit., págs. 11-13.

108 Kant, La religión dentro de los límites de la mera razón, op. cit., págs. 109-110.

109 Ibíd., pág. 117.

110 Ibíd., pág. 100.

111 Étienne Gilson, God and philosophy, New Haven, Yale University Press, 1941, pág. 114.

112 Empleo esta grafía porque el apellido es de origen galaico-portugués y su padre firmaba sus documentos en Ámsterdam como Miguel d’Espinosa. Además así lo escribe el erudito don Marcelino Menéndez y Pelayo en su Historia de los heterodoxos españoles, t. 5, libro V, cap. II. Es hora de reivindicar nuestro idioma.

113 El comentario figura en el excelente libro de Hugh Honour, Romanticism, Nueva York, Harper and Row, 1979, pág. 277.

114 Ibíd., pág. 279.

115 Transcripto de la Crítica de la razón pura, por Honour, op. cit., pág. 281.

116 Martin Heidegger, Carta sobre el humanismo, Revista Realidad, Buenos Aires, vol. tercero, n.° 9, mayo-junio de 1948, pág. 354. (Cursiva en el original).

117 Georges Gusdorf, Le Romantisme, París, Payot, 3.ª edición, 1993, t. I, págs. 542-543.

118 Transcipto por Pierre Aubenque en «La cuestión de la ontoteología en Aristóteles y Hegel», en La question de Dieu selon Aristote et Hegel, París, Presses Universitaires, 1991, pág. 260, nota 2.

119 Ibíd., pág. 548.

120 Gusdorf, op. cit., pág. 498.

121 John Gray, Black Mass: Apocalyptic religion and the death of utopia, Londres, Penguin Books, 2008, Epígrafe y pág. 1.

122 Ibíd., t. I, pág. 543.

123 Datos extraídos del ya citado Le Romantisme, t. I, parte II, cap. 4. «Spinoza», págs. 592-623.

124 Hegel, Lecciones sobre la historia de la filosofía, México, Fondo de Cultura Económica, t. III, págs. 285 y 305.

125 David Rapport Lachterman, The ethics of geometry: A genealogy of modernity, Nueva York, Routledge, 1989, Prefacio, pág. IX.

126 Para la documentación que avala este calificativo puede verse: José Enrique Miguens. La Otra Versión: mitos, magia e ilusión revolucionaria, Buenos Aires, Plus Ultra, 1978, parte III, cap. 4 «La revolución alienada», b) Hegel como ilusionista, págs. 145-153.

127 G. W. F. Hegel, Science de la logique, París, Aubier, s/f. t. I, «La Logique Objective» Préface a la première édition, pág. 5-10.

128 León Dujovne, Spinoza: Su vida, su época, su obra, su influencia, Buenos Aires, Facultad de Filosofia y Letras, 1941, t. I, pág. 167 y ss.

129 El texto íntegro figura en Marcelino Menéndez y Pelayo, Historia de los heterodoxos españoles, Madrid, Victoriano Suárez, 1928, t. V, págs. 299-363.

130 Transcripto por Dujovne, op. cit., t. I, pág. 110.

131 The ethics of geometry, op. cit., pág. 203. Las citas de Kant y de Maimon son de pág. IX.

132 Carlos Morales, Baruch Spinoza: Tratado teológico-político, Madrid, Magisterio Español, 1878, págs. 1-14, y León Dujovne, op. cit., t. I, cap. XII.

133 Baruj de Spinoza, Tratado teológico-político, Barcelona, Ediciones Folio, 2002, págs. 29 y 217.

134 Tratado, op. cit., pág. 76. De aquí en adelante la paginación de las citas irá entre paréntesis.

135 Trata bien este asunto Carlos Morales, op. cit., págs. 99-100.

136 Carlos Morales, op. cit., pág. 143 y nota 61.

137 Giuseppe Ricciotti, Historia de Israel, Barcelona, Miracle, 3.ª edición, 1937. Traducción de Xavier Zubiri, t. I, págs. 191-193. Publicado con todas las licencias eclesiásticas y con la aprobación del Instituto Bíblico Pontificio de Roma.

138 Julio Navarro Monzó, La actualidad filosófica de Jacob Böhme, Montevideo-Buenos Aires, Mundo Nuevo, 1931, cap. F. «Böhme y Espinosa», págs. 111-112.

139 G. Gusdorf, Le Romantisme, op. cit., pág. 171.

140 Frances Yates, Giordano Bruno y la tradición hermética. Citada por Bernardino Orío de Miguel, «Esplendor y decadencia del pensamiento organicista hermético-kabbalístico», en Ezequiel de Olaso (comp.), Del Renacimiento a la Ilustración I, op. cit., pág. 193. Ver también de Yates, La filosofía oculta en la época isabelina, México, Fondo de Cultura Económica, 1982, Primera Parte, caps. V y VII.

141 Trato más detenidamente esta posición de Weber con las citas correspondientes en mi Epílogo, en Roberto Bosca y J. E. Miguens, Política y religión, Buenos Aires, Lumiére, 2007, págs. 338-341 y nota 14.

142 Novalis, Himnos a la noche – Cantos espirituales. La Cristiandad o Europa, Córdoba, Editorial Assandri, 1965. Las citas son respectivamente de págs. 138, 139 y 137.

143 Gusdorf, op. cit., pág. 618.

144 León Dujovne, op. cit., t. III, pág. 56.

145 Benedicto XVI, Jesús de Nazaret, Buenos Aires, P 107, pág. 52.

146 Ibíd., págs. 67-72.

147 Ibíd., págs. 60-61.

148 Frances A. Yates, El iluminismo rosacruz, México, Fondo de Cultura Económica, 1981, págs. 125-186.

149 Citado por Ignacio Andereggen, Hegel y el catolicismo, Buenos Aires, Eds. de la Universidad Católica, pág. 194.

150 «Esplendor y decadencia del pensamiento orgánicista hermético-kabalístico», en Ezequiel de Olaso, Del Renacimiento a la Ilustración, op. cit., pág. 194.

151 Transcripto en Julio Meinvielle, De la cábala al progresismo, Salta, Editorial Calchaquí, 1970, pág. 110, aunque aclarando en nota 96 que «no abre un juicio de valor» sobre estas afirmaciones.

152 Antoine Faivre, Accès de l’ésotérisme occidental, París, Gallimard, 1986, págs. 77 y 109.

153 Moshe Idel, Cábala hebrea y cábala cristiana, Buenos Aires, Lilmud, 2010, págs. 50 y 49.

154 Op. cit., pág. 20. Transcripto en el Prólogo de Daniel Colodenco.

155 Daniel Lawrence O’Keefe, Stolen Lightning: The social theory of magic, Nueva York, Continuum, 1982, pág. 14.

156 Robert Amadou, «Postface», en Kurt Seligmann, Le miroir de la magie, París, Fresquelle, 1956, págs. 383-384 y 387.

157 Julius Evola, La tradición hermética, Barcelona, Martínez Roca, s/f, pág. 26. (Subrayado en el original).

158 J. E. Miguens, La otra versión: mitos, magia e ilusión revolucionaria, Buenos Aires, Plus Ultra, 1978, parte III, cap. 2 «Política mágica y política de Eros», págs. 111-127. La cita es de pág. 118.

159 Dujovne, op. cit., t. II, pág. 136 y pág. 144.

160 F. Yates, La filosofía oculta en la época isabelina, op. cit., págs. 288-289.

161 Dujovne, op. cit., pág. 47.

162 Joshua Trachtenberg, El diablo y los judíos, Buenos Aires, Paidós (edición supervisada por el rabino Marshall T. Meier), págs. 114-115.

163 David Ruderman, Kabbalah, magic and science: The cultural universe of a sixteenth-century jew, Harvard University Press, 1988.

164 Henri Serouya, La Kabbale, París, Grasset, 1947, 10.ª edición, parte V, cap. XXII, págs. 373-398.

165 G. G. Scholem, Les grands courants de la mystique juive, París, Payot, 1946, cap. I, págs. 34-50. La cita es de pág. 50.

166 Ídem, cap. IV, págs. 162-171. La cita es de pág. 168.

167 Gershom Scholem, Desarrollo histórico e ideas esenciales de la Cábala, Barcelona, Riopiedras, 1994, pág. 223.

168 Abraham Skorka, ¿Hacia una mañana sin fe?, Buenos Aires, Longseller, 2010.

169 Michael D. Swartz, Scholastic Magic, Princeton University Press, 1996, parte III, cap. 8, págs. 209 y ss.

170 Auguste Viatte, Les sources occultes du Romantisme, París, Champion, 1979, vol. II, Annexe 1, pág. 278.

171 Transcripto por Mircea Eliade, Forgerons et Alchimistes, op. cit., pág. 181.

172 Hegel, Escritos de juventud, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 1978, págs. 60-62.

173 Hegel, Foi et Savoir, París, Vrin, 1952, pág. 298.

174 Hegel, Phénoménologie de l’esprit, París, Aubier, s/f, t. II, pág. 93. «La Aufklärung o iluminismo».

175 Ídem., pág. 98.

176 Ídem., págs. 98-99.

177 Jean Chevalier (director), Dictionnaire des symboles, París, Seghers, 1974, vol. III, págs. 184, 187.

178 Ver Goethe, Le serpent vert, con comentarios del ocultista Rudolf Steiner, París, Mermod, 1947. También el libro de Rudolf Steiner, L’Esprit de Goethe: d’après Faust et le conte Le serpent vert, París, Presses Universitaires, 1926.

179 Hegel, Leçons sur la philosophie de la religion, París, Vrin, 1975, III.ª parte, cap. IV, pág. 166, y V, pág. 189.

180 F. W. Schelling, Les âges du monde: suivis de Les divinités de Samothrace, París, Aubier, 1949, pág. 221.

181 Novalis, Himnos a la noche – Cantos espirituales, Córdoba, Assandri, 1965, pág. 23.

182 Hegel, La Vie de Jésus, París, Gambier, 1928. Introducción de D. D. Rosca, pág. 12.

183 J. Hoffmeister, Briefe von und an Hegel, Hamburgo, Felix Meister, vol. I, pág. 18.

184 Ver José Enrique Miguens, «Aspectos mágicos del terrorismo político», Revista Diógenes del Consejo Internacional de Filosofía y las Ciencias Humanas de la Unesco, n.° 126, abril-julio, 1984, y «Consideraciones sobre las relaciones entre magia y violencia política», en Escritos de Filosofía de la Academia Nacional de Ciencias, Buenos Aires, año V, enero-julio de 1982.

185 A. Koyré, «Hegel à Jena», Revue Philosophique, 1934, IX-X, pág. 274. Amplío el asunto en J. E. Miguens, La Otra Versión. Mitos, magia e ilusión revolucionaria, Buenos Aires, Plus Ultra, 1978, parte III, cap. 4. «La revolución alienada», b) Hegel como ilusionista, págs. 145-162.

186 Jacques D’Hondt, Hegel secreto, Buenos Aires, Corregidor, 1976, pág. 309.

187 Sigo la exposición y la interpretación que hace del documento el gran politólogo alemán Eric Voegelin en su colaboración titulada sugestivamente «On Hegel. A study in sorcery», incluida en The study of time (International Society for the Study of Time). Editado por J. T. F. Haber y G. Müller, Berlín, Springer Verlag, 1972.

188 Hegel, Historia de la filosofía, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 1955, t. II, pág. 339 y t. III, pág. 9.

189 Transcripto en Paul Asveld, La pensée religieuse du jeune Hegel, París, Desclée, 1953, págs. 48-49.

190 Transcripto en Eric Voegelin, op. cit., pág. 419.

191 Ídem., pág. 419. La última frase es cita textual del documento de Hegel que usa la figura en varios otros lados. Hay un esbozo de esta situación en el Prefacio de la Fenomenología del espíritu (t. I, pág. 12 de la edición francesa).

192 Harvey Cox, The Feast of Fools: A theological essay on festivity and fantasy, Nueva York, Harper and Row, 1969, cap. 2. «Festivity and the Death of God».

193 Transcripto por Eric Voegelin, op. cit., pág. 430.

194 Ibídem.

195 G. W. F. Hegel, Science de la logique, t. I. La logique objective, París, Aubier, s/f, pág. 35.

196 Alexandre Kojève, Introduction à la lecture de Hegel, París. Gallimard, 1947, 7.ª conferencia. «Nota sobre la eternidad, el tiempo y el concepto», pág. 354.

197 Voegelin, On Hegel. A study on sorcery, op. cit., pág. 451.

198 Transcripto por Henri de Lubac, La postérité spirituellle de Joachim de Flore, París, Lethielleux, 1978, t. I, pág. 374.

199 Ignacio Andereggen, Hegel y el catolicismo, Buenos Aires, EDUCA, 1995, págs. 22-23 y 56.

200 De Lubac, op. cit., págs. 372-373.

201 Transcripto por Henri Niel, De la médiation dans la philosophie de Hegel, París, Aubier, 1945, pág. 341.

202 J. E. Miguens, La Otra Versión: mitos, magia e ilusión revolucionaria, Buenos Aires, Plus Ultra, 1978, Parte Primera.

203 La versión es de Raimon Pannikar en Iconos del misterio: La experiencia de Dios, Barcelona, Península, 3.ª edición, 1998, págs. 140-141. Las tradiciones judía y cristiana están bien reseñadas en el libro del teólogo protestante Edward Langton, La démonologie: Étude de la doctrine juive et chrétienne, París, Payot, 1951, a la que sigo.

204 Con todas las salvedades y precisiones que exige tamaña empresa y que consigné en las primeras páginas de mi libro La Otra Versión (op. cit., Primera Parte), traté de reconstituir durante cinco años de investigación, la lógica del mensaje de la tradición esotérica, con una abundante información que avala mis afirmaciones y que recomiendo leer.

205 Hegel, Philosophie de la religion, t. III. 1. op. cit., págs. 173-174.

206 Ídem, págs. 153, 158 y 157.

207 Ídem, pág. 165.

208 Ídem, págs. 157-158.

209 Hegel, Las pruebas de la presencia de Dios (Dasein Gottes), México, Almada, 1955, cap. XVI, págs. 193-209. Hegel sostuvo que el Bahgadav Gita «confronta al lector con la obscuridad, el absurdo, a costumbres bárbaras y a una moral corrompida», tiene «un contenido ante el cual no experimentamos ningún respeto, ni moral ni religioso». Lo que Hegel llama el Yoga «se cumple en la estupidez y la parálisis de la potencia espiritual». «Hegel», artículos publicados en el Jahrbücher für wissenschaftliche Kritik, 1827, números 7 y 8, transcriptos en M. Hulin, Hegel et l’Orient, París, Vrin, 1979. Las citas son de págs. 148, 152 y 163. Contiene también una refutación del panteísmo en general, en págs. 194-200.

210 William Blake, «The marriage of Heaven and Earth», pág. 44, y «Jerusalem», pág. 224, en Poems and Prophecies, Londres, Dent and Sons, 1950.

211 Robert Muchembled, Une histoire du diable, París, Du Seuil, 2000, pág. 248, y cap. VI, «Le démon interieur. XIX.e-XX.e siècle», págs. 249-298.

212 Esta interpretación que hago es avalada por los principales ocultistas modernos. Véase Miguens, La Otra Versión, op. cit., parte I, cap. 6. «Venganza, liberación y restablecimiento de la justicia», y cap. 7, «Desalojo y suplantación del dios injusto».

213 Reverendo Bernard M. G. Reardon. Hegel’s philosophy of religion, Harper & Row, 1977, cap. 6. «Some problems of Interpretation», págs. 100-122 y notas 6, 7, 8 y 31.

214 El tema está tratado reiteradamente, por ser notas de clase, en sus Lecciones de filosofía de la religión, parte II, cap. 1 (32 págs.) y parte III. B. tercera sección (7 págs.). Para evitar la acumulación de notas de pie de página, cuando transcribo un texto le agrego la página de la edición francesa de Vrin, ya citada.

215 Antonio Gramsci, Notas sobre Maquiavelo, sobre la política y sobre el Estado moderno, Buenos Aires, Nueva Visión, 1984, pág. 15.

216 Transcripto por Henri Brunschwig, La crise de l’État prusien à la fin du xviii eme siècle et la genèse de la mentalité romantique, París, Presses Universitaires, 1947, pág. 212.

217 A.-D. Sertillanges, Le problème du mal, París, Aubier, 1951, t. II, pág. 6.

218 Hoffmeister, Briefe von und an Hegel, op. cit., t. I, pág. 122.

219 Transcripta con comentarios por el prestigioso ocultista Rudolf Steiner en L’esprit de Goethe d’après Faust et le conte du Serpent Vert, París, Ed. Alice Sauerwein, Presses Universitaires, 1926, pág. 12.

220 Aquí empleo la bella traducción en verso de Augusto Bunge en la edición del Fausto del Instituto de Literatura de la Facultad de Filosofia y Letras de la Universidad de Buenos Aires. En las demás citas empleo la edición de la Obras Completas, El Ateneo, Buenos Aires, 1949. Las citas entre paréntesis de la Fenomenología corresponden a la edición francesa de Jean Hyppolite, op. cit.

221 José Enrique Miguens, «Nacimiento y ocaso del laicismo político», en Bosca y Miguens, Política y religión: Historia de una incomprensión mutua, Buenos Aires, Lumiere, 2007, pág. 20.

222 Maximilien de Meck, Ésotérisme et survie. Études d’un mystique moderne, París, Drouin, s/f, págs. 105-106.

223 Abbé André Léonard, «Hegel et le droit de l’Absolu dans la penseé de Claude Bruaire», en La question de Dieu selon Aristote et Hegel, París, Presses Universitaires, 1991, pág. 402.

224 Phénoménologie, op. cit., t. II, págs. 287-286.

225 En La question de Dieu, op. cit., pág. 333.

226 Trato detenidamente este asunto en mi libro Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, op. cit., anexo I, págs. 468-477.

227 Enciclopedia de las ciencias filosóficas, Tercera sección de la Filosofía del Espíritu. B. La religión revelada, pág. 564.

228 Phénoménologie, op. cit., t. II, pág. 267. (Entre paréntesis me pertenece).

229 Ídem., t. I, Prefacio, págs. 21-22 y nota 42.

230 Phénoménologie, op. cit., t. II, pág. 263. Ver el interesante comentatio de Leo Lugarini, «Niveaux de la compréhension hégélienne de Dieu», en La pensée de Dieu selon Aristote et Hegel, op. cit., págs. 329-334.

231 Ídem., t. II, pág. 268.

232 Jean-Louis Vieillard-Baron, Hegel: Système et structures théologiques, París, Du Cerf, 2006, pág. 51.

233 Jacques D’Hondt, Hegel: Biographie, París, Calmann-Lévy, 1998, pág. 242.

234 Ídem, pág. 309.

235 J. L. Vieillard-Baron, op.cit., págs. 129-152.

236 Las citas entre paréntesis corresponden al t. II de la edición francesa de la Ciencia de la lógica, op. cit.

237 Edward Leach, Custom, law and terrorist violence, Edimburg Univ. Press, 1977, pág. 22. (Subrayado en el original). Pueden verse mis trabajos: «El discurso mágico del terrorismo político», en Revista Diógenes del Consejo Internacional de la Filosofía y las Ciencias Humanas de la Unesco, n.° 126-1984; «Consideraciones sobre la relación entre la magia y la violencia política», en Escritos de filosofía de la Academia Nacional de Ciencias, Buenos Aires, año V, enero-junio de 1982, y «América Latina: magia, clericalismo, liberación», en Revista Criterio, año LII, n.° 1813, junio de 1979.

238 Oswyn Murray, «Cities of Reason», en Oswyn Murray and Simon Price (eds.), The Greek City: From Homer to Alexander, Oxford, Clarendon Press, 1991, págs. 21-22. (Entre paréntesis me pertenece).

239 Trato extensamente este asunto fundamental en mi libro Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, op. cit., parte II, cap. 3, «Comunidad y comunidad política», y parte III, cap. 2, «Requisitos para alcanzar la finalidad de la polis». Lo amplío en «La justicia política de Aristóteles como justicia democrática», Revista Sapientia de la Universidad Católica Argentina, Buenos Aires, vol. IV, fasc. 297/2000, pág. 271.

240 Jean Hyppolite, Introduction à la philosophie de l’histoire de Hegel, París, Riviere, 1948. La primera cita es de pág. 68, la segunda de pág. 70.

241 J. E. Miguens, «Consideraciones sobre la relación entre la magia y la violencia política», en Escritos de filosofía, Academia Nacional de Ciencias de la Argentina, año V, enero-junio de 1982, págs. 87-88. También «El discurso mágico del terrorismo político», Revista Diógenes del Instituto Internacional de Filosofía de la Unesco, n.° 126.

242 Mariano Fazio, Historia de las ideas contemporáneas: una lectura del proceso de secularización, Madrid, RIALP, 2007, págs. 189, 190 y 200.

243 Karl Marx, Misère de la philossophie, París, Giard, 1908, pág. 249.

244 Slabuy/Grossmann, Wörterbuch. Lump-Lumpen.

245 Me apoyo en la excelente recensión de John Macquarrie, El pensamienato religioso en el siglo XX, Barcelona, Herder, 1975, cap. II, «El idealismo absoluto».

246 Gustav A. Wetter, S. J, Il materialismo dialettico sovietico, Einaudi Editore, 1948, pág. 46.

247 José Enrique Miguens, Política sin pueblo: Platón y la conspiración antidemocrática, Buenos Aires, EMECÉ, 1994, parte I, cap. 3, «La visión del bien y de lo bueno para la sociedad corresponde a los iluminados y no al vulgo», pág. 63. De aquí en adelante las citas entre paréntesis corresponden a la paginación de este libro.

248 J. E. Miguens, La Otra Versión, op. cit., pág. 149.

249 Herbert Marcuse, Reason and revolution: Hegel and the rise of social theory, Nueva York, The Humanities Press, 2.ª edición, 1954, págs. 19 y 18.

250 Herbert Marcuse, One dimensional man: Studies in the ideology of advanced industrial society, Boston, Beacon Press, 1966, cap. 5. La cita es de pág. 132.

251 Recomiendo consultar mi libro Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, op. cit., donde trato extensa y detenidamente este fundamental dilema, especialmente en las partes I, VII y IX y en el anexo I. La cita es de pág. 331.

252 Hegel, Philosophie de la religion, (traducción de A. Vera), París, Garnier, 1876, t. I, págs. 147 y 159-163.

253 José Enrique Miguens, La Otra Versión, op. cit., págs. 153-162, donde trato extensamente el asunto. Cita de pág. 154.

254 J. E. Miguens, Democracia práctica: para una ciudadanía con sentido común, Buenos Aires, EMECÉ, 2004, especialmente: «Introducción», parte I, cap. 1, «Hacia una política con sentido común», y cap. 2, «Teoría y práctica en la política»; y parte VI, cap. 2, «Política democrática práctica con sentido común».

255 Phénoménologie de l’esprit, op. cit., pág. 58.

256 Ernesto Grassi, Vico y el humanismo, Barcelona, Anthropos, 1999, págs. 17, 37 y 43.

257 J. E. Miguens, Desafío a la política neoliberal. Comunitarismo y democracia en Aristóteles, op. cit., pág. 198. Ver también anexo II, «El todo y las partes en la comunidad política».

258 Juan Bautista Vico, Sabiduría primitiva de los italianos, Buenos Aires, Instituto de Filosofía, 1939, pág. 437.

259 Jean Grondin, La philosophie de la religion, París, Presses Universitaires (Colección Que sais-je?), pág. 3.

260 Bernhart Giese (Universidad de Constanza, Alemania), «Implantación de la trascendencia en la política: Soberanía, desviación y el vacío de sentido», en Sociological Theory, vol. 23, n.° 3, septiembre de 2005, pág. 281. (Entre paréntesis me pertenece).

261 Puede verse sobre este asunto, del mismo autor, Science, politique et gnose, París, Bayard, 2004; The new science of politics, Chicago University Press, 1952; Los movimientos de masas gnósticos como sucedáneos de la religión, Madrid, RIALP, 1966, y también Stephen McKnight, «Voegelin’s science of history and politics», en Ellis Sandoz (ed.), Voegelin’s significance for the modern mind, Louisiana State University Press, 1991, págs. 49-60.

262 Eric Voegelin, Los movimienos de masas gnósticos como sucedáneos de la religión, op. cit., págs. 27, 28 y 33.

263 Hannah Arendt, The human condition, The University of Chicago Press, 1958, pág. 283. Véase también en Between past and future, Penguin Books, 1998, «The crisis in culture», pág. 223.

264 Hannah Arendt, Los orígenes del totalitarismo, Madrid, Taurus, 1974, pág. 567. (Las citas siguientes entre paréntesis corresponden a esta obra).

265 Science, politique et gnose, op. cit., págs. 33-64.

266 Ernst Cassirer, El mito del Estado, México, Fondo de Cultura Económica, 1947, págs. 334, 335 y 337.

267 J. E. Miguens, «Enseñanzas políticas de la caída del Muro de Berlín», en Revista Criterio, Buenos Aires, n.° 2356, enero-febrero de 2010, pág. 15.

268 Todas las citas entre paréntesis que siguen corresponden a Hegemonía y estrategia socialista: hacia una radicalización de la democracia, Buenos Aires, Fondo de Cultura Económica, 3.ª edición, 2010.

269 Ver sobre esto mi libro Democracia práctica, op. cit., tercera parte, Política en acción, cap. 3, «¿Cómo nació el comunitarismo democrático?».

270 Kenneth E. Boulding, El impacto de las ciencias sociales, Buenos Aires, Paidós, 1974, pág. 14.

271 José Enrique Miguens, El conocimiento de lo social y otros ensayos, Buenos Aires, Perrot, 1953, pág. 17.

272 Hans-Georg Gadamer, The idea of the good in platonic-aristotelian philosophy, New Haven, Yale University Press, 1986, págs. 11 y 89. Trato el asunto en mi Política sin pueblo: Platón y la conspiración antidemocrática, págs. 66-67.

273 Sheldon Wolin, Politics and vision, Boston, 1960, pág. 57.

274 Pierre Aubenque, Le problème de l’être chez Aristote, París, Presses Universitaires, 1962, págs. 276 y 275.

275 Trato extensamente el auténtico sentido de todos estos términos tan malinterpretados por los filósofos en mi Desafío a la política neoliberal: comunitarismo y democracia en Aristóteles, parte II, capítulos 2, 3 y 4. Lo que sigue está documentado y razonado en el resto del libro. La relación entre las partes y el todo figura en el anexo II: «El todo y las partes en la comunidad política».

276 Me estoy refiriendo a los movimientos políticos que aparecieron en Occidente en la era histórica que se inicia en 1789 con la toma de la Bastilla y comienza su declinación doscientos años después con la caída del Muro de Berlín en 1989.

277 Como comenté anteriormente, el Partido Comunista Italiano, el más inteligente y actualizado de Europa, recientemente dio por terminada la experiencia comunista y decidió disolverse y crear un nuevo Partido Democrático de Izquierda, más próximo a la socialdemocracia.

278 Jürgen Habermas, Theory and practice, Boston, Beacon Press, 1974, págs. 254-255.

279 E. I. Watkin, The balance of truth, Londres, Hollis & Carter, 1943. La cita es de pág. 26.

280 Hans Urs von Balthazar, La esencia de la verdad, Buenos Aires, Sudamericana, 1955.

281 Bent Flyvbjerg, Making social science matter: Why social inquiry fails and how it can suceed again, Cambridge University Press, 2001.

282 John Rex, Key problems of sociological theory, Londres, Routledge and Kegan Paul, 3.ª edición, págs. 96, 98 y 70.

283 Joseph E. Stiglitz, Le triomphe de la cupidité, París, Les liens qui libèrent, 2010, pág. 15.

284 Inmanuel Kant, La philosophie de l’histoire, «Réponse à la question: Qu’est-ce que les Lumières»?, París, Aubier, 1947. Las citas son respectivamente de págs. 83, 86 y 87.

285 G. E. Rusconi, Teoría crítica de la sociedad, Barcelona, Martínez Roca, 1969, págs. 294 y 224.

286 Jürgen Habermas, Theory and practice, Boston, Beacon Press, 1974, págs. 254-255.

287 Richard J. Bernstein, The restructuring of social and political theory, University of Pennsylvania Press, 6.ª edición, 1995, pág. 176.

288 Philibert Secretan, «Éléments pour une théorie de la modernité», en Revista Diógenes del Consejo Internacional de la Filosofía y las Ciencias Humanas de la Unesco, París, Gallimard, n.° 126, 1984, pág. 96. Una divulgación popular de esto es el difundido libro de Louis Pauwels y Jacques Bergier, El retorno de los brujos, cuyo subtítulo lo dice todo: «Introducción al realismo fantástico», junto con su elogio de la alquimia.

289 Mariano Fazio, «Un intento de superación del laicismo y del clericalismo», en R. Bosca y J. E. Miguens, Religión y política: historia de una incomprensión mutua, Buenos Aires, Lumiere, 2007, págs. 137 y 138.

290 Maurice Blondel, Pages religieuses, París, Aubier, 1942, Chapitre Premier, II y III.

291 Las citas son de Peter Berger, Facing up to Modernity, Nueva York, Basic Books, 1977, págs. 208, 209 y 210. (Entre paréntesis en el original).

292 Trato extensa y detalladamente este asunto del orden sagrado y la indebida inclusión de este en la política en mi trabajo «Consideraciones sobre la relación entre la magia y la violencia política», en Escritos de filosofía, de la Academia Nacional de Ciencias, Buenos Aires, año V, enero-julio de 1982, págs. 71-90. Por razones de espacio transcribiré aquí solamente algunas conclusiones, pero remito al artículo para la fundamentación de estas. (De aquí en adelante las citas de este trabajo van entre paréntesis).

293 Clifford Geertz, «La religión como sistema cultural», en A interpretaçao das culturas, Río de Janeiro, Zohar, 1978.

294 J. E. Miguens, «El discurso mágico del terrorismo político», Revista Diógenes del Consejo Internacional de la Filosofía y de las Ciencias Sociales, n.° 126, verano de 1981, págs. 103 a 120.

295 Centro de Estudios e Investigaciónnes Interdisciplinarias en Teología de Estrasburgo, Le point théologique, París, Beauchesne, 1974, pág. 13.

296 Pierre Bourdieu, The logic of practice, California, Stanford University Press, 1995, nota 6 al Libro I, Crítica de la razón teórica, pág. 188.

297 Alfred Schütz, «The problem of rationality in the social world», en Collected Papers. II. Studies in social theory, La Haya, Martinus Nijhoff, 1964, pág. 71.

298 «The well informed citizen», op. cit., pág. 134.

299 J. E. Miguens, «El Logos democrático de Aristóteles», en Revista Aquinas, Facultad de Filosofía de la Pontificia Universidad Lateranenese, XLIII, n.° 1, 2000. También en Democracia Práctica, op. cit., págs. 25-26.

300 Arnold Toynbee, A história e a religião, parte I, cap. 8, «O desvio das religioes superiores da sua missao espiritual para obras profanas», Río de Janeiro, Fundo de Cultura, 1961, pág. 166.

301 Joseph Folliet, «La significación sociológica del ocultismo», en Revista Criterio, n.° 1154, 8 de noviembre de 1958. Véase también «Las desviaciones de lo religioso», n.º 1325, 9 de noviembre de 1961.

302 Michael Burleigh, Causas sagradas: Religión y política en Europa, Madrid, Taurus, 2006, pág. 18.

303 Xavier Tilliette, «Faut-il laissez le sacré aux ethnologes», en Revista Corps écrit, 2, Champ du sacré, París, Presses Universitaires de France, 1983. Las citas son de págs. 111-113 y 119-120.

304 William J. Abraham, «Oh God, Poor God: The state of contemporary Theology», en The American Scholar. Las citas son respectivamente de págs. 558, 559 y 562.

305 Franck Damour, «Radical Orthodoxy. Ou le retour du théologique?», en Revista Communio, año 16, n.° 1, otoño de 2009, págs. 104-105. Las demás citas entre paréntesis.

306 Ver J. E. Miguens, «Nacimiento y ocaso del laicismo político», en Bosca y Miguens, Política y religión: historia de una incomprensión mutua, Buenos Aires, Lumiere, 2007. Sobre el humanismo mágico y el humanismo religioso contrapuestos en los filósofos políticos del Renacimiento, véanse págs. 20-27. Sobre la distinción entre las dos esferas: la sagrada y la secular, págs. 44-52.

307 Joseph Ratzinger (Benedicto XVI), Jesús de Nazareth, Buenos Aires, Planeta, 1.ª edición, 2007, págs. 67-71.

308 Trato extensa y documentadamente este proceso histórico en Democracia práctica: para una ciudadanía con sentido común, op. cit., quinta Parte, «La política del capitalismo», cap. 1, «El avance histórico de los capitalistas hacia el poder político y social» y «La unión indisoluble entre el capitalismo y el liberalismo». La cita es de pág. 195.

309 Joseph Ratzinger, Iglesia y modernidad, Buenos Aires, Ediciones Paulinas, 1992, págs. 56-67. La cita anterior es de pág. 59.

310 Michael Burleigh, Causas sagradas, op. cit., págs. 245-254.

311 Carl Schmitt, The concept of the political, The University of Chicago Press, 2007, págs. 62-63.

312 Juan José Tamayo-Acosta, La teología de la liberación, Estella, Editorial Verbo Divino, 1991, pág. 57.

313 Gerhard Lenski, The religious factor: A sociologist’s inquiry, Nueva York, Doubleday & Co., 1963. (Citas entre paréntesis.)

314 Étienne De Greeff, «L’enfer dans la condition humaine», en Magie des extrêmes, París, Desclée de Brouwer, 1952. Las citas son de págs. 26, 27 y 45.

315 Guy Labouérie, Dieu de violence ou Dieu de tendresse?, París, Editions du Cerf, 1982, págs. 98-99.

316 René Girard, Je vois Satan tomber comme l’éclair, París, Grasset, 1999, págs. 65-67.

317 Thomas Merton, The nonviolent alternative, Nueva York, Farrar, 1980, pág. 74.

318 Trato exhaustivamente todo este asunto en mi Democracia práctica: para una ciudadanía con sentido común, op. cit., a la cual me remito.